Último capítulo

GIЯL STAЯK

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𝐍𝐀𝐑𝐑𝐀𝐃𝐎𝐑 𝐔𝐍𝐈𝐕𝐄𝐑𝐒𝐀𝐋

-Aria yo... yo...

Peter estaba muy nervioso. Sabía que tenía que hacerlo, que tenía que decirle como se sentía. Que era ahora o nunca. Pero los nervios le traicionaban.

-Yo... quería... bueno...

Aria también estaba nerviosa. Conocía lo que Peter estaba intentando decirle, o al menos esperaba que fuera lo que pensaba. Esperaba que le hiciera caso a Iron-Girl. Pero se aseguró de que los nervios no lo hicieran echarse atrás.

-Dilo. No pasa nada, Peter. Dilo por favor- si no lo decía él acabaría diciéndolo ella.

-Aria... tú... me gustas.

Peter bajó la mirada, tímido. Acto que le pareció adorable a la chica. Esta llevó una de sus manos del hombro del chico a su barbilla para volver a conectar miradas.

-Tú también me gustas, Pete.

Peter abrió los ojos, sorprendido, ya que no esperaba que sus sentimientos fueran correspondidos. Aria le sonrío haciendo que el chico se relajara y le devolviera la sonrisa.

-¿No es una broma, no?- Aria río levemente.

-No- susurró.

Esta se puso de puntillas acercando más su rostro al de Peter. En cuanto sus labios estuvieron a punto de rozarse ambos los entreabrieron dejando que sus alientos se mezclaran. Tenían el pulso acelerado y las ganas les inundó.

Eso fue lo que hizo que los dos acortaran la distancia dejando que sus labios se unieran al fin. El beso comenzó lento y torpe con la única intención de sentirse. Pero se tornó más profundo con el paso de los segundos.

Sus labios se abrían y cerraban encima de los del otro. Se mecían en un vaivén profundo y tierno trasmitiendo todo lo que se habían estado callando durante tantos meses. Todo lo que se querían.

-Wow- dijo Peter en cuanto se separaron.

Las frentes unidas y los ojos cerrados, así estuvieron durante unos segundos hasta que al final se separaron para mirarse a los ojos.

-¿Esto dónde nos deja?- preguntó tímido.

-Eres adorable- le dedicó una sonrisa tierna.- ¿Dónde quieres que nos deje?

-Pues... me... me gustaría estar juntos- y como si una chispa lo encendiera, se confesó.- Me gustas mucho, Aria. Cuando te vi caer en Washington te juro que el temor se apoderó de mí. Por casi te pierdo y si hubiese pasado no sé qué habría hecho sin ti. Hoy me equivoqué. Si fui al baile con Liz fue porque pensé que no era suficiente para ti. Tú eres una Stark y yo un simple...

-Tú eres Peter Parker- le interrumpió.- El chico más bueno, humilde y empático que he conocido en mi vida. Si alguien no era suficiente para el otro era yo, pero eso no es lo importante. Lo importante son los sentimientos.

-No pensé así. Estaba mal por lo del traje y me sentía insignificante por lo que acabé pensando que era insuficiente para ti. Pero hoy, cuando casi muero, recobré la fuerza y la confianza en mí. Eso junto con lo que una "amiga" me dijo, me hizo darme cuenta de que tenía que confesártelo. Y aquí estamos.

-Dale las gracias a esa "amiga" tuya- le sonrió.

-Se las daré. Pero ahora no pienso perder más el tiempo, ya he perdido mucho- inspiró profundamente preparándose para sus siguientes palabras.- Aria Stark, ¿te... te gustaría ser mi... mi novia?

-Sí- susurró.- Sí- repitió más alto y con una sonrisa.

Peter sonrió ante su respuesta y se inclinó hasta volver a unir sus labios con los de su, ahora, chica. Un beso menos torpe pero igual de tierno.

Al separarse se quedaron mirando con unas sonrisas en sus rostros. Cuando iban a volverse a besar una voz proveniente de detrás de la puerta los interrumpió.

-¿Chicos?- se separaron de golpe justo un segundo antes de que la puerta se abriera.- Oh, si estáis los dos. No os he escuchado entrar.

-Estabas dormida, tía May. No te quisimos despertar.

-Gracias- les dedicó una sonrisa a ambos jóvenes.- Es bastante tarde os deberíais ir a dormir ya.

-Sí, yo ya me iba a dormir. Ya estaba hasta con el pijama- dijo la chica.

-Yo solo había venido a desearle buenas noches- le dijo Peter a su tía y luego miró a su chica.- Buenas noches, Aria.

-Buenas noches, Pete- repitió con una sonrisa.

