𝚇𝚅𝙸𝙸↬¿conғιar o no conғιar?
Ya en casa volví a ser el suspira que suspira mientras pensaba en Yeonjun desde la comodidad de mi cama. Tras esta última interacción no podía dejar de tener esa risilla de enamorada cada dos por tres. Moría de ganas porque llegara mañana para el próximo turno con él.
¿Me había enamorado de Yeonjun?
Sí.
Si antes mi inseguridad decía que era deseo, eso había cambiado. Me sentía con todos los síntomas del enamoramiento.
Ya en la tarde, todos en mi casa se negaron rotundamente a mi asistencia en el ensayo, hasta el profesor Ten dijo que podía tomarme unos días de descanso. Pero como soy mente fija, no paré hasta ir.
Ya no estaba asusta en lo que podía pasar, tampoco es que quería volver a ensayar en sí. Deseo volver al lugar del crimen, ese mismo donde casi fui degollada. Tenía esa insólita necesidad.
En el teatro todos me dieron una cálida bienvenida y tras unas riñas de Jeno por estar ahí tan pronto, nos pusimos manos a la obra. Fue un poco cansino para mí por culpa los sucesos del día anterior. Pero afronté toda la situación e di mi mejor esfuerzo para que toda saliera bien. Así fue.
A la hora de "calabaza, calabaza, cada uno para su casa" esta de más decir que Taeyong vino a buscarme, y aún así, Jeno nos acompañó hasta el coche.
Pasar por ese lugar fue raro. Lo reviví todo por un corto minuto mirando fijamente a las gotas de mi sangre en el pavimento. Un sentimiento de pavor, misterio y interés despertó en mi ser. Necesitaba saber la causa. Eso se había convertido en una necesidad tan insólita como el deseo de pasar por ahí.
En el camino el gemelo no paraba de decir emocionado que se encontraba porque había una sorpresa esperándome en casa. No le presté mucha atención. Estaba inmersa en mis pensamientos, teniendo un largo diálogo con mi mente, intentando descubrir un indicio del quién pudo ser y el por qué.
El sonido en mi teléfono indicaba una notificación. No estaba esperando ninguna. Eso era raro.
Lo saqué de la mochila para revisarlo. Lo primero que captaron mis ojos fue el mismo número que me había advertido. Tragué en seco, ansiosa, despavorida ¿Lo debería ver? ¿Acaso debería contarle a los demás sobre esto para que ellos se encargaran?
La curiosidad fue más fuerte. Por lo que tocando el ícono el mensaje apareció frente a mis ojos.
Desconocido.
No temas. No vengo a hacerte daño como los otros. Estoy aquí para ayudarte, Malía. Necesitas mi ayuda para descubrir lo que pasa. Seré tu mano derecha en esta historia. No desconfíes de mí por favor.
Puede que me arrepienta de esta decisión, ash, a la mierda. Seguiré a mis institutos con respecto a toda esta situación. Y uno de ellos me decía que debía darme una oportunidad con este desconocido.
Igual ya me había soltado una pista...
Dijo que se trataba de "otros" ¿Acaso hay más deseando hacerme daño? ¿Por qué?
No he hecho nada malo. Ni siquiera sabía que tenía enemigos hasta ahora. Modestia aparte, soy una chica muy buena. El único lío al que he entrado ha sido a mi relación con mi psiquiatra.
Malia.
¿Quién eres?
¿Por qué quieres ayudarme?
Desconocido.
No puedo darte esa información.
Podría ponerme en el mismo peligro que tú. Mi ayuda debe permanecer en el anonimato.
Malia.
¿Qué me asegura que puedo confiar en ti? No puedes ni darme esa información.
Desconocido.
La última vez te advertí de lo que pasaría. No seguiste mis concejos y mira lo que te ocurrió.
Malía.
Podrías ser el mismo loco que intentó degollarme.
Desconocido.
Bien, quizás si te diera la primera pista te convencerá.
Malia.
Okey, estoy esperando.
Desconocido.
Aquí va...
Sé que tienes pesadillas por la noche con un monstruo quemado. Ellos también lo saben. Y eso tiene una razón. Te enviaré una ubicación en donde descubrirás el inicio de tus sueños y porque te quieren hacer daño.
Ahora depende de ti cogerla o ignorarla.
Mis ultimas palabras por ahora son: confia en mí.
La ubicación quedó en la pantalla.
Y casi todo quedó claro...
Era la ubicación de la casa que quedaba al lado de la nuestra. La gran casa que se incendió con el dueño dentro una noche aparentemente tranquila. La esposa y sus tres hijos sobrevivieron e se mudaron.
Recuerdo parte de esa noche. Recuerdo ver las llamas y una ambulancia tras la ventana de la habitación. Pero no recuerdo nada más. Era muy pequeña cuando eso ocurrió. Apenas tenía uso de razón, no entendía lo que pasaba en ese momento.
¿Y qué tenía que ver eso conmigo? No fui la comenzadora del fuego, tampoco tuve algo que ver y mucho menos pude estar implicada. Apenas había cumplido los cuatro años.
Sin embargo, algo me enlazaba a los hechos. Quizás alguien. Debía darme prisa y descubrirlo antes de que mi vida terminara. Solo conozco una persona que podría contarme lo que pasó en la casa del lado sin mentiras. Mi hermana, Lizzy. Ella era lo suficiente grande para recordar, y si mal no recuerdo, creo que era amiga de uno de los niños de ahí.
Ya de vuelta en casa, frente a la puerta y de brazos abiertos me esperaba la dichosa sorpresa la cual no presté la debida atención.
Eran dos personitas. Ver a dichas personas hizo que saltará de emoción. Así que olvidando todo el caos que se consumía mi vida, corrí a sus brazos felizmente.
- ¡Lizzy unnie, Jungkook oppa!
- ¡Malie!
No hay mejor reencuentro que con esas personas a las que nunca deseaste separarte. Había extrañado demasiado a mi hermana y mi cuñado. Eran dos personitas que más me comprendían e me amaban. Siempre estaban a mi lado sin importar qué. Y apoyaban sin importar el problema.
Tenerlos aquí implicaba muchas cosas. La primera era que tenía la compañía debida para superar todo esto. La segunda, se empezarán a descubrir muchos secretos. Y la tercera, aún no sé qué será de mi vida.
Bueno, bueno, qué creen? Ya tienen sus teorías de los buenos y los malos? Quisiera escucharlos🥺
Estoy intentando actualizar más seguido los fines de semana ya que en tiempos de clases me encuentro muy agotada. Seguiré tratando de estar activa por aquí.
Los quiero y nos leemos pronto en el próximo capítulo.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top