Era una mañana tranquila en Kyoto, faltaba un día para una reunión importante según su madre. No había muchas cosas que hacer.

Intentó levantarse de la cama, pero algo le complicó aquella acción.

Se exaltó levemente cuando al mirar sobre sí vio una cabellera azabache esparcida en su pectoral.

-¿O... Ophis? -preguntó algo ruborizado y nervioso.

-Con que ya has despertado -fue lo único que profirió la dragón levantando su vista sin emociones hacia su amigo- Ya me estaba aburriendo -dijo con simpleza sentándose sobre el torso del mestizo cosa que puso más nervioso al joven.

Como pudo el príncipe salió de aquella situación cayendo al suelo.

-¿P...por qué estás aquí? -preguntó tragando seco

-Me has invitado a vivir contigo, ¿no es así? -volvió a preguntar la azabache ladeando su cabeza con confusión- No veo lo malo con compartir la cama contigo, ¿o te molesta?

-¡¿Heh?! N... no es eso, pero ya tenías una habitación -respondió exaltado.

-No me gustó.

-Ya veo -Gohan suspiró frotando su frente, su amiga era muy caprichosa, no tenía sentido discutirle.

-¿Qué haremos hoy? -preguntó con curiosidad dejando caer su rostro sobre la almohada del Son.

-Pues no hay mucho que hacer hasta mañana, planeaba ir a visitar a Ravel -respondió poniéndose de pie acercándose a su armario- Pero primero una ducha -dijo feliz.

-¿Amiga? ¿ya tenías amigas? -cuestionó con confusión Ophis.

-Sí, es algo complicado, es mi prometida según mi papá y mamá -explicó con simpleza, nunca había cuestionado aquello por no entenderlo bien realmente.

Ahora que sí era más consciente de lo que significaba quería hablar más con la Phenex, si ella no estaba de acuerdo no forzaría nada, de eso no había dudas.

-¿Prometida? ¿para qué? -preguntó nuevamente con aburrimiento- Además ya me tienes a mí, ¿por qué otra mujer?

No se molestaba realmente aunque era obvio que ella como el dragón del infinito sería mejor opción que cualquier mujer en este mundo para permanecer al lado de Son Gohan, el ser más poderoso del mundo.

En cambio Gohan simplemente levantó una ceja, decidió ignorar aquellas palabras tan directas por el momento aunque se había ruborizado.

-I...ire a tomar la ducha -murmuró ingresando al baño de su habitación, algo bastante tradicional y lujoso claro está.

La Dragona en cambió notó como había desviado su pregunta pero no lo dejaría así.

Sin pensarlo mucho se quitó su camiseta blanca y pantalones cubriéndose con una toalla antes de entrar a la tina.

Se sentó en el lugar mojando sus cabellos negros y rostro dejando solo ver su torso bien trabajado.

Supo que vivir con Ophis sería difícil cuando la misma entró al baño también completamente desnuda y con una expresión nula contrario a él que se exaltó terriblemente.

"¡Ophis!"

Fue el grito que la familia Son pudo oír desde el comedor.

.

Gohan ahora vestía su clásico traje chino blanco con un gran sonrojo en su rostro y al lado la serena Ophis quien fue abrazada por Kunou al instante.

-¡Ophis! ¿quieres jugar? -preguntó con emoción la niña rubia ante lo cual la dragona simplemente asintió sin interés alguno.

Sin oponer resistencia alguna fue estirada por la hermana de Gohan hasta el patio donde esperaba que las reglas de esa actividad le fueran explicadas.

-¿Mañana difícil? -preguntó Yasaka con algunas risas.

-Ma...mamá -Gohan se rascó su nuca sin saber qué decir- Tengo hambre.

-Lo sé, tu padre...

-¡Fuaa! ¿no quieres entrenar hijo? -preguntó Goku ingresando a la cocina con una gran sonrisa- ¡Woah! Huele rico -habló con alegría el hombre tomando asiento con su esposa e hija.

-Hoy no papá, planeó ir al inframundo a ver a Ravel -respondió con tranquilidad ante lo cual Goku simplemente sonrió.

-Está bien, entrenaré a Kunou por hoy entonces, avanza muy rápido -dijo mientras comenzaba a comer.

La mesa estaba repleta de todo tipo de comidas, mucho más necesario para una ración de tengus cansados, pero probablemente insuficiente para tres saiyajines.

-¿Ophis te acompañará? ¿no se pondrá Ravel celosa? -preguntó la rubia con curiosidad- Además no creo que sea una buena idea que el dragón del infinito llegue repentinamente al infierno, sería un caos de hecho -explicó con nervios.