-Buenas noches- le dijo May.

En cuanto el chico y su tía salieron de la habitación de Aria, May cerró la puerta y dirigió la mirada a su sobrino.

-¿Cómo te ha ido con Liz?

-Em... bueno... bien. Sí, bien.

-¿De verdad? No se te nota muy seguro.

-Oh, es solo que estoy cansado. Pero...- miró a la puerta de Aria.- La noche ha acabado bien.

-Me alegro. Yo me voy a dormir. Haz tú lo mismo anda, así descansas.

-Sí, lo haré. Buenas noches, tía May- le dedicó una sonrisa.

-Buenas noches, Peter.

May se dirigió a su habitación y el chico se adentró a la suya. En cuanto estuvo solo no pudo evitar revivir lo que acababa de pasar tan solo unos minutos atrás.

Con una sonrisa se quitó el traje, el cual fue a recoger al instituto, para ponerse el pijama y se introdujo entre las sábanas. En la otra habitación, Aria también se metió en su cama. Ambos, con una sonrisa, se dispusieron a dormir.

Al día siguiente ambos chicos se levantaron como cada mañana. Su rutina seguía siendo la misma: despertarse, ducharse, vestirse, desayunar e irse. Todo igual, excepto por una cosa. Su relación.

Sin ni siquiera haberlo acordado, como si ya fuese obvio, fingieron que no pasaba nada delante de May esa mañana. E hicieron lo mismo cuando se encontraron con Ned en la entrada.

-¿Cómo estás?- le preguntó Ned a Peter.

-Bien, todo bien. Tuve ayuda- Aria le dedicó una mirada a Ned que Peter no percibió.

-¿A sí? De Iron-Girl, ¿no?

-Aha.

-Todavía intentó asimilar lo que pasó- continuó hablando Ned.- ¡Tenía una pinta de loco! ¡Fue flipante!

-Sí- afirmó Peter mientras Aria solo asintió con la cabeza.

-Iba en plan... *ssssss*.

-Ssh.

-Y entonces tú...*AAAA*- movió las manos para darle dramatismo. Peter miró a Aria con una sonrisa para después volver la atención a su amigo.- Y yo le alcancé con él... *fluush*. Fue tan...- soltó un suspiro final.

-Me salvaste. Bueno, y tú también- miró a Aria e intercambiaron una mirada y sonrisa con mucho más significado. - Fue una pasada.

Ned los observó durante varios segundos en los que la pareja no dejaba de mirarse. Eso hizo que su amigo frunciera el ceño.

-¿Pasa algo?- preguntó Ned captando la mirada de ambos al instante.

-Em... no- contestó Aria.

-¿Seguro? Estáis muy raros- ambos chicos se miraron y después volvieron a observarlo.

-Sí... seguro- dijo, ahora, Peter.

-Noto que me ocultáis algo- su ceño seguía fruncido.

-No digas idioteces- le dijo la chica.

-Mirad- Peter señaló con la cabeza delante donde se encontraba Liz despidiéndose de Betty.- Debería disculparme con ella.

Peter miró a su chica quien le sonrío mientras asentía levemente con la cabeza. Volvió la vista a Liz y aprovechó el momento después de separarse de su amiga rubia para acercarse.

Ned y Aria se quedaron en medio del pasillo observándolo. O mejor dicho solo Aria lo observaba porque Ned la miraba a ella.

-¿Y tú estás bien?- le preguntó Ned.

-Oh... em... sí- le contestó después de apartar la mirada de Peter.- No sospecha nada así que genial.

-Deberías decírselo.

-Se preocuparía por mí.

-Ya lo hace.

-Ya, pues aún más y no quiero eso. Lo distraería de su deber de Spider-Man cuando lo ayudara. No quiero que se preocupe por mí y eso afecte a su tarea.

-Como tú quieras- el chico se encogió de hombros.- Yo no diré nada.

-Gracias- le sonrió.

Por otro lado, Peter estaba dispuesto a hablar y disculparse con Liz por su comportamiento de ayer.

-¡Eh, Liz!- se acercó a ella trotando.- Liz- le dijo en cuanto se separó definitivamente de Betty. Se acercó, ya caminando, hacia ella.- Liz, oye lo siento.

-Lo dices mucho. ¿Por qué lo sientes esta vez?- le preguntó dolida por su comportamiento, pero sobre todo por lo que pasó con su padre.- ¿Por el baile? Pues... pues me dejaste bien colgada.

-Bueno, sí, pero es que tu padre... no imagino por lo que estás pasando. Si hay algo que pueda hacer para ayudar...

