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Jimin intentaba abrir los ojos pero sus párpados le pesaban mucho. Solo podía hablar y eso, apenas si se le entendía.


–Jimin, escúchame... Te llevaré en brazos a tu cama pero necesito que tú me digas cómo llegar....–hablo algo avergonzado el alfa.


Jimin solo asintió y se dejó llevar en brazos, escucho como la puerta del auto se cerraba y luego sonaba por la alarma puesta.


–Okey... Jimin ya entramos... Ahora dime... ¿Para donde...?


-¿Jimin? ¿Eres tú? Llegaste...–hablo la madre de Jimin



Okey, Yoongi estaba en problemas...


Piensa Min, piensa... Ya se.!- dijo Min en sus pensamientos.


–Señora... ¿Park? Soy el jefe de Jimin y lo traje a casa... Él está justo ahora dormido en mis brazos pero... No sé en donde dejarlo, digo más bien en dónde recostarlo.... ¿Podría ayudarme?


No recibió respuesta... Hasta minutos después.


–Oh... Bueno... Yo, ahorita tengo dificultades para levantarme pero... Creo que sí escucha mi voz puede que sepa en dónde dejarlo.


–Si señora, no se preocupe, yo la escucho.–dijo Yoongi esperando indicaciones de la mujer.


–Bueno, verás que enfrente esta una mesa y luego hay dos puertas... Viendo de frente a las puertas la de la derecha es la habitación de Jimin la otra, la de la izquierda es la del baño... Puedes entrar a dejarlo ahí... Dentro de la puerta de la derecha.


–Esta bien... –dijo Yoongi.


Después de todo no fue tan difícil como esperaba... rápidamente llevo a la puerta que dijo la mujer.


Entro con dificultad a la habitación y con cuidado levantó las cobijas de Jimin para recostarlo.


Recostó al Omega dejando sus pies colgando de la cama, le quitó los zapatos y los puso de bajo de la cama, subió sus pies y los coloco de bajo de las cobijas mientras veía como se removía en su cama en busca de calor. Lo tapó hasta los hombros y salió de ahí, no sin antes mirar la habitación, no estaba tan mal.


Salió y cerró la puerta cuidadosamente.


–Señora.... Emm... Jimin está en su habitación, me tengo que ir...


–Joven... ¿Puede usted venir un momento?


–Si, claro, solo dígame a ¿dónde...?–respondió Yoongi



–Supongo que si está de frente a la puerta de la entrada, a su izquierda vera otras dos puertas más... Hay una que está entreabierta... Ahí puede entrar.


Yoongi siguió instrucciones de la mujer y entro en dónde le dijeron.



–Oh. Hola joven....–hablo la mujer esperando algún apellido o nombre para decirle al chico.


–Min, Soy Min Yoongi... Un gusto señora ¿Park?–pregunto Yoongi



–Oh, así que eres tú el famoso Min Yoongi... Y si, soy la señora Park, Park Seori. Mi hijo me platico algo de ti...


El alfa se sorprendió por escuchar aquellas palabras de la mujer.


–Oh... ¿Enserio..?


–Si, pero... Antes de que te cuente... Gracias por traer a mi hijo...


–No fue nada señora...



–Tome asiento aquí mire– dijo la mujer señalando un espacio en la cama.


El alfa se sentó en el espacio que había hecho la señora, esperando ansioso por las palabras de la mujer. Quería saber que tanto había hablado Jimin de el.


–Bueno... Cuando llegó a la casa diciendo me que consiguió trabajo, bueno me contó de usted, que era de la familia Min y que bueno que usted era lindo, luego, después de su primer turno llegó aquí diciendo que tenía usted un gemelo pero que supo quién era usted por su aroma... Aunque me dijo que los dos tenían el mismo aroma... Lo único que cambio entre ustedes era su aroma frutal... También dijo que usted lo trataba bien a comparación de los otros trabajos que tuvo y que le gustaba la forma en que lo ayudaba en su trabajo... Y que era muy amable y bueno eso lo acabo de confirmar hoy que lo trajo hasta aquí...



