La fiesta de celebración estaba avanzando conforme a los planes de los novios.

La mesa de dulces se acabó más rápido de lo que habían planeado, ni siquiera los novios probaron los dulces "exóticos" que habían puesto en la mesa.

TaeHyung y Jungkook fueron los que tomaron todas las fotos en la boda. Por qué si, con tanto esfuerzo lograron comprar cámaras profesionales para tener un trabajo extra, además de que era algo que a ambos se les daba.

Claro que Jimin iba a pagarles a los chicos por su servicio, además de que también iba a pedirle a su hyung que lo hiciera.

La mesa de regalos estaba llena, hasta regalos había en el suelo.

No pasaban más de las doce cuando a Yoongi ya le habían notificado que su "pedido" estaba hecho.

La luna alumbraba más que los focos colgantes del lugar. El mar hacia una perfecta combinación junto con su sonido.

–Jimin, ¿Estás listo?–preguntó el alfa acercándose al oído del omega.

–Listo... ¿Para qué?

–Para correr....–Dicho esto, el alfa tomo la mano de su omega comenzaron a caminar un poco apresurado para luego comenzar a correr.

Nadie se dio cuenta de que se habían ido, su plan del alfa había salido perfecto.

Corrieron lo suficientemente lejos como para que ya nadie los viera ni percibieran sus aromas.

–¿A dónde.... Vamos...?–preguntó él omega algo agitado después de correr tanto.

–Te tengo una sorpresa....–Habló el alfa mientras le tapaba los ojos al omega.

Caminaron unos cuantos pasos más y se detuvieron frente a una cabaña.

–¿Estás listo?–preguntó el alfa antes de quitarle las manos de los ojos.

Él omega solo asintió con la cabeza y espero con ansias para ver su sorpresa.

Una hermosa cabaña adornada con telas blancas a su alrededor, una cama enorme en el centro en el suelo velas y pétalos adornaban la madera.

Eso se veía de lejos, tenían que caminar para llegar hasta la cabaña, caminar por un pequeño puente de madera que pasaba por encima del agua.

Al llegar las velas que había ahí tenían un aroma que se confundía con lo fresco del lugar. Yoongi bajo todas las cortinas, menos la que daba vista al mar, la brisa fresca entraba a la cabaña, las cortinas no se movían ya que habían sido amarradas para que no se levantaran.

Jimin podía ver la hermosa luna que estaba justo enfrente de sus ojos a unos cuantos metros de separación con el mar, el sonido del mar le provocaban una sensación de relajación.

–¿Te gusta?–preguntó el alfa abrazando por la espalda y dando besos húmedos en el cuello del omega.

Él omega solo asintió con la cabeza recargándola en el hombro de su alfa. Podía sentir como su piel se erizaba con tan solo tener las manos del alfa en su vientre.

Él omega se dio vuelta y posó sus manos en los hombros del alfa mientras lo miraba fijamente.

Ambos se sonreían con ternura, todo esto que apenas comenzaba era nuevo para los dos y lo que se venía era aún más nuevo en sus experiencias.

La cabaña estaba casi a obscuras, lo que alumbraba era la brillante Luna y las pocas velas que había alrededor en el suelo.

Unieron sus labios en un tierno beso que cada vez subía más y más de tono, las manos del alfa viajaron por toda la espalda del omega por encima de la camisa aún.

Se separaron por falta de oxígeno y el alfa lentamente desabotonaba la camisa del omega viendo como él peligris se estremecía. Cuando por fin pudo sacar todos los botones acercó su rostro al cuello del omega y olfateo toda el área mientras lentamente bajaba la camisa del omega, mientras que este solo soltaba pequeños suspiros.

Él omega lentamente subió sus manos hasta la camisa del alfa e imito los actos del alfa, quitándole la camisa lentamente, sus aromas salían más a flote con cada roce de sus pieles.

El alfa pasó su lengua desde la unión de su cuello y hombro hasta su pecho.
Abrazo al omega por los hombros y lo sentó en la orilla de la cama mientras el alfa se acercaba ferozmente y unía sus labios mientras lo recostaba en la cama por completo.

Sus pechos se rozaban casi de manera exótica para ambos, las sensaciones nuevas que pensaban en disfrutarlo y aprender del otro.

Él omega como pudo dio la vuelta y está vez el que quedó abajo fue el alfa y él omega se sentó encima de él moviendo sus caderas encima del entrepierna del alfa, sintiendo como sus erecciones necesitaban ser atendidas, sus pantalones apretaban sus zonas y el alfa estaba fascinado con la bella imagen que tenía de Jimin encima de él mientras movía sus caderas encima de su miembro ya erecto.

El alfa se sentó como pudo y comenzó a desabrochar el pantalón del omega al mismo tiempo que también desabrochaba el suyo.

El peligris se separó un poco y se quitó de una sola vez el pantalón y la ropa interior. Al igual que el peli azul.

Ambos quedaron con sus cuerpos expuestos cada uno embelesado con la belleza del otro.

–Eres hermoso...–habló el alfa acercándose al omega.

Él omega se sonrojó al escuchar eso, pues en medio de tanta lujuria aún se tomaba la molestia de decirle cosas lindas.