-Creo que nos mudamos a Oregón. Mamá dice que es bonito así que me parece bien. En fin, papá no quiere que estemos durante el juicio.

-Liz, es que no puedo explicar...- se calló, no sabía qué decir.

-Adiós, Peter. No sé qué te está pasando, pero ojalá lo resuelvas- dicho esto Liz pasó por su lado para irse junto con su madre.

Peter la observó cruzar la puerta para después volver junto con sus amigos. Los cuales le preguntaron. De camino a clase les explicó sobre la conversación.

Durante la primera hora, que compartían juntos, Peter y Aria se dedicaban miradas y sonrisa, las cuales no pasaban desapercibidas para sus dos amigos.

-Estás muy feliz- le dijo Michelle a Aria mientras la miraba con los ojos entrecerrados. En ese momento la asignatura en la que se encontraban no estaban los chicos.

-¿Yo?- asintió con la cabeza.- Que... qué va. Estoy igual.

-Te he observado.

Solo hizo falta esa frase y que Michelle la mirara atentamente para que, al final, Aria soltara un suspiro y se lo explicara.

-Está bien- suspiró rendida.- Pero no se lo puedes decir a Ned.

-Aha.

-Peter y yo estamos juntos.

-¿Juntos, juntos?

-Sí, somos pareja.

-Bien- Michelle sonrió leve, pero sinceramente.- ¿Al final te has confesado?

-Sí y no- su amiga la miró confundida.- Se declaró él primero. Con un poco de mi ayuda- susurró lo último.

-¿Qué?

-Que se declaró él y después yo- excusó nerviosa.

-Ahh. Bueno, pero al final has conseguido estar con él- Aria asintió con la cabeza.- Enhorabuena.

-Gracias.

-¿Y por qué no quieres que se lo diga a Ned?

-Oh, no es por nada malo. Simplemente, todavía no lo sabe y tengo que hablar con Peter para ver cuándo se lo decimos.

-Oh, vale.

Las clases siguieron hasta que el timbre de la hora del almuerzo sonó. Peter se despidió de Ned y le dijo que ahora se veían en el comedor. Aria hizo lo mismo con Michelle. Ambos se encontraron en sus taquillas.

-Hola- murmuró Peter después de cerrar su taquilla y acercarse a su chica.

-Hola- le sonrió ella.- ¿Qué tal las clases?

-Aburridas, faltaba tu locura- dijo tímido porque nunca se había comportado así con una chica, ya que nunca había tenido novia.

Aria se rio mientras cerraba la puerta de su taquilla. Las clases que les había tocado las primeras horas eran la mayoría en las que no coincidían.

-Aww, y a mí tu ternura- Peter se sonrojó lo que lo hizo verse aún más adorable.

-¿Vamos?

-Claro.

Ambos caminaron juntos hacia el comedor con la intención de juntarse con sus amigos. Cuando llegaron cogieron dos bandejas y pasaron a recoger la comida que se tomarían.

-Oye, habría que decírselo a Ned- le dijo Aria. Peter observó a su amigo sentado en la mesa de siempre hablando con Michelle.

-Sí, tienes razón- volvió la mirada a Aria.- ¿Quieres que se lo digamos ahora y así también se lo decimos a Michelle?

-Oh... eh... Michelle ya lo sabe.

-¿Se lo has dicho?- preguntó Peter con el ceño fruncido mientras caminaba en la fila y las cocineras le servían la comida.

-Sí, básicamente me ha pillado. Es demasiado observadora- le explicó mientras observaba a su amiga.

Cuando los dos tuvieron la comida en sus respectivas bandejas se acercaron a la mesa que siempre ocupaban. Aria se sentó al lado de Michelle, en frente de Peter.

-Oye, Ned, tengo que contarte algo- le dijo su amigo.

-Dime- la reciente pareja se dedicó una mirada antes de volverla a posar en su amigo.

-Aria y yo estamos juntos.

Los tres lo observaron para ver su reacción, pero no la hubo. Se quedó quieto observando a Peter y después dirigió su mirada a Aria para observarla también.

-¡Aleluya!- gritó captando la mirada de varias personas.

-Ssssh- dijeron Peter y Aria a la vez.

-Por fin. Ya estabais tardando.

-¿A que sí?- le apoyó Michelle.

-Sí. Estaba harto de ver cómo os moríais uno por el otro y lo único que hacíais era callaros. Lo peor fue al principio cuando os escuchaba hablar del otro de manera cursi y que ni siquiera os dabais cuenta de que os estabais gustando.

Aria y Peter conectaron miradas las cuales no se sostuvieron ni dos segundos, ya que la apartaron por vergüenza.

