GOTAS DE LLUVIA SOBRE MI CABEZA

Autora: Clumsykitty

Fandom: Marvel

Género: AU -Sci-Fi/Omegaverse

Parejas: Stony, Cherik, Thorquill, Winterwidow como principales

Derechos: Los personajes pertenecen a Marvel, Stan Lee y los abogados. Yo solo soy un gusanito.

Advertencias: Pues esto no será agradable, hay mucho dolor, sangre, sufrimiento como lo propio de un Omegaverse. Gente mala haciendo cosas malas. Yo pensando mil locuras con eso. Inspirado en la serie "The Rain".

Gracias por leerme.

***

Refugiados.

Thor respingó al sentir la mano de Quill sobre su hombro, parpadeando al ver a su Omega con una herida en la cabeza bajando su vista al rostro blanco de Strange.

-Cariño, él quería hacer esto.

-Todas las veces que caí, él me levantó. Soy Triunvirato gracias a él.

-Y eso lo hizo inmensamente feliz -Peter tomó las manos de su Alfa para que soltara el cuerpo- Ahora déjalo partir con dignidad.

Asintiendo apenas, Thor se levantó, dejando que otros tomaran el cuerpo del doctor para llevarlo con los demás, envolviéndolo temporalmente. Llevó su mano a la herida de su Omega quien negó, abrazándole por la cintura para ir donde Erik y Charles, igual que lo hacían Steve y Tony, los primeros en acercarse. Steve tomó un trozo del domo, una pieza redondeada que usó de escudo para cubrir a Charles, ahora de ojos cerrados, ganándose una sonrisa de agradecimiento por parte de Erik. Tony recibió una manta de manos de Pepper que extendió para cubrir el cuerpo de Charles.

-Gracias -apenas musitó Erik, mirando ese rostro pálido.

-Van a estar bien -sonrió Steve, abrazando por los hombros a Tony- Todos vamos a estar bien.

Bruce había vuelto en sí, ayudado a caminar por Clint. Bucky vendaba una pierna de Nathaniel, regañándole por ser descuidado. Thor y Quill llegaron con Erik, quien miró a la pareja unos segundos, tomando aire.

-La última vez que vi a Thor aún quería que le leyeran cuentos.

-Eso no ha cambiado -bromeó Peter- Los vamos a llevar, ya viene la Milano.

-¿A dónde?

-Bueno... -Tony carraspeó- Ahora que el resto del Consejo que Richards no asesinó ha visto todo, pueden ayudarnos, hay algunos laboratorios...

-No.

-Pero, Erik...

-No, Thor. No más laboratorios para Charles.

-Creo que algo podremos hacer -musitó Steve mirando a los demás.

-Debemos encargarnos -Quill palmeó el pecho de Thor- Todavía queda mucho por hacer y la verdad ya también me cansé de estar bajo la lluvia.

-Creí que te encantaba.

-Am... volvemos.

Tony arqueó una ceja, a punto de preguntarle a Steve sobre ese Guardián, pero notó que Charles estaba abriendo sus ojos, haciendo señas a Erik para que bajara la mirada.

-¡Charles!

Éste levantó despacio su mirada, encontrándose con la de Erik, quien le sonrió, acariciando con una mano temblorosa su rostro. Su cuello blanco mostraba una Marca en forma de una M puntiaguda que fue apareciendo ahora que volvían a estar juntos.

-Erik...

-Charles, Charles, Charles.

-Está lloviendo.

-Sí -Erik sollozó- Está lloviendo.

-Tienes... arrugas -una mano delgada tocó el rostro del Alfa quien besó esa palma- Yo te dije... que no gruñeras tanto o... te harías viejo pronto.

Erik rió, limpiándose un ojo. -Lo siento.

-Sigues estando tan apuesto... -Charles suspiró, cerrando sus ojos y buscando el calor de su pecho- Estoy cansado.

-No te preocupes, se acabó.

-Lo sé...

-Descansa, estaré a tu lado cuando despiertes.

-Erik...

