—¿Sigues molesto, verdad?

- No, para nada, no es como si fuera a reprobar mi año por faltar a la escuela... - Taehyung seguía repasando sus apuntes mientras caminaban por la vereda de vuelta al colegio.

- Vamos, no creo que vallas a reprobar solo por tener una falta en el semestre... -Taehyung le dedicó una mirada de fastidio cuando pasó a leer algo sobre las fórmulas de potencias. - Además, estoy seguro que esos apuntes ni siquiera son de las clases.

Las ramas crujieron cuando el más joven se frenó para verlo desafiante, Jungkook quería reírse de su expresión.
Sabrá Magdalena* porque no lo hizo.

- ¿Cómo estás tan seguro?

- En toda mi vida de preparatoria he visto algo relacionado con el valor de "i" y los números imaginarios. Así que de antemano sé que el profesor de Álgebra no te enseñó eso.

- Crees saber mucho para estar en las últimas columnas de este último semestre ...

- ¿Así que de eso se trata Kim? ¿Vas a jugar a humillarme por mis calificaciones?

- Yo no dije eso...

- Que lo dijo dice... - Jungkook mordió una paleta que sacó de sabrá dónde y la mordió. Taehyung sintió el dolor en sus dientes al escuchar tal crujido.

- Piensa lo que quieras... No me interesa... Solo sé que afectará mi rendimiento.

Jungkook chasqueo la lengua. Escuchó alguna vez decir a su hermano que en las clases de alto rendimiento los profesores trataban de mejorar el conocimiento de los alumnos. El nunca había estado en una de esas clases, y el joven a su lado parecía tener toda la pinta de ser un inteligente en todas las ramas.

Taehyung estaba caminando en círculos sin darse cuenta de ello. Cuando concluyó el párrafo en el que se le explicaba las elevaciones de "i" para levantar su vista, se encontró con un "Joven de Bazar" con los brazos cruzados por detrás de su nuca que lo observaba preguntándose si sería capaz de construir una bomba atómica.

- No... no soy un científico loco Jungkook, camina que aún debo ir a mi clase o también la perderé.

El pelinegro se rio de las palabras del menor y señaló una brecha que abría paso hacia la carretera.

- Por cierto Tae...

- Dime...

Jungkook sonrió con ternura después de notar como el más joven no se inmutaba ante el apodo.

- ¿Por qué te preocupas si estás en una de las clases avanzadas? Por lo que sé ahí hacen explotar el potencial de los alumnos dotados. -El sol comenzó a asomarse haciendo que Taehyung entrecerrara los ojos para verlo. Era cierto, si hacían explotar su potencial-. Pero fuera de eso, los maestros de base se preocupan más por venir a cobrar su sueldo que por enseñarnos lo que deberíamos aprender.

- ¿Realmente hacen eso? - El azabache le prestó atención dejando su libro.

- ¿Crees que miento? Me siento mal ahora porque desconfías de mi.

- ¡Yo no dije eso! - Jungkook volvió a reírse. - Es solo que... no creía eso...

- Aún eres ingenuo Taehyung, las personas como yo no tenemos la oportunidad de aprender muy bien, pero tenemos más libertad de divertirnos.

- Si... eso explica varias cosas... - volvió a leer su libro cuando su compañero rechistó.

- ¡Oye! Que no esté en una clase avanzada o vista bien no significa que sea ignorante...

- Nuevamente, yo no dije eso... ni mucho menos he juzgado tu economía...

- Bueno, te advierto por si quieres hacerlo... recuerda que ante todo yo me puedo burlar de lo rico que eres...

Taehyung arrugó su nariz después del comentario, unos segundos después se arrepintió cuando el más alto imitó su gesto y masajeo su nariz con diversión.

- Ahora quiero burlarme de ti... - Le dijo haciendo que el otro lo mirara ofendido.

- También tengo casa y cama por si creías que no... - Ambos rieron con diversión.

- Y yo no soy tan rico por si querías saber...

- Lastima, ya había ideado un plan para robarte tu reloj y una televisión...

- No voy a reírme, porque hay una posibilidad de que no sea una broma...

Jungkook frenó sus carcajadas. Sus ojos se cristalizaron y tocó su pecho dramáticamente fingiendo estar decepcionado y dolido.
- Gracias por la confianza...