Estaba tratando de ignorar el tema de que una de las entidades más poderosas de todo su mundo estuviera en su hogar, durmiendo con su hijo, comiendo con ellos y ahora mismo jugando inocentemente con su hija menor.

¿Confiaba en ella?

No, por el momento no del todo, pero confiaba en su hijo y por ello lo estaba permitiendo además el mismo Goku aclaró que no sería un problema para él y menos para Gohan detenerla de hacer algo.

-¡Oh! Esto me recuerda que ayer vi a Sairaorg, se ha hecho muy fuerte -habló Goku repentinamente masticando su comida- Creo que se alegraría al verte -explicó sonriente.

-¡Sairaorg-nii! A mí también me gustaría verlo -habló con emoción el chico recordando a su amigo demonio.

El demonio siempre fue amable con él demostrando actitud fraternal en todo momento y respetando a su padre llamándolo incluso maestro.

-¿Peleaste contra él, Goku? -preguntó Yasaka suspirando.

-Pues claro, quería ver lo fuerte que se volvió y no decepcionó jeje -respondió riendo con diversión.

-Tipico de ti, mi amor -murmuró la mujer recostándose por el brazo del hombre con abrazándole con cariño.

-No puedo evitarlo, siempre fue alguien determinado a mejorar -respondió con satisfacción el Son- ¿Y cómo irás? -preguntó Goku con curiosidad.

-¿Puedes llevarme? -preguntó Gohan rascando su mejilla- Ahora lamento no haber aprendido tu técnica de teletransportacion -murmuró nervioso.

-Tampoco quisiste aprender algún hechizo -Yasaka se cruzó de brazos algo molesta.

Su hijo no había mostrado mucho interés en la magia ni peleas en realidad cuando era niño.

Además de que probablemente tenía un talento monstruoso también en el arte de la magia youkai así como en su lado guerrero pues para ella su hijo era un genio en todo.

-L...lo lamento mamá -se disculpó apenado.

-No hay nada que lamentar, tienes el tiempo del mundo de aprender lo que quieras ahora

-Ah, también tengo que llevarle comida a esa chica -Gohan recordó mientras comenzaba a cargar una gran cantidad de alimentos en una cesta.

-¿La prisionera? -preguntó su madre recibiendo un asentimiento.

-Seguro que pronto hablará -dijo suspirando.

-¿Tienes una prisionera? -Ophis repentinamente apareció en el lugar y sobre sus hombros una alegre Kunou.

-Ophis-chan es muy fuerte mami -habló la niña divertida.

-Soy el dragón del infinito, claro que lo soy -explicó con tranquilidad- Además tu no te quedas atrás, niña, siento un potencial inimaginable en ti -dijo con más seriedad.

-Obviamente, soy la hija de Son Goku después de todo y voy a superar a mi hermano tarde o temprano -afirmó la niña bajando y con algo de magia cambiando sus ropas al mismo dogi que su padre.

Algunas risas se oyeron aunque la rubia había hablado con una determinación única.

-¿Entrenamos papá? -preguntó con emoción.

-Claro, ya estoy satisfecho y hay que bajar la comida -respondió saliendo del comedor acompañado del Son.

-¿Tienes una prisionera? ¿por qué?

-Es de esa facción de héroes, no dejé que se escape como los demás -respondió con seriedad el joven comenzando a caminar siendo seguido por Ophis- Ya vuelvo madre.

-Esa facción -la expresión de la dragona se volvió a seria- Está bajo mi mando...

Gohan se detuvo al instante mirando de reojo a la azabache.

-¿Hablas en serio...?

La pregunta fue algo de molestia.

-¿Por qué atacaron a mi familia entonces? -preguntó con total seriedad.

-Lo ignoro, yo simplemente le di mi poder para que me ayuden a tener lo que tanto quiero -respondió con tranquilidad algo que molesto levemente a Gohan.

-¿Qué? ¿das tus poderes sin importar para qué son usados? -preguntó curioso- Eso está mal, es irresponsable lo que haces -dijo con tranquilidad.

-¿Por qué?

-Porque las personas que tienen poder tienden a hacer cosas solo por sus propios intereses, quien sabe si en realidad te hubieran ayudado cuando lo necesites -respondió suspirando- Eres más ingenua de lo que pareces -dijo con algo de diversión.

-¿No quieres que lo vuelva a hacer? -preguntó levantando una ceja.

-No, no me gustaría, si necesitas ayuda puedes pedirme a mí o a mi padre -afirmó con determinación.

-Está bien, tomaré tus palabras en serio -la pequeña simplemente asintió con desinterés- La brigada del Khaos... lo terminaré -dijo con desinterés.