-En fin, felicidades- les dijo a ambos con una sonrisa.

El resto de la comida fue tranquila excepto por alguna que otra pregunta o anécdota de Ned que sacaba a la luz y hacía que ambos se avergonzaran o se pudieran nerviosos.

También las demás clases pasaron tranquilas, con ambos compartiendo clases hasta que llegó la reunión del Decatlón Académico. Los cuatro se dirigieron hacia ahí y tomaron asiento.

-¡Felicidades, campeones nacionales de Decatlón!- les felicitó el Sr. Harrington a lo que todos aplaudieron.- Tengo que devolver esto enseguida, pero lo he traído solo como motivación, ahora, para esta práctica. Me estoy adelantando, pero vamos a necesitar a un nuevo capitán para el año que viene así que nombro a... Michelle.

Todos la miraron con una sonrisa y aplaudieron acorde con la decisión del Sr. Harrington.

-Oh... gracias. Mis amigos me llaman MJ- dijo la nueva capitana.

-Creía que no tenías amigos- le dijo Ned a su lado.

-No... tenía- eso hizo sonreí a Aria quien se encontraba sentada a su otro lado encabezando un lado de la mesa.

El móvil de Peter vibró indicando un mensaje por lo que lo cogió y le dio la vuelta para observar el texto que le acababa de llegar.

Número desconocido: Ve al lavabo

-Em... tengo que irme- murmuró Peter.

-¿Adónde vas?- le frenó MJ.- ¿Qué ocultas, Peter?- este la miró un poco desconcertado.- Es coña, me da igual. Chao. Está bien, tenemos que practicar un poco.

Peter se levantó de su asiento y se dirigió a dicho sitio que salía en el mensaje. Por otro lado, Aria sintió vibrar su móvil y lo sacó para observar un mensaje que era de Happy. Este decía exactamente lo mismo que el de Peter.

-Tengo que ir al baño- dijo la chica captando la mirada de todos.

-¿Es urgente? Tenemos que tocar temas importantes y con qué Peter se lo pierda ya es mucho- le dijo MJ.

-Es tema femenino- mintió en susurro.

-Está bien, ves- le dijo con una leve sonrisa.

Aria se fue siguiendo los pasos que Peter acababa de dar. Lo vio entrar al baño por lo que supuso que a él también le habría llegado un mensaje. Se paró en seco en la puerta del baño. Como era el de chicos no podía ni iba a entrar.

En cambio, Peter al entrar vio a Happy darse la vuelta y observarlo. El joven lo miró sorprendido por encontrarlo ahí.

-Hola, Happy- le saludó un poco confundido.- ¿Qué... haces tú aquí?

-Te debo una. No sé qué haría yo sin este trabajo. Antes de conocer a Tony...- no pudo continuar porque el sonido de la cadena lo interrumpió.

De uno de los cubículos salió Tiny quien se acercó al lavamanos y se las limpió bajo la atenta mirada de Happy y Peter. Después salió del baño observándolos por última vez con confusión.

Al salir se encontró con Aria apoyada en la pared de al lado. Este le observó confundido mientras que ella le dedicó una leve sonrisa.

-Dimee... ¿Cuánto llevas aquí?- le preguntó Peter a Happy.

-Lo suficiente para crear dudas- le respondió.- El jefe quiere verte.

-¿Él está aquí?- le preguntó sorprendió en susurro mientras señalaba los cubículos.

-¿En el lavabo? No, está en el norte.

-En el norte- repitió.- ¿En el norte, norte?

-Sí. Vamos.- asintió mientras pasaba por su lado.- Espera- dijo antes de salir y se giró a ver a Peter.- ¿Y Aria? También le he enviado un mensaje para que viniera.

-Estaba en la reunión del Decatlón.

-Pues hay que ir por ella. Tony también quiere hablar con ella.

El hombre abrió la puerta y Peter salió detrás de él.

-Por fin salís- ambos hombres se giraron para encontrarse con Aria apoyada en la pared.

-Aquí estás. ¿Has visto mi mensaje?

-Sí, ¿pero en qué momento se te ocurrió que me metería en el baño de hombres?

-No había pensado en eso- admitió en adulto.

-Ya me he dado cuenta.

-¿No nos íbamos?- preguntó Peter captando la mirada de ambos.

-¿Irnos?- preguntó la chica.

-Tu tío quiere hablar con ambos- le respondió Happy comenzando a andar hacia la salida seguido por los dos jóvenes.

-¿Dónde?

-En el norte- le contestó Peter.

En cuanto llegaron al coche ambos adolescentes se sentaron en la parte de atrás. Tardaron un rato en llegar, pero se les hizo ameno.

