Habían pasado dos semanas y ya estaba tranquilo, esa tarde solo vería una película y se iría a dormir, estaba cansado.

Reaper se quedó sentado en el sofá cuando Geno lo hizo, allí ambos se vieron unos segundos antes que el pelinegro hablase.

— ¿Te parece si pasado mañana viene Brid?

— Claro, no es que me importe.

Vio cómo se pasó la mano por la nuca, parecía querer decir algo más, se notaba tenso.

— Geno...

— ¿Hmm-hm?

— Err... Sé que no quieres hablar de este tema, pero necesito que escuches y aceptes lo que te pido. —Geno frunció el ceño, muy confundido a qué venía eso— Para Brid, tú y yo somos compañeros de piso, no estamos casados ni tenemos ningún lazo más allá de la amistad por lo que te pido es que mantengas esa fachada.

Al comprender lo que quería decir, abrió la boca con un "aaa" mudo, se encogió de hombros y desvió su mirada a la televisión. Siempre evitaba recordar que ambos estaban casados, tampoco es que mencionase mucho a Reaper en su vida laboral, por él muy bien que ese lazo no existiese, pero tampoco podía engañar a las personas.

Era un tema complicado, pero era la vida de Reaper, si quiere ser feliz de esa forma, por él bien.

— Bien. Tampoco creo hablar mucho con ella, me encerraré a la habitación una vez llegue del trabajo.

— Pero también quiero que la conozcas, es una buena chica, es fabulosa. Quédate.

— Qué bueno, pero no me interesa socializar. —Respondió aburrido— Pasa el rato con tu novia feliz.

— ¿Novia? —Se quedó mirando la nada y después rió sonrojándose— No hemos llegado a nada formal, pero ahh... sí que quisiera.

Geno se sintió incómodo, no quería escuchar más así que subió el volumen de la televisión, Reaper captó el mensaje.