-¿Brigada del Khaos? ¿eso que es? Parece el nombre de un grupo de villanos -murmuró curioso.

Ella no respondió y simplemente se dedicó a seguirle hasta el lugar donde yacía Jeanne.

La rubia esperaba con tranquilidad la llegada del príncipe de Kyoto, pero en ningún sueño o pesadilla suya creyó ver lo que veía ahora mismo.

Se estremeció cuando el líder de toda la Brigada del Khaos ingresó detrás del chico con total naturalidad.

Sudó frio cuando sus ojos negros carentes de emociones se posaron en ella con total apatía.

-¿Es ella?

-Sí, es ella, aún no sé por qué...

-¡Ophis! -exclamó la rubia con temor poniéndose rápidamente erguida temiendo por su vida.

-Tú... ¿por qué atacaste a la familia de Gohan? -preguntó sin emoción alguna.

Jeanne tragó secó, sintió una abrumadora presión sobre ella en estos momentos. Estaba en peligro, el dragón del infinito estaba molesto y no sabía por qué.

-F....fue para poder usar la conexión única con las líneas ley en Kioto para convocar a Gran Rojo -respondió nerviosa y preocupada.

La expresión se Ophis cambió por primer vez, casi parecía molesta ante la mención de aquel Dragón quien le quitó su todo.

-...

-...

-...

Una luz tenue violeta comenzó a emanar de la mano de la azabache, ya no tenía utilidad para esta mujer.

Acabaría con ella pues eso aliviaría a Gohan, quien en verdad le sería de utilidad, no como ese grupo quien usaba sus poderes.

No, Son Gohan o Son Goku no dependerían de ella para nada en absoluto. Estaba más que segura que Gran Rojo también pudo sentir sus poderes así que al tener a su lado a al menos uno de ellos bastaría para recuperar lo suyo.

Solo necesitaba de Gohan y nadie más.

Lentamente extendió su mano hacia Jeanne quien cerró sus ojos sin saber la razón de la furia de su líder.

O eso creyó ella.

-Es suficiente, Ophis -la mano de Gohan sostenía con firmeza la muñeca de la dragona quien le miró de reojo con confusión.

-¿Por qué me detienes? Ya dijo la razón -preguntó con confusión.

-Sí, y no hay necesidad de matarla -explicó con seriedad- Puede ser una amiga o aliada...

Miró a la rubia quien estaba asombrada, el chico la estaba defendiendo de la mismísima Ophis y la misma también se había retenido.

-¿Aliada? Es demasiado débil para ti o para mí -habló con tranquilidad sin dejar de emanar su poder mágico- Ni siquiera si le doy mis serpientes se comprará a tu fuerza...

La descendiente de Juana de Arco se tenso al oir esas afirmaciones.

Ophis veía como igual al príncipe de Kyoto.

-Aun así no todo se trata de poder -explicó con tranquilidad obligando a su amiga a bajar la mano.

El Dragón del Ouroboros se asombró de la fuerza del chico, no podía extender su mano.

-¿Lo entiendes?

-Como digas, si quieres tener a esta mujer de siervo no me molesta -habló Ophis con tranquilidad- ¿Lo entiendes? Ahora serás una esclava de Gohan -dijo en forma chibi mirando a Jeanne quien se confundió.

-¿Esclava? -dijeron los dos confusos por las palabras de la dragón.

-Eso no es...

-Está bien -Jeanne veía aquello como única forma de sobrevivir ahora mismo además le había salvado la vida.

No le sería completamente fiel, no por el momento, pero le serviría para mantenerse con vida por el momento y conocerlo más a profundidad.

Agachó su rostro con respeto poniendo nervioso a Gohan.

-N...no es necesario -habló agitando sus manos- Ophis, yo no quería esto.

Jeanne estaba analizando el comportamiento del joven y hasta el momento no había demostrado nada más que amabilidad incluso salvándole en estos momentos.

Era puro, de eso no cabía dudas y también era lo suficientemente poderoso para ser considerado y oponerse abiertamente al Dios Dragón Infinito.

-Gracias por esta oportunidad, Gohan-sama -la muchacha esbozó una pequeña sonrisa cosa que no hizo más que alterar al Son.

"¡¿Heh?!"

--Fin del capítulo--

Bien, nuevo capítulo y espero que les haya gustado. Sí, le cortamos el mambo a la Brigada del Khaos, ya veremos como terminan con los demás miembros, ahora Ophis está completamente del lado de Gohan.

Dejen sus comentarios, siempre es genial leerlos, eso motiva bastante en especial a mí.

Jeanne no se ha enamorado de Gohan por el momento, pero ya comenzamos con su desarrollo respectivo😈

Para el próximo capítulo 220 votos.