Goku caminaba pensativo, estaba por llegar a la comisaría donde estaba detenida Sopphie.

-"¿Estará bien?" -se preguntó algo preocupado.

Goku vestía una camiseta bordó debajo de una campera negra con cuello y gorro que no usaba, debajo unos pantalones marrones con zapatos blancos con detalles negros.

Con tranquilidad entró a la comisaría, aquellos que le conocían y eran menos antiguos a su persona se encuadraban rápidamente realizando un respetuoso saludo.

Igualmente el correspondía el saludo o él mismo realizaba una reverencia a aquellos con mayor jerarquía a su persona.

Notó como habían unos cuantos civiles siendo atendidos en orden por el personal del lugar, todo se veía correcto. Se notaba que el lugar tenía una buena administración.

El azabache llegó hasta un escritorio dentro de aquella oficina.

-Permiso, soy el oficial Son Goku, ¿me podría decir donde se encuentra la suboficial Mi-Suk? -preguntó Goku curioso a un joven en frente suyo, se notaba que se trataba de un recién egresado.

-¡Claro que sí señor! Recibí ordenes para cuando usted llegue -respondió animado el muchacho poniéndose de pie- La oficina de mi suboficial Mi-Suk es aquella, por favor solo toque la puerta y ella le atenderá, mientras le avisaré de su llegada -explicó el muchacho tomando un teléfono de su mesa.

-Muchas gracias -Goku siguió las indicaciones del muchacho.

"Knock, knock"

"Pase por favor"

Goku ingresó a la oficina y miró a la mujer que se puso rápidamente de pie detrás de su escritorio.

La misma era una mujer en sus 30, azabache con el uniforme correspondiente.

-Buenos días mi oficial -la mujer dio una pequeña reverencia.

-Sí, buenas tardes, me gustaría saber cuál es la situación de la detenida -pidió suspirando.

-Bien, por favor tome asiento -ella indicó respetuosamente.

Goku se sentó mirando a la mujer esperando a que hablara.

-Como le comenté por teléfono, la mujer ha causado un incidente en un pequeño local a 3 kilómetros de aquí -comenzó a explicar tranquila- No pasó nada grave, los daños materiales no fueron la gran cosa, de hecho se menciona que el conflicto fue afuera -mencionó tranquila.

-¿Qué clase de incidente? -preguntó Goku más serio.

-Sophie Min parecía tener problemas con un grupo de jovenes, eran 3, una mujer y dos hombres, al parecer hubo contacto físico bruto -respondió con simpleza.

-Ya veo, ¿qué hay que hacer para sacarla del calabozo? -preguntó el azabache mirando directo a los ojos de la suboficial.

-Disculpe que pregunte mi oficial, ¿pero qué tipo de relación tiene usted con ella? -preguntó entrecerrando sus ojos, aunque Goku no se sintió para nada intimidado- He investigado y...

-Es una amiga, pero responda mi pregunta, Suk -esta vez fue una orden, Goku estaba impaciente.

-Claro, como dije solo fue un leve disturbio y es obvio que estaba en desventaja, con una pequeña multa podría salir hoy mismo -respondió dando un sorvo a una taza de café.

Goku se resignó, si era lo que tenía que hacer, lo haría. Estaba interesado en saber cómo estaba la muchacha después de todo y de alguna manera se comprometió con ella.

Algunos minutos después Goku vio una cabellera rubia siguiendo a Mi-Suk, supo de inmediato que se trataba de Sophie.

Sus hermosos ojos avellanas se abrieron en sorpresa al ver a Goku, realmente había venido por ella.

Desvío su mirada de él, intentando ocultar algo en su rostro.

-Aquí esta mi oficial, lamento la tardanza -habló la azabache mientras señalaba a Sophie.

-Bien, entonces nos retiramos, gracias por todo Mi-Suk -Goku asintió con su cabeza y sorpresivamente agarró la mano de la rubia que se exaltó levemente por el contacto.

-A su orden mi oficial -fue lo último que el azabache pudo oír antes de caminar hasta la salida.

Ahora estaban en la calle al costado de la comisaría.

-Gracias por venir, Goku -ella agradeció entre murmullos.

-No fue nada, ¿no te lo prometí? -preguntó Goku suspirando, aún no soltaba la mano de la chica- Pero cuéntame, ¿qué ocurrió? -preguntó curioso y entonces notó que la mujer no levantaba la vista- ¿Pasa algo? -preguntó pero ella simplemente desvío más su mirada.

-No ocurre nada, estoy bien y lo que pasó no fue la gran cosa -respondió mientras se soltaba del agarre del Son que la miró extrañado.

-Tu cara, muéstrame -habló con tranquilidad, pero ella negó con su cabeza.

Ya algo cansado Goku sostuvo su mentón y la obligó a mirarlo.

Sus ojos se abrieron al notar el gran moretón en su mejilla izquierda, parecía que le habían abofeteado varias veces, su ojo derecho tampoco estaba en las mejores condiciones pues mostraba un color morado en él.

-¿Quién...? -las cejas de Goku denotaron su molestia.