-Fijaros. Impresionante, ¿eh?- les dijo Happy haciendo que ambos observaran la gran edificación.

-Está cambiado- dijo Aria captando la mirada de su novio.

-Acaban de remodelarlo- le informó el adulto.

-¿Has estado aquí?- le preguntó en susurro Peter.

-Sí, venía antes de que me mandaran a vivir contigo.

Peter observó a través de la ventanilla y Aria se inclinó hacia él para hacer lo mismo. Miró atentamente para reconocer lo que había cambiado y lo que seguía igual.

Peter no pudo reprimir una sonrisa cuando vio, a través del gran ventanal, como esa aeronave se elevaba hacia el cielo. Aria ya había visto eso muchas veces por lo que se paseó, sin alejarse, por todo el interior observando los cambio que había desde la última vez que estuvo ahí, un poco más de un año atrás.

-No se ve cada día- le dijo Happy a Peter.

-Yo sí lo hacía- ambos la observaron.- Bueno, casi todos.

-Oh, aquí estáis- comentó Tony pareciendo con sus manos en los bolsillos.- Hola, pequeña- dejó un beso en la sien de su sobrina.- ¿Qué tal el viaje?

-Bien- contestó Happy.

-Dame un minuto con el chico.

-¿En serio?

-Sí. Tengo que hablar con él.

-Estaré muy cerca.

-Pues mejor de forma alejada. ¿Vale? Limítate- le dijo y se giró a ver a su sobrina.- Tú puedes venir.

Se acercó a Peter y le dio un golpe amistoso en el hombro para después pasar el brazo por detrás de estos y darle un par de palmadas en el brazo. Acabó posando la mano en el hombro del chico.

Ambos empezaron a caminar seguidos de Aria, quien estaba detrás de ellos pero cerca. La chica estaba confundida por su repentino interés en hablar con Peter, pero sobre todo en el porqué le había citado a ella y ahora solo ha dicho que hablaría con Peter.

-Siento lo del traje, pero te lo buscaste. En realidad fue el momento perfecto de disciplina amorosa severa que necesitabas, ¿no? Para espolearte. ¿No crees?

-Ee... sí- dijo Peter un tanto nervioso.

-Sí que lo era.

-Sí- afirmó y Tony soltó un suspiro.- Sr. Stark...- lo interrumpió.

Aria caminaba detrás de ellos escuchando atentamente e intentando averiguar que estaba tramando su tío. Este encuentro escondía algo y ella lo sabía.

-La cagaste bien cagada, fue lo máximo. Pero luego hiciste lo correcto. Repusiste el papel higiénico, desatascaste el inodoro... Vale, no es mi mejor analogía- soltó un pequeño suspiro.- Me equivoqué contigo. Creo que con un poco más de tutoría serías un buen activo para el equipo.

Y fue en ese momento, con esa frase con la que Aria sabía qué estaba pasando. Ya lo había escuchado hablar de ciertas tutorías y de más cuánto vivía aún con él. Eso significaba entrenamiento en la base, en esa misma base.

Se va a traer a Peter aquí- pensó Aria y eso la asustó.- ¿Y yo? ¿También me traería? ¿O me dejaría ahí con May? ¿Sin Peter? No, ahora no. Ahora que estamos juntos, no.

-¿Pa... para el equipo?- preguntó Peter mientras los tres subían un par de escalones.

-Sí. En fin. Detrás de esa puerta hay unos 50 periodistas, no blogueros- dijo mientras le daba dos toques a su reloj haciendo que unas compuertas de delante de ellos se abrieran.- Cuando estés listo... ¿Por qué no te lo pruebas?

Enfrente de ellos apreció un traje de Spider-Man fabricado con el mismo material que la armadura de Iron-Man. Estaban delante de nada más y nada menos que el Iron-Spider.

-Presentaré ante el mundo al nuevo miembro oficial de Los Vengadores- dijo Tony mientras se acercaba al traje e hizo una pausa.- Spider-Man.

Peter se acercó lentamente al traje con emoción y felicidad, no podía evitar sonreír al verlo. Aria lo siguió, pero su reacción era todo lo contrario. Ella sabía lo que implicaba lo que su tío le estaba diciendo.

-Eh... yo... em... pero...- tartamudeaba Peter mientras se acercaba.

-Sí, fíjate bien- le dijo Tony.- Después de la rueda de prensa Happy te acompañará a tu nuevo alojamiento- ese comentario caló en Peter y aún más en Aria.- ¿Entre quién y quién está? ¿Está cerca de Visión?- le preguntó a Happy.

-Sí, Visión pasa de las puertas- contestó este.