Steve miró de reojo a Tony quien negó al entender su intención de pedirle a Erik que lo dejara llevar a Charles, lo que hubiera sido una catástrofe. Se notaba a leguas que no iba a permitirlo. Aquel Alfa se puso de pie, jadeando, pero levantando en brazos a Charles, agradeciendo a Steve por el escudo, caminando hacia la Milano que llegó, media reparada a prisas por Rocket para llevárselos a la comuna más cercana donde pudieran abrigarse y descansar.

-¿Entonces te puedo cargar a ti? -preguntó el rubio.

Tony le empujó, buscando a Rhodey y Pepper para comenzar a organizar la recuperación, todos siendo repartidos a las comunas más cercanas pues Nova estaba lejos para llevarlos y había heridos de gravedad. Sin Ciudad ni Charles haciendo presión sobre las mentes de todos los habitantes del Colmenar, éstos recibieron a los extraños sin problemas, haciendo las preguntas que nunca se habían atrevido a formular, escuchando las explicaciones que lentamente fueron dándose, conforme todos estuvieron descansados, atendidos y hubieran comido. A pedido de Tony, Steve le llevó a su refugio preferido en el Sur, acompañados de Bucky y Nathaniel con Rhodey y Pepper. Ahí descansaron, alejados de todo el bullicio en las comunas. Ahí le alcanzaría Thor con Quill, luego de haber hecho los funerales de Strange, hablando de todo lo que restaba por hablar, razón por la que Thor pidió estar a solas con Tony. Quill estaba tenso, pero no le quiso decir nada a Steve. Ambos salieron del refugio, caminando por el bosque.

-Creo saber qué quieres de mí.

-Solamente es una respuesta sencilla.

El castaño asintió, riendo con tristeza. -Fui yo. No sabes cuánto lo siento, pero eso no cambiará el dolor que debes sentir, ¿cierto? Yo maté a Loki. Soy culpable.

-No lo sé... -Thor cruzó sus manos detrás de su espalda, subiendo un pie a una roca- ¿Sabes? Puedes decirme que disparaste a Loki a matar y lo lograste, pero... fue la decisión de Loki el viajar, el arriesgarse sabiendo el precio. Reaccionar así.

-Reaccionar no. Eso fue culpa de Richards... aunque no minimiza mi acción. De verdad lo siento, hay muchas muertes que voy a lamentar.

-No deberías hacerlo, llevas contigo un cachorro, necesita alegrías no culpas.

-Te pido perdón, Thor Odinson. Asesiné a tu Omega cegado por una mentira.

-Mi Omega es Peter Quill. Y aunque es doloroso recordar aquel momento, me es más doloroso la lección de verme a través del espejo del pasado y darme cuenta de que, en primer lugar, el culpable fui yo. Porque era el Alfa, era el Triunvirato. Strange me aconsejó que no, pero estaba inflamado de la valentía imprudente que causó todo esto, y sin embargo...

-No hubieras conocido a Quill de no haber sucedido.

-Estamos en una trampa peligrosa, Stark. Donde sí buscamos responsables de circunstancias que no controlamos, vamos a entrar en un círculo vicioso de remordimientos. Hay cosas que suceden de la manera más torcida, clavándonos una daga en el corazón. Podemos buscar la respuesta al por qué de ello, o podemos sanar antes de que la herida nos consuma.

-Me asombran tus palabras y tu actuar.

Thor sonrió, encogiéndose de hombros, caminando hacia él, sus manos siempre detrás de su espalda.

-Odín, Erik, Charles y Strange son suficientes padres para que algo hubiera aprendido. Pero si lo necesitas, no seré egoísta al negártelo. Te perdono, Stark. No cargues más con ello.

-Gracias.

-Te daría un abrazo, pero una roca destruiría mi cráneo.

-¿Nos siguió?

-Si esto te consuela, hubiera hecho lo mismo en una situación invertida.

-¿Por qué tienen que ser tan idiotas, dime?

-Cosas de Alfas.

La siguiente charla fue con Nathaniel, igual de seria, aunque menos tensa debido al humor más relajado de ambos, conforme las cosas se aclararon, cuando Tony habló con Quill sobre el video. Había sido Doom, quien había imitado las maneras del Mercader de la Muerte para ir sembrando la discordia entre Nova y el Colmenar. Doom había atacado al pelirrojo, no había mucho que decir después de eso, salvo la petición que Steve le tuvo que explicar.