-¡Suéltame! -exclamó la rubia apartando las manos de Goku, aunque en su rostro estaba presente un tinte carmesí- T...te agradezco que me hayas sacado de ese lugar, pero mis problemas no son asuntos tuyos -afirmó dándose la vuelta para irse sin dejar ver sus ojos.

Goku no pudo evitar molestarse por esas palabras apretando sus puños de la ira.

-Tú lo volviste mi problema cuando me llamaron al teléfono de una comisaría -comenzó a hablar serio causando que la rubia se detenga al instante- Se volvió mi maldito problema cuando tuve que salir de mi casa para sacarte de la carcel -afirmó molesto sujetando la muñeca de Sophie quien parecía no tener intenciones de seguir.

Era bueno, sí, pero no tan estúpido como para no darse cuenta de que no estaban valorando lo que hacía.

-¿Sabes qué? Haz lo que quieras, estoy cansado de esta mierda -habló Goku liberando algo de su molestia soltando la muñeca de la mujer.

No tenía por qué soportar este trato, en su hogar había una mujer que le trataba con todo el amor posible y le daba una calidez irremplazable.

En cambio la rubia era un tormento de emociones, estaría otra vez sola, nadie la esperaba en ningún lugar y además de todo trataba mal al hombre que vino a ayudarla sin nada que ganar.

Mordió sus labios al punto que casi sangraba. Nada estaba bien en su vida, nada hasta que lo conoció.

Desde el arresto de Gunner no había pasado un día que no piense en él y sus amables y desinteresadas palabras.

Cuando ya se había alejado varios pasos fue Goku quien fue detenido esta vez. Era Sophie lo abrazó con fuerzas de la espalda.

-¿Sophie? -Goku miró de reojo a la rubia que se aferraba con fuerzas a él- "¿Qué le habrá pasado para estar así?" -se preguntó, no se sentía la misma fiereza de antes, esa desconfianza y brusquedad.

-Lo... lo lamento -fue difícil para ella decir tales palabras, pero no quería que se vaya, no quería que se aleje de ella.

El azabache suspiró resignado.

-¿Me vas a contar lo que pasó? -preguntó aun serio pero con un tono más amable.

-Sí -fue la corta respuesta de la muchacha soltando por fin a Goku que se giró para verla.

El oficial abrió sus ojos en sorpresa al ver las lágrimas cayendo por su bello y lastimado rostro.

Su cuerpo temblaba intentando evitar que sus lágrimas escaparan, la misma limpió sus ojos con su antebrazo.

-Qué mierda, todo es una porquería -la rubia escupió con ironía.

-Muchas veces así es, pero es cuestión de soportarlo hasta que vengan cosas mejores -fue lo único que el Son pudo responder mientras se sacaba la campera.

La chica apenas tenía una camiseta blanca sin mangas, unos shorts azules y tenis blancos por lo que naturalmente tendría frío.

Sophie sintió la calidez del abrigo que el azabache puso sobre sus hombros, miró asombrada a Goku esperando que dijera algo.

-Lo necesitas más que yo, no quiero que te enfermes -habló con tranquilidad mientras cerraba el cierre de la chamarra con delicadeza.

Ella simplemente hundió su rostro en el cuello del abrigo intentando ocultar un intenso sonrojo.

-Deberiamos ir a otro lugar, parece que va a llover -mencionó el Son mirando el cielo que rápidamente se estaba nublando.

-Está bien -fue lo único que dijo comenzando a seguir a Goku que caminaba hacia una dirección.

Los hermosos orbes avellanas de la mujer miraban fijamente la mano del chico, quería sentir el mismo tacto que Goku brindaba.

-¿Qué pasa? -preguntó al notar que la rubia se quedaba algo atrás- Vamos -sorpresivamente la sostuvo de su mano.

-¡¿Qué haces?! -preguntó nerviosa.

-No quiero que te quedes atrás, ¿te molesta que te tome de la mano? -Goku respondió y preguntó curioso.

-Pu...pues n...no, pero al menos avisa -se quejó desviando su mirada a lo que Goku simplemente rió ante lo mencionado por la chica.

Algunos minutos la pareja ingreso a una cafetería en donde tomaron asiento en un lugar hacia el fondo, donde no había nadie.

Los mismos hicieron sus pedidos a la trabajadora que se retiró poco después de anotarlo todo.

-¿Quién te hizo eso en el rostro? -preguntó por fin el azabache mientras extendía su mano hasta la mejilla de la chica- Parece doloroso.

La misma se sonrojó por el tacto de Goku, pero al recordar lo de la última vez no lo apartó bruscamente, simplemente desvío su mirada algo avergonzada y sonrojada.

-No lo es, la maldita ni siquiera sabe dar un buen golpe, puta perra -respondió con desprecio- Te aseguro que si sus lacayos no hubieran estado, ella estaría peor -explicó apretando sus puños con desprecio.

-Ya veo, sí, creo que si fuera justo pocas personas podrían ganarte en una pelea -habló divertido Goku- ¿Quién comenzó la pelea? -preguntó nuevamente.

