Dedicado a take_aBREATH💜💜 espero que te guste*-*

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-¡DYLAN O'BRIEN!- grita Thomas poniéndose la mano en el pecho.

Dylan se ríe en el asiento del copiloto. Nada más Ava bajó del coche, Dylan se metió para asustar a Thomas.

Y lo hizo, porque el rubio estaba concentrado mirando por el espejo para ver si venía Dylan y cuando lo vio al lado se asustó. Sería la primera vez en un mes que no los viene a saludar nada más aparcan. Thomas empieza a pensar que se levanta antes para llegar antes que ellos. Así poder verlos antes de entrar a clase y poder asustarlo.

-¿Me buscabas a mí por el espejito mágico, Tommy?- le pregunta señalando el espejo de su puerta.

Thomas enrojece y coge su mochila.

-¿Para qué quería ver yo a un gilipollas como tú?- responde mordaz saliendo del coche y cerrándolo con el mando antes de que a Dylan le de tiempo a salir.

Dylan sigue riendo en el coche y Thomas sonríe a medio camino.

Se da la vuelta poniendo el semblante serio, abre el coche y Dylan sale disparado. Thomas lo cierra de nuevo y guarda las llaves en su estuche porque lleva una falda blanca corta que lleva no tiene bolsillos. Lleva con ella unos tacones pequeños negros y una camiseta negra también.

El castaño corre para alcanzarlo cuando ven a Ki con ambos Tylers sentados en un muro.

-¡DYLAN! DEJA DE LAMERLE EL CULO A THOMAS. ASÍ NO LO VAS A CONQUISTAR- le grita el asiático.

-QUE SABRÁS TU DE LIGAR, SHANK. SI NO FOLLAS NI PAGANDO- le grita riendo Dylan- ADEMÁS, SI LE LAMIESE EL CULO TE ASEGURO QUE NO ESTARÍAMOS AQUÍ, PRECISAMENTE.

Thomas rueda los ojos reprimiendo una sonrisa y saluda con la mano a los tres chicos y a las dos morenas que se acercan a ellos.

-¿Te he dicho alguna vez lo bien que te queda en negro y el blanco?- dice Dylan una vez está al lado de Thomas mirándolo de arriba a abajo con una sonrisa.

-Sí, Dylan. Y el rosa y el azul y gris y el rojo...- responde Thomas-... y los tacones y las sudaderas largas y el pelo mojado y el pelo seco.

Al final, la sonrisa de Thomas sale a la luz y Dylan casi da un salto.

-Bueno, no es mi culpa de que, por encima te queden bien las faldas y los vestidos, todos los colores vayan contigo- sonríe bobamente- y ni se te ocurra responderme sarcásticamente como que no te queda bien porque te pego.

Thomas lo mira y suelta una risita tonta. ¿Cómo me conoce tanto de solo un mes?

Siguen caminando hasta que Dylan se fija en la cara de horror que tiene Thomas. Está por preguntarle cuando pasan tres tíos altos como torres. Un rubio y dos castaños.

El rubio pasa con una sonrisa cínica y le da una agarrada a su culo. Thomas pone una mueca y antes de que Dylan pueda decirle nada, el siguiente trata de tocarle la entrepierna y el tercero le dice sin molestarse en susurrar.

-¿Qué pasa, putita? ¿No quieres venir a chupármela al baño?

Dylan abre los ojos horrorizado y se da la vuelta dispuesto a gritarle.

-EH, CABRONES, ATREVEROS A DE...- se calla cuando siente la mano de Thomas agarrar la suya entrelazando sus dedos.

Un escalofrío recorre a Dylan todo su cuerpo.

-Thomas, te acaban de decir... y te acaban de...

-Lo sé. Déjalo estar, Dyl- responde el rubio.

Dylan bufa enfadado y nota como Thomas tira de él hacia el baño.

Nada más cerrar la puerta, Dylan tira su mochila furioso. Thomas se apoya en la pared cerrando los ojos.

-¿Por qué no me has dejado decirles nada?- pregunta enfadado Dylan.

Thomas no contesta durante unos segundos.

-Porque me da igual. Estoy acostumbrado- se encoge de hombros.

-Muy bien, Thomas- dice irónico- A MÍ NO ME DA IGUAL. ESOS CABRONES TE HAN... TE HAN TOCADO Y TE HAN DICHO ALGO HORRIBLE. ¡DIOS! SE MERECEN QUE LES DE UNA PALIZA AHORA MISMO.

