11. Sale con la fuerza del alma

6:30 de la mañana.

Me levanté especialmente temprano el día de hoy, era miércoles y me sentía bastante preocupado, anoche mientras dormía sentí a Kirino temblar y llorar, no estoy seguro de que le habrá pasado, pero tengo el presentimiento de que es grave.

Lo desperté y se levantó sin ánimos realmente, pero estaba convencido de que se repondría de alguna manera.

No tuve el valor de preguntarle de nuevo si asistiría al partido de hoy, en otras circunstancias probablemente lo habría molestado hasta que aceptara, pero tengo el presentimiento de que no es lo indicado...

El se fue a bañar, y mientras tanto yo bajé a tomar desayuno. Curiosamente no estaban ni el tío Suzuno ni el tío Nagumo, le pregunté a papá y me comentó que ellos habían salido temprano para comenzar a mudarse a la casa de Kirino, pero que probablemente no terminarían hoy, lo que significaría que Kirino se quedaría a dormir una ultima noche el día de hoy.

Una ultima noche sonaba como algo agradable, probablemente mamá y papá inventen algo lindo para darle la despedida a Kirino, aunque lo volveré a ver más temprano que tarde.

Y hablando del rey de Roma, acababa de salir el pelirrosa del baño, ya vestido con el uniforme de la escuela se sentó a mi lado y desayuno conmigo.

-Al final si iré al partido hoy-

Dijo de manera seca mientras se armaba un pan con queso.

-¿De verdad?-

-Si, ayer lo pensé bastante y tomé la decisión de ir a jugar-

No sabia si dudar de sus palabras, o sentirme feliz de tenerlo a mi lado en el partido de hoy, puede que sea una señal de que las cosas van mejor.

-¿Estas seguro? Si no te sientes bien no deberías forzarte a jugar-

-Anoche me dí cuenta de que ya había perdido mucho tiempo en lamentarme, por más que me duela lo sucedido, se que probablemente lo que mi madre quiera es que continúe mi camino pensando en ella como una guía, en lugar de que sea el motivo por el que no quiera seguir con el...-

No estoy seguro de que bicho le habrá picado, pero si lo que dice es en serio, puede que haya sido lo mejor que haya escuchado en un buen rato.

-Eso está bien, créeme que me alegro de oír eso, pero...-

-¿Pero?-

-Eso significa que puedo gastarte bromas sin sentirme mal por ello-

El río levemente.

-Si, puede ser, siempre que estés dispuesto a recibir lo que das-

-Quiero verte intentándolo afeminado-

-Oye enano-

-Dime-

-Al final nunca me contaste que onda contigo, tu pasado y todas esas cosas...-

Kirino tenía toda la razón, nunca le conté eso, pero el tampoco me contó el porque llevaba su cabello tomado en 2 coletas bajas.

-Dices que hoy te quedarás a dormir por ultima vez ¿No?-

-Si, ¿pero eso que tiene que ver?-

-Pues esta noche te lo contaré, pero con la condición de que tu me cuentes porque llevas esas ridículas coletas-

Puso su mano en mi cabeza y me despeinó con fuerza mientras sonreía.

-Acepto enano castroso-

Esa conversación estaba siendo bastante agradable, pero desgraciadamente el tiempo nos jugaba en contra, por lo que tuvimos que partir rumbo al colegio...

2:30 de la tarde

Estaba bastante cansado, no me gustan las clases y mucho menos tener que convivir con los alumnos de mi salón, la mayoría son bastante ruidosos y estén todo el día hablando, aunque por supuesto siempre pongo mi "mejor" faceta, para intentar pasar desapercibido.

Habíamos salido de la escuela junto con Kirino, observando lo que siempre ocurría a la salida de nuestra jornada, muchos chicos salían solo para reunirse en una paliza cercana y compartir mientras fumaban, bebían o se metían algo al cuerpo, algunos lo hacen por moda, otros para escapar de la realidad en la que viven, y otros simplemente porque les parece divertido.

