27

-Sea lo que sea, es tu decisión.

-No. Si la decisión va a ser de alguien, será de los dos.

Asentiste.

-Sí, pero mayormente será tuya.

¿Qué debo hacer?

La campana que indica el término del recreo sonó. Empezamos a caminar hacia los salones en silencio. Sabía que estabas esperando a que tome una decisión.

Tal vez por cobardía, tal vez porque no quiero extrañarte, te dije que te perdonaba. Aunque ya esté todo claramente hecho.

Te pregunté si tú querías seguir conmigo. Tu respuesta fue que no había nada en el mundo que quisieras más.

Nos abrazamos firmemente. Como si eso pudiera retirar todo.

No me daba cuenta que te extrañaba aún estando al lado tuyo.

Entramos a las aulas para seguir con nuestro trabajo. La profesora me llamó y me pidió si podía inflar unos globos. Sí. Su color era el rojo.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top