El tiempo transcurría lento para cierta castaña en cambio para cierta rubia; había perdido la noción del tiempo cosa la cual solamente la Bruja sabía exactamente cuánto tiempo se encontraban en aquella montaña.

Las semanas habían pasado rápido pero Sasha no tenía ni la menor idea de que fue el tiempo.

Aún continuaba su arduo trabajo de fuerza completa en escalar el segundo nivel de la montaña para continuar escalar el tercer nivel.

- ¡Ya casi....ya casi...AGH! -se quejo demostrando todas sus fuerzas pues sus cayos habían crecido más a tal grado de comenzar a sangrar piedras más atrás.

La vieja Bruja se aferraba a la fuerte espalda de la rubia quién daba sus últimas, con tal de llegar al "tercer nivel".

- ¡LO LOGRE! - puso su mano en la última piedra más grande, comenzó a subir esperando pacientemente que su acompañante terminará de trepar.

- debo admitir, me sorprendiste solo un poco - canturreo ayudando a quitar las demás cosas de la espalda de Sasha.

- ¡En su cara!.

Y justo antes de cantar victoria en cuanto comenzó a subir su cuerpo, una piedra iba a causar su muerte pero justo a tiempo logro tomar equilibrio. Se aferró a la nieve del suelo y en cuanto se aseguro de estar a salvo, continúo con su victoria.

- ¡Ve que lo logré! chupame las bolas - señaló su ingle la cual fue golpeada nuevamente.

- deja de ser tan egocéntrica y ponte las pilas, todavía falta demasiado por subir - señaló la punta- quizás sea bueno descansar.

- claro, después de todo sobró comida de ayer.

Sasha se estiró para sentarse en una piedra la cual tenía la forma perfecta y noto como la sangre manchaba sus manos, unas manos las cuales a cualquier persona le impresiona lo fuerte y firme que son. En vez de ser finas y delicadas.

- déjame ver eso - se acercó la mujer de prendas de animal, tomando las manos lastimadas de la rubia.

- ¡Hey! sea cuidadosa porque nuestra vida depende de estás - gruño recibiendo una mirada de pocos amigos por parte de la contraria.

- exactamente ¿que es lo que tienes? - pregunto dejando sus manos para tomar su bastón entre el montón de cosas.

- ¿que no ve? tengo....- termino de hablar al notar que sus manos estaban firmes y sanas, sin cayos pero aún manteniendo su grosor - ¿Pero que carajos?.

Sasha miro confusa a la mujer anciana, quién simplemente sonrió de lado para tomar madera del suelo.

Una vez más aquella bruja volvía a jugar con su mente y la rubia en su ignorancia no comprendía nada desde que despertó en casa de aquella misteriosa mujer.

- ¿porque no te encargas de encontrar más provisiones? no nos va a durar lo poco que tenemos, anda.

- ¿no puedo descansar un momento? casi caigo de un abismo y apenas veo que mis manos están mejor - se quejo la rubia levantándose de su lugar.

La mujer sin un ojo la amenazó con la mirada y de inmediato Sasha tomo un par de lanzas para cazar.

- bien pero el animal más grande es solo mío.

Sin más, la rubia entre gruñidos comenzó a andar en el bosque gracias a la piel que cubría su cuerpo, el frío ya no era una debilidad.

Comenzó a saltar entre rama y rama haciendo una que otra dominada para caer de pie, luego de hacer una voltereta en el aire, simplemente se divertía y aplastaba con su lanza uno que otro sapo o insecto el cual degustaba después.

Su diversión fue interrumpida cuando escucho unos pasos detrás suyo y de inmediato se puso a la defensiva; miro seriamente su entorno analizando cada cosa hasta que entre los arbustos, las ramas se movían y sin pensarlo se lanzó a atacar.
Su sorpresa fue grande y se detuvo en seco en cuando noto a un pequeño niño moreno de cabello rizado, ojos curiosamente azules usando un pequeño overol por encima de sus ropas de pueblerino.