Taehyung asintió entre risas y llanto.
- ¿Alguna vez intentaste estar en una clase avanzada? -Preguntó

Jungkook no respondió.

- Llegaremos tarde a tus clases... Vamos... - El menor sintió el jalón en su muñeca cuando el otro lo invitó a correr a su lado.

Después de todo las clases de química eran importantes para el azabache que corrió tanto como pudo detrás del jugador de fútbol, a quien no le interesaba tanto faltar a su entrenamiento y de paso a la clase de Matemática.

Pero si quería que llegaran temprano.

Dentro de la preparatoria había un caos, bueno, todos los días había un caos, solo que en esta ocasión se sentía más o era porque simplemente ambos habían llegado tarde y ya había almas en pena vagando por aquí y por allá. Jungkook frenó su aceleración evitando así tropezar con el letrero que indicaba el salón de la Bióloga Hernández.

- Bueno, de aquí yo me despido, haré de todo para no entrar y ver a mi profesora favorita. - Taehyung rodó los ojos.

- La Bióloga Hernández es buena enseñando, es solo que es un poco estricta.

- Si solo un poco... ¡¡Me dejó cargando 10 enciclopedias por 4 horas!! - Su tono subió de volumen con notorio odio y desprecio. Pero no sé equivoquen, el no la odia.

- Bueno, a mí no me han hecho nada de eso...

- Hablemos de si todavía la amas cuando suceda eso...

- ¡No he dicho que la amo!

- ¡He! -Jungkook lo señaló con felicidad y silbó con diversión. - Acabas de hacerlo, acabas de hacerlo...

- ¡Cállate y desaparece Jeon Jungkook!

- ¡Callame!

- ¡¿Qué...?! - Jungkook se carcajeó y desapareció por los pasillos.

- ¡¡Nos vemos Taehyung!! ¡Te quiero!

Taehyung se quería tirar del balcón de la escuela cuando escuchó a Jungkook despedirse con normalidad.

Apretó los cordones de su mochila y estaba a punto de entrar en su clase cuando unas manos lo atacaron por detrás. David tenía una cara de sorpresa cuando lo tomo desprevenido e inspeccionó su cara con notable preocupación, Taehyung incluso notó que no parecía haber dormido bien la noche anterior.

- ¡Taehyung! ¿Se puede saber dónde estabas? - Le preguntó su amigo.

- Lo siento, tuve problemas con el tráfico...

- ¿Cuáles problemas con el tráfico? ¡Mi trasero! Tu nunca atiendes problemas con el tráfico. Además, hoy no te vi salir de tu departamento y me dijeron que no llegaste a dormir... ¡No te imaginas lo preocupado que estuve!

Taehyung lo analizó con lástima, su cabello estaba desordenado y además parecía no haber comido. Al final resulta que si tenía a un David preocupado a pesar de tener más cosas por las que preocuparse. Ah, su policía.

- Está bien... no lo volveré a hacer, pero ahora no me regañes, ya tuve suficiente de Jungkook en la mañana, por favor... - Pidió el.

- ¡¿Jungkook?! ¿Hablaste con Jungkook en la mañana? Taehyung, te estoy hablando, ¡Taehyung! ¡¡Taehyung!!

El azabache ya no le prestó atención e ingresó en el salón seguido de su amigable pero preocupado amigo.

La clase transcurrió normal, hicieron algunas ecuaciones químicas con Elemento básicos y Taehyung no quiso llamar la atención de la profesora porque sabía que preguntaría sobre su proyecto con las plantas y Taehyung ya no quería hablar de el. Lastimosamente no pudo evitar el hecho de que su mentora hiciera la pregunta cuando fue el primero en entregar su hoja de operaciones.

- ¿Cómo vas con el proyecto de las flores Taehyung? -Preguntó ella cuando terminó de poner un 10 y una nota de "Excelente" en su libreta.

- Aun no germinan, creo que terminaré abandonando el proyecto antes de terminar el semestre. -Contestó el con seguridad. Pudo ver a David sonreírle desde su mesa.

- ¿Entonces no germinaron? - Preguntó ella no muy convencida.

