63
—¿Qué tal? —Pregunto Jimin mientras daba una pequeña vuelta, mostrándole a Jungkook su atuendo. Una camiseta con volables y encajes en las mangas, bastante simple pero muy bello.
El alfa sostuvo una de las manos de Jimin al girar para que así pudiera lucirse mejor, se veía precioso. Con una sonrisa lo hizo girar mientras la timidez del omega se apoderaba de él; por la mirada que el alfa le otorgaba.
—Te ves precioso, al igual que un muñequito. —Susurro Jungkook colocando una de sus manos en la cintura de Jimin, con la otra aun sosteniendo su mano, manteniéndolo cerca de su cuerpo. Con un beso logró que Jimin se sonrojara hasta las orejas, haciendo que se oculte en su pecho. —Te ves precioso, amor.
—Gracias. —Sonrió en su pecho, aun sonrojado por el dulce beso que le fue otorgado. Subió su mirada hasta encontrarse con Jungkook. Se puso en mejor posición, erguido para así poder acomodar la corbata de su prometido. —Tu también te ves muy bien, muy guapo.
Ambos se sonrieron con ternura mientras seguían con los pequeños retoques que les faltaba, colocando ligeras sombras y aún revisándose frente al espejo. Querían lucir lo mejor que pudiesen para la noche de la fiesta celebrando su compromiso.
Jimin estaba nervioso, no quería imaginar cómo estaría el día de su boda que iba acercándose rápidamente; seguramente sería solo un manojo de nervios. Se estremecía al pensarlo, por eso lo dejo de lado mientras se concentraba en las ligeras sombras que colocaba en sus cuencas, mirando por el espejo como Jungkook jugueteaba con Maya. Era muy adorable.
—Deberíamos llevar a Maya. —Dijo mientras tomaba uno de los peluches de la cachorra y hacía que ella se lo quite.
—Ya tienes una favorita ¿no?
—No, solo que mira a Margarita. —Señaló con el dedo. —Sacará un ojo si nos atrevemos a moverla de su plácido lugar, mientras que Maya está lista para salir.
—Deja de malcriarla.
—Es una cachorra, ¿qué quieres que haga?
—Que la dejes de malcriar. —Dijo entrecerrando los ojos. —Además ellas irán a la boda, ahora es un salón cerrado.
—¿Escuchaste Maya? Tu papá no te quiere llevar.
—Hey. —Volvió a voltearse con los ojos entrecerrados. —Ahora pones a las niñas en mi contra.
—Y ni estamos casados aún. —Rio, la expresión que hacía Jimin de indignación le causaba gracia.
Ambos soltaron unas cuantas risas mientras dejaban todo en orden antes de partir al salón donde habían organizado su fiesta de compromiso. Ambos se encontraban nerviosos, pero quisieron pensar en que todo estaría bien; como siempre lo había estado.
Cuando el reloj marcó las siete de la noche ambos salieron de su pequeño pero cálido hogar tomados de la mano, aun conversando sobre cualquier cosa que se les pasara por la cabeza, yendo hacia su auto para encontrarse con su familia y amigos. Para empezar la celebración que se había formado alrededor de su compromiso, alrededor de una pronta promesa.
La música en la radio haciendo compañía a su amena plática, reduciendo las horas desde la lejanía de la ciudad hasta el centro de esta. El sol ocultándose a sus espaldas y las estrellas posándose sobre sus cabezas. Al llegar al lugar Jungkook se adelantó para así poder abrirle la puerta a Jimin, tomando de su suave y pequeña mano contra la suya. Caminando juntos hacia la fiesta que ellos habían organizado.
Se encontraron con sus amigos sentados en una de las mesas, se acercaron a ellos para saludarlos y compartir mientras la noche empezaba. Se levantaron de la mesa al ver a más invitados llegando, todos acercándose a ellos para felicitarlos por el gran paso que habían tenido en su relación, ambos sonriendo ante todos los halagos y escuchando muy bien de los consejos de quienes ya tomaron aquel paso en su vida. Los recibían con sonrisas resplandecientes mientras les ofrecían copas de champán.
Y algo que aumentó los nervios en ambos, sobre todo en el omega, fue ver a los padres de ambos entrando juntos al salón. Sus padres tenían muy buena relación, siempre se habían llevado muy bien; desde los comienzos de su relación. Se podría decir que casi todas las navidades las pasaban juntos en algún viaje, así como decía uno de ellos; podrían hacer videollamada con sus hijos más fácil, sin gastar mucho.
Los abrazos familiares no se hicieron esperar, continuando de la velada que estaba a nombre de ellos.
—¿La estás pasando bien? —Preguntó Jungkook al oído de Jimin.
—Ujum. —Asintiendo sonriendo. —Todos nos desearon muchas cosas bonitas, sus deseos fueron muy lindos. —Volvió a sonreír. —Todos son muy amables, Jungkookie.
—Lo son. —Asintió. —Me sorprende que ningún paparazzi se haya colado.
—Es porque nuestros amigos, conocidos y familiares nos aprecian mucho. Saben que es muy importante para nosotros y que preferimos que todo sea lo más discreto posible. —Hablo bebiendo de la pajilla de su mojito.
Jungkook asintió, mirando a Jimin quien veía atento a las personas bailando, atento a su mojito y a la música. Lucía precioso.
—Te ves muy hermoso. —Susurro.
—Ya. —Canturreo recostándose en Jungkook. —Me pones tímido enfrente de todos nuestros invitados. Me toca ponerte tímido.
Jungkook esbozó una sonrisa asintiendo. Esperando al siguiente movimiento de Jimin. Literalmente contó los segundos, pero no pasó nada, hasta que cuando se distrajo con su mojito, sintió los labios pomposos de Jimin contra su mejilla.
No era mucho, pero siempre los besos sorpresas de Jimin lo ponían como un tomate, eran aquellas pequeñas cosas que lo transportaban a los momentos en donde comenzaba a enamorarse del dulce omega; enamorarse de su ángel.
—Logre sonrojarte. —Sonrió Jimin.
Ambos se sonrieron tímidos, entrelazando las manos, recostando sus cabezas cerca.
Luego de terminar sus bebidas Jimin llevó a Jungkook a que ambos bailaran, algo disparejos a todos los demás, pues mientras los demás bailaban al ritmo de la canción animada ellos bailaban un vals; no importaba el ritmo de la canción, ellos solamente querían estar cerca del otro, eso era todo lo que querían.
El resto de la noche se la pasaron bailando cerca del otro, compartiendo sonrisas mientras sus manos estaban entrelazadas; girando de vez en cuando. En su burbuja de amor.
Celebrando el paso para unir sus vidas para el resto de ellas, debajo de las estrellas y cerca de la aurora.
tarde pero seguro, ya tenemos que hacer la cuenta regresiva para el final amistades :3
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top