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-Siéntate, Ty- dice Thomas trayendo dos tazas de chocolate para su amigo que está danzando por todo el salón.
-Gra... gracias, Tom- tartamudea un poco el moreno.
Dylan se sienta a su lado y cuando abraza a Tyler nota lo frío que está.
-¡Joder, Tyler! ¿Cuánto llevas esperándonos fuera?- dice poniéndole una manta encima rápidamente- sube arriba a por un pijama mío de invierno, Tommy, por favor. Y unas zapatillas mías, que abriguen.
El rubio asiente dejando las tazas de chocolate en la mesa.
-No sé. Ni siquiera he mirado el móvil, lo apagué y...- mira por la ventana y se arropa con la manta- sé que era de día cuando me senté a llorar en el porche.
-Dios, Ty...- suspira Dylan abrazándolo- debiste de esperar muchas horas por nosotros.
-No... no he sido capaz de ir a casa de Ki. Ni de ningún otro.
-Tranquilo, tranquilo- lo acuna Dylan besando su frente.
Al bajar Thomas con el pijama, se sienta en la mesa para mirar a Tyler. Dylan le quita los zapatos y los calcetines, después quita su pantalón vaquero y le pide con cuidado a Tyler que se levante.
Este se deja vestir y cuando tiene en pantalón calentito, Dylan le coloca las zapatillas y pone la manta en sus piernas. Le quita la chaqueta y al camiseta para después colocarle la del pijama. Lo frota un poco y quita la manta de sus piernas para que se sienta recogiendo las piernas al pecho y lo cubre bien con la manta.
-Eso es, hermano. Ya estás, ¿ves? Calentito, ¿te sientes mejor?- pregunta Dylan preocupado.
Tyler sorbe por la nariz y niega con la cabeza.
-Esto no se arregla con mimos, Dyl. Ni siendo un buen hermano- contesta el de tatuajes.
Thomas compone una mueca en su rostro y le alcanza la taza de chocolate.
-Verás como el chocolate te ayuda a mejorar un poco- le sonríe y Tyler lo acepta con un amago de sonrisa.
Se protege dentro de la manta y comienza a tomar el chocolate.
-Voy a por mi taza- le da la otra que trajo a Dylan y este le sonríe en agradecimiento.
-Muy bien, ¿qué es eso de que Daniel te ha besado?- pregunta calmado.
Tyler bebe más chocolate y suspira dejando la taza en la mesa para arroparse más.
-Tengo que admitir que lo de estar así ayuda. Me siento más protegido- dice Tyler y Dylan le acaricia la pierna.
Coge aire antes de continuar para no echarse a llorar.
-Hoy Ki tenía que hacer unos recados con sus padres. Hoech y Will habían quedado a solas. Supongo que para follar como conejos o así. Las niñas ya nos dijeron que hoy iban a ir de compras y sabes lo mucho que odio ir con ellas solo a comprar- comienza Tyler y Dylan da una risita.
-Sí, sobre todo Holland. Ya sabes... diva se nace, no se hace.
Tyler asiente y prosigue.
-Sabía que vosotros teníais médico y cómo no estaba seguro si era por el bebé o por tu pierna- señala la pierna ya sin el yeso- pues pensé que iríais a hablar con tu padre y vuestras hermanas.
-Pues no fuimos, la verdad- interviene Thomas sentándose en la mesa de nuevo con la bata puesta y bebiendo de su chocolate- ni nos acordamos de ellos.
-Pues podría haberme ido con vosotros...- comenta Tyler con una mueca- el caso es que llamé a Daniel. No quería quedarme en casa y todo estaba bien, ya nos hemos acostumbrado a volver a verlo a menudo y a ser sus amigos. No habría problema ninguno.
-Es lo que nos esperábamos la verdad- interrumpe Dylan.