-Es una fiesta para celebrar que una pareja se ama. Con votos y baile.

Nathaniel le había pedido hacer una boda, idea que estuvo apoyada por Thor, sugerida discretamente por Erik cuando se recuperó junto con Charles. Era una buena oportunidad para unir ambos territorios, siendo el Alfa de Nova y el Omega del Colmenar, y darían una buena demostrarían a este último de lo que era festejar. Con los trabajos de reconstrucción de todas las comunas, de lo que había sido el Triskelion, tener una boda era la mejor manera de alegrar a todos. Con la primavera entrando de lleno, más días de sol que de lluvia fueron propicios para tener una fiesta en grande. Tony poco pudo hacer al desconocer todo lo que eso implicaba, salvo el ayudar el día de la boda a su cachorro porque no podía ni siquiera ponerse un calcetín debido a los nervios. Verlo en ese curioso traje de Nova en color blanco como la nieve, le trajo lágrimas que trató de ocultar cuando se quedaron solos en la pequeña casona junto al gran salón junto al lago del Triskelion.

-Fuiste mi primer cambio en mi vida, aquello que de corazón realmente quise y no lo que Richards me hizo creer que deseaba. Trajiste muchas cosas a mi vida... y...

Bucky le abrazó. -Siempre serás mi padre, nadie va a alejarme de ti.

-Los mataría, que eso me sale bien.

-Deja eso ya.

-Okay.

-No, hablo en serio -Bucky se separó, mirándole- Dicen que los novios reciben regalos de boda, yo no quiero nada de ti excepto eso, deja de ser un Aullador. Deja de ser el Mercader de la Muerte y conviértete en aquello que quieras ser. Yo te apoyaré.

-¿Dónde quedó mi asustadizo cachorro?

Para los habitantes del Colmenar, la ceremonia y la fiesta fue algo que los atrajo por la curiosidad, las sonrisas sinceras en rostros brillantes. Thor fue quien hizo la ceremonia, obsequiando a Nathaniel y Bucky dos anillos forjados en Nova, labrados en el Colmenar. La comida llena de aromas y colores que ningún estómago pudo resistir también sería comentaba, sería la primera de muchas fiestas por venir en tiempos futuros. Tony miró a lo lejos a Erik y Charles, éste aún con su cabeza rapada al estar sanando de aquel espantoso casco, en su silla de ruedas. A Thor y Quill bailando, éste último con un vientre abultado de gemelos que su hermana Mantis juraba traerían canas a su madre. Esos dos habían hecho las paces al fin, así como el resto comenzaban a sanar sus heridas.

-Señor Stark, ¿me concedería esta pieza?

-Por supuesto, Señor Rogers.

Hubo que decidir muchas cosas, entre ellas la nueva organización. Era cierto que no se necesitaba más ni el Consejo ni el Triunvirato, enemigo uno del otro, pero aún requerían de alguien dirigiendo todo, siendo la cabeza. Rhodey propuso que fuese Thor quien se quedara como líder, pues Erik seguía en recuperación y Steve estaba muy concentrado cuidando que nada le pasara a Tony pese a que Bruce ya le había asegurado que todo iba bien con el cachorro. Las primeras votaciones de una nación libre dejaron a Thor Odinson como patriarca, el tiempo decidiría que nombre le darían, que terminaría siendo esa nación. Ahora tenían una villa Nova donde estaría él con los que habían decidido continuar viviendo ahí, el centro entre los bosques con una sola comuna que se asentó cerca de las tierras olvidadas, de donde aprenderían del pasado. Steve y Tony se quedaron ahí igual que la mayoría, el Omega haciendo caso a la petición de su hijo de ya no ser más un Aullador.

