Capítulo 15.

Son Goku miraba con tranquilidad a su pequeña hija que esperaba sus palabras con ansias. Ambos vestían sus dogis de pelea, ella imitando claramente a su padre.

-¿Q... qué es el super saiyajin? -murmuró con confusión la pequeña mestiza ladeando su cabeza- ¿Es cuando te vuelves rubio como mamá y yo? ¿verdad? -cuestionó con inocencia.

Yasaka simplemente oía la interacción entre padre e hija con alegría por verlos juntos. Era como si sus sueños se estuvieran cumpliendo justo ahora.

-Bueno, en parte sí, pero eso no es el fin de la transformación -respondió riendo levemente.

-¿Entonces? -preguntó nuevamente.

-Tú ya raspaste la superficie de lo que significa y eso es poder... -murmuró Goku a la vez que sonreía con emoción- Sacar una fuerte emoción y volverlo poder, esa es una característica de nuestra raza, los saiyan -siguió mientras sus ojos chispeaban de un verde esmeralda a negro.

-¿Huh? -los ojos de la niña se abrieron- T...tu ki papá...

-Cuando Gohan y yo luchamos probablemente no pudiste verlo muy bien o sentirlo... -habló con tranquilidad mientras sus cabellos se tornaban dorados en puntas con una bestial sonrisa- El poder de un super saiyajin multiplica la forma base del usuario, pero para ello tu cuerpo tiene que estar preparado para soportar dicho poder -explicó mientras su aura dorada le rodeaba.

-Brillante, papá brilla mucho -dijo sonriente la niña con una gota de sudor corriendo por su mejilla.

Ahora lo veia de cerca, su padre adrede estaba librando una porción de su poder real estando en aquella forma, aunque podría asegurar que no era ni la mitad de lo que podría dar.

-¿Q... qué tanto podrías destruir? -preguntó incrédula Kunou abriendo sus ojos de par en par.

Yasaka oía sumamente interesada la respuesta de su marido, estaba interesada. Sabía perfectamente que su hijo y marido actualmente eran seres de poder abrumador, no por nada los Ángeles y Demonios estaban tan urgidos por crear una relación con ellos, incluso cuando claramente le brindarían una posición igual a ellos.

Básicamente estaban mordiendo sus labios y aceptando que se toparon con un igual en cuanto poder se trataba.

Los demonios eran seres codiciosos y ambiciosos, pero también eran listos. Los maou sabían perfectamente que era mejor tener a los dos saiyan como aliados antes que cualquier atrocidad que podría ocurrir.

Los Ángeles en cambio querrían asegurar la neutralidad de Son Goku y Son Gohan para con la humanidad y seres sobrenaturales para mantener la frágil paz que se sostenía por un hilo.

Kunou había leído que los Demonios de clase suprema podrían acabar con continentes completos con su poder. Congelar países enteros, destruir montañas como si no fueran nada.

Pero, ¿y su padre? ¿de que era capaz Son Goku?

-Je... jeje me imagino que tu padre podría destruir un planeta -dijo divertida Yasaka llamando la atención del papá y la hija.

-Bueno, sí, pero no podría respirar y eso sería malo para mí jejeje -respondió con simpleza Goku.

Yasaka y Kunou palidecieron, eso lo dije con total honestidad e incluso como burla.

-Como sea, eso no es lo importante, ¿entendiste entonces lo que tienes que hacer? -preguntó el super saiyan sonriente.

-A...ah, cre...creo que sí papá -respondió la pequeña agitando su cabeza- ¿Entrenar mi cuerpo? -murmuró insegura recibiendo una caricia en su cabecita.

-¡Así mismo! -exclamó el Son alegre.

-Entonces para empezar tendremos que ponerte ropa extra, ¿puedes Yasaka? -preguntó el hombre por fin sacando de su trance a su mujer.

-E...eh, sí, sí puedo -respondió extendiendo su mano hacia su hija- ¿Cuánto...?

-100 kilos está bien para ella, creo que puede manejarlo pues está ya algo entrenada -respondió con simpleza el saiyan.

La niña entonces frunció su expresión al sentir el peso agregado a su cuerpo, casi cae de rodillas pero se esforzó al máximo en matenerse firme.

-A partir de ahora tienes prohibido sacarte ese peso a no ser de suma necesidad, ¿entiendes, hija? -preguntó recibiendo un esforzado asentimiento de la niña rubia- Recuerda que el ki también te brinda más fuerza y velocidad, así que al mantener un flujo constante podrías incrementar tus capacidades -explicó con sabiduría volviendo a su estado base.

Desde ese momento la formación de Kunou para poder alcanzar la forma del super saiyajin comenzó instruida por el legendario Son Goku, quien era su padre.

-Goku -Yasaka llamó seria a su marido quien se giró a verla con curiosidad mientras Kunou se esforzaba por resistir la rutina brindada por su padre.

-¿En serio puedes destruir un planeta? -fue la corta y precisa pregunta de la rubia ladeando su cabeza.

-¿Huh?