Sasha lo miro confundida y volteo a todas las direcciones en busca de dónde pudo provenir aquel niño de cinco a seis años.

- ¿que hace un mocoso como tú en este lugar? - pregunto molesta pues para ella los niños eran una distracción más.

Simplemente no obtuvo respuesta más que el pequeño comenzó a correr en dirección contraria.

- ¡Hey!, ¡no puedes estar solo por aquí es demasiado peligroso! - grito comenzando a correr detrás del niño.

Quién era demasiado rápido pero no tan ágil como la rubia, quién entre trepar árboles se lanzó al pequeño niño poniendo como prioridad que esté no salga herido.

- te atrapé - soltó una risa para abrazar al pequeño encima suyo.

El niño comenzó a temblar del miedo pero al mirar fijamente a la rubia, ese temor se esfumó a cambio de un aire de tranquilidad pues se sentía familiarizado con Sasha.

- veo que no hablas mucho pequeño - Sasha se levantó dejando al niño en frente suyo.

Comenzó a mirar al rededor con cierta confusión; era un lugar nuevo para ella y curiosamente se encontró a un niño perdido o abandonado.

El pequeño niño de rizos comenzó a temblar y de inmediato se escondió detrás de la fuerte pierna de Sasha, la rubia volteo a verlo confundida.

- ¿tu mami llegó acaso? - canturreo hasta que el suelo comenzó a temblar junto a un par de árboles moverse de manera brusca, Sasha volvió a la defensiva cubriendo con su cuerpo al pequeño - definitivamente esa no es tu madre enojada.

Sasha cambio su semblante juguetón a uno serio, tomo su lanza con fuerza y busco con la mirada un lugar seguro para el pequeño niño.

Analizaba cada detalle de su entorno y lamentablemente no había una zona segura para el niño perdido, Sasha gruño apretando su lanza a punto de romper está, de inmediato los pasos fuertes resonaron más cerca, la rubia tomo al niño y lo escondió detrás de enormes piedras entre otros arbustos.

Por ella hubiera hecho un refugio para el infante pero el tiempo era muy limitado.

- no te muevas de aquí y si vez peligro cerca ¡Huye! - le advirtió al pequeño el cual se aferró al pecho cubierto de piel, de esta - pequeño no hagas esto más difícil de lo que ya es.

Sasha sentía su corazón blando por segunda vez, la primera fue por Anne y ahora era por mantener a salvo a un infante, cosa que para ella no era nada esperado.

- en cuanto el peligro se esfume, vendré por ti ¿si?.

El pequeño se aferraba al cuerpo de la rubia quién noto como sus ojos comenzaron a estar cristalizados, el pequeño tenía miedo y confusión.

Sasha antes de hablar unos árboles cayeron al piso, la rubia se puso alerta y escondió entre unos cuantos arbustos al niño de tez morena ojos azules.

- bien ¿Quién carajos se atreve a joder mis pelotas otra vez? - pregunto la rubia molesta volviendo a endurecer su corazón y estar a la defensiva nuevamente.

En cuanto miro a su lado, abrió los ojos y la boca del shock notando que era un gigante de un solo ojo, tenía brazos fuertes pero una barriga que lo hacía ver horrible. Portando una armadura con pieles.

- definitivamente este bosque no es normal - hablo sería esquivando el enorme puño que iba a aplastar la.

La criatura gruño golpeando su pecho para volver a su juego de aplastar el cuerpo de Sasha como si fuese una cucaracha.

- ¿eso es todo grandote?.

Se burló subiendo al brazo del gigante el cual en un intento de golpear, este se lastimó su propio brazo.

Soltó un quejido de dolor para lanzar a la rubia, posicionó sus dedos y al mover el dedo índice la rubia salió volando, chocando contra un árbol.

- ¡Agh....carajo! - cayó de rodillas por el golpe en su espalda, tomando nuevamente su arma- bien esto no será sencillo.