- Lamento informarle que no. Buscaré alguna explicación sobre Química para mí proyecto, si me disculpa. -Hizo reverencia a su mentora.

- Adelante Taehyung. - La mujer lo dejo volver a su asiento en una de las mesas.

Taehyung suspiró aliviado cuando la clase dio por finalizada y David le mostró un pulgar arriba por su esfuerzo.

- Todavía no entiendo... - David preguntó mientras iban por la siguiente clase del día. - Pudiste obtener una más que excelente calificación con ese descubrimiento... ¿Por qué no?

Taehyung recordó el momento en que realmente comenzó aquel proyecto, fue incluso antes de ingresar a la preparatoria. Aquella noche que bajo la lluvia se instaló en su nuevo departamento, Taehyung realmente no olvidaría tan fácil el día en que decidió entregarse a ese proyecto por completo y como su corazón palpito con fuerza cuando su descubrimiento dio éxito.

Taehyung no quería ganar su éxito con el sufrimiento de un ser vivo tan inocente como lo eran las plantas. Jungkook tenía razón cuando decía que le encantaban mucho las plantas, las atesoraba demasiado como para permitirse hacerles daño de esa manera.
Sonrió mate la idea de que ese pensamiento podía ser un poco egoísta, pero que más daba, lo hacía por un bien mayor.

- Soy egoísta... - Le dijo y David aseguró repitiendo sus palabras.

- Eres egoísta... - Después le pateó el trasero con su zapatos y caminó -. Vamos chico egoísta, formémonos por el desayuno antes de que no alcancemos.

Y ahí estaban, Taehyung siempre diría que si de tortas se trataba las mejores eran las de su madre.

- Si, si Taehyung, ya sabemos que mi suegra cocina mejor que la doña, pero déjame comer... - Había dicho David la última vez que lo comentó en voz alta.

La mujer que ese día vendió las tortas los miro con desprecio e incluso le dejó a su amigo 2 pesos más caro el almuerzo. Taehyung no podía con la cara de su amigo cuando se dio cuenta que le habían cobrado de más. Desde entonces la mujer no toleraba verlo en el puesto y Taehyung decidió quedarse cerca de las mesas a esperar a su amigo.

Aquella mañana no fue diferente, el cielo estaba gris y caían algunas gotas de lluvia por lo que tuvo que buscar alguna mesa que estuviera bajo un techo mientras terminaba de analizar una de sus operaciones de cálculo integral.

-¿Cálculo Integral?- El chico dio un salto en su lugar al escuchar su nombre. El pelinaranja tomo asiento frente a el acomodando su playera. -¿Es difícil? ¿Necesitas ayuda?

- No... solo estoy asegurándome de que no cometí ningún error.

Su compañero le asintió y sacó un libro de probabilidad y estadística que comenzó a hojear, Taehyung lo observó cuando terminó de analizar su operación.

- ¿Probabilidad y estadística? ¿Es difícil? -Le preguntó está vez.

- Oh, no... solo que, me parece algo interesante... - Le sonrió mostrando su dentadura perfecta.

Taehyung lo conocía bien, sabía como se sentía, incluso que pensaba y que hacia, aunque el otro no estuviera consciente de ello. Temeroso de fallar alguna de sus pruebas, o cuando temía defraudar a los que el considera amistades con sus errores, y Taehyung tambien sabía que el estaba dentro de esas amistades. Lo supo cuando lo escucho maldecirse en el baño por no haber obtenido una calificación perfecta en su exposición, así que como compañero de equipo Taehyung tuvo que darle ánimos y decirle que el 3% no obtenido era por su propia culpa... y no por qué él no estuviera a su altura.

- Si quieres puedo ayudarte un poco... - Le dijo y los ojos de Jihoon se despegaron del libro para a verlo, se veía cansado, desganado y triste. - Esos temas a veces son difíciles de procesar. - Lo ánimo para que no se sintiera tan mal si no conseguía buena nota.

- Hyung...

Cuando Taehyung escuchó aquella palabra supo que sus problemas no solo eran las materias, si no que su compañero de pupitre se estaba enfrentando a muchas cosas más. Talvez a eso se debía su actitud los días pasados o el comportamiento que tuvo cuando felicitó a David por su cumpleaños. Taehyung no lo admitiría pero estaba curioso.

