El ambiente de Nueva York, ya acababa de ser alcanzado por completo por la clásica oscuridad de la noche, sin embargo las luces que rodeaban alrededor por los muchos rascacielos y locales que habían, eran mucho más que suficiente para que no hubiese un lugar de la ciudad que no estuviera iluminado.

Eso era lo bueno de estar en una ciudad como lo era la mítica Nueva York.

Hay muchos que, al ver el ambiente de la ciudad desde ciertos lugares, podrían decir con total seguridad de que estaban teniendo un gran privilegio con el hecho de poder y tener ante si una vista realmente esplendida ante sus propios ojos.

Pero otras personas, bueno... se puede decir que no tenían ese tipo de perspectiva, en especial sobre la vida en general.

Y es que, desde una azotes, el ambiente era visto por un hombre que, cuya apariencia era cubierta por la oscuridad de las sombras que había a su alrededor justo en este instante, pero se podía distinguir que en la mano tenia un habano que, por el humo que salia del mismo, estaba claro que ya estaba prendido.

Con la mirada puesta sobre la ciudad, el sujeto en cuestión suelta un suspiro y, de sus labios escapa un poco de humo en señal, de que ya acababa de probar el habano.

-Ah, es increíble el tipo de vistas que uno puede tener en ciudades como esta, y aun pensar que todo el mundo en general, puede seguir manteniendo la apariencia que dan en el exterior. -decía el hombre para si mismo con la mirada aun puesta sobre las calles de la ciudad, para luego entrecerrar ligeramente sus globos oculares. -La vida ha evolucionado mucho más de lo que las personas en si, eso cambia siempre las ruedas del destino, pero quizás esta vez... me de el gusto de poder hacer uso de ello a mi favor. -termino de decir para luego tirar el habano al piso y pisarlo hasta que se deshace.

Tras dejar salir un poco más de humo de su boca, el hombre saca un celular del interior del bolsillo de sui chaqueta, para luego empezar a revisarlo hasta que da un numero que tenia al parecer en marcado rápido, y poner el dispositivo contra su oreja para escuchar como responden al otro lado de la linea.

-Hola, se que quizás las cosas no acabaron bien entre nosotros la ultima vez que hablamos, pero te tengo una propuesta que se que te va a interesar. -decía el hombre con cortesía, pero luego el tono de su voz no tarda en tornarse más sombrío. -Encontré el modo en el que puedes remediar el error Warren, recuerda el ADN que le sacaste a la chica que el maldito de Sims había tenido escondida, puede que nos sirva de algo si esa mocosa esta por las calles, además de que la otra chica araña, también puede ser detenida... te daré tu tiempo para pensarlo, pero te llamare yo... adiós. -termino de decir para luego colgar la llamada.

Una vez que termina la llamada, el hombre solamente se limita a quedarse justo en donde se encuentra en aquel lugar, su mirada todavía daba hacia el exterior a través de la ventana, y no puede evitar que se comenzara a sobar el puente de la nariz con algo de pesadez.

-El plan tiene que funcionar, solo así se va a poder llevar a cabo mi reinado en esta ciudad... solo así voy a poder apuntar de nuevo a la grandeza... y lo haré como sea. -termino de decir el hombre a si mismo decidido mientras apretaba sus puños.

Algo grande se acercaba a Nueva York, una enorme batalla venia... y solo Dios sabrá como acabaría si el mal termina triunfando.

...

El sonido de una campana se escuchaba a lo largo y ancho de los pasillos de la preparatoria Midtown, significaba que las clases del día estaban por comenzar, y los alumnos ya comenzaban a ir a sus respectivos salones, algunos iban solos o en grupo mientras hablan entre si.

Gwen Stacy era del tipo que, en este momento iba sin compañía a su salón, al mismo tiempo una parte de ella se encontraba algo perdida dentro de sus pensamientos.

Tener que buscar el modo de mantener el balance de su vida como Ghost-Spider y de la vida como civil era algo que muchas veces se ha esmerado en tratar de mantener, en evitar que otros se den cuenta de la conexión ente ambas, en que ambas identidades le pertenecen a la misma persona.

Y es que, a lo largo de la noche cuando salio a patrullar, ha tenido que detener varios asaltos y ventas ilegales, eso era algo que se ha vuelto muy parte de su rutina al llevar puesta la mascara, y en el comienzo de la noche todo parecía que iba a ser una noche como todas las demás.

Pero al final, resulto ser más que solo eso, estaba segura de que así fue.

Se remonta a que, no mucho después de pasada la media noche, mientras patrullaba en un puerto ubicado en Manhattan, ahí encontró a un pequeño grupo de hombres que parecía estar levando a cabo un tipo de venta de armas de contrabando, y ella no tardo mucho en actuar para tratar de detenerlos.

Sin embargo, lo que más recordaba de eso es que, mientras se preparaba para atacar a algunos de los criminales por sorpresa, llego a escuchar a dos de ellos hablar de algo que, no pudo evitar que captara su atención totalmente.

...

-¿Es en serio lo que me estas diciendo? -pregunto uno de los tipos con curiosidad mientras terminaba de empacar un par de cajas.

-Si, ya si al final no lo crees es tu problema bobo, pero es lo que supe acerca del jefe. -dijo el otro sujeto a su lado mientras se sentaba encima de sus cajas.

-Vaya, pensé que la competencia iba a estar muerte desde la desaparición de Hammerhead, pero es claro que aun queda competencia. -dijo el tipo mientras hacia crujir su espalda.

