BajistaBondi: -toma un sorbo de su taza de café y suspira relajado- Que buen día...

Tenma: -flotando sobre El Dorado- ¡Acabaré con todo! -gritó antes de reír como loco-

Saryuu: ¡Las zanahorias no por favor! ¡Las zanahorias no! -gritó desesperado intentado proteger su granja secreta-

A lo lejos se ve caer un rascacielos... y los gritos del Raimon...

BajistaBondi: Sí, un buen día...

-_-_-_-_- En el capítulo anterior -_-_-_-_-

Los miembros del Raimon de todas las épocas no podían creer lo que sus ojos veían, era Tenma de eso no había duda, el problema era que de una forma extraña no era el capitán apasionado que conocían en muchos sentidos. Si bien para un desconocido parecía que no había diferencias, los que conocían al moreno podían reconocerlas todas al instante... Detrás de él, una versión oscura y retorcida del Kenshin de Tenma se cernía sobre todos. Y la tormenta que afectaba el exterior, el campo de fútbol donde se encontraban también se vio envuelto por una tormenta eléctrica y mucha lluvia. " ¡Chicos! ". Gritó Endo preocupado cuando entró corriendo con el resto del trio dorado. " ¡Entrenadores! ". Exclamó Tenma con una sonrisa y mirada que delataba lo furioso y loco que estaba en ese momento. " ¡Matsukaze, por favor es una locura! ". Gritó Kurama preocupado por lo que su kohai estaba a punto de hacer. Tenma puso su mano en el mentón en una pose pensativa mientras fingía considerar esas palabras. " Bueno... que tal un partido de fútbol ". Les dijo a todos. " Si ganan, terminaré esta locura ". Todos consideraron las palabras de Tenma, acaso tenían otra opción... no. El equipo miró a Shindou, quien era el segundo al mando después de Matsukaze. El de cabello gris miró a su amigo con seriedad. " Esta bien, lo haremos ". " Empecemos entonces ". Declaró Tenma con una sonrisa siniestra y ojos brillando en azul.

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-_-_-_-_- Centro del Multiverso -_-_-_-_-

En algún lugar cercano a "Yggdrasil", existía una zona urbana que mezclaba edificaciones de las mejores épocas de la historia y del multiverso. En el corazón de esta zona, existía una inmensa e imponente torre de obsidiana y grandes ventanales de cristal; esta torre era la sede principal de los protectores del multiverso. En pocas palabras, la torre era lugar más místico, monumental y hermoso que se podría haber creado para albergar a los guardianes dedicados a preservar la estabilidad y equilibrio de los distintos universos, realidades y líneas de tiempo. Cada habitación en la edificación serviría para propósitos específicos, proporcionando a los protectores las herramientas, conocimientos y recursos necesarios para llevar a cabo su noble misión. Entre las muchas salas había salones de estrategias, una biblioteca interdimensional, zonas de entrenamiento, una habitación de portales conectada a un hangar casi infinito, una cámara de visión futura, laboratorios de artefactos, lugares de reunión, un ala de invitados, un jardín interdimensional, una pequeña prisión, salas de resonancia multiversal... en fin, la torre era casi infinita en formas útiles de ayudar tanto a los protectores como a los creadores de cada universo existente y por existir. Hayashi Byacuya, había ido de visita al lugar para devolver algunos libros de la oficina de su padre-creador-escritor de esta historia solicitó y que la fecha para regresarlos estaba por cumplirse. El chico entró por uno de los portales y miró la gran habitación recubierta en metal. " Que raro... no hay nadie ". Dijo mientras caminaba a los elevadores que por primera vez no tenía vigilantes. " ¿Habrá pasado algo? ". Pensó Hayashi muy confundido por lo extraño del momento.

Lo que Hayashi no sabía era que sí, estaba pasando algo... y era una completa locura. En una de las muchas salas de estrategias de la torre, la cual tenía vista panorámica de la ciudad, el ambiente estaba tenso por el desastre que estaba ocurriendo. Dentro de la sala, una red de consolas avanzadas y pantallas holográficas se alineaba en una formación caótica. Los seres que trabajaban allí, provenientes de diversas esferas del cosmos, vestían trajes elegantes y aerodinámicos de color blanco que resplandecían gracias a algunas partes con tela holográfica que se iluminaba en hologramas de colores cambiantes. Cada uno de ellos poseía una apariencia única, representando la diversidad de las razas galácticas, y la unión de todos ellos con un broche en el pecho con forma del emblema de los protectores. Las pantallas de la habitación parpadeaban con mensajes de error y estática, como si una tormenta digital hubiera caído sobre toda la tecnología en el lugar. Los seres, con manos ágiles y dedos danzantes, tecleaban frenéticamente en sus avanzados teclados, intentando descifrar el origen del caos que se extendía por la red del sistema. Gritos de frustración resonaban en las paredes, mezclándose con el zumbido constante de cada herramienta digital; algunos se dirigían a otros con acusaciones, mientras unos pocos entraban en colapso metal en las esquinas, incapaces de lidiar con la presión. El sistema eléctrico, por momentos, titubeaba, sumiendo la sala en breves períodos de oscuridad antes de recuperar la energía.