En cuanto noto que el gigante hombre comenzó a buscar al pequeño cerca de su escondite, Sasha se alarmó tomando con fuerza su lanza y de inmediato correr.

- ¡Tu lucha es contra mi! - y en cuanto él gigante iba a tomar al niño de rizos.

La rubia se lanzó tomando impulso; una vez mas la extraña energía rosa rodeó su cuerpo, una llama flameante rosada cubrió su puño el cual choco contra el rostro del gigante, alejándose del refugio del pequeño niño.

Sasha clavo su lanza en el ojo de su enemigo y cortando lo a la mitad, un líquido extraño salió de la herida punzante.

- ¡Esto es entre tú y yo!.

Sasha miro al pequeño que admiraba aquella pelea en su escondite, en cuanto está se aseguro que el niño se encontrará bien nuevamente miro molesta y sería a su contrincante.

El gigante en cuanto comenzó a olfatear usando su olfato de inmediato empujó el cuerpo de la rubia, provocando que chocará contra la nieve.

Sasha se levantó adolorida mirando detrás de si con confusión a su enemigo; notando que esté de inmediato saco entre los arbustos al infante.

- ¡Estás jodido pequeño hijo de puta!.

Sasha se levantó olvidando el dolor de su cuerpo, notando como el enorme hombre sin su único ojo comenzaba a irse del lugar con el niño entre sus manos.

- ¡Mierda! - grito desesperada, de inmediato corrió detrás del gigante- ¡con el niño no, hijo de puta!.

La rubia tomo impulso para saltar clavando sus uñas en la enorme espalda de aquel gigante, comenzó a escalar ignorando el frío viento nevado para cuándo se posicionó en el hombro de este, noto al niño que era asfixiado y a nada de ser aplastado entre la mano de aquel gigante.

- hoy no será tu día - hablo para si misma notando como el gigante se adentraba al bosque.

Luego de un rato donde la rubia esperaba para llegar al "pequeño escondite" de aquella extraña criatura, se topo con una extraña cueva la cual estaba camuflada entre algunos árboles y ramas las cuáles eran parte de la naturaleza.

Sasha miro confundida aquello donde noto que al entrar el fétido olor a muerto y más fluidos penetró sus fosas nasales, la rubia hizo cara de asco de inmediato y solo pensó en el niño, en cuanto el enorme hombre dejo al pequeño colgado de una jaula parecida a la de un perico. Esta miro confundida como iba a lograr salvar al pequeño.

- mierda - murmullo notando como el gigante comenzó a encender una fogata.

El tiempo se agotaba y la mente de Sasha se encontraba en blanco, miro de reojo al niño el cual se encontraba temblando de miedo y hecho bolita abrazado asi mismo.

La rubia sentía impotencia y estaba decidida a dejar su esfuerzo hasta ahí pero la mirada del pequeño le era un tanto familiar y el sentimiento de culpa le ganaba.

- lo que hago por un mocoso - gruño entre dientes para saltar de un punto A al B.

Cayendo perfectamente encima de la jaula, se le hizo familiar pues tristemente era parecida a la que utilizaba con su trata de blancas entre pueblos bajos. El sentimiento de culpa creció más y eso la hacia enfurecer.

- tranquilo estoy aquí en cuanto salgamos de aquí tu buscaras a tus padres ¿Okey? - la rubia aprovecho la distracción comenzando a romper los barrotes con desesperación.

- papi...- el pequeño hablo entre cortado y tembloroso pues Sasha era su única salvación, el infante se encontraba al borde del llanto.

- por fin hablas, no soy tu papá y en segunda será mejor que no hagas un berrinche o ambos seremos comida ¿Bien? - ordenó molesta para después de mirar detrás suyo al gigante, por fin destrozó la jaula.

Sasha tomo del cuello de la camisa por encima, al niño y lo saco de su "prisión". Pero el destino tenía otros planes.

- ¿¡Quién está ahí!? - grito grave y brusco el gigante, dejando su caldero encendido, para olfatear su alrededor y seguir el sonido a lo bajo a la rubia con el infante.