Durante su aislamiento en el Arca, él ya había charlado lo suficiente con Bruce para darse cuenta de que era agradable inventar más cosas que no fueran armas, así que, teniendo cerca aquel museo y todas esas cosas del antiguo mundo humano, podría crear con ayuda y guía del doctor Banner lo que hiciera falta para los suyos, cuando a su rubio sobreprotector se le quitara tratar de envolverlo en algún tipo de burbuja mágica hasta que terminara su embarazo. La presencia de Quill siendo un guía algo disperso pero alegre sobre lo que vendría con un cachorro ayudó en el humor de Tony. Los cabellos de Charles ya eran cortos en ese color que tanto amaba Erik cuando decidieron que ellos se marcharían al sur. Groot les dijo -o, mejor dicho, Quill tradujo- que aquel bosque de Latveria en realidad eran falsos árboles, máquinas creadas para alejar a los curiosos de las verdaderas tierras más cálidas, esas que Meredith y Jason habían conocido. Una vez más, como lo hiciera con Nova, Erik usó todo aquel material para levantar una muralla, no tan alta pero que bordeara esas tierras, dejando entrar el agua en forma de un ancho río.

Con un puente de piedra, se hizo el paso a ese nuevo hogar de la pareja, donde Charles descansaría su mente, un espacio tranquilo para ambos, las verdaderas víctimas de todas esas ambiciones y despechos que habían culminado en una guerra. La llamaron Genosha. Uno de los primeros inventos de Tony fue un exoesqueleto para las piernas y espalda de Charles, quien le agradeció dejándole ver lo que siempre había anhelado. El tranquilo ocaso detrás de Genosha. No sería la primera vez que visitaría ese lugar, cuando nació Peter, a quien nombró así por la ayuda de Quill para que Steve no lo matara con tantas precauciones, y también los cachorros de aquel hubieran nacido, fueron a visitarles. Thor y su familia, Steve y su familia. Ambos, Erik y Charles, estaban mejor, más relajados, pensando ya en ser los siguientes para celebrar una boda, ahora que todo estaba tranquilo.

-¿Por qué Richards hizo todo eso? -quiso saber Tony, meciendo a un regordete bebé entre sus brazos, todos sentados en el pasto mientras Meredith y Jason correteaban mariposas.

-El dolor, la negación a la suerte de Susan, el remordimiento por lo que habían hecho.

-Nunca comprendí todo lo que sucedió -comentó Thor, con Stefan, uno de sus gemelos chupando una trenza suya- Stephen jamás quiso contarlo.

-Es realmente torcido, tanto Doom como Susan querían probar si era verdad que podían despertar esos genes que potenciaran las habilidades humanas. De cierta manera tuvo éxito, pero... Víctor hizo un cambio en la vacuna de Susan, usó el material genético de Frigga para ello. Esperaba que además de fortalecer a Susan, ella tuviera una mujer Alfa.

-¿Por qué eso es tan relevante? Digo, ¿qué diferencia hace además de crear Alfas tontos y necios? -bromeó Quill con Vincent, el otro gemelo chupándose su pulgar.

-Una mujer Alfa no puede embarazar a nadie, obviamente, pero es capaz de transmitir un código genético puro, perfecto. Si éste ya tenía ese gen para potenciar habilidades, lo vuelve no solo parte de la herencia al resto de la descendencia, lo mejora -explicó Bruce, ajustándose sus gafas- Pero que nazca una mujer Alfa es vencer las probabilidades en contra. Por lo que Thor nos ha contado, Frigga provenía de los últimos grupos que cruzaron el océano y se instalaron en Nova a los que llamaron dioses, si me lo preguntan, debía ser por una buena razón. Posiblemente su pueblo tenía esta pureza genética, pero dudo que ella supiera que era Alfa como tal. Nadie lo mencionó en los apuntes de Nova. De la misma forma que Erskine tampoco estaba seguro de que Sarah Rogers fuese a ser una mujer Alfa, solo sabía que su madre tenía genes intactos todavía, mezcla de Nova y el Colmenar, de los últimos descendientes.

-La mezcla hace la fortaleza -canturreó Quill.

-De hecho, es cierto.

-Los genes de Susan estaban ya demasiado alterados, sumado a eso el embarazo, cuando... Richards le inyectó esa mezcla de genes... -Charles negó, apretando la mano de Erik.

-¿Alguna idea de qué cosa fue lo que le puso a su propia esposa? -inquirió Tony.

-Logan.

-¿El lobezno?