-¡Lo sé! Yo también... Decidimos ir al cine y merendar en el McDonald's- Tyler coge su taza ara tenerla entre las manos y así poder jugar con algo mientras hablar- estábamos sentado en la terraza del centro comercial cuando... No sé, estábamos muy bien. Muy agusto y... medio abrazados porque yo qué sé. Estoy con Ki y no quiero estar con nadie más. Llevamos varios meses siendo amigos de Daniel y no me esperaba nada de lo que pasó- suspira frustrado- de repente me giró la cara, me miró a los ojos y me besó. Yo estaba tan en shock que solo cuando quería... meter su lengua me separé porque no me lo creía y... y me aparté de él. Me levanté todavía en shock y caminé un poco antes de que Daniel me parase.
-Ty, lo siento- pide Daniel colocándose delante- no quería... no quiero que le seas infiel a Ki, solo...
-Mejor no digas nada, Daniel. No quiero saber nada.
-Me fui y llegué hasta aquí para esperaros. Dios, le he sido infiel a Ki. Joder, joder, joder- solloza y Dylan y Thomas se miran.
-Ty, en cuanto te diste cuenta te apartaste. Es decir, si es una infidelidad, pero no fue repetidas veces ni por gusto. ¿Quien no puede perdonar algo que hiciste sin querer?- pregunta Thomas.
-No sé, Tom. Es difícil..- comenta Dylan- yo no me enfadaría contigo si te pasa con alguien, pero tus labios estuvieron con los de otros y... No podía con ese pensamiento, querría ir a cortarle los cojones al que te besó.
-No dejaré que toque a Daniel. Actuó mal, pero no creo que quisiese hacerlo para hacernos daño. Los recuerdos con una persona que te gustó mucho suelen ser muy fuertes, es imposible a veces no dejarte guiar por los sentimientos pasados y... Creo que Daniel debería explicarse antes de recibir ninguna paliza.
-Me siento infiel porque me gustó- conteste Tyler llorando- me gustó porque Daniel es genial y... Solo fue un pico. No me gusta Daniel, no estoy enamorado de él, no lo quiero. Pero después analizándolo sí que me gustó. No sé, es como... ¿una mini despedida que no pudimos tener? No es que haya tensión, pero... Joder, no sé. Amo a Ki, quiero estar con él toda la vida- solloza secándose los mocos con la manta.
-Escúchame, tú tienes que hablar con Ki- dice Dylan y Tyler empalidece.
-¿Qué? No, no, no, no. Me va a dejar, ¿qué hago yo viviendo sin Ki? Me va a dejar por infiel y por estúpido. Él lo vio venir, él sabía que lo de Daniel no había quedado bien como para que no hubiese tentaciones y...
-Tyler, ¿tú a quién quieres?- pregunta Thomas duro.
-A Ki- contesta el moreno.
-Pues ya está. No necesitas pensar en nada más.
-Pero... pero, ¿qué pasa si ahora empiezo a dudar con Daniel y eso me hace dudar con Ki?
-Por muchos picos que venga a darme Juan yo no voy a dejar de amar a Thomas- comenta Dylan.
-No es lo mismo. Vosotros tuvisteis algo serio y lo terminasteis. Él te hizo daño, no...
-Daniel también te hizo daño, aunque parte fue un malentendido. Si no fuera por Thomas si ni siquiera habríamos sido sus amigos de nuevo. Ten fe en lo mucho que quieres a Ki. Y en lo mucho que te quiere él a ti.
Tyler asiente lentamente y termina su chocolate.
-Vamos, hoy te quedas a dormir. Podemos poner algo en Netflix- comenta Dylan con una pequeña sonrisa.
(...)
-LLEGAMOS TARDEEEEE. COMO SIEMPREEEEE- grita Dylan desde la puerta de la entrada jugueteando con su móvil.
-Tu novio está más insufrible desde que le quitaron el yeso- protesta Tyler desde el colchón del suelo.
Está tirando en el colchón aunque ya vestido y desayunado, esperando a que Thomas termine de preparar su ropa.
-Y mucho más rápido de lo que a mí me gustaría. Disfrutaba más de cuidarlo que de que me cuide.
Tyler sonríe mirándolo.
-Vosotros y vuestros rollos raros de proteger al otro.
Thomas se ríe y niega con la cabeza.
-Ya estoy, levántate- le dice dándole un ligero golpe.