Thomas lo mira sorprendido porque no entiende el por qué de tanto alboroto.

-LES CORTARÍA CADA DEDO QUE TIENEN EN SUS ASQUEROSAS MANOS- grita yendo de un lado para otro del baño- Y LES CORTARÍA LA POLLA YA QUE ESTAMOS. SOLO POR DECIRTE NADA LOS CORTARÍA A TROCITOS, LOS QUEMARÍA Y PISARÍA SUS MALDITAS CENIZAS.

Thomas abre los ojos impresionado y se separa de la pared. Dios, pero si está a punto de perder el control...

-ES MÁS- sigue gritando Dylan- LES VOY A DAR UNA PALIZA AHORA MISMO Y SI SE CREEN QUE PUEDEN CONMIGO LLAMARÉ A HOECH, A WILL, A KI Y A TYLER. YA VERÁS COMO SE LES QUITAN LAS GANAS DE VOLVER A MIRARTE.

Está caminando hacia la salida cuando de nuevo el tacto de Thomas lo calma.

Thomas tira con cuidado de él hacia su cuerpo por el brazo. Dylan lo mira con la boca abierta sin ser capaz de decir nada.

Lo mira directamente a los ojos hasta apoyarse de nuevo en la pared. Sin despegar sus miradas, Dylan coloca sus manos en la cadera de Thomas y el rubio nota la entrepierna de Dylan en su cadera. A ambos se le hace la respiración pesada y Dylan suspira tratando de calmar los latidos frenéticos de su corazón.

-Dios... y no sabes cómo estoy deseando besarte- dice Dylan sin molestarse en susurrar. El corazón de Thomas acelera de tal manera que parece que se le va a salir del pecho.

Apoya su frente en la pared respirando en el oído de Thomas y mandándole descargas eléctricas a todo el cuerpo del rubio.

Thomas coloca su mano en la mejilla de Dylan acariciándola. Se quedan así unos minutos habiendo ignorando totalmente el toque de la campana que sonó mientras Dylan gritaba. Dylan separa su frente del frío azulejo y su rostro queda a centímetros del de Thomas.

El rubio sigue acariciando con cariño la mejilla de Dylan.

-Lo siento- musita el castaño apoyando ahora su frente en la del otro viéndolo cerrar los ojos y contener la respiración- sabes que no te estaba gritando a ti, pero estando los dos solos no debió de ser bonito escucharme.

Thomas abre los ojos y Dylan separa su frente de la suya, pero sin dejar de mirarlo y juntándose los centímetros que se separó al apartar su frente.

-Gracias- musita Thomas con los labios ligeramente entreabiertos sin dejar de mirar para Dylan.

Da una última caricia con sus dedos a la mejilla de Dylan provocando que el castaño los cierre por placer. Thomas pone ambos manos en el pecho de Dylan, pero Dylan las sube hasta sus hombros para que el rubio no note lo acelerado que le va el corazón.

Lo que no sabe es que el de Thomas está latiendo a la misma velocidad.

Al final, Thomas sube sus manos hasta la nuca acariciándola para cerrar los brazos alrededor de Dylan. Se junta con su cuerpo todo lo que puede con el del otro y se pone de puntillas para abrazarlo.

Dylan se queda sin respiración hasta que reacciona. Sus manos rodean la cinturita de Thomas abrazándolo fuerte. Después estas bajan a las piernas de Thomas para subirlo a su cadera. Thomas se deja hacer y Dylan lo lleva hasta los lavabos.

Una vez sentado en ellos, Thomas rodea con fuerza la cintura de Dylan con las piernas abrazando más fuerte al castaño y así se quedan más de media hora.

Cuando se separan, Thomas sonríe levemente y le ordena a Dylan el pelo.

-Hagamos una cosa- pide Dylan susurrando- al acabar las clases te llevaré al McDonald's. Comemos juntos y me cuentas por qué tu cara fue puro horror al verlos y de qué conoces a esos hijos de puta.

Se miran fijamente durante unos segundos y Thomas acaba asintiendo lentamente.

-Bien. Así me gusta- suspira Dylan abrazándolo de nuevo y dejando un beso en la cabeza de Thomas.

Cuando se separan, Thomas coge su mochila y se va del baño sonriéndole levemente a Dylan.

Dylan se mete en uno de los cubículos a tranquilizarse un poco antes de volver a clase.