-Sí, Thor -asintió Charles con una media sonrisa- Como todo lo que nos ha sucedido, todo ha quedado en el "si esto no hubiera ocurrido...". Si Logan no hubiese llegado a la costa, si Richards no lo hubiera encontrado y notado su inusual mutación, tratado de pasar aquel gen a su esposa, nada de esto hubiera ocurrido. Pero creo que uno de los primeros errores de Richards fue haberle ocultado a Stephen y a Víctor la aparición de Logan, ellos hubieran sabido, lo hubieran detenido, en especial Doom la saber sus intenciones.

-Entonces, ¿ese hombre ya era raro desde que llegó? -Quill bufó apenas, Vincent golpeando su mentón.

-Lo veremos, tiene demasiados demonios internos con qué lidiar, no quiere ver a nadie ni estar en ningún lugar. Es como una bestia herida, pero les aseguro que está comenzando a ser atraído a la paz que está volviendo a todos nosotros. La que él necesita.

-Siento mucho que hayas tenido que experimentar todas esas cosas, Charles, que se hayan quedado en tu cabeza. No es algo lindo.

-Por eso decidimos venir a Genosha, Bruce, yo necesitaba... calma para lidiar con esto, hablarlo me ayuda, por eso los invitamos. Estoy mejor. Erik ha sido de mucha ayuda.

-Todos necesitamos paz en nuestras vidas, y felicidad -asintió Steve, cargando a su Peter- Ahora que todos estas peleas y mentiras se están marchando, todos juntos podemos dedicarnos a reconstruir lo que una vez fue nuestra civilización, sin esos errores. Averiguar qué ha sido del resto del mundo. Tal vez haya comunas o villas enterradas en montañas nevadas que necesiten ser rescatadas.

-Oh, ¿salvadores? -Erik le miró con curiosidad.

-No me negarán que ustedes dos tienen un poder que puede hacer la diferencia entre vivir esclavos y ser libres. Que quede claro que no estoy diciendo que deberían hacerlo, pero quizá podamos contar con su ayuda cuando estemos atorados en algo.

-Bueno...

-Erik, no -le cortó Charles, mirando a Steve- Lo haremos, no pedimos estos poderes, es cierto, pero sería demasiado egoísta reservarlos sólo para nosotros. Además, tanto Richards como Doom hicieron experimentos, con lo que sabían. No dudo que allá afuera también esté sucediendo lo mismo, no vamos a ser los únicos con esta clase de peculiaridades.

-Menos si tienen cachorros -comentó Quill- ¿Se imaginan? El bebé lanzando lejos su chupete o robándose la galleta escondida en la alacena.

-Quill, no des ideas.

-Puede pasar, Tony. Puede pasar.

Thor rió, besando la sien de Quill. -Primero es reconstruir todo, que las cosas vuelvan a la normalidad. Mientras Tony hace más juguetitos y ustedes descansan, estas tierras sanarán.

-¿Y qué tal si hay otros científicos locos en otras partes del mundo haciendo cosas macabras?

-Thor, controla a tu Omega.

Sin el campo artificial creado por Richards y manipulado por Ciudad más el poder de Charles, las playas de mares bravíos desaparecieron igual que las tormentas en el Este y Oeste. Eso alegró a todos hasta que el Doctor Banner bien habló de la posibilidad de "estar expuestos" porque el campo de protección ocultaba todo el territorio al desviar cualquier onda o vibración de radares, lo que hizo que se creara un nuevo campo por Stark, más noble y menos agresivo que el anterior. Tony llevó a su bebé Peter a conocer las playas de ambos extremos, mientras probaba sus experimentos. Bucky ya era todo un experto espía que se escabullía de casa para ir a verle, siempre llevándole regalos que solían ser donas, a veces acompañándole en esos paseos porque también era un histérico que pensaba que brotaría una máquina asesina del suelo para atacarlo. Cierto que había analizado los restos de los androides de Doom como las arañas de Richards, pero para otros fines. Siendo un Omega con el natural instinto de protección, le había creado a su Peter un pequeño droncito en forma de araña que le cuidaba a todas horas, incluso cuando dormía en su cuna.

-¿Qué piensas, padre?

-Te veo pasado de peso, Buck.

-...

-¿Algo que le quieras decir a tu padre?

-Nada.

-Si le pregunto a Nathaniel y...