Dylan, que estaba moviendo su pierna libremente disfrutando de no tener el yeso, detiene sus movimientos y coge rápidamente las muletas cuando escucha a Thomas terminar de bajar las escaleras.
El rubio le mira con el ceño fruncido.
-¿Que te dijo el médico de descansar y de las muletas?
Dylan rueda los ojos.
-Me gustaría odiarte- contesta Dylan abriendo la puerta.
-Puedes intentarlo- se ríe Tyler adelantando a sus dos amigos.
-O puedes controlarte por una semana para así hacer caso al doctor y no tener que odiarme- comenta Thomas pasando delante de su novio.
Este rueda los ojos de nuevo.
-¡DIOS MÍO!- grita emocionado-¡por fin voy a poder volver a conducir a mi bebé!
-De eso nada- frunce el ceño Thomas- vamos en mi coche y tú no conduces hasta que pase esta semana de reposo. Aún incluso cuando estés con los ejercicio de rehabilitación no deberías conducir, pero ahí supongo que es demasiado pedirte.
Dylan lo mira y grita obvio.
-¡SÍ!
Tyler se ríe dentro el coche de Thomas y los otros dos chicos se suben para ir hasta el hospital de Melissa.
-¿Están todos allí?- pregunta Thomas.
Tyler asiente nervioso. Como Ki quedó con él ayer en que no dormirían juntos no han podido verse y no han podido hablar nada. Daniel también va a ir así que...
Dylan lo mira por el espejo del coche y teme por su hermano. No necesita que se altere, casi se comportó como cuando su padre se fue de su casa.
Al llegar al hospital, Thomas baja primero para abrirle la puerta a Dylan y este coge las muletas saliendo ya casi sin apoyar la pierna mala. Alcanzan a la entrada donde están todos y Ki se acerca sonriendo a saludar a Tyler.
-Hola- lo abraza por la cintura y lo atrae a él dándole un beso- te he echado de menos.
-Yo también- suspira con el pulso a mil por hora y abrazándolo.
-¡Chicos!- sonríe Melissa- pasad, vuestras hermanas y Noah ya están en la sala que os he preparado. Disimulad, sabéis que no estoy autorizada para llevaros a esta parte.
Los demás asienten y siguen a la enfermera hasta el segundo piso. Entran a una sala después de cerrar la puerta y sientan a Thomas en una camilla.
-No sabéis lo incómodo que es hacer esto delante de todos- comenta Thomas
Los demás ríen y Melissa sonríe preparando el monitor.
-Es normal que queramos verte, Tom- dice, de pie al lado de Dylan, Noah.
-Sobre todo la barriga- sonríe Holland- estoy segura de que te ves precioso.
-Lo hace- sonríe Dylan acariciando su pelo.
Thomas enrojece y la da la camiseta a Dylan para bajarse la falda hasta que no molestase.
-Vamos a ver a Sam- susurra Dylan emocionado, pero todo lo oyen.
-¿Vais a llamar Sam al bebé?- pregunta Kaya casi llorando.
-Sí. Es un nombre neutro y nos gusta a los dos- sonríe Thomas.
-A mí ya me lo dijeron ayer- sonríe Tyler orgulloso- dale, mamá. Quiero ver a mi ahijado.
-Ya voy, ya voy. Yo también quiero ver a mi nieto- esparce el líquido por la barriga de Thomas y enciende el monitor.
Hoech, Will y Daniel giran la cabeza junto a Holland para tratar de ver dónde está Sam. Melissa lo señala en la pantalla.
-Ahí está Sam- sonríe emocionada y pasa el ecógrafo por la barriga de Thomas.
-Es... extraño- termina por decir Hoechlin.
-Y bonito- añade Will.
Dylan besa la mano de Thomas con amor y se apoya al lado del hombro del rubio para mirar a su bebé.
-Es nuestro bebé, nuestra pequeña, nuestro protegido, nuestra...
Thomas se ríe en bajito y calla las palabras de Dylan con un beso.
-Ojalá mamá pudiese ver esto- suspira y se apoya ligeramente en Dylan.
-Lo verá- sonríe Julia abrazando a Ava mientras graba todo.
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