Un intento de asesinato tenia sus dificultades, y las dificultades siempre cambiaban dependiendo de los objetivos, en realidad asesinar hombres era màs sencillo que asesinar mujer, ya que los hombres solo habia que plantar una chica hermosa, a veces una prostituta, a veces una esclava, a veces una sirvienta y en otros casos hacer una pantominia sobre una noble o una hija rica que iba de vacaciones para cumplir con los objetivos de que una chica asesinar cumpliera su deber, a veces era envenerar, otros era ahorcarle y luego desaparecer, raras ves apuñalar o dispararle y nunca se habia llegado a la necesidad de una batalla, uno de los casos que màs recordaba era la de un capitan con tanta magia y con una resistencia tan inusual que realmente los metodos normales no hubieran servido, tuvo que mandar a su guardaespaldas a quitarle la vida, cual fue la sorpresa al enterarse que su guardaespaldas encontro su punto debil de ese capitan, cuando le estaba haciendo una mamada ella noto que se relajo tanto que aprovecho el momento y le arranco el pene con todo y testiculos, no le gusto el metodo pero fue efectivo.

Asesinar mujeres era màs dificil, las mujeres eran màs precavidas y màs listas y no tenian un punto debil que una chica pudiera arrancar a mordiscos, la idea le hizo mirar a la chica que hacia su trabajo.

-Ten cuidado o te despellejare viva- en realidad hubiera preferido estar fumando opio pero necesitaba estar atento, asi que prefirio recurrir al metodo de tener a una chica dandole tratamiento con la boca, al final se quedo observando parte del techo.

Para su trabajo habia decidido, realizar un ataque de distraccion al palacio de no se que noble donde se hospedaria Laura Lidwurd, al menos tenia la idea de que un ataque frontal seria la distracciòn, tenia a Jack "El veloz" el unico hombre que era tan rapido que habia logrado robar ropa interior de la princesa de Tiro, una Behemot la chica intento seguirle el paso pero fue màs rapido Jack, tambien habia robado un poco del pelo de la primogenita de los Draculae tambien logro escapar a pesar de que la chica le persiguio pero no le alcanzo, habia conseguido una de esas miticas espadas "Cortadragones" si su hombre era màs veloz, podria cortar la garganta de la pequeña niña y seria un trabajo rapido, nadie era màs veloz que Jack "El veloz".

En esos momentos empezaba el trabajo, sin duda ya habria comenzado el ataque, asi que porque no, tomo a la chica de su cabeza y luego presiono para que ella fuera màs rapido, y màs rapido, en un momento sintio la desesperacion de la chica por intentar respirar pero el siggio presionandola hasta que finalmente exploto en la boca de la chica y no le permitio alejarse todavia, derramo toda su semilla en la garganta de ella, y finalmente le permitio alejarse mientras tocia e intentaba respirar, se quedo respirando tranquilamente eran esos momentos donde no necesitaba ni màs sexo ni màs opio, su mente era calmada.

-Si no la matamos, me mataran a mi- al menos estaba confiado que harian su trabajo-jajaja no fallare, eso lo se, no fallare- dijo con la idea de que lograria sus objetivos,

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La mansion tenia sus ventajas y sus desventajas, pero al menos nadie tendria la osadia de atacar a Laura Lidwurd, su viaje habia sido rapido y ahora despues de asegurar que nadie intentaria una idiotes, las chicas estaban calmadas e incluso los comandantes estaban calmados, nada como ser presionados hasta el limite pero mejor era tomar su tiempo con tranquilidad.

Los soldados vigilaban la entrada y tambien habian pequeñas patrullas que salian por la ciudad y vigilaban cualquier movimiento sospechoso, los soldados miraban a las sirvientas que salian ocasionalmente para intercambiar palabras con ellos, llevarles regalos o simplemente platicar, algunas salian al descubrir sitios interesantemente escondidos o con privacidad para intercambiar horarios y quedar en encuentros rapidos en la noche, al menos hasta que avanzaran al siguiente punto y fuera imposible algunso descansos.

Los soldados siguieron en posiciones en firme, su comandante Roland estaba con una actitud un poco màs relajada despues de que Laura habia desaparecido pero aun asi de repente le daban ataques de imponer orden cuando veia a las caballeros de Hlin que no eran nada favorecidos por los soldados de Ragnarok, y en realidad era porque todas eran "castas" o en realidad no buscaban satisfacer sus necesidades con los soldados a diferencia de la unica favorecida llamada "Svava" que le habia causado gran cantidad de problemas porque Margot iba aquejarse  sobre  como se atrevian sus pateticos soldados a usar a su compañera aunque en realidad eso ultimo lo ponia en duda, ya que Svava era toda una campeona olimpica a la hora de actuar por iniciativa propia a la hora de orgias donde ella era el centro, pero no eran cosas que iba a pelear, al final un par de "castigos" que eran solamente amonestraciones escritas que nadie tomaba en serio.

 Una explosion hizo a todos los soldados tomar sus armas que tenian a su disposiciòn, los arqueros se prepararon, y los lanceros empezaban a formarse, hasta uno de los soldados salio corriendo acomodandose los pantalones, alguien se derramo la cerveza.

Ahora explosiones en la pared, no dañaron al menos eran resistentes, las caballeros se retiraron, no tenian ninguna obligacion con los soldados y las sirvientas, que se veian tan tranquilas y que no dañarian nadie empezaron a sacar sus armas escondidas y algunas tan rapidamente o descuidadamente que rompieron sus ropas, pero era tiempo donde esas pequeñeces no importaban una mierda.

