XVIII

Me tardé menos de 5 días porque hubo comentarios, bum para que no digan que solo pido y no actualizo

Sigan comentandoooo👹👹👹👹👹

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Un gran silencio se hizo presente después de que Ni-ki pronunciará esas palabras.

-Te traje medicamento... me enteré que estabas enfermo...- mostró las bolsas que tenía -te juro que te puedo explicar todo...

-Ya no te creo.

Sunoo siquiera lo estaba mirando, tenía miedo, pero estaba mucho más decepcionado que aterrado, de aquel hombre que casi lo manda a matar.

-Por favor...- levantó su mano, sin dar ni un paso adelante, solamente queriendo alcanzar la de Sunoo. -yo nunca te haría daño a ti... nunca te lastimaría...

-No, no te creo- su labio inferior comenzó a temblar -todo lo que dijiste fueron mentiras...- su mano apretó la manija de la puerta.

-Tenía miedo.

-¿Miedo? ¿Tu? Yo tengo miedo, tengo tan miedo que es difícil moverme, pero también estoy tan decepcionado de ti y por eso puedo hablar contigo, porque yo si te dije siempre la verdad, porque creí que podíamos confiar entre nosotros y creí que tu... que algo... vete por favor.

-E-escúchame- Ni-ki dio un paso adelante y eso hizo que Sunoo retrocediera dos, soltando la manija de la puerta, con miedo de estar con Ni-ki dentro de una habitación.

Sunoo no dijo nada, el miedo acababa de superar la decepción, ahora quería huir.

-Por favor, no te vayas- Ni-ki sostuvo su mano, de manera delicada y suave.

-N-no me toques...- Sunoo se quedó quieto, sin poder moverse en ese momento.

-Está bien... solo, escúchame... por favor- se alejó tres pasos, colocando las medicinas y la avena en el suelo, levantando sus manos, dejando a Sunoo sentando en la cama que tenía.

-No quiero escucharte- se alejó aún estando en la cama, abrazando sus rodillas. -No voy a escucharte, no hay ninguna razón por la que yo quiera--

-Porque me gustas... y uno nunca daña a alguien que le gusta... sí me dejas explicarte... s-si tan solo me dejas... hablar... creo que entenderías y si no, me iré, pero por favor, déjame tratar...

Sunoo no dijo nada y eso para Ni-ki fue un "habla entonces"

-Mi nombre completo es Nishimura Riki, solo me gradué de la preparatoria y no tuve una carrera universitaria, el día en el que mamá murió y mi padre trató de hacer lo mismo conmigo, maté a mi papá en defensa y venganza a mi madre, papá trabajaba en una clase de mafia y cuando vinieron a cobrarle dinero vieron que yo lo había matado así que me reclutaron... entonces empecé con esto.

Se calló un momento, viendo cómo Sunoo había soltado un poco sus rodillas.

-Nunca fui bueno haciendo amigos, pero tengo a Sunghoon y Jake, nunca le tuve miedo a nada después de lo que me había pasado, ni siquiera morir me daba miedo, pensaba que si debía pasar entonces iba a pasar, traté varias veces de acabar conmigo mismo... no le veía sentido a nada, entonces esa noche te vi y de algún modo supe que debía ayudarte... me arrepentí un poco por solo darte mi chaqueta ese día.

Sunoo ya había soltado sus rodillas y sus piernas estaban colgadas en una esquina de la cama.

-Pensé que solo iba a ayudarte y todo volvería a ser como antes, pero entonces fuiste tan... tú- sonrió -y tú empezaste a darle una nueva vista a todo lo que me rodeaba- levantó su mirada, chocando con los ojos de Sunoo -y cuando menos lo pensé, me di cuenta que ahora tenía miedo a algo.

Con cuidado, dio un paso adelante, viendo que las piernas de Sunoo trataban de cohibirse para alejarse, pero de todos modos, dio un paso más, quedando solo a uno de Sunoo.

-Tengo miedo solo a una cosa y eso es que tu te vayas... eres mi más grande debilidad y no me preguntes cómo que yo sigo averiguandolo...

Se quedó callado, por al menos 2 minutos y se empezaron a escuchar sollozos.

-Me da tanto miedo querer creerte...- cubrió su rostro con sus manos -p-pero... quiero creerte...

Ahí fue cuando Ni-ki se colocó de rodillas, justo delante de Sunoo, tomando con tanta delicadeza sus manos.

-Así como solo temo perderte, te prometo protegerte, de todo y todos, de cualquier persona que quiera hacerte daño y si tu en algún momento quieres irte... puedes hacerlo.

El alfa se sentía tan débil en ese momento, se sentía tan desprotegido ante Sunoo.

-Yo...

-Déjame poner a todos a mis pies, mientras yo lo hago a los tuyos- dijo el alfa -porque en este mundo, todos me tienen miedo y yo solo tengo miedo a no hacerte feliz.

-Ni-ki...- Sunoo vio como aquel chico de pelo negro soltaba sus manos y alcanzaba sus piernas.

-Déjame hacer que todos sigan mis órdenes y yo seguiré las tuyas, sin rechistar- besó encima de la ropa los muslos de Sunoo -nunca voy a hacerte daño... nunca voy a dejar que nadie te haga daño y tu tienes ese poder de gobernarme... por favor, déjame seguir siendo el malo con todos menos contigo.

Y de algún modo  aquellas palabras.

"Déjame poner a todos a mis pies y yo lo haré a los tuyos"

¿Porqué sonó tan reconfortante? No lo sabía, talvez, ser la debilidad de alguien tan imponente y poderoso de un alfa dominante cono Ni-ki, no era mala idea.

-Si yo huyo ¿Irías detrás de mi?

-Siempre voy a hallar la manera de encontrarte- levantó su vista, chocando con la de Sunoo. -Tu eres lo único que necesito.

Entonces, una sonrisa se postró en los labios de Sunoo.

Solo esta vez.

Iba a creerle.































Cami~

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