Es el resultado de lo que hacen la clase de personas como Tsurugi, vendiéndo a tus congéneres y tomando ventaja de su débil mente.

En algún momento he tenido la oportunidad de consumir esas cosas, sobre todo cuando estaba en el orfanato, y no es que me agradara demasiado, pero a muchos de mis compañeros en aquel tiempo les fascinaba y los tenía locos.

El pelirrosa y yo simplemente tomamos rumbo a mi casa, la verdad es que el camino no era especialmente corto, aproximadamente unas 10 cuadras de la escuela a la casa, aunque tengo el presentimiento de que algo malo va a suceder.

No porque sea vidente, sino porque escucho pasos, están corriendo, vienen de un callejón, me paro en seco y comienzo a intentar escuchar que se supone que es...

Inmediatamente Kirino me empuja con su mano hacia adelante.

-Camina, solo camina-

Me dice, mientras camina a mi lado con la vista al frente. Simplemente le hago caso y camino, aunque siento sus nervios de todas maneras.

Suena un disparo, no, suenan dos, tres, el estruendo proviene desde nuestras espaldas.

-Corre-

Corrimos como si no hubiera un mañana hasta llegar al final de la calle en la que teníamos que doblar, una vez ahí miramos hacia atrás esperando que no hubiera nada.

Hasta que comenzamos a escuchar gritos, insultos y más disparos.

Mi corazón latía con ferocidad, guardamos silencio y seguimos caminando hasta llegar a la casa, pero con un nerviosismo que no se nos quito hasta que pudimos cerrar la puerta y entrar finalmente.

5:45 de la tarde

Mamá y Papá aún no volvían del trabajo, pero sabían que iríamos al partido, puesto a que se lo había contado antes de que ellos se fueran a trabajar.

-Hey Kariya, mira-

Dijo Kirino, mostrándome la pantalla de su celular, era una conversación entre el y el Tío Suzuno, mostraba una foto selfie, aparentemente tomada por Nagumo, de ambos ya instalando todas las cosas para mudarse a la casa, y deseándole mucha suerte a Kirino y a mi en el partido.

Al terminar de ver, fijé mi vista en la cara de mi amigo, la cual mostraba una tranquila sonrisa, sonrisa la cual me hizo bastante feliz al verla.

-Oye, será mejor que vayamos saliendo, el partido es a las 6-

Dije mirando el reloj.

-Tienes razón, vamos-

Fuimos a ponernos la ropa con la que jugábamos y a preparar la mochila por si ocurría algo y nuevamente salimos de la casa.

-Espero que Kazemaru esté allá para ver el partido-

Dijo Kirino mientras caminabamos.

-¿Quien?-

Pregunté, no tenía idea a quien se refería el pelirrosa.

-El tipo de pelo azul que vino anoche junto con los demás, el que te dije que habló conmigo-

-Aaah, ya lo recuerdo, ojala que si-

Seguimos caminando hasta llegar rápidamente a la cancha en la que siempre se realizaban los partidos, estaba como siempre, y como de costumbre, Kurama, Amagi y ese portero que nunca hablaba, nos esperaban, ya listos y preparados para jugar el partido.

-Por cierto ¿Que resultado hay que tener el partido de hoy?-

Preguntó Kirino, al llegar junto con nuestros compañeros, a 5 minutos de comenzar la contienda.

-Se supone que perderemos 3 a 2-

Dijo Kurama.

El partido de hoy era peculiar, no solo teníamos que perder, sino que también perderíamos contra el equipo de Tsurugi, el cual hoy debutaba con un miembro nuevo, un chico de cabello castaño, Tenma creo que era su nombre.

-Hey Kariya, mira, ahí están-

Dijo el pelirrosa, apuntándome a unas gradas que se encontraban fuera del enrejado, ahí se encontraba aquel adulto de cabello azul, mirando hacia la cancha tranquilamente, al notar a Kirino, este saludo amablemente en nuestra dirección, a lo que el pelirrosa correspondió felizmente.