-Como podrás haberte dado cuenta, no tengo una buena personalidad y cuando estaba estudiando, junto a Gunner no hicimos buenas migas con otros estudiantes -respondió algo triste de recordar al pelirrojo- Tuvimos problemas en esa época, peleamos y como siempre Gunner les dio una paliza y se quedaron resentidos -finalizó suspirando con fastidio.

-Pero fue ese sujeto, ¿no? Tú no tenías nada que ver -habló Goku confuso a lo que Sophie le sonrió divertida.

-Yo también le di su parte a esa perra, la maldita no paraba de hablar mal de mí y se lo ganó de sobra -respondió riendo al recordar todo aquello- Como sea, de alguna forma se enteraron que Gunner fue arrestado y desde entonces me andaban buscando -explicó rascando su nuca molesta.

Goku abrió sus ojos al darse cuenta de que en parte era su culpa, al meter en la carcel al pelirrojo dejó sin protección a la chica que estaba acostumbrada a meterse en problemas al contar con el sujeto que la protegería.

Aunque claramente también era culpa de la rubia y ella no parecía estar muy arrepentida que digamos.

La mesera llegó junto a ellos y dejó sus pedidos sobre la mesa y se volvió a retirar con una amable sonrisa.

Goku agarró una taza de chocolate y lo bebió sonriente bajo la mirada curiosa de la rubia.

-¡Qué rico! -exclamó alegre mientras agarraba un trozo de media luna de dulce de leche y partía en dos- Toma, prueba -ofreció a Sophie quien no pudo rechazar el postre y los sostuvo en sus manos.

-Gra... gracias -la muchacha habló algo tímida, miró la media luna unos segundos y finalmente lo probó.

Sus mejillas se ruborizaron rápidamente y no pudo evitar soltar un pequeño chillido de gusto.

-Está muy rico -habló con una hermosa expresión que Goku quedó mirando unos segundos sumamente atento.

-Sin dudas cuando sonríes así eres muy tierna -se burló Goku riendo exaltando de sobremanera a Sophie que crispó sus cejas en molestia desviando su mirada.

-¡Tch! Siempre diciendo esas cosas inoportunas -habló sonrojada, aunque disfrutaba de los cumplidos.

-¿Y ellos? ¿también fueron arrestados? -preguntó Goku a lo que ella asintió.

-Sí, pero son hijos de papi, los sacaron casi de inmediato -respondió bufando en burla.

Entonces Goku se percató de algo.

-¿Y tu padre? Me hablaste de él -preguntó pero casi de inmediato se arrepintió cuando notó la tristeza en los ojos de la hermosa muchacha.

-Falleció hace un par de años, ya no tengo familiares vivos, mi madre se fue cuando era pequeña -respondió fingiendo dureza y desinterés aunque fue fácil para Goku notar aquello- Una típica historia trágica, ¿no te parece? Hasta es divertido -murmuró riendo con ironía.

-No, no es así, lo lamento, debió ser duro -Goku habló con genuina honestidad asombrando a Sophie.

-S...sí, gracias.

-Aun así no me arrepiento de poner tras las rejas al pelirrojo, era una persona peligrosa, me aterra pensar qué hubiera hecho de ti si lo hubiera dejado libre -explicó Goku con seriedad asombrando a Sophie.

-¡N...no te conté todo porque lo extrañara o algo así! Es cierto que ha sido horrible desde que se fue, pero tienes razón, de ninguna forma hubiera sido como antes -se apresuró en decir queriendo evitar que mal interprete sus palabras- Yo... yo de hecho -intentó decir.

La misma incluso golpeó la mesa por la frustración que sentía en esos momentos.

-¡Rayos!

-¿Qué ocurre? ¿te pasa algo? -preguntó algo preocupado.

-No he parado de pensar en ti desde ese día -finalmente dijo Sophie con dificultad mirando directo a los ojos de Goku que lentamente se iban abriendo en sorpresa.

No se esperaba esto, ni mucho menos que ella pusiera su mano sobre la suya. Era obvio que le costaba demostrar su afecto de esa manera, lo notaba en su rostro, sus expresiones.

El gran sonrojo y vergüenza que sentía, al igual que él mismo quien no se esperó este desenlace.

-¡¿Q... qué es esa cara de tonto que pones?! ¡¿no oyes?! -preguntó cómicamente molesta, aún así Goku seguía boquiabierto e incrédulo.

--Fin del capítulo--

Bien, espero que hayan disfrutado del capítulo, desarrollando a Sophie. La misma sí que se metió en varios problemas tras el arresto de Gunner, no solo lo que contó, pero ya se verá.

En fin, espero sus comentarios, ¿qué les pareció el capítulo? ¿está bien la personalidad de Sophie?

Aprovecho para agradecerles por el tremendo apoyo a esta historia, hasta ahora me ha sorprendido.

Ah, y ya salió el fanfic de Goku en Beautiful New World como prometí, pasen a leerlo😈

Para el próximo capítulo 230 votos.