capitulo 6.
Las tropas marchaban con armas en mano mientras eran dirigidos por mi, Marcy Wu la próxima en liderar un ejército con tal de rescatar a mi amada Anne y a todo aquel que haya sido arrebatado del pueblo.
Estaba molesta pero debía controlarme o todo saldría de mis manos, era algo que mamá siempre me recordaba y más siendo ella la segunda, ahora, primera reina más poderosa junto con mamá Olivia. Desde la muerte de Andrias.
Miraba a cada uno disparar en los tiro al blanco de paja y yo solo observaba que practicarán bien , normalmente estaría en una esquina temblando por la vergüenza pero está vez era diferente, estaba molesta con los vikingos por arrebatar lo que más amo.
Aún más porque ellos mismos mataron al Rey Andrias con quién iba a ver una unión de ambos reinos, ahora esos planes ya no existen.
Regrese a mi castillo para ver a mi mamá Yunan inspeccionar un mapa para llegar a espaldas del reino en unos cuantos meses.
— ¿Es necesario una guerra, cariño? — hablo Olivia con cierto disgusto.
— lo siento amor pero ellos empezaron esto, quieren guerra pues la tendrán — escuché el tono enojado de mi madre.
— mamá y madre, estoy orgullosa de decirles que el ejército va bien hasta el momento — las interrumpí mientras revisaba el mapa de lejos y con solo un vistazo ya tenía todo memorizado.
— esas son excelentes noticias, dentro de tres o cuatro meses podremos destrozar a esos bárbaros y tú tomarás el reino del norte en ofrenda al Rey Andrias — ser acercó a mi Yunan lo cual me hizo tragar saliva nerviosamente.
Aún no estaba lista para gobernar hasta que recordé a Anne.
— claro que lo haré pero con la condición de casarme con Anne Boonchuy y ella gobierne junto conmigo — respondí firmemente recibiendo una risa.
— me temo que no se podrá, debe ser de la realeza o....— un leve golpe de mamá la hizo recapacitar — está bien pero es muy pronto.
— no, después de la guerra viene la paz y esa paz es la boda entre yo y Boonchuy — dije firmemente para sentarme en el trono de mi madre Yunan — en cuanto ganemos la guerra tomaré mando del reino y a la semana será mi boda, tengo todo perfectamente calculado madres.
Ellas se quedaron calladas para mirarse entre si.
— cariño primero debemos prepararnos para la guerra y si todo sale bien, haremos tu boda — dijo dulcemente mi madre Olivia y yo sonreí.
— claro pero mi esposa será Anne porque ella es el motivo y causa de que haya declarado guerra a esos idiotas que gobiernan algo que nunca fue suyo — me levanté — ahora iré a tomar un baño, estoy agotada de comandar.
Me retire ignorando las miradas de disgusto o alguno que otro comentario de mi madre Yunan, conocía bien a mi madre y lo indecisa que puede llegar a ser, pero decidí ignorar sus quejas o reclamos, en todo el transcurso de mi baño en tina, no paraba de pensar en Anne ¿Cómo está ella ahora en estos momentos?.
Detestaba la idea de que muchos bárbaros se aprovecharan de ella o arrebataran su inocencia.
Suspiré pesadamente para sumergirme en el agua espumosa.
Estoy provocando una guerra por ti, con tal de tenerte a salvo.... Boonchuy.
[. . .]
— ¡No puedo creer que nos besamos! — moví mis piernas con emoción al sentir los suaves labios de Sasha con los míos y para más emoción, su aliento no olía mal.
— eso es impresionante, Sasha nunca hace eso y es algo nuevo — hablo Sapin aún en estado de shock.
Yo solo abrace la almohada en forma circular color verde oscuro para gritar de emoción; mi primer beso y fue con....una animal, bueno, sigue siendo una bestia pero tiene su lado lindo y físicamente es jodidamente hermosa y atractiva, pensé.
Esperaba mi primer beso con Marcy pero nunca sucedía incluso este nuevo sentimiento es muy diferente a lo que sentía por Marcy. Era algo extrañamente nuevo.