-Okay, se supone que te lo íbamos a decir en la fiesta de los hijos del Patriarca, padre. Arruinas sorpresas.

-No estoy listo para ser abuelo.

-Pues lo serás.

-Tu hermano no puede tener un sobrino de la misma edad que él.

-¿Querías que tuviera hijos cuando me salieran canas?

-¿Eso es alguna clase de indirecta, cachorro?

-¿No?

Peter gorgoteó, señalando a lo lejos. Bucky se giró a esa parte de la playa que se perdía en el mar, como un largo brazo que se perdía en el horizonte. Tony buscó sus binoculares, frunciendo su ceño.

-¿Qué es eso?

Le pasó sus binoculares a Bucky, acomodando a Peter en su chaleco, enviando un mensaje a Steve de alerta. Había una nave o embarcación encallada en aquella parte distante de la playa.

-Yo iré.

-Yo también.

-Papá, es en serio.

-Tú estás gestando, jovencito. O vamos los dos o esperamos al salvaje de Steve.

-Okay, pero tú y Peter se quedan atrás.

-Andando.

Si había alguien dentro no estuvo alerta a su llegada, lo que parecía ser una cápsula de metal cubierta con un símbolo extraño en rojo y gris debajo del cual había una placa en la compuerta donde se leía "LexCorp.", la cápsula mostraba los claros signos de un transporte que había naufragado en el océano por varios días o quizá hasta una semana, además de tener marcas de lo que para Tony fue una explosión. Una cápsula de emergencia sin duda alguna. Bucky hizo la lectura, preocupado.

-Hay dos personas. Un adulto y un cachorro.

-¿Vivos?

-Sí, pero no en buenas condiciones. Hay que esperar a...

-No vamos a esperarlo, el oxígeno puede estar acabándose. Debemos sacarlos, abre la tapa. Dame tu arma. A mi cuenta.

Bucky abrió la compuerta, mirando dentro. Envueltos en un capullo con máscaras de oxígeno y trajes hechos para no contaminarse, había un hombre de cabellos negros cortos, abrazando casi desesperado a un bebé de semanas que se aferraba a él, jadeando dentro de su máscara. Los dos vestían ropas azul oscuro y rojas con un escudo en forma de diamante que parecía una gran S en el interior. Efectivamente, el oxígeno estaba llegando a su límite.

-Es un Omega con...

Una mano veloz como un rayo atrapó la garganta de Bucky, un arma silbando en sien sudorosa del hombre recién despierto. Sus ojos azules de expresión dura miraron de reojo a Tony con el arma, liberando a Bucky quien tosió, alejándose. Aquel Omega era fuerte. Peter miró al desconocido con sus grandes ojos succionando su chupete.

-Muy bien, nadie aquí va a lastimarlos -habló Tony muy despacio, alejándose, pero sin dejar de apuntar al desconocido Omega- Tú te tranquilizas, nos tranquilizamos nosotros y podemos ayudarlos. ¿De acuerdo?

El hombre entrecerró sus ojos, una de sus manos acariciando los cabellos de su cachorro, dio un vistazo fugaz a su alrededor. Tony leyó en su expresión el desconcierto. Algo parecido a la duda, estaba muy seguro. O algo similar.

-¿Puedes entender nuestro idioma? ¿Hola?

-¿Cómo se llama este lugar? -una voz demandante sin un atisbo de vacilación.

-Le decimos cariñosamente el Triunvirato o si lo prefieres la Nación del Hierro. Tenemos metal para arrojar al cielo. A quien tratabas de ahorcar es mi hijo mayor, Bucky, mi nombre es Tony y este pequeño es mi hijo menor Peter. ¿Crees que es suficiente muestra de civilización para ti?

El cachorro en la cápsula gimoteó adolorido, percibiendo el estrés de la situación. Sin apartar la mirada de ellos, el Omega levantó al pequeño entre sus brazos, acurrucándolo contra su cuello de forma protectora. Bucky y Tony intercambiaron una mirada.

-¿Y bien?

Luego de lo que pareció una eternidad, el extraño al fin habló.

-Mi nombre es Bruce Wayne, mi hijo se llama Damian... necesitamos ayuda.

FIN DEL ARCO MARVEL

(esta historia se traslada al Arco DC).