-Está bien.

-Y de las paredes- añadió.

-Encajarás.

-¿Y yo?- preguntó Aria captando la mirada de su tío.- ¿Qué pasa conmigo? ¿También vendré a vivir aquí o volveré a vivir contigo?- le preguntó a su tío mientras Peter no dejaba de mirar su nuevo traje.

-Oh, no pequeña. Tú seguirás viviendo en Queens- eso también caló en ambos.

-¡¿Qué?!- preguntó alterada.

-Ahí estás a salvo y May cuida muy bien de ti.

-¿Entonces, Peter se vendrá aquí y yo me quedaré sola con May?- preguntó temerosa, pero se mantuvo serena como si no le afectara.

-Aha- afirmó acompañado de un asentimiento de cabeza.- ¿Preparado Peter?

Aria se acercó a su chico quien no dejaba de observar el traje sin inmutarse ante todo lo que se acababa de decir. Y eso asustó a Aria, no solo por su relación sino también por el propio alter ego de Peter.

-Peter- le susurró en el oído para que solo él la escuchara.- Perderemos lo nuestro, pero...- inspiró antes de continuar.- Sobre todo perderás tu doble identidad. Se acabó el amigo y vecino Spider-Man.

Aria se separó y observó el perfil de Peter quien todavía permanecía quieto pensando en todos los pros y los contras. Su no respuesta hizo que Aria se alejara unos pasos, algo decepcionada.

Va a aceptar- se repetía Aria en su cabeza una y otra vez. Eso hizo que apartara la mirada y se diera la vuelta para que su tío no se diera cuenta de que le afectaba.

Perderás tu doble identidad. Perderemos lo nuestro. Se acabó el amigo y vecino Spider-Man- las frases de Aria retumbaban en la mente de Peter. Eso hizo que se diera la vuelta y se acercara hasta quedar de frente con Tony. Observó el traje una vez más antes de hablar.

-Gracias Sr. Stark- Aria se mordió el labio intentando disimular.- Pero paso.

Aria se dio la vuelta de golpe y observó a su novio mirar fijamente y con seguridad a su tío. Una sonrisa se dibujó en el rostro de la chica.

-¿Qué pasas? ¿Cómo que pasas?- preguntó Tony confundido.

-Bueno que preferiría... preferiría seguir aquí un tiempo. El amigo y vecino Spider-Man. Alguien debe cuidar de los indefensos del pueblo- le explicó con una leve pero orgullosa sonrisa. Tony se quitó las gafas antes de hablar.

-¿Me rechazas? Mejor piénsalo, mira eso- señaló el traje por lo que Peter lo miró.- Mírame- le obedeció al instante.- Decídete, ¿sí o no?

-No- no dudó ni un segundo.

-Vale. Entendido, eres de la onda Springsteen, del proletariado. Ah... Happy te llevará a casa- el nombrado se acercó.- ¿Sí?

-Sí. ¿Me esperas en el coche? Necesito un minuto- señaló a Tony y a él mismo.

-Gracias, Sr. Stark.

-Sí, Sr. Parker, muy bien- se dieron la mano.

-Nos vemos.

-Vale.

Peter caminó de espaldas y dio una palmada sin borrar la sonrisa de su rostro. Se giró y observó a Aria quien lo miraba con una amplia sonrisa. Cuando ambos empezaron a bajar los escalones la voz de Tony sonó.

-Tú no, Aria- ambos joven pararon y se giraron a ver al adulto.- Tengo que hablar contigo, espero un momento. Sr. Parker siga su camino.

Peter observó a Aria y esta le asintió con una sonrisa. El chico se dio la vuelta y acabó de bajar los pocos escalones y siguió caminando. Paró cuando pensó en algo mientras Tony cerraba las compuertas de donde estaba el traje.

-Era una prueba, ¿no?- le preguntó Peter después de darse la vuelta.- Ahí detrás no hay nadie.

-Sí, la has superado- mintió Tony.- Venga esfúmate ya, Yogurin.

-Gracias, Sr. Stark, gracias- dijo y al final siguió su camino.

-Gracias a ti.

-Te dije que era un buen chico- le comentó Happy a lo que Tony solo contestó con una mueca y un gesto con ambas manos.

Aria los observaba atenta esperando a que lo que fuera que su tío tenía que hablar con ella sucediera. Tony la miró y le hizo un gesto para que se acercara, cosa que hizo.

-Bien, también quería hablar contigo. Happy déjame a solas.

-Está bien- este se dio la vuelta y se alejó lo suficiente como para no escuchar la conversación.

-¿Y bien?- preguntó Aria volviendo la vista a su tío.