— es lindo ver que saco el lado tierno de la comandante Sasha — hablo él para sentarse en la cama.
— aún no lo creo es decir....ella me vio triste y hizo un momento lindo para mí — tome el collar que compre en un puesto pues recordar a Sasha colocarme el collar me daba una extraña alegría.
— eso es lindo de su parte ¿Que piensa hacer ahora? señorita.
— ella me dijo sobre cenar con ella y pienso que si es algo bueno, quiero cenar con ella pero antes no quería por ser tan salvaje ¿Eso tiene sentido? — pregunté sonrojada.
— la está conociendo y es válido si se siente así, es normal — él me sonrió.
Nuestra plática fue interrumpida en cuanto alguien tocó la puerta fuerte lo cual me saco de mis pensamientos, los toquidos bruscos pasaron a golpes más suaves.
Deje que pasarán y mire a Sasha con ese notorio sonrojo en sus mejillas que la hace ver linda.
— yo....emmm...— ella tomaba su cuello con nervios para luego aclarar su garganta y hablar firme pero suave — Anne quería preguntarte si....gustas cenar conmigo está noche.
Yo salte emocionada y en cuanto me percate de aquello me senté cruzando mis piernas.
— está bien, cenaré contigo — sonreí levemente.
— parece que por fin me aceptas la cita — ella se acercó y sin percatarme estaba encima mío, lo cual me sonrojo.
— no hagas una tontería o juro que no ceno contigo, Waybrigth — hable de forma juguetona y ella solo río.
— sabes, es una lástima porque yo siempre hago idioteces — de un momento a otro ella tomo mi mejilla con suavidad para acariciar suavemente la parte trasera de mi oído.
Solté un leve jadeo por aquello y ella sonrió.
— entonces, te veo en la cena — ella se separó dejándome con la duda y mire como salto como si fuera una niña pequeña.
Definitivamente me gustaba conocer este lado de Sasha.
— no puede ser Sapin....¿Es bueno que un vikingo como ella me traiga así de tonta? — cubrí mis mejillas en cuanto sentí el calor acumular se en aquella zona.
— si quiere calmarse un poco, apenas se están tratando incluso si continúan por el buen camino puede que la aclamada boda sea tiempo después — él sonrió amablemente para salir de la habitación — le traeré un poco de té para luego buscar un hermoso vestido para usted.
En cuanto él cerro la puerta yo suspiré pesadamente, quería verme linda está noche pero no tan extravagante, aún no podía creer que de verdad me está gustando estar con Sasha. Después de un mal comienzo y un cierto lapso de tiempo el cual tuvimos varias discusiones, incluso enfrentamientos. Apesar de eso, estaba decidida a continuar con esto.
Pov Sasha.
En cuanto entre a mi habitación lo primero que note fue a Mugre de brazos cruzados, aquello me hizo pasar mi expresión alegre a una seria.
— ¿Que sucede Mugre? — pregunte.
— ¿Así que vas a estar atenta a tu mujer antes que prepararte para la guerra? — me miró serio y yo solo tome un hacha vikinga de la pared.
— pfff claro que no, a ella la veré hasta la noche mientras vamos a entrenar al ejército — ordene pero su rostro no estaba del todo convencido.
— Sasha, me alegra que por fin controles tu temperamento con esa mujer pero la guerra se aproxima, no sabemos si mañana o cuando y debes decirle a ella sobre eso.
— aún no se cómo decirle, pienso que no debe saber o quizás le diga después de que me la folle — hable para quitarme la capa y parte de mi armadura para poder entrenar mejor.
— ¿Aún piensas en solo hacerla tuya de esa manera? — me miró mientras arqueaba su ceja.
Yo suspiré pesadamente pues desde que la vi sabía que debe ser mía, solamente mía incluso mas que solo en la cama, era extraño para mí, pero por eso lo primero que pensé en cuanto la mire fue en casarme con ella.