Su confusión por alguna razón hizo sonreír a la mujer, probablemente su hombre simplemente estaba bromeando....

-Sí puedo.

"¡Heh!"

Su rostro por alguna razón se tornó en un intenso color rojo brillante.

.

Un nuevo día había llegado a Kyoto, como era costumbre Goku era el primero en despertar.

Miró entonces a su mujer completamente dormida sin alguna prenda de ropa alguna por su tersa y blanca piel. En su rostro una expresión entre cansada pero llena de satisfacción.

Por alguna razón la youkai no había parado de incitar las interacciones sexuales con él. No le molestaba en absoluto, es más, lo disfrutaba pero le parecía raro aunque quizás era normal luego de tanto tiempo en su ausencia.

Claramente en cuestión de resistencia ella había perdido en todos los casos y situaciones puestas.

Le divertía como la mujer inocentemente intentaba evitar gritos fuertes para no levantar a sus hijos.

Su mujer, la reina de Kyoto era simplemente una belleza de otro mundo, cuando fue joven no pudo verlo con claridad, pero ahora era otro tema.

Para Goku ella no tenía alguna imperfeccion incluso luego de sus dos hijos, tal vez por su naturaleza sobrenatural, era absurda la forma en que aquella mujer parecía más hermosa al pasar el tiempo, al menos en sus ojos.

Esbozó una dulce sonrisa dedicada a Yasaka mientras pasaba suavemente su mano sobre su mejilla causando unos pequeños gemidos de la rubia.

-Tienes que despertar, Yasaka -murmuró con cariño el hombre causando algo de molestia en la reina.

-No quiero, prefiero estar aquí contigo más tiempo... -susurro como un dulce gemido mientras entrelazaba sus dedos con los de Goku.

-Jejeje, a mí también, pero hoy es esa reunión, ¿no dijiste que era algo importante? -habló causando que la mujer se rodee entre su frazada- ¿E..eh? Por favor... mi amor -murmuró suavemente y con ello las orejas de Yasaka se tensaron descubriendo su rostro sonrojado.

-Sabes que no puedo ir contra eso... es raro que tú seas el responsable aquí -se quejó tiernamente la rubia mientras levantaba su torso dejando ver sus enormes pechos.

-Realmente raro -se dijo a sí mismo Goku divertido antes de recibir un tierno beso de la mujer.

-¿Tomamos una ducha? -preguntó la reina poniéndose de pie.

-Esta bien -respondió el Son siguiendo a su señora esposa.

Mientras eso ocurría Son Gohan se preparaba tranquilamente en su habitación. Gohan vestía una yukata negra con detalles azules al igual que el cinturón.

Se miró unos segundos al espejo viendo que todo quede como debe hasta que desvío su mirada hacia las dos personas a parte de él dentro de la habitación.

-Te queda bien -Ophis dijo con simpleza mientras comía unas papitas.

-La ropa tradicional le queda realmente bien, Gohan-sama -Jeanne expresó sonriente quien vestía una blusa color celeste con flores bordadas de color blanco parada al lado de la dragona.

-¿Sigues con eso de sama? -Gohan suspiró pesadamente.

-Así es, después de todo Ophis-sama me ordenó que sea una subordinada suya y sobre todo porque usted me salvó la vida -respondió con total honestidad.

-Eso es innecesario, ya te lo dije -habló con nervios el azabache retrocediendo unos pasos.

-Su vida no tendría sentido, por eso tiene una mejor función como esclava tuya que buscando estúpidamente la muerte -Ophis dijo con serenidad asustando levemente a la rubia.

-Ophis, no es necesario amenazarla -pidió Gohan suspirando- Como sea, mis padres me dijeron que hoy hay una importante reunión con las tres facciones y que me vea presentable -murmuró con tranquilidad.

-Ya veo, probablemente quieran mantenerlos vigilados a tu padre y a ti al saber de sus capacidades -Ophis explicó sin interés alguno o eso parecía.

-Basicamente tienen miedo -Jeanne sonrió divertida pero con nervios también, aún recordaba como el muchacho menor que ella paró a la endemoniada Ouroboros.

-Sí, puede ser, pero sería bueno formar una buena relación con ellos creo -el azabache sonrió felizmente.

-"Inocente" -se dijo la rubia curiosa, poco sabía en realidad de la comprensión y madurez que tenía el guerrero más poderoso del universo.

-Aunque no permitiré que intenten algo más en contra de alguien importante -agregó girándose dispuesto a salir de la habitación seguido de las dos mujeres.

Llegó entonces a la sala de estar donde fue recibido por su madre, padre y hermana que se veía algo cansada.

-Es hora Gohan, vamos -Goku dijo sonriente vistiendo un kimono elegido por la reina que rodeaba el brazo del hombre.

-¡Claro papá! -exclamó animado el chico.

--Fin del capítulo--

Dejen sus comentarios, digo, pa saber si les gusta y para que actualice más rápido.

En el siguiente capítulo la reunión con las facciones con waifus, poder, pelea y amor.

Para el siguiente capítulo 220 votos.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top