Yo también lo saludé, pero noté que a su lado estaba sentado otro adulto de una edad similar, era blanco, tenia el cabello largo y castaño, ojos filosos de un color verde oscuro y una sonrisa agresiva, parecían ser amigos.

Todos calentamos y nos preparamos para el partido, el cual ya estaba a punto de comenzar.

La formación sería la misma de la ultima vez, Kurama y Kirino adelante, Amagi y yo en la defensa. Había sido una formación solida en la ultima oportunidad, por lo que confío en Kirino para que los resultados sean similares.

El partido comenzó con un ritmo lento pero seguro, el equipo de Tsurugi tomo la delantera rápidamente, siendo constante e intimidando con su poderoso ritmo a todo nuestro quinteto.

No tardó mucho cuando, entre ese chico nuevo y Tsurugi, lograron evadir nuestra defensa y anotar un gol, las cosas se ponían complicadas desde ese momento.

El desenlace estaba pactado de todas maneras, pero parte de este espectáculo es que los resultados parezcan reales, y para que se cumpla ese cometido debemos esforzarnos.

Kurama se armó de valor y consiguió evadir a los defensas para empatar el marcador rápidamente.

Y el partido siguió de esa manera hasta terminar le primer tiempo, por lo visto el resultado se definiría con el segundo.

Dicho y hecho, el segundo tiempo comenzó con el equipo de Tsurugi más agresivo que nunca, lograron sacar una falta provocada por Amagi, y anotaron un gol de penal.

Tras comenzar nuevamente, nos quitaron de forma veloz el balón, sentenciando el partido a un 3 a 1.

Y de esa manera el partido continuo, no podíamos dominar de ninguna manera, hasta que el defensa de su equipo se lanzó fuertemente contra Kirino, eso me hizo enojar, se notó que intentaba lastimarlo con esa barrida, corrí rápidamente a empujarlo y comenzó una pelea entre ambos equipos, las barras estaban eufóricas e hicieron más ruido que nunca.

Afortunadamente logramos sacar una falta, proporcionándonos un tiro libre el cual sería definido por Kirino.

Como si de un acto divino se tratara, el de cabellos rosados consiguió marcar el gol, dejando el marcador con un resultado de 3 a 2, perdiendo de todas maneras, pero llevándose un tiro libre a su historial.

Terminó el partido y entre los jugadores nos despedimos, para posteriormente salir de la cancha bastante cansados.

-Veo que te decidiste por venir a jugar-

Dijo aquel hombre de cabellos azulados, acercándose a nosotros junto con su amigo.

-Ese fue un buen tiro libre-

Comento el antes mencionado.

-Muchas gracias, aunque siento que tuve bastante suerte-

Respondió Kirino.

-Y tu Masaki, eres un excelente defensor, lastima que ese chico, el que anotó el primer gol haya sido tan hábil-

-Gracias señor...-

Recordé que no tenía idea de como se llamaba.

-Ah, disculpa, creo que nunca nos presentamos formalmente, mi nombre es Ichirouta Kazemaru, y el es Akio Fudou-

-Es un gusto-

Dije poniendo mi faceta más agradable, aunque sinceramente me daba igual quien fueran o que hicieran, pero de todas maneras intentaba no ser mal educado, menos considerando que son amigos de mis padres.

-Bueno, nosotros tenemos que irnos, hay asuntos que no se atenderán solos, nos vemos en otra ocasión-

Fue Fudou el encargado de sentenciar la conversación, ambos se despidieron y se fueron. Nosotros hicimos lo mismo, yendo nuevamente a casa después de todo.

8:20 de la noche

Apenas habíamos llegado a la casa y vimos a mis padres afuera de la misma junto a mi tío Suzuno y mi tío Nagumo, habían patrullas de policías afuera y parecían estar discutiendo con ellos. No solo era eso, habían bastantes vecinos al rededor y tenia el presentimiento de que se estaban llevando detenidas a algunas personas.