Sasha le enseño el dedo de en medio comenzando a correr ignorando por completo los huesos humanos y restos de animales en aquel asqueroso lugar.

Pero el gigante de inmediato tomo a Sasha quien empujó al pequeño a la salida.

- ¡Busca a tu verdadero padre mocoso! - grito antes de sentir como sus huesos tronaban levemente - ¡Agh!.

Se quejo al sentir como sus ojos estaban por salir de su órbita y sus órganos comenzaron a sentirse apretados. El gigante comenzó a golpear varias veces el rostro de Sasha el cual comenzó a sangrar.

En cuanto al niño de tez morena, se escondió mirando tal escena.

- al menos limpia tus asquerosos dientes si vas a comer me - canturreo escupiendo sangre para sentir su agarre mas apretado.

El gigante gruño y la rubia aguanto el aire pues el aliento caliente había chocado con su rostro, que sentía el espantoso aliento llegar hasta su boca.

- ¡Hijo de puta! - Sasha comenzó a forcejear pero era en vano, era un simple insecto para aquel hombre.

La rubia miro el enorme estómago del gigante y suspiro pesadamente pues su plan no sería tan agradable.

- te veré en el infierno.

Y sin hacer más teatro el gigante simplemente se comió de un mordisco a la rubia, en cuerpo completo. El niño miraba aquello como si fuera un pan comido, el pequeño miraba a todos lados angustiado.

Sasha se adentro dentro del estómago del gigante buscando una forma de como escapar sin ser digerida. Gruño y apretó sus puños.

- y todo por un mocoso sin padres amorosos - se quejo comenzando a moverse entre los ácidos gástricos, poniendo cara de asco - es en vano, quizás esto sea todo y quizás no sea tan buena madre como Anne espera.

Se cruzó de brazos cambiando su semblante repulsivo a uno más decaído.

Desde afuera el niño de rizos tomo un hueso humano y una piedra, de inmediato comenzó a lanzar piedras filosas al cuerpo de su contrincante que solo se calentaba en el fuego.

Ninguno decía nada, era como estar en una película muda. El pequeño comenzó a lanzar más piedras y al mismo tiempo esconderse del gigante.

Quién justo antes de lanzarse contra el niño y aplastarlo como insecto, el sonido de tripas resonó en su interior junto el de su estómago; el de ojo ciego tomo con fuerza su abdomen que comenzó a inflamarse.

El menor miro aquello con confusión y de en un parpadeó, el gigante estalló siendo abierto del estómago manchando aquella caverna y de su interior una Sasha jadeando logro escapar y derrotar al monstruo.

- ¡Te dije que sería un mal día para ti, cabron! - insulto manchada de carne del mismo gigante junto a más fluidos estomacales.

La rubia tenía un brillo rosado en sus ojos y su puño estaba cubierto de una bola de fuego del mismo tono. El pequeño miro con admiración a Sasha y de inmediato corrió hacia ella abrazándola con fuerza desde sus piernas.

- no pequeño yo...- intento alejar al menor pero este había ablandado el corazón de la rubia.

- papá....- hablo una vez más y Sasha de inmediato lo cargo.

- está bien pequeño - suspiro pesadamente mirando todo su alrededor notando el escenario repulsivo, algo que un infante no puede ver y simplemente comenzó a caminar con el niño en brazos - salgamos de aquí, la anciana loca no me va a creer nada de esto.

El niño sonrió abrazando por el cuello a Sasha quien gruño para después sonreír pues un aire familiar sentía por parte del menor.

En cuanto salieron de aquel repulsivo lugar; durante el camino Sasha encontró un pequeño poso con agua el cual no dudo en meterse a bañar, dejando sus prendas de animal en una roca y al pequeño lo más cerca posible. No duró mucho simplemente lo suficiente para no tener el repulsivo olor pegado en ella.

Movía su cabellera rubia y en cuanto el pequeño sonreía, Sasha sonrió repitiendo su acción para salir de aquella agua fría pero refrescante para ella.