No sabía que me ocurría.
— no y eso es raro, por primera vez quiero a una mujer solo para mí y para toda mi vida — suspiré.
— y eso sucederá si ganamos la guerra, cuando ganemos te prometo que estarás con ella todo el tiempo y podrás hacerle lo que quieras — él salió de la habitación — te espero afuera, comandante.
Suspiré por aquello en cuanto él salió yo solo me tiré en mi desordenada cama, cubrí mi rostro para pensar en como decirle aquello.
Pero hasta la cena la veré lo cual tenía tiempo en buscar las palabras correctas para decirle sin que ella quiera irse de mi lado, no quería perderla.
Y no sabía porque, siempre me daba igual si una persona se queda conmigo pero está vez quería protegerla.
Me levanté decidida y tome mi espada para salir de la habitación, llegando al campo de entrenamiento donde la mayoría estaban cansados y yo solo suspiré por aquello, si que son unos vagos, buenos para beber y me exigen algunas mujeres para ellos pero ni siquiera merecen un mínimo descanso.
Todos se levantaban como si fueran muñecos de los cuales podía manejar fácilmente, miraba a cada uno apestando a sudor y lodo hasta que les di la orden de continuar sus prácticas de usar el armamento.
Hasta que uno de ellos se acercó a mi.
— comandante Sasha me temo que entrenar duro y pesado no será suficiente pues el ejercicio de las tierras del sur, tienen mejor equipamiento le sugiero.....— este hizo una pausa al ver mi semblante serio— le sugiero que busque proyectiles, yo sé dónde conseguir al igual que armas más filosas y mejores armaduras anti balas.
Analice aquello mirando todo el entorno de mis tropas tiradas en el suelo ya cansados, suspiré para verlo seriamente pues a este paso íbamos a ir en picada.
— tienes mi autorización de conseguir proyectiles, mejor equipamiento y armadura que puedan proteger nuestros cuerpos de mejor manera, pero que sea antes porque tenemos que poner todo eso en práctica — tome su hombro con fuerza y él solo asintió para irse.
Mire a toda mi tropa, estaban cansados y eso me decepcionaba.
— ¿Que hacen? ¡Continúen su entrenamiento o todos moriremos, nuestro futuro depende solo de nosotros! — grite con autorización para tomar un hacha de doble filo.
[. . .]
La azabache bajaba las escaleras con la frente en alto demostrando su seguridad en si misma; manteniendo su semblante neutro hasta que se detuvo en frente de un enorme cuadro donde estaban sus dos madres y ella desde pequeña.
Con ropa formal de la realeza.
La de ojos rasgados miraba atenta aquella pintura para suspirar pesadamente. Miraba con atención cada detalle de su castillo para finalmente llegar hasta un pequeño cuadro de ella y la castaña desde pequeñas.
— Anne te prometo que te sacaré de ese infierno y rezo porque mantengas tu virginidad intacta para mi, no quiero ni imaginar me que horribles cosas te obliguen a hacer — miro la pintura para detenerse en el balcón.
Miro atentamente como su pueblo aún seguía con las marcas de la última emboscada, apretó sus manos para de un momento a otro estar entre aquel pueblo con hogares destrozado que a duras penas intentaban reconstruir su hogar.
Los pueblerinos la miraban con súplica en que sean ayudados pero a Marcy no le intereso o les respondía "es trabajo de mi madre" aquello les disgustaba a uno que otro pueblerino.
Su única preocupación por el momento tenía nombre y apellido, Anne Boonchuy.
Llegó a la pequeña casa un tanto apartada del pueblo, era la casa con cosecha de los plantar y está noto como él viejo Hopedaya se esforzaba en arreglar sus terrenos.
— ¡Marcy! — hablo el amigo de aquella castaña, spring.
— no tengo tiempo para una jugarreta — hablo seriamente.
— no es eso, tu deberías de estar apoyándonos — hablo confundido el menor.