Nos acercamos a ellos y antes de poder decir nada un policía tomó a Kirino y lo apoyó boca abajo en el capó de la patrulla y comenzó a tocarlo por todo el cuerpo.

Yo iba a echarme encima del policía para que lo soltara, pero otro inmediatamente me tomó a mi e hizo lo mismo que con Kirino.

-¡¿Donde guardas las piedras pendejo?!-

Gritó el infame uniformado.

-¿Qué? ¡Oye no todo el mundo vende droga!-

Respondió Kirino, quien inmediatamente recibió el golpe de una luma en su espalda mientras intentaban esposarlo.

El policía que me estaba deteniendo me hizo lo mismo a mi.

-¡Masaki! ¡Hijo!-

Gritó asustada mi madre.

-¡Hey! Ustedes métanse o les prometo que arruinaré su noche-

Le advirtió otro policía a mi madre, la cual estaba bastante asustada.

-¡Viejo de mierda! No le hables así a mi madre-

Grité mientras forcejeaba con el policía.

-¡Esta es nuestra casa, podemos seguir aquí! ¿Entiendes?-

-Esto es abuso de autoridad, esos chicos no han hecho nada-

Mi padre y Nagumo fueron quienes hicieron acto de presencia esta vez.

-¡Chicos! ¡Estamos aquí!-

Ahora fue el Tío Suzuno quien llamó nuestra atención, intentando calmar la situación e ignorando la disputa con los uniformados.

-¡Esta lamina me está quemando!-

Se escuchó otro grito a lo lejos, y era cierto, el capó del vehículo estaba caliente y me estaba quemando la cara.

Los policías nos soltaron luego de un rato al no encontrar nada de lo que estaban buscando y nos dejaron libres.

Mi mamá estaba muy asustada, por lo que apenas estaba libre corrió a abrazarme.

Luego de unos minutos, Suzuno y Nagumo se despidieron de nosotros y le dijeron a Kirino que lo esperarían en casa mañana. Nosotros simplemente entramos a la casa, a relajarnos por fin después de un día con muchos altos y bajos.

12:00 de la noche

Después de haber pasado por tantas cosas, mis padres habían preparado una rica torta de fresa, para conmemorar la vuelta de Kirino a su hogar junto con Suzuno y Nagumo.

Fue una buena cena y Kirino se encontraba realmente feliz, estoy seguro de que se sentía a gusto con toda la situación y eso me alegraba, después de toda la mierda que tuvo que pasar, finalmente fue capaz de mostrar sonrisas sinceras, y normal, mis padres son geniales, son amables y muy divertidos.

Ahora es media noche y yo estaba en mi habitación esperando a Kirino, quien se acababa de ir a bañar, es momento de que me cuente que onda con su cabello y el porque siempre se tapa todo el cuerpo.

Pasaron los minutos y el susodicho había vuelto con una toalla rodeandole la cintura, y aún con sus coletas armadas en su cabello. Intenté fijarme lo más que pude en su torso, bastante marcado por sus leves músculos, pero lo que más resaltaba eran las marcas que este poseía, parecían ser cicatrices y moretones antiguos, heridas ya cicatrizadas en sus brazos y espalda.

Entró a la habitación y buscó unos pantalones para dormir, no lo culpo si no se pone algo arriba, hace mucho calor de todos modos. Únicamente vestido con unos pantalones se sentó a mi lado en la cama.

-Nunca me has visto sin mis coletas ¿Cierto?-

Yo negué con la cabeza.

-Bien...-

Acto seguido, mi compañero procedió a despojar de las ligas su cabello, soltándolo por completo y dejándome ver su naturalidad. Estábamos solos en mi habitación con la luz apagada, el único brillo que entraba provenía de la luz callejera, la cual iluminaba su presencia y me hacía sentir afortunado de presenciar aquel acto.