- Mi madre me dijo que está siendo muy difícil para ella encontrar trabajo para mantener la casa... Y a mí no me aceptan en los trabajos. -Susurró el pelinaranja cómo temiendo que alguien más lo escuchara. - Quisiera obtener notas perfectas para que así mamá no tenga que pagar mi inscripción.

- ¿Por eso has estado estudiando tanto? - Taehyung procuró no ponerlo tan incómodo, aunque Jihoon no lo supiera Taehyung siempre se había dado cuenta de sus problemas. Lo sabía, la profesora Lee tenía problemas y eso más que nada le estaba afectando a su hijo mayor. - ¿Has comido? ¿Descansado? Tienes que descansar para poder retener información mejor

- Yo... yo... -Tartamudeó.

- ¡Tae! Ya volví... había una fila enorme, pero si conseguí un poco de comida .. ¿Quieres? - David apareció con su plato y un vaso de agua. Los ojos del más pequeño se encontraron con los del naranja que de inmediato cambio su expresión y se volvió neutral. - Jihoon.

- David. -Respondió el en un tono más seco y superficial. - ¿Qué tal el semestre?

- Un poco complicado pero estoy bien con eso... Taehyung me ayuda un poco.

- ¿Cierto Taehyung? - Jihoon parecía curioso de la respuesta de su compañero.

- Bueno, eh, un poco jejeje...

- Oh, Taehyung me ayuda mucho, es bueno en varias cosas...

- David...

- Lo sé, es mi compañero de pupitre, y estamos en el mismo grupo del último semestre... - Aseguró Jihoon.

- ¡Oh! ¿Estás en un grupo con MI amigo? ¡Que bueno!

- David...

- Si.

- Bien...

- BIEN.

Jihoon sonrió y guardó su libro en su mochila para después ponerse de pie y mirar al azabache que los observaba con miedo y preocupación.

- Nos vemos más tarde hyung, ten un buen día y gracias... - Le hizo saber antes de retirarse por uno de los pasillos seguro yendo a la próxima clase.

Taehyung solo alcanzó a asentirle con la cabeza antes de que se perdiera por los pasillos y la multitud.

- Ay, muy amable tu compañero... - Comentó David llevando uno de sus tacos con salsa a sus labios.

- Si

- Ajá, ¿Y...? ¿Cuándo firmó el divorcio para que ya te cases con el?

- ¡David!

- ¿Qué?

Taehyung suspiró y negó volviendo a leer su libro.

- Olvídalo.

- Yo olvido pero no perdono... ¿Qué harás en la tarde? - Preguntó antes de beber de su agua de Jamaica.

- Tarea, tengo que pensar en otro proyecto para mi clase ya que dejé el proyecto de las plantas ¿Por qué?

- Bueno que... ¿Desde cuándo necesito un porque para preguntarte qué harás? - Taehyung rodó los ojos, ahí iba de nuevo-. Si te recuerdo Taehyung que me dejaste muy preocupado anoche... ¿Si puedo saber dónde estabas? O también necesito un por qué para saberlo... ¿No basta con mi preocupación?

- Si

- ¿Es lo único que vas a decir? Al menos dime si sales, me preocupo por ti... - Para ese punto Taehyung estaba riendo.

- Esta bien, a la próxima te diré...

- Bien, me calmo.

Faltaba medio desayuno para que las clases comenzaban cuando Taehyung dejó a David con un grupo de sus compañeros, el chico le dijo que debían ponerse de acuerdo para una exposición, así que Taehyung tuvo que devolver a una de las mesas al aire libre mientras esperaba con paciencia a que faltarán 10 minutos e irse a su siguiente clase. Encontró una debajo de un árbol, limpió los bancos llenos de hojas y después tomo asiento ahí para abrir su libro.

- ¿Y? ¿Te reprobaron? - Preguntó el pelinegro que recargó su pierna en la mesa. - Hola.

- No, no lo hicieron.

- ¡QUE BIEN!

- Pero me perdí la explicación de mi último trabajo evaluativo.

- ¡Que mal!

Taehyung no pudo evitar reír ante el cambio de humor que tuvo el muchacho mayor. Jungkook sostenía una de sus manos detrás de su espalda mientras caminaba hacia la banca donde Taehyung estaba sentado.