— es trabajo de las reinas si quieres ve y diles en persona que tú viejo abuelo está en sus últimas, tratando de arreglar su vieja cosecha — hablo cruelmente mientras miraba al mayor detenerse un momento a causa del sobreesfuerzo para seguirle su nieta más joven.
— ¿Disculpa?, la Marcy que conozco y que Anne conoce, ella si estaría al pendiente ¿Porque actúas así? Llevo días que no te veo poner un pie en el pueblo — se quejo mientras esté se cruzaba de brazos, obteniendo una mirada sería de la mayor.
— ¿Crees que es fácil para mí? disculpa estoy comandando una tropa para la guerra entre nuestro terreno del sur contra el norte.
El de cabello anaranjado miro impactado a la azabache por aquella información; pues el pueblo no estaba enterado de la guerra que iba a haber entre ambos reinos enemigos.
— ¿Que?....¿Porque no nos dicen? debemos preparar el pueblo y....— la azabache lo interrumpió con una risa.
— el pueblo estará bien, ustedes la tienen fácil en cambio yo y mis madres....me temo que tendré que ir hasta el norte para cortarle el cuello a quien sea que esté detrás de toda esta mierda — tomo un tomate hechando a perder para aplastarlo con su mano— todo sea por Anne.
Spring miro con temor aquello para bajar la cabeza con tristeza al saber que su amiga estaba en peligro.
— solo quiero que Anne sepa lo egoísta que te has vuelto con el pueblo.
La azabache chasqueo la lengua y tenso su mandíbula por aquello, sin importar la diferencia de edad tomo por el overol a aquel jovencito.
— esto es entre ella y yo, en cuanto termine está horrible guerra, Anne será la próxima Wu — sonrió con superioridad para empujar al menor en un charco de lodo— mejor ve y ayuda a tu viejo abuelo o puede que a este paso ni siquiera llegué a ser un invitado de mi boda.
La azabache se burló para ir camino a casa de los Boonchuy, dejando a un molesto spring en el piso que la miraba con disgusto.
— Anne merece a alguien mejor — murmuró a lo bajo el joven spring, levantándose y limpiando el lodo de su ropa.
La de ojos rasgados miro la casa en perfecto estado de los Boonchuy y suspiro de alivio, miro un puesto que a duras penas podía mantener su local en servicio.
Sin pensarlo dos veces compro una canasta de frutas y delicioso bagre recién pescado, aclaro su garganta para tocar la puerta siendo abierta por la señora Boonchuy.
— Marcy....hace rato que no te veía — hablo en voz baja y desanimada la morena.
— supe lo que sucedió con Anne y lamento mucho eso, a cambio de eso le obsequio el mejor pescado — se inclino levemente para ofrecerle aquella canasta.
La mujer mayor la tomo para suspirar al recordar que su hija fue capturada.
— señora Boonchuy puedo empatizar con su dolor — está tomo su mano — el reino está decidido en hacer una guerra para traer de vuelta a Anne y a todo aquel que fue raptado.
— ¿Que?...
La mayor miro a borde de lágrimas aquello pues nadie estaba de acuerdo de aquella guerra, la señora B. bajo la mirada.
— quiero a Anne tanto como tú, incluso más porque es mi hija pero Marcy....una guerra no es la mejor opción, simplemente ve por ella y los demás de manera pacífica y....
La azabache la interrumpió negando con la cabeza y suspirando.
— me temo que estamos hablando de bárbaros, vikingos. Aquellos que mataron al rey Andrias — explico con falsa tristeza — lo mejor es hacer una guerra porque queramos o no ellos van a querer pelear como animales.
La mayor limpio sus ojos evitando que las lágrimas fueran derramadas.
— yo....debo irme, si sabes algo de Anne por favor avísame.
Aquella conversación termino con la puerta cerrada con candado, Marcy bufo frustrada para arreglar su cabello del cual se desordeno.
— Marcy Wu mantén la calma, todo saldrá bien y te casarás con Anne — hablo para si misma.
Regresando a su hogar luego de ver a su viejo pueblo en ruinas.
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