La luz de la luna iluminaba sus ya de por si bellos ojos azules, dichos, me miraban con tranquilidad mientras era testigo de lo que su cara representaba, en la misma también habían cicatrices, y sus ojos eran rodeados de unas estremecedoras ojeras, culpa de la falta de sueño de la que Kirino estaba preso.

-Masaki... Desde que soy niño que he tenido problemas por mi apariencia, ya sea mi cabello rosa, mis ojos azules o lo afeminado que aveces parezco, sufrí mucho por eso, muchísimo, mi cuerpo es testigo y prueba de lo que te digo. Sin embargo, había alguien que sufría bastante más que yo, y esa era mi madre... Recuerdo bien un día que llegué a mi casa, herido como siempre, y mi madre después de verme entre lagrimas me llevó al baño, ahí recogió mi cabello y me hizo dos coletas argumentando que se me veían preciosas... Desde entonces que uso el pelo de esa manera, me recuerda a ella, y ahora mismo se que ella estará conmigo más que nunca...-

Woah, no tenía la menor idea de todo eso, y el saber todo eso sobre Kirino, después de lo que hemos vivido juntos...

-Yo... No sabía nada sobre eso... Vaya, es revelador cuanto menos-

-Jajaja, oye esto es bastante curioso-

Dijo mientras se recostaba en la cama.

-¿Qué cosa?-

-Considerar como comenzó nuestra relación, la primera interacción que tuve contigo fue pegarte una patada-

Ahora lo recuerdo, tiene toda la razón y ni siquiera lo había tomado en cuenta.

-Es verdad... No entiendo porque te picaste tanto, solo fue una entrada amistosa-

Dije con una picara sonrisa.

-Pues si no fuera por esa entrada amistosa, probablemente no habría tenido donde caerme muerto después de la muerte de mamá... Sin ti, sin Suzuno o Nagumo, sin tus padres, todos me han ayudado como no tienen idea-

-Hablando de eso... ¿Seguro que estás mejor con lo de tu madre?-

-No estoy seguro de eso... Puede que al llegar a mi casa me sienta aún peor que antes, o al volver de la escuela y ver que ella no llegará en la noche del trabajo, saber que no podré celebrar su cumpleaños ni otro día de la madre... Creo que mientras más lo pienso más me duele-

-Hey, arriba ese animo, la casa no estará vacía, tienes a tío Suzu y a tío Nagu-

-Si... Tienes razón, confío plenamente en ellos-

Guardé silencio por un rato mientras lo observaba detenidamente, su respiración se había calmado, y la mía también, no había tensión en el ambiente, solo tranquilidad y la esperanza de que el futuro nos depararía mejores cosas a ambos.

-Supongo que nos seguiremos juntando después de esto...-

Dije con un dejo de melancolía.

-Oye, no te pongas así, sabes que no dejaría de lado a mi enano favorito-

-Y yo nunca permitiría que me dejaras de lado, si me olvidas te perseguiré hasta que te arrepientas-

-Te creo jaja, descuida...-

Solté un pequeño bostezo después de eso.

-¿Tienes sueño?-

-Si... Creo que si-

-Vamos a dormir entonces, mañana será un día de cambios-

Ambos nos recostamos en la cama.

-Estoy seguro que si... Buenas noches Ranmaru-

-Buenas noches Masaki-

...

-

-

-

-

Wow, este en realidad fue un capitulo de cambios jaja, y por cierto, es el ultimo del arco introductorio de RanMasa, y siento que quedó bastante bien uwu Puede que el siguiente comience con la historia de Tsurugi y Tenma y lo que ocurre con ellos paralelamente a lo relatado en los primeros 11 capitulos de este UA.

Esperando que haya sido de su agrado, me despido feliz y contento.

Y recuerden, si llegaron hasta aquí, dejen sus buenas vibras y felicidad <3

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top