El día tan especial para las gemelas llegó, hicieron una gran fiesta, en la cual todos la disfrutaron, Louis y Harry estaban abrazados viéndolas reír.

-Me hubiera gustado ser hermano mayor.- Murmuró.

-A veces es un poco tedioso... Aunque no niego que de niño fui feliz... Pero ahora ellas te quieren como un miembro más.-

-Sí, en serio tu familia me recibió bien...-

-¿Quién no lo haría? Eres el ser más hermoso y carismático de la tierra.-

-Lo dices porque me amas.-

-Claro que te amo, pero es cierto amor.-

-Esta bien.- Lo abrazó fuerte.

La fiesta transcurrió de lo más feliz, todos los invitados sorprendidos al ver a Louis con un chico tan hermoso, todos dijeron eso, lo que ocasionó que Louis hiciera una mueca de celos.

Al terminar todo, ordenaron, limpiaron, cuando terminaron cada quien se fue a su habitación a descansar.

Harry y Louis estaban terminando sus maletas.

-¿Listo?- Asintió.

-Sí cariño, vamos, mañana regresamos al trabajo.-

Salieron de la habitación, Harry se fue a despedir de las hermanas de Louis, mientras que el mayor fue a dejar las maletas en el auto.

Al regresar al interior de la casa, ya tenía a sus hermanas abrazando a Harry y llorando para que no se fuera.

-Vendré el próximo fin de semana, lo prometo.-

-Más te vale.-

Asintió separándose del abrazo, cuando menos lo espero, corrieron a abrazar a Louis, el mayor correspondió el abrazo.

Jay estaba abrazando a Harry.

-Volveré el próximo fin de semana, volveremos.- Sonrió.

-Aún no se van y ya los extrañamos.-

-Vamos, solo será una semana.-

-Con cuidado.- Asintió.

Después de despedirse salieron, subieron al auto y de camino hacia Londres.