Capítulo 16: Amorodio
Dentro de la tierra de los druidas, las dos chicas y su guardián los recibieron como viejos amigos de Meliodas que son. La chica rubia, tan alegre y jovial, no dudó en acercarse a ese extraño ser mutante y agarrar sus orejitas de conejo.
- ¡Que monaaada! ¡Qué suaveeess! Me encantas... seas lo que seas.
- Soy una... humana... - Zoba respondió con sinceridad.
- ¿Humana, eh? - la druida jefe acarició sus plumas y pasó las manos por sus escamas - No se yo, no se yo...
- Oh, bueno... es que muto...
- Pero esto está muy mal mutado, esta cola no está formada y las escamas... no te cubren todo el cuerpo... - la druida la miraba de arriba a abajo mientras su hermana pequeña hablaba con Meliodas.
- No se de quién es la culpa... - Zoba giró la cabeza con odio hacia Gowther, alejado del resto.
- Si no hubieses aceptado, todos estarían muertos - Gowther levantó un dedo.
- ¡Yo sí que te quiero muerto!
Zoba siseaba moviendo la lengua bífida nerviosa y sus ojos se rajaban más. Su cola se tensaba y se le echaban las orejas hacia atrás. Jenna se rio.
- Que curiosa relación amorodio...
- ¿Amorodio? - Gowther giró la cabeza curioso, pues era una nueva expresión de sentimientos que no había escuchado nunca.
El príncipe Arthur se agachó a su lado susurrando.
- Creo que es cuando una persona está enfadada contigo, pero en el fondo te quiere...
- ¿Qué me odia pero me ama? - Gowther lo miró curioso - Eso no es compatible, son dos sentimientos opuestos.
- ¡Que no te quiero ni oír! - Zoba le siseó con fuerza.
Meliodas la agarró de la manga acercándola. Le dio unas palmaditas en la cabeza.
- Calma, calma, calma... de verdad te sienta mal estar lejos de Diane... - Meliodas estaba tranquilo como siempre.
Los ojos de reptil de Zoba se llenaron de lágrimas.
- Dianeee... - ella sollozó agarrándose a su ropa y se arrodilló a su lado para abrazarle.
Meliodas suspiró y siguió dándole palmaditas en la cabeza esponjosa.
- Vaya cambios de humor nena, esto no es normal - Hawk la miraba al lado de Gowther - ¿Tanto te afecta la pérdida de Diane?
Gowther pensaba con una mano en la barbilla.
- Tal vez está menstruando - dedujo.
Las orejas de Zoba se volvieron hacia el muñeco dejando de sollozar. Meliodas miró a Gowther mientras Zoba se giraba lentamente hacia él. Su mirada hizo que todos se le pusieran la carne de gallina menos al inocente Gowther.
- Ahora si que te mato.
- ¡Por mis jamones! - Hawk chilló - ¡Corre Gowther, corre hasta dar la vuelta al mundo!
- No se si podré correr tanto - Gowther empezó a correr hacia la salida, mientras las pezuñas de Zoba golpeaban el suelo.
Puede que Zoba exagere un poco, pero de verdad no se encuentra bien. Muchos choques de emociones que la descolocan y le hacen que la sangre le corra más rápido por las venas. Además, ¿cómo te sentirías tú si tu amor platónico le jode la vida a tu mejor amiga?
- ¡Corre como Naruto, llegas más lejos y duras más! - Hawk le gritaba dando saltos.
- ¡Slader, atrapa a la mutante! - Merlín los miró acercándose un poco.
- Sí, Onee-san - y él también salió corriendo detrás.
Jenna y Zaneli se miraron. La mayor empezó a reír.
- ¡Que grupo tienes más divertido! Bueno, ¿queréis empezar a entrenar con mis pruebas?
El grupo se dividió en dos para entrar en las dos torres distintas que había, entrando en parejas. Merlín fue la única que no quiso entrar, por no poder, y Hawk se acercó a ella.
- ¿Estás preocupada por esos dos? - preguntó.
- No han vuelto aún...
- Gowther es capaz de volver por el otro lado si da la vuelta al mundo - Hawk se rio de su propia broma.
Merlín siguió mirando hacia la puerta con expresión serena y de brazos cruzados. No se movió hasta que, unos minutos después, vio llegar a Slader cargando a Zoba, agarrando sus manos y piernas para que no se revolviese. Gowther venía caminando detrás.
- Ya está, ya está, pequeña mutante... - Slader la intentaba calmar caminando con voz suave.
- Si no estás menstruando, era una suposición, no hueles a sangre - Gowther no arreglaba nada.
Zoba le enseñó sus colmillos largos sacando la lengua bífida, con cara de serpiente peligrosa. Slader la agarraba con fuerza.
- ¡Tú cállate ya! ¡Cada vez que abres la boca la haces enfadar! Que poco tacto...
Gowther lo observó caminando a su lado, ignorando los silbidos peligrosos de Zoba.
- Tienes pensamientos obscenos y evitas sujetarla por ciertas zonas. No deberías llevarla en brazos.
