Estaban controlando su respiración, ambos tenían una sonrisa en sus rostros, estaban acostados en la cama, sus cuerpos cubiertos con sábanas.

-Te amo tanto.- Murmuró elevado su mirada hacia Louis.

-Yo te amo mucho más mi amor, en serio eres lo mejor que me ha pasado en mi vida.- Lo abrazó, escondió su rostro en el cuello del menor.

-Tú eres lo mejor en mi vida, amor.- Acarició su espalda.

Se quedaron abrazados, al paso de los minutos tomaron un baño ente risas y besos robados.

Al salir del baño, se vistieron cómodamente, arreglaron la habitación y salieron de ella, bajaron a la cocina, en donde Jay estaba preparando el desayuno.

Saludó a ambos chicos con un beso en su mejilla.

-¿A qué hora regresaron?-

-Sinceramente no tengo idea mamá.-

-¿Y tus hermanas?-

-Dormidas, nos regresamos juntos.- Asintió.

-Esta bien, tu tía nos invitó a la cena...-

-Nos iremos antes de la cena mamá.-

-¿Aún se irán?-

-Sí, Harry tiene que ir a la universidad mañana.-

-Esta bien, entonces disfrutemos del día.- Asintieron.

En algunos minutos las hermanas de Louis bajaron al comedor, todos se dispusieron a desayunar en un ambiente agradable.

-¿Podemos enseñarle el pueblo?-

-Pero iremos todos juntos, quiero aprovechar el tiempo con mi yerno.- Sonrió.

-Esta bien mamá.-

-¿A donde iremos primero?-

La conversación se vio interrumpida por una llamada.

-Perdón, tengo que contestar.- Asintieron.

Harry se colocó de pie y caminó hacia la sala.