El recuerdo del olvido
a la sombra de la verdad
Dicen que si lo recuerdo
Mi felicidad acabará.

Rosas de memoria me trajiste
Todos los días
Rosas de memoria decidiste darme
Para que yo lograra recordarte.

¿Con qué me encontraré?
¿Con qué lidiaré?
¿Será feliz?
Quizás triste.
Quizás de ambos,
porque esta vida fría y mustia nos favorece y nos ofende.

Porque a veces lo que creemos bueno,
es malo.
Lo que creemos sincero,
es estrafalario.

Y finalmente, tras recordarte.

Pude notar como la vida mustia quería alejarme de ti.
Pude notar como la vida mustia quería hacerme sufrir.

Y lo hice.
Para olvidar.
Lo hice para no recordar.
Lo hice para amar,
pero con ello, mi roto corazón decidí dar.

Porque me diste rosas de memoria,
me diste marcas de recuerdo.
Me dijiste un «te quiero»
Aunque temo que este no fue sincero.