El alfa hizo que él omega se acostara mientras le daba cortos besos en los labios y cuello lentamente iba bajando sus besos hasta llegar al vientre de este, escuchando como dejaba salir suaves y casi inexistentes gemidos de placer.

Ambos podían sentir en sus aromas que estaban nerviosos, para ambos era su primera vez.

El peligris sintió como su lubricante natural escurría de su entrada y está pedía casi a gritos ser atendida. Él omega estaba listo por así decirlo, pero el alfa no quería lastimarlo de ningún modo.

Saco de abajo de la almohada una botellita con lubricante de aroma a uva.

–¿P-Para que... Es eso...?–preguntó él omega viendo como este le quitaba la envoltura de la tapa.

–No quiero lastimarte... Sé que con tu lubricante natural es suficiente... Pero no quiero hacerte daño...–habló el alfa mientras bañaba literalmente toda su mano, pues él lubricantes era líquido y no en pomada como se imaginó.

Después de haber remojado lo suficiente sus dedos se acercó lentamente a los labios del omega mientras le besaba con ternura, uno de sus dedos fue a acariciar su entrada dando suaves masajes sintiendo como el cuerpo debajo del suyo se retorcía casi de placer, cuando logró que la entrada del omega se dilatará más, introdujo uno de sus dedos sintiendo como él omega se separaba de sus labios.

Soltó un gemido tanto de dolor como de placer, sintiendo como una lagrima caía de su ojo.

–Si te duele... P-Podemos parar...–El alfa estaba asustado de haber hecho algo mal.

Él omega negó con la cabeza, en sus adentros, sabía que iba a doler y si era lo que quería, tenía que dejarse llevar por el placer y no por el dolor.

Él omega alzó sus manos para acercar el cuerpo del alfa para darle besitos y que su dolor solo fuera mental.

El alfa al sentir más relajado al omega comenzó un ligero vaivén sintiendo como las paredes internas del omega lo aceptaban y abrazaban su dedo mientras se expandían más, sin pedir permiso introdujo el segundo dedo sintiendo como Jimin ya no le dolía, o tal vez si pero ya no lo demostraba. Así hasta que introdujo el tercero, él omega comenzaba a dejar su vergüenza y sus gemidos subían más de tono.

El alfa solo daba besitos húmedos en la barbilla y cuello del omega mientras seguía con su vaivén con sus dedos, poco a poco fue bajando la velocidad y saco por completo sus dedos abrazando con su mano su miembro de la punta para también lubricarla un poco antes de entrar por completo al cuerpo de Jimin.

Él omega comenzaba a sudar, su cabello se le pegaba a la frente y se humedecía.

El peli azul, tomo una de las piernas del omega y comenzó a darle besitos en la parte interna hasta estar cerca del miembro de Jimin. La dejo caer con cuidado y se acercó a los labios de Jimin mientras le susurraba cosas lindas.

Con su miembro comenzó a jugar alrededor de la entrada del omega viendo como este se desesperaba por tenerlo dentro.

Soltaba eróticos gemidos y entre ellos pedía ya ser penetrado.

–P-Por favor... Te necesito...–Habló él omega viendo al alfa cono ojos brumosos.

Yoongi iba a pedir más palabras por parte de Jimin pero el también estaba necesitado y no perdería la oportunidad.

De una sola vez entro por completo y sin avisar, Jimin solo soltó un gemido extremadamente fuerte, su espalda se arqueo y los dedos de sus pies arrugaron la sabana. Se quedó casi sin respiración.

–Cuando me digas me muevo...–Habló el alfa casi arrepintiéndose de haber entrado así.

Él omega espero unos minutos mientras se acostumbraba al nuevo intruso en su ser, con ayuda de los suaves besos, palabras y caricias por parte del alfa anunció que ya estaba listo.

Un casi perfecto vaivén comenzó el alfa mientras se embelesaba con la hermosa imagen que tenía enfrente de él.Ambos se entregaron en cuerpo y alma a la luz de la luna llena, el sonido del mar de fondo junto con la brisa que hacía que las flamas de las velas quisiese apagarse.

Se entregaban amor puro, se demostraban cuanto se querían y cuánto se habían deseado desde el primer día en que sus miradas se cruzaron.Sus cuerpos estaban sudados, y parecía que ambos llegarían a su clímax ya que los colmillos del alfa comenzaron a salir, Jimin solo daba el espacio entre la unión de su cuello y hombro para ser marcado.

El alfa lamia la zona mientras con su mano tomaba la del omega y entrelazaba sus dedos.

–Te amo...–Susurró el alfa y encajo sus colmillos en la tersa piel del omega.

Ambos soltaron un fuerte gemido y llegaron a su clímax. El alfa seguía moviéndose mientras sentía como su nido comenzaba, lamió rápidamente las pocas gotas de sangre que habían brotado y dio vuelta a sus cuerpos quedando el abajo y él omega encima de él.

–También te amo...–dijo él omega un poco más calmado y dio un beso en la barbilla al alfa.

Imaginense algo así, pero de noche xd.

นางเงือกสีม่วง 💜