-He mandado a recoger tu traje.

-¡¿Qué?! ¡No es justo! ¡Me dijiste que no me lo quitarías!

-Y no lo voy a hacer.

-¡Como siempre haciendo lo que...! Espera, ¿qué?- preguntó confundida.

-Lo he mandado recoger para hacerle unos arreglos. En unos días tendrás uno nuevo.

-Pero a mí me gustaba ese. Lo había hecho yo.

-Lo sé y todo lo que tú hiciste no se va a tocar. Solo voy a añadir un par de cosas y una tecnología que estoy probando, nada más.

-¿Lo demás es todo lo mío?

-Aha.

-Oh, bien. Gracias- Aria le sonrió, acto que Tony le devolvió.- ¿Eso era todo?

-En un principio sí, pero ahora tengo algo más de que hablar contigo- su tío se puso serio lo que puso en alerta a la chica.

-¿Y bien?- le preguntó cuando vio que Tony no decía nada. Este entrecerró los ojos antes de hablar.

-¿Qué hay entre el mocoso y tú?

Aria abrió los ojos, sorprendida, pero se obligó a sí misma a mantenerse inocente e indiferente de inmediato. Lo miró con el ceño fruncido haciéndose la desentendida.

-¿De qué hablas?

-He notado como te has puesto ante la idea de que Peter se instalará aquí.

-Bueno, es mi amigo. ¿Qué esperabas? Que me alegrara la idea de que se alejara- actuó bastante bien.

-Ya- dijo para nada convencido.- ¿Seguro que no hay nada entre vosotros?

-No, nada de nada. Aparte de amistad, claro.

-No te creo.

-Pues no me creas. Tampoco es que sea asunto tuyo- saltó la parte a la defensiva de la chica.

-A mí no me hables en ese tono- dijo firme.- Ahora exijo que me cuentes qué pasa entre el mocoso y tú.

-Ya te lo he dicho- dijo exasperada.

-Quiero la verdad- Aria no contestó solo le aguantó la mirada firme.- O si no te quito el traje.

-¿Qué?- flaqueó.- No puedes hacerme eso. Ya te he dicho la verdad- mintió, pero lo hacía por el bien de Peter, y en parte por el suyo.

-Sí que puedo- Aria lo miró atenta antes de darse la vuelta y comenzará alejarse.

-¡Quítame el traje si quieres!

Aria se alejaba segura, pero lentamente, intentando darle tiempo a que se arrepintiera. Tony sonrío con gracia al ver la reacción de su sobrina.

-¡Es buen chico!- comentó Tony elevando la voz.

Aria paró en seco y miró a su tío por encima del hombro. Este le sonreía pero no con burla sino sinceramente. Se dio la vuelta sin dejar de observarlo. Respiró hondo y habló.

-Estamos juntos- confesó. Tony la miró serio unos segundo y luego esbozó una sonrisa.

-Me alegro de que sea con él- la sonrisa de la chica se amplió.- Pero ten cuidado. Y si te hace algo me lo dices y será arañita muerta.

Aria rio y trotó hasta llegar a su tío. Lo observó unos segundos para después acortar la distancia y abrazarlo. Él la envolvió en sus brazos abrazándola de forma paternal.

-Gracias- le susurró la chica y se separó.

-¿Por qué?

-Por llevarme a Queens hace un año. Ahí soy muy feliz. Contigo también lo era, pero...- se apresuró a decir lo último.

-Tranquila, entiendo a lo que te refieres- Tony la observó durante unos segundos que parecieron minutos.- Anda ve, antes de que me arrepienta.

-Adiós, tío.

-Adiós, pequeña.

Se dieron un último abrazo antes de que la chica se diera la vuelta y se dirigiera a la salida. Happy se quedó ahí, pero le dijo a Aria, con un gesto, que ahora iba.

La chica salió del edificio con una gran sonrisa y no puedo evitar ampliarla en cuanto vio a su chico apoyado en la puerta del coche. Se acercó a él y cuando estuvo delante pasó sus brazos por los hombros de Peter.

-Aria, tu tío nos...- empezó a decir nervioso, pero los labios de la chica sobre los suyo lo callaron.

Fue un beso dulce por parte de Aria, pero torpe y rápido por parte de Peter, quien al separarse miró al edificio asustado.

-Aria, el Sr. Stark ha podido vernos y si se entera de que...

-Ya lo sabe- le cortó. El chico la miró con el ceño fruncido.- Se lo ha intuido y me ha preguntado. Se lo he ocultado al principio, pero un comentario suyo me ha hecho cambiar de opinión.

-¿Un comentario? ¿Qué comentario?