- veo que eres muy juguetón, no entiendo que hace un niño como tú aquí - miro al niño y de inmediato se asusto, escondiéndose detrás del cuerpo desnudo de la rubia - ¿Que ocurre?.

Pregunto dudosa y nuevamente los aullidos de lobos sonaron entre los árboles, Sasha sonrió de lado pero al ver al pequeño asustado de inmediato se cambió para ponerse a la defensiva.

Y tras una larga lucha contra lobos, mientras el pequeño estaba escondido respirando pesadamente, Sasha salió para demostrarle que el peligro ya no estaba cerca.

En todo momento la rubia cuidaba al menor como su hijo; lo cargaba cuando esté se cansaba después de estar un buen rato caminando y luego lo tomaba de la mano mientras ella sostenía la cena de hoy.

Hasta que por fin el destino volvió a hacer de las suyas.

- ¡Volví! y no me lo vas a creer - hablo Sasha con una sonrisa de oreja a oreja dejando la carne de lobo y venado en el piso.

- tardaste demasiado ¿que tanto hacías allá fuera? - volteo a verla la mujer mayor, saliendo entre la casa de campaña.

- bueno traje la cena de hoy y mañana pero un pequeño amiguito me acompaño, necesito que lo llevemos a la aldea y....- justo antes de continuar la mujer la interrumpió poniendo un dedo en sus labios.

- ¿cuál amigo? Sasha estás sola ¿o acaso la locura se te pego? - canturreo la mujer tomando las carnes crudas para comenzar a preparar estás.

Sasha abrió sus ojos de par en par mirando a su alrededor, notando que en efecto estaba sola, él niño ya no se encontraba tomado de su mano lo cual la alarmó pero ni siquiera estaban sus pequeñas pisadas, marcadas en la nieve.

La rubia suspiro pesadamente y su semblante alegre volvió a uno decaído y serio incluso más mal humorada. Entro al pequeño refugio donde suspiro pesadamente.

- pero si yo lo vi....

Simplemente cerro sus ojos en cuanto se acostó en el tapete para dormir, concentrándose en su respiración, hasta que reconcilió el sueño.

[. . .]

Las semanas habían transcurrido de manera lenta y un tanto pesada para mí; Marcy se la pasaba de un lado a otro incluso viajando de manera rápida hasta el reino norte, todo era tenso.

Justo recordar las palabras de mi doctor respecto a no estar estresada, hacía todo lo contrario o por lo menos así me sentía.

La noche había llegado junto al frío de invierno; me encontraba en mi habitación leyendo una historia romántica la cual me recordaba a Sasha, cada vez no podía dejar de pensar en ella y menos en llorarle, Marcy lo a notado. Lo cual es incomodo.

Mi lectura de cada noche para distraerme de esos deprimentes pensamientos; fue interrumpida por la puerta abrirse dejando ver una sombra enorme.

Era del tamaño de un bárbaro incluso podía apostar que parecía mucho a la sombra que Sasha generaba siempre.

- ¿Sasha? - pensé en un instante con un brillo en mis ojos y como las lágrimas estaban por salir.

- linda perdón por interrumpir es solo que no podía dormir - mi semblante con esperanzas paso a uno decepcionado. De inmediato limpie mis lágrimas para cerrar mi libro.

- claro....emmm si quieres puedes tomar asiento - ofrecí amablemente prendiendo una luz de noche la cual Marcy me obsequio de repente.

- gracias - ella sonrió, cerrando la puerta detrás suyo para acostarse a mi lado.

Apreté las cobijas de mi cama con fuerza a la vez tome con fuerza la capa de Sasha, la cual comenzaba a perder su olor, ella estaría a mi lado pero a cambio de eso era mi mejor amiga.

- la noche es larga y sabes, lamento mucho si me he distanciado de ti - tomo mi mano entrelazando sus dedos - puedo compensar te el tiempo perdido ahora mismo.