Claro que la mujer mintió en algunas cosas que su hijo ni siquiera pronunció pero supo que las pensó por la forma en que cuando hablaba de él le brillaban los ojitos y en un momento se quedó pensando.


Por otro lado el alfa estaba contento de escuchar que Jimin le dijo que él era lindo.


–Oh... Que cosas... Bueno... Señora... ¿Cómo está usted de salud? Digo, no es por ser chismoso pero... Bueno, Jimin me contó algo, no mucho pero me quedé preocupado por la forma en que me lo dijo...


–Mi hijo... Siempre se preocupa mucho por mí.... Pero, bueno yo tengo cáncer en el vientre... Es algo raro pero si, ahí tengo el cáncer, mi hijo desde que se enteró no ha dejado de trabajar para comprarme las medicinas... Él siempre ha Sido muy noble con los demás y conmigo. Pero no me gusta que él trabaje tanto... Dejo sus estudios solo para trabajar para mí... Y eso no me gustó...


–Ya veo... Y ¿Su pareja...?


–Bueno... Su papá de Jimin es como un fantasma aquí...


–¿Un... Fantasma? ¿Cómo....?


El alfa ya sabía algo por qué Jimin le contó cuando lo contrato.


–Si, bueno, el nos dejó a nosotros cuando Jimin se presentó como Omega a los cinco años, bueno, se podría decir que nos dejó pero aún sigue viviendo aquí... Cada que viene, llega borracho y oliendo a otra Omega y se que es chica por qué llega manchado de labial...  Pero bueno, me preocupo por Jimin, mi hijo querido que siempre que llega su padre tiene que encerrarse en su habitación o salirse a algún lugar... Siempre que llega su padre llega... Borracho y quiere hacerle algo a mi bebé... Por eso es que Jimin... Llego a la conclusión de que su padre, no es un padre como dice ser... Pero bueno... No quiero aburrirte con nuestra triste historia...


–Es interesante... Creo que ahora entiendo por qué Jimin trabaja desde pequeño, literalmente... Bueno, señora, fue un gusto conocerla... Oh... Es muy tarde... Iré a dormir al auto y en unas horas espero a Jimin para llevarlo al trabajo.... Descanse un poco señora...



–Oh, si... Bueno, ¿Dormirás afuera? Hace frío. Puedes quedarte en el sofá de la sala... O podrías quedarte en la habitación de Jimin, también hay un sofá en su habitación...


–Enserio...?


–Si, te doy la confianza de entrar a la habitación de mi hijo por qué se que no le harías daño, no le harías nada. ¿Cierto?


–Si, tiene razón... Bueno... Le tomaré la palabra. Iré a la habitación de Jimin en el sofá estaré... Y obvio que no le haré nada..


–Esta bien, ¿Podrías cerrar la puerta después de salir?



–Si, está bien...



–Gracias...


El alfa salió casi dando saltos de felicidad al saber que la madre de su Omega lo había dejado dormir en la habitación de Jimin



La mujer se recostó nuevamente y estaba dispuesta a dormir un rato más, hasta que recordó algo que no le dijo al alfa.


–Olvide decirle que Jimin era sonámbulo....


El alfa entro a la habitación de Jimin y casi se desmaya al ver que Jimin está justo enfrente de él con rostro no muy bueno.


Lo que más le sorprendió               -asusto- al alfa era que Jimin tenía los ojos bien abiertos.


–Jimin... No te enojes... Vamos... Vuelve a la cama...–hablo el alfa algo asustado por el recibimiento del Omega.


Jimin no respondió, más sin en cambio, tomo la mano del alfa y lo llevo hasta su cama, lo invito    -obligo- a que se recostara con él y Jimin segundos después volvió a quedarse dormido



–Que susto me diste...– pensó el alfa y se quedódormido












































นางเงือกสีม่วง💜

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