- ¿Y tú? ¿El entrenamiento?

- Taehyung, yo sé que no estás drogado pero es la primera vez que me tuteas sin estar molesto o obligado.

- ¿Y qué? ¿Está mal? - Le reprochó ocultando el hecho de que sus orejas se habían puesto rojas. - Tu siempre lo haces...

- ¡Oh! O sea que te gusta que lo haga.

- ¡No dije eso! - Jungkook rio divertido-. Pero no cambies el tema, dime, ¿El entrenamiento? ¿Matemáticas? ¿Fuiste?

- Demonios, ¿Cómo sabes mi horario?

- Nada especial, sé el horario de todos. - Le respondió y hubo un cambio de energía alrededor del pelinegro.

- Entonces debes saber a dónde voy ahora...

- Temas de Filosofía.

- ¿Y Daniel?

- Igual.

- ¿Félix?

- Inglés

- Mmm... Lo sabes... - Parecía rendido.

- Lo sé.

- ¿Kuanlin?

- Inglés también.

- Bien, ya me quedó claro.

- Eso es bueno...

- ¡Oye! - Jungkook sonrió.

- No has respondido a mi pregunta... ¿Fuiste?

- No...

- ¿Por qué?

- No fui al entrenamiento pero si a las clases. - Le aclaró con orgullo.

- No te creo...

- Bien, bien, no fui a ninguno de los dos porque me quedé dormido en uno de los bancos mientras esperaba a mi hermano.

- Te creo...

- ¿En serio lo haces? - Jungkook volvió a reincorporarse en su lugar con sorpresa.

- Lo hago.

Ambos se miraron por unos minutos, Taehyung tan absorto en su respuesta y Jungkook tan perdido en su mundo lleno de fantasías... Taehyung era hermoso.

Sacudió su cabeza con brusquedad y apretó fuerte detrás de su espalda. Estaba asustado.

- En realidad yo... vine aquí por otra razón. - Dijo aferrándose aún más a su espalda.

- ¿Tiene que ver conmigo? - Jungkook asintió y Taehyung se acomodó en su lugar-. Te escucho.

- Yoooo.... - Alargó la palabra con nerviosismo. - Sé lo tan importante que es para ti no faltar a clases y lamento haber hecho que faltaras ayer, y está bien, porque estuviste feliz y me lo dijiste ... no quiero decir que está bien faltar a clases... solo que de vez en cuando, o sea no del diario, pero tampoco está mal... - Tiró de su pelo con frustración. - Agh, es que ni yo me entiendo.

Taehyung sonrió y eso hizo que Jungkook volviera a controlarse.

- Está bien, te entendí.

- Bueno... yo lo siento mucho por eso... por eso, te traje algo... - El pelinegro sacó un ramo de flores que estaban atados con una pequeña pulsera que tenían estampados de araña. Taehyung sonrió con ternura ante tal gesto. - Perdón, no son caras y no están envueltas en papel brilloso como las del la tienda, pero es algo...

- Gracias... - Taehyung las tomó y entonces se dio cuenta de que estaban mojadas, seguramente las había salido a cortar durante el receso.

- Y bueno... yo... lo siento.

- No te tienes que disculpar, está bien, puedo informarme después...

- Si lo sé, pero lo siento por no poder disculparme bien... - Taehyung observó al muchacho que tenía enfrente y se le hizo muy tierno el puchero que tenía en su rostro con sus mejillas infladas y sus ojos brillosos.

- Está bien...

Le dijo para calmarlo y calmar su corazón que golpeaba contra su caja torácica con fuerza.
¿Quién era Jungkook y porque le hacía sentir ese dolor de estómago?

Taehyung estaba procesando todo aquello que no se percató del momento en que se encontró a si mismo abrazando al pelinegro que había recargado su rostro en su hombro.

- Taehyung... - Lo llamó.

- ¿Mm?

- Algún día voy a comprarte un ramo real de flores...

- ¿Lo harás?

- Lo prometo.

Y Taehyung se dejó llevar enterrando también su rostro en el cuello del mayor. Porque talvez sabía que hay promesas tan bonitas que no se pueden hacer realidad.