¡Es buen chico!

-Nada con importancia- aunque sí que la tenía.

-¿Entonces ya sabe lo nuestro?- Aria asintió con la cabeza.- ¿Me va a matar?

-Si no me haces nada malo no.

-Nunca te haría nada malo. Me gustas mucho, Girl Stark- le dedicó una sonrisa tierna.

-Y tú a mí, Spidey- le devolvió la sonrisa.

-¿Entonces se lo ha tomado bien?

-Sí.

-Me alegro. Entonces puedo volver a hacerlo, pero en condiciones.

-¿Hacer qué?- frunció el ceño.

-Esto.

Peter acortó la distancia tomando a Aria de la cintura y atrayéndola hacia él. Unió sus labios con los de su chica y esta vez dejó la torpeza de lado. Se centró en el vaivén de sus labios al compás sintiendo toda la ternura del beso.

-Separaros- la voz de Happy hizo que ambos se apartaran abruptamente.- Debemos irnos.

Ambos asintieron con la cabeza. Peter entró al coche y Aria y Happy lo rodearon para entrar por el otro lado. Antes de hacerlo el adulto le dedicó una sonrisa a la chica, la cual le devolvió.

En cuanto llegaron al apartamento Aria y Peter se dirigieron a la habitación del chico y decidieron que también tenían que contárselo a tía May. Por eso cuando la mujer regresó de hacer unas tareas ambos se animaron a hablar.

-Tía May- la llamó Peter.

-¿Sí?

-Ven un momento.

May se dio la vuelta y observó a ambos chicos sentados en el sofá por lo que intuyó que era algo importante. La mujer se sentó en el sillón individual y los observó un tanto preocupada.

-¿Qué pasa? ¿Ha ocurrido algo malo?

-No, no, tranquila- se apresuró a decir Aria al ver el tono de preocupación de May.

-Uff, menos mal. ¿Entonces qué ocurre?- ambos chicos se miraron y después volvieron la vista a la mujer que tanto había cuidado de ellos.

-Estamos juntos- dijeron a la vez con un poco de timidez.

May abrió los ojos, sorprendida, y desvió la mirada de Peter a Aria repetidamente mientras asimilaba lo dicho. Después de unos segundos les sonrío a ambos.

-Ya estabais tardando- dijo al fin.

Ambos adolescentes se miraron confundido durante unos segundos y después volvieron a mirarla. May rio antes la expresión de ambos.

-Era muy obvio- se apresuró a decir antes de que le preguntaran.- Creo que erais los únicos que no os habías dado cuenta.

¿Tan evidente era? ¿Tan ciegos estábamos?- pensaron ambos aún sorprendidos antes las palabras que acababa de decir May.

-Iré a preparar la cena- dijo y se levantó para ir en dirección a la cocina.- Oh- se giró a verlos.- A partir de ahora si estáis en una misma habitación quiero la puerta abierta.

Ese comentario hizo que ambos se sonrojaran y apartaran la mirada a cualquier lugar que no fuera alguno de ellos. May se volvió a girar entre risas y se puso a cocinar.

——

Al día siguiente ambos chicos se comportaron como la pareja que eran. En el instituto varias personas los miraban asombrados y otros como si no se sorprendieran.

Flash miró mal a Peter durante todo el día y le dijo más de una vez a Aria que se estaba equivocado de chico, pero ella lo ignoraba o le contraatacaba.

A la vuelta del insti ambos iban con los auriculares puestos, pero aun así disfrutando de la compañía del otro. Al entrar al departamento cada uno se fue a su habitación.

Encima de la cama de Aria había una pequeña caja cuadrada con una nota pegada en la tapa. Se acercó hasta que pudo leerla claramente.

Tu proyecto con unos arreglos
-TS

Aria se quitó los auriculares y cerró la puerta para así abrirla sin ser descubierta. En la habitación de enfrente Peter abrió la puerta y se encontró con una bolsa de papel la cual también tenía algo escrito.

Esto te pertenece.
-TS

-¿May?- se quitó los auriculares y preguntó para asegurarse de sí su tía estaba en la estancia.

Al no recibir respuesta se adentró a la habitación y abrió la bolsa para encontrarse con el traje. El traje de Spider-Man que Tony le había quitado.

Se lo puso enseguida y caminó por su habitación con el hasta quedar de espaldas a la puerta. Gran error. Se quitó la máscara descubriendo su rostro. Lo que no sabía es que May se encontraba detrás de él.

-¡No me jod...!

└── ⋅⋅⋅⋅⋅ ─── ⋅⋅⋅⋅⋅ ─── ⋅⋅⋅⋅⋅ ──┘

FIN