Slader dio un sobresalto y su sonrojo salió por fuera de su máscara. Sí, era cierto que muchas veces recordaba esa escena de la ventana, pero en su corazón sólo había sitio para su Onee-sama. Luego Escanor hablará con él.
Zoba miró a Slader sin importarle mucho. Merlín llegó a su lado suspirando.
- Por favor, Gowther, controla tus palabras... - dijo con una mirada con algo de decepción - Zoba, no te alteres tanto... Ahora entrad por parejas a entrenar.
Hawk se fue al lado de Gowter y se apoyó en su muslo para acercarse a su oído.
- ¿Pero está menstruando o no? - preguntó en un susurro.
- No, no está - Gowther contestó tapando su boca con la mano en otro susurro.
- ¡Ojalá en este entrenamiento aprenda a lanzar veneno por los colmillos! - Zoba le amenazó.
Luego miró a Slader desplegando sus colmillos, que se quedaban a lo largo del paladar, como las serpientes.
- ¿Quieres entrar conmigo ahí dentro, Slader?
- E-Eh... - el guerrero se puso nervioso.
- No. Zoba se viene conmigo.
Todos se giraron hacia el muñeco lentamente. Él los miraba enfadadito, con esa expresión tan linda e inocente de cabreo que en el fondo, a Zoba le encantaba, y negaba hacia los lados.
(Demonios, me encanta esta cara)
- ¿Contigo? ¿Ahí dentro? - Zoba lo miró incrédula, pensando que eso tenía que ser otra broma.
- Sí, con Gowther - él se estaba quitando la ropa, pero Merlín lo detuvo antes de que se quitase los pantalones también.
- No, con Slader - ella se abrazó al cuello del gran guerrero, que intentaba alejar su cara de ella manteniendo su mente limpia.
- Si es amorodio, todavía me amas - Gowther tiró de su muñeca para bajarla de sus brazos.
- ¡¿Pero qué dic...?!
- Vamos, quítate el vestido.
- ¡Yo no me quito nada!
- Hay que entrar con la menor ropa posible, han dicho las druidas.
- ¡Que no quiero entrar contigo ni me voy a quitar la ropa delante de ti ni delante de este! - dijo señalando a Gowther y a Slader.
Zoba daba vueltas alrededor del gran cuerpo de Slader, intentando que Gowther, por el otro lado, no la agarrase. Era una imagen rara y cómica.
- Ese ya te ha visto todo lo que tenía que ver y no va a ver más - Gowther caminaba alrededor de Slader para agarrarla.
- ¿Gracias a quién, eh?
- Además, puedes entrar en ropa interior, no es tan grave.
Gowther la agarró de una de sus colas haciendo que ella de un chillido. Merlín aprovechó y con un leve movimiento de dedos, hizo desaparecer el vestido de Zoba.
- Zoba, a entrenar - dijo con una sonrisa.
- ¡Merlín, no me abandones! ¡Pensaba que estabas de mi lado! - ella le recriminó tapándose el pecho y juntando las piernas en ropa interior.
Zoba tenía un sonrojo molesto, mezcla de vergüenza y de indignación.
- Vale, vale... iré contigo, pero dejad de mirarme...
Gowther puso su pose de victoria al conseguir lo que quería.
Él le agarró la muñeca y empezó a tirar. Ella le miraba perpleja mientras él tiraba de su muñeca hacia una de las torres hablando.
- No me gusta que me evites, ni que me grites, ni que me sisees ni que te enfades. Tenemos que hablarlo sin que quieras matarme.
- ¡Yo no quiero hablar nada contigo! - ella intentaba forcejear, pero el muñeco tenía una fuerza asombrosa - Yo solo quiero a Diane...
- De momento... tendrás suficiente conmigo.
Zoba lo miraba perplejo y sin conocerlo, mientras la oscuridad de la torre los envolvía a los dos. Slader, Hawk y Merlín se quedaron fuera, mirándoles. Hawk empezó a hablar.
- ¿Ha dicho... lo que creo que ha dicho? ¿Después de perseguirla medio desnudo para quitarle el vestido? Creo que ya entiendo por qué es la Lujuria, y parecía tonto cuando lo conocí...
- Lo ha dicho...
Los dos miraron a Merlín, quien le contestó con un susurro. Ella tenía los ojos brillantes, pero brillantes con incredulidad.
- Que pronto... - dijo bajando la mirada - Se está dando cuenta demasiado pronto...
Ella se alejó a hablar consigo misma.
- ¿Qué Gowther se está dando cuenta de qué? - preguntó el cerdo.
- Entrad juntos a entrenar - ordenó - Dejadme sola, debo aclarar mis ideas.
Ellos dos se miraron.
- Ojojojo - rio Hawk levantando el morro - Vas a entrar con un asesino en serie, el mejor del grupo de Meliodas. ¿No te parece un orgullo?
- Eh... supongo que si...
Y dicho esto, Slader caminó detrás de Hawk para entrar a la torre.
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