-No lo dudo, pero ambos sabemos que el jefe no dará el brazo a torcer, el siempre tiene algo en la mente y un paso adelante del resto de la gente... nadie es rival para el Big Man. -dijo el tipo con seguridad y algo de arrogancia en su tono de voz.

Por otro lado, Ghost-Spider se quedo callada desde el lugar en el que se encontraba escondida, había escuchado lo que los dos sujetos estaban platicando, estaba claro que sea lo que sea que esto implicara, no era nada bueno.

-Bueno, ya abra tiempo para pensar en eso, ahora... mejor me esfuerzo  en dejar hecho polvo esta jornada de trabajo que tuvieron. -dijo Ghost-Spider a si misma para luego salir a la acción.

...

Y como recordaba Gwen, aquella noche termino con ella bajo la mascara, dando una buena cantidad de golpes y patadas a aquellos delincuentes.

Si bien tuvo que hace frente a las balas que tuvo que esquivar tanto como le fue posible, pero fuera de eso no fue nada malo, realmente hizo buen trabajo aunque lo dijera ella misma.

Pero aun así, lo que aquellos dos sujetos estaban comentando, es que ahora mismo eso justamente le pasaba por la cabeza a mil por hora.

Para ella no era precisamente ajeno el tema del bajo mundo, porque en el tiempo que ella usa la mascara de Ghost-Spider, le ha tocado hacer frente al tema de venta de armas o sustancias ilegales, y la verdad es que en más de una ocasión le ha tocado darse cuenta de que hay alguien que mueve los hilos.

Que alguien opera todo desde lo más profundo de la ciudad, desde las sombras mezcladas en la oscuridad.

Además, en más de una ocasión, le ha tocado escuchar a su padre en secreto hablar con otros miembros del departamento de policía acerca de operaciones relacionadas a ello.

Es increíble lo que ocurre a simple vista, lo que para unos pocos es un tema muy de hablar, pero como es que para la mayoría es algo que parece ajeno a lo que ocurre, sin duda los hilos que se mueven en la oscuridad han de ser movidos por alguien muy hábil, y aunque sabía como los criminales se referían a ellos, era un tipo de máscara, una que cubría el verdadero nombre de esa persona.

-Y pensar que en serio ya tengo mucho enfrente de mi. -se decía Gwen a si misma mientras se sobaba el puente de su nariz con algo de fastidio.

-Je, se nota mucho con solo verte Stacy. -se escucho una voz femenina hablando con un toque burlón.

Eso ultimo sobresalto a la joven rubia, y no tardo en ver que, quien le acababa de hablar era una chica de su misma edad, tenia rasgos de ascendencia latina y sus ojos son de color café y cabello castaño, mide 1.55 de estatura y viste una blusa negra de botones con jeans claros y zapatillas informales blancas con las suelas negras.

Pero además de ella, estaba una chica pelirroja con los ojos azules, mide 1.59 de estatura y viste una camiseta amarilla con estampado de una gran estrella verde en el frente, con pantalones informales de color verde con una rasgadura en la rodilla derecha, además de unas zapatillas negras con las suelas blancas.

-También es un gusto verte hoy Anya, lo mismo para ti MJ. -dijo Gwen primero dirigiéndose a la castaña y luego a la pelirroja.

Anya Corazón y Mary Jane Watson, ambas eran muy amigas de Gwen desde hace tiempo, con Anya siempre estudiaban juntas, a ambas siemrpe se les da por reunirse de vez en cuando al cine; en el caso de Mary Jane, a quien ella conoce como MJ de cariño, ambas eran parte de una banda conocida como "las Mary Jane's", siempre que podían ensayaban en el garaje de la casa de Gwen, era divertido.

-Te vimos algo pensativa, ¿todo bien? -pregunto MJ al ver a la rubia a los ojos.

-Tranquila roja, todo bien, solo que estaba pensando en que hacer con lo de las tareas y los ensayos de la banda, ya saben a veces puede ser demasiado. -dijo Gwen mientras se pasaba una mano por el cabello con algo de pereza.

-Ni me lo digas, si llega a ser algo complicado tener el balance entre ambas cosas, pero siemrpe hay que saber cuando en algunas cosas hay que decir basta, por algo acordamos el darnos un tiempo de los ensayos, pero tarde o temprano lo retomaremos. -dijo Mary Jane con lo ultimo con clara emoción.

-Además, todavía falta para la película que acordamos de ver, por ahora lo que mejor podemos hacer es centrarnos en los próximos exámenes que vienen en unos días, hay que ponernos las baterías en eso. -dijo Anya decidida en sus palabras.

Con escuchar lo que sus amigas hablaban, Gwen no pudo evitar encontrar algo de gracia, pero su expresión se torno seria nuevamente al recordar bien lo que la tenia metida en sus pensamientos.

-Lastima que no pueda decirles la verdad chicas, pero no puedo arriesgarlas, a ninguna de ustedes, además con lo que escuche se que hay más de un pez gordo en esto, y los voy a enfrentar no solo por la ciudad, si no también por mi padre... por ustedes... por todos. -pensó Gwen determinada con lo que se proponía.

...

Y Fin.

Bueno, hasta aquí llega el capitulo, espero les guste.

Siendo honesto, es increíble profundizar de toros peajeros de comics, vaya que se puede ser realmente variado, a ver que dirección es la que se forma y a donde conllevara.

Además les aviso, que aquí aparecen Anya Corazón y Mary Jane Watson, interpretadas por Jenna Ortega y Sadie Sink, respectivamente.

Y es todo por hoy, los invito a que dejen sus votos si les gusta el capitulo, además de que también los invito a que escriban sus opiniones sobre el capitulo abajo en los comentarios, nos vemos, que lo disfruten.

Buenas noches.