El lugar que estaba en el centro de la ciudad estaba de repente tolamente desierta, aparecieron no solamente unos pocos atacantes, sino una gran cantidad de enemigos.

Los que corrieron a traves de la reja que ahora habia sido sellada con una docena de lanceros, resisitio una embestida, hasta descubrir que eran los atacantes.

-Magia nigromantica- miro alguien al notar los cadaveres, con esto se resolvian varias dudas sobre quein estaba robando cadaveres, lluvia de flechas, saetas y balas acaban con los enemigos, los oficiales se prepararon porque entre los atacantes estaban los vivos que eran los màs peligrosos, asi que debian ser cuidadosos, sumamente cuidadosos.

Un hombrenton con brazos gigantes y que iba semidesnudo  aparecio el cual fue medio repelido por uno delos oficiales de lanceros, con una sonrisa en el rostro, finalmente un poco de verdadera accion, los hombres sonrieron esto era lo que querian, pelear, finalmente peleaban, aparecieron màs vivos, incluso si alguno de los hombres que se encontraban arriba diviso al nigromante no diria nada, este tipo de diversion era mejor que esperar que algo pasara el tener a un enemigo al cual poder matar era mejor de un enemigo invisible que no sabrian quien podria ser, tal ves habria un asesino escondido debajo de una anciana o de una niño, pero esto era  alo que estaban acostumbrados como soldados del imperio.

Las caballeros de Hlin, solo miraron con enojo las acciones de los soldados que estaban màs divertidos peleando de esa manera que realmente repeliendo los ataques, una mala costumbre acaecida desde que Erick participaba màs seguido en guerras pero no dijeron nada, las acciones del padre de Laura no eran el tema que ellas fueran a disputar una porque no simpatizaban nada con ese hombre y la segunda preferian hablar de un tema màs agradable sobre cual de los gestos de su protegida era màs tierno.

Las chicas se replegaron hasta el palacio e hicieron una defensa asegurando cualquier sitio que pudiera permitir la entrada de algun enemigo que fuera  llegar hasta Laura.

Las sirvientas se unieron con las caballeros, cuando alguien pregunto donde estaba Laura, le dijeron que habia querido tomar clases con el maestro de armas del palacio, asi que la mantendrian en el salon de practicas con el maestro para no molestarle, su madre estaba tomando un baño, para no asustarla enviaron una docena de guardias.

-Los cachorros de Laura son Zorros de fuego verdad?-

-Si porque???- dijo una de las chicas que miraba por la ventana, la batalla al menos el palacio tenia una division de 2 murallas la interna y la externa, por lo que la defensa le tocaba a los hombres de Ragnarok hasta que vencieran o fueran derrotados, la chica señalo a unos zorros que estaban cargando un jabali gigantesco descaradamente por la puerta, algunos soldados como enemigos, incluso muertos, se quedaron mirando a los zorros, que  se llevaban el jabali al parecer recien robado ya que tenia marcas de flechas y que alguien ya le habia sacado los organos, mordelon e hiperactivo lo jalaban desde frente y bestia empjaba desde detras  y sobresaliendo en la cima sin hacer nada estaba princesa, que ordeno a sus hermanos con su cola se detuvieran, miro a todos lados, se quedo mirando con atencion a todos lados y luego de decidirlo, ordeno que continuaran mientras ignoraban la batalla, al final todos reanudaron su batalla, despues de ver que eran ignorados por los cachorros

-Esos cachorros son una excentricidad-

-Siiii- todas aprobaron-Pero SON TAN LINDOS-

Las caballeros que se quedaron frente a la puerta donde estaba Laura con el maestro de armas sonreian, al menos podrian asegurar que ellas eran la ultima defensa.

-Ademas ese maestro de armas se veia fuerte- dijo una de las caballeros- y atractivo - las caballeros comenzaron un chismorreo sobre lo perfecto que era el hombre, algo que llamo la atencion de las sirvientas que habian reemplazado apenas a sus compañeras que no se alajeaban de Laura.

-JAJAJAJAJA-sonrio una de las sirvientas que estaban cerca, con una daga entre las manos

-Porque te ries-dijo una de las caballeros, que realmente no aguantaban las burlas y menos de esas idiotas sirvientas que no saben hacer nada màs que fallar, como pensaban todas las caballeros.

-Porque dices que es muy fuerte y atractivo- las sirvientas que estaban ahi eran las màs fuertes, ademas de que se decidio cambiar las sirvientas por unas màs frescas ya que las otras estuvieron con Laura y se habia emocionado por la idea de un maestro de armas famoso y talentosso  que sin querer uso magia, el cual su cercania de uso habia desgastado a las chicas que cedieron con facilidad su oportunidad de cuidar a Laura por no estar en las mejores condiciones de protegerla por estar en sus limites cosa que habian aprendido al convivir tanto tiempo con Laura, la magia de dragon provocaba el sindrome de desgaste rapidamente-te gustan los gordos???- las sirvientas tenian rencillas contra las caballeros.

-Noooo me gustan.... espera dijiste gordo?- la caballero llego a la cuenta que la perra  que le hablaba frente a ella al parecer conocia al maestro de armas.

-Si, el maestro de armas es un gordo que le gusta manosear culos y ni siquiera sabe manosear- dijo la chica resentida-no dijiste que estaba con Lau?-  miro con mayor atencion, y sus compañeras se pusieron alertas

-Gordo...?- volvio a repetir las caballeros, desenfundaron espadas-no uno delgado y atletico- no fue necesario decir màs, el rostro de todas era de horror y terror, incluso odio por ser idiotas, ahora debian aseguar que su error no fuera peor.