Yoongi estaba muy sonriente, dirigiéndose a su salón luego de haber escuchado la campanada de inicio de clases.

Pues de qué manera podría tratarse, si luego del intento que hizo por revertir el efecto de Cupido, su autoestima de adolescente subió un gran porcentaje.

-Hoy puede ser mi día..- murmuró contento, sonriente mientras caminaba por los pasillos que le dirigían a su aula.

En ese instante no le importó el peso de su mochila o la idea de la llegada de su mejor amigo.

Y hablando de Hoseok, no lo había visto en la entrada como de costumbre, ni siquiera se lo topó por el camino.

Como sea, su plan ya estaba en marcha, y ahora que Jimin no le odiaba podía tomar las riendas del camino y hablar con la pura verdad.

Estaba muy entusiasmado de hacerlo, más aún cuando pudo diferenciar su inigualable silueta linda cerca de su paralelo.

Enseguida su mente empezó a recrear situaciones penosas, con el fin de que él no cometiera algún estúpido error.

Que miedo, que jodido miedo traía consigo.

-E-Eh...¡Jimin, espera!..- fue lo único que pudo salir de sus belfos delgados, su voz estando igual de temblorosa como sus brazos y piernas.

Los nervios estaban haciendo de las suyas en ese entonces.

Observó con timidez al de baja estaura, como se acercaba a él a pasos rápidos y con una cara muy neutral.

Una electricidad recorrió el cuerpo de Yoongi velozmente, preocupando sus pensamientos al distinguir una mueca de disgusto, así de la nada y por parte de Jiminie.

¡No podía ser así! ¡JIMIN, SU JIMINIE SEGUÍA ENOJADO!

-¿Qué es lo que quieres, Min?..- le preguntó con sorna.

El recién nombrado sintió como algo apretaba su pecho, y como sus latidos sonaban como fuertes golpes para sí mismo.

Mierda, esto realmente le había destrozado el alma.

-Na-Nada, solo quería hablar contigo, y tratar de ser tu amigo..- dijo.

Yoon esquivó la mirada intensa del menor, ya no le quedaba de otra, debía de hablar urgentemente con la mamá de Hoseok para poder solucionar todo y restaurar la paz.

Detestaba saber que Mimi le tenía odio y rencor sin sentido alguno.

-Yo jamás sería tu amigo, y mucho menos te dirigiría la palabra. No te acerques a mi, no me agradas y me molesta mucho tu presencia, agradecería mucho si dejaras de ensuciar mi nombre..- le dio una rápida e incómoda mirada al de ojos gatunos, y se fue allí sin nada más que decir.

Ahora si que la cagó en grande, el "ritual" que hizo junto a Jungkook y Hoseok no funcionó.

Nada iba a funcionar salvo la idea de...

Darle un beso de amor verdadero.

No, era una terrible idea. Ser un puberto más virgen que el aceite de oliva le hacia dudar de la única opción.

💛💛💛

Espero que les guste, perdón si ven algún error.

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Ayer subí una historia llamada "Kiss Me More" agradecería mucho si fueran a leerla y dejar un voto :'). Gracias 💓

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Sempai❤