Aquello me dio un flashback. Simplemente asentí, no le dirigía la palabra.

Y sin percatarme sentí como ella se posicionó encima mío, la mire confundida, con la esperanza de que no haga lo que yo pienso.

- te noto más decaída de lo usual pero se de algo que te fascinará y subirá el ánimo.

En cuanto dijo aquello, re lamió sus labios para acercarlos a los míos. Yo me negué en cuanto sentí aquellos labios ajenos pero, no podía quedarme así, por más que me doliera la perdida de Sasha debía continuar con mi vida.

Apreté su capa la que usualmente ella usaba siempre, no podía y simplemente me sentí obligada a corresponder aquel beso intenso y húmedo. Podía sentir como rodeaba sus manos por mi cintura bajando lentamente hasta mi intimidad, entre mi ropa para dormir, lo cual me puso tensa.

- Marcy estoy cansada - la detuve tomando su mano la cual pasaba por mi monte de Venus.

Ella me miró confundida.

- siempre estás cansada Anne ¿podemos solo está noche? se que lo correcto es hasta el casamiento, pero quiero que tú primera vez sea sin remordimientos.

Aquello me tenso aún más y nuevamente me beso con desesperación, apreté sus hombros en un intento de alejarla pero es Marcy, ella no capta indirectas. De nuevo sentí como comenzó a subir mi pijama holgada lo cual me asusto.

- te quitaré lo estresada que estás cariño - susurro de manera seductora en mi oído. Un escalofrío recorrió por todo mi cuerpo.

Hasta que quitó mi prenda superior ella pego el grito al cielo; de inmediato se levantó de la cama y yo me cubrí de inmediato, el frío golpeó mi morena piel.

- mierda.... Anne.....no me hagas esto por favor, dime que no es verdad - hablo molesta, triste y decepcionada. Ella volteó a otro lado aguantando las lágrimas.

Yo simplemente me cubrí con la capa de piel.

- yo....lo siento Marcy, te lo dije desde un principio y además....el embarazo ya lleva meses, lo lamento mucho pero no es mi culpa - intente explicar aguantando las lágrimas, simplemente ella cubrió su rostro con decepción.

- vístete....solo vístete y no quiero que nadie sepa de esto o serás la decepción del pueblo - hablo seca y sin sentimiento alguno - después que ese bebé nazca, lo llevaré a un lugar mejor pero lejos del reino.

Yo me volví a poner mi camisa, suspiré con pesadez para levantarme y decidida la enfrente.

- el bebé es de Sasha y mío, yo elijo que esté conmigo quizás tú no lo quieras por obvias razones pero no tiene la culpa - dije con autoridad y solo sentí como abofeteó mi rostro.

- eres una sucia zorra, debería de prostituir tu cuerpo pero no lo hare porque te amo y seras mi esposa, agradece que la boda sigue en pie pero....- su voz se comenzó a cortar, soportando el nudo de su garganta - pero ese bebé es una aberración, no será mi hijo.

- ¿Y quién dijo que lo será? mataste a su madre, si ella estuviera aquí tu....

De un movimiento rápido ella me tomo del cabello para golpear mi rostro, sentí como mi ojo se hinchaba y solo la mire fijamente.

- ni una palabra más. A partir de ahora no saldrás del castillo hasta que dejes de estar así — hablo en tono dominante y autoritario lo cual me erizo la piel de los nervios.

Y sin percatarme termine en el piso, con un nudo en la garganta y de inmediato comencé a llorar en cuanto ella salió, dando un portazo.

Me arrodille en la orilla de la cama cubriendo mi lastimado rostro entre mis brazos y las sábanas, caí en llanto al saber que Sasha no estaba y que quizás idealice demasiado a Marcy. Me sentía destrozada emocionalmente.

Mi cuerpo comenzó a temblar apenas sentía las ganas de levantarme y acostarme, donde me aferré a los detalles que Sasha me dio antes de esa guerra. Termine reconciliando el sueño horas después.