Entre el tumulto, individuos desesperados corrían de un lado a otro, desconectando y reconectando cables en un intento desesperado de restablecer el orden de las computadoras. La urgencia en el aire era palpable, y como no, el destino de mundos enteros dependiera de la resolución de ese caos. " ¡Maldita sea! ". Gritó uno de los hombres golpeando su teclado con frustración; el hombre tenía una mezcla de rasgos humanos y de dragón, y estaba a empezar salir humos de su nariz del enojo. " ¡¿Alguien logró comunicarse con los encargados de la cámara de visión futura?! ". Gritó por encima de la cacofonía de voces de la sala. " ¡No! ". " ¡Mi celular no responde! ". " ¡Nadie contesta! ". Fueron las respuestas generales que recibió el hombre mitad dragón causándole un suspiro cansado. " ¡Respondieron! ". Toda sala se congeló y miraron con esperanza al hombre lobo que gritó. La esperanza fue muriendo cuando la sonrisa del hombre lobo fue decayendo. " ¡Sí, pero... Ahá... no es posible... ¡¿Pero como rayos... esta bien, gracias ". El hombre lobo finalizó la llamada y miró a cada rostro del lugar. " La cámara de visión futura esta en reparaciones ". " ¡¿Qué?! ". Gritaron todos en la sala ante esas palabras. El hombre lobo asintió con una mirada inexpresiva. " Dicen que alguien dejó caer una lata de soda y solo se puede ver el pasado ". El silencio se hizo presente otra vez antes de que todos se empezaran a golpear la cabeza con sus escritorios.

" ¿¡Pero qué diablos pasó!? ". Se preguntó en un grito una mujer humana de tez morena, cabello marrón corto y ojos verdes. Y era algo que todos en la sala querían saber; todo había estado en orden con los acontecimientos de la historia y universo de "Gemelos del Tiempo", incluso con la activación de los genes de segunda etapa de Matsukaze Tenma todo debería estar en orden para algo que pudiera resolverse de forma simple y sin contratiempos para que el castaño de sufriera las consecuencias de los genes. Pero algo había pasado y la propia existencia de ese mundo estaba en peligro debido a un cambio que nadie sabía explicar. " Quizás Bajista Bondi rompió las reglas ". Propuso una anciana de tez violeta, cabello gris y ojos azul opaco. " Bajista Bondi nunca se ha salido de las reglas ". Dijo un chico de 13 años de tez bronceada, cabello rubio rizado y ojos rojos; muchos asintieron de acuerdo con esas palabras. " ¿Tal vez hubo un error en el bolígrafo de corrección? ". Les preguntó un hombre transgénero con rasgos felinos caminaba de un lado a otro mirando documentos, con sus tacones asiendo un leve eco. Muchos pensaron en la posibilidad, los bolígrafos de corrección eran recientes y a pesar de toda la tecnología disponible, aún eran vulnerables a fallos de conexión debido al poder casi omnipotente de los creadores y lectores de mundos. " Lo que sea que haya pasado no importa ". Declaró un androide a todos. " Intentemos conectar el sistema a los borradores de Bajista Bondi y quizás sepamos qué demonios está pasando ". Todos reiniciaron la labor titánica... Mientras Bajista Bondi en su oficina privada de la isla multiversal de Inazuma Eleven, bloqueaba los borradores de su historia en todos sus dispositivos. " Buena suerte intentando entrar idiotas controladores ". Pensé con una risita.

-_-_-_-_- Grandes Almacenes Action, 3 minutos antes de la explosión; 2XXX -_-_-_-_-

" Endo... ". La voz de Kidou llamó la atención del antiguo capitán del Raimon. " ¿Sí Yuuto? ". Le preguntó el de cabello castaño mientras comía bolitas de pulpo de un puesto ambulante. " Sé que la comida de Natsumi puede llegar a ser... ". Kidou se detuvo un momento a pensar en la mejor palabra para describir la bazofia que era la comida prepara por la esposa de Endo. " una bazofia, pero no por eso tienes que comer todo lo que encuentras hasta reventar mientras estamos en este periodo de tiempo ". Mamoru suspiró, sabiendo que su amigo tenía razón. " Además, si no te controlas cuando regresemos estarás como un globo ". Le dijo Gouenji al de la bandana naranja mientras le arrebata la bandeja de takoyaki. El hombre de cabello blanco y el de rastas se rieron de los pucheros de su amigo que hacia pucheros. " Ha~ El pobre bebé está enojado ". Se siguió burlando Gouenji apretando las mejillas de Mamoru. Los tres se rieron después de eso antes de continuar su paseo por un parque. " Que tranquilidad ". Reflexionó Endo. Sus amigos asintieron. " Normalmente en este punto es cuando pasa algo que va a destruir el mundo ". Dijo el de cabello castaño en broma, quizás hablando demasiado pronto. " ¿Oíste lo que pasó en El Dorado Melfe? ". Los tres hombres miraron hacia la voz; vieron a dos jóvenes de Feida, en concreto del equipo The Excellar, cerca de un puesto de helados. Uno de los chicos era de tez clara, cabello del color crema y ojos de escleróticas negras con iris naranja, vestido con un jumpsuit deportivo con zapatillas. El chico hablaba con una chica de tez clara, ojos verde vibrantes, cabello rubio platinado peinado en dos coletas, vestida con un top rosa, pantalones cortos y sandalias. La chica negó con la cabeza confundida. " No he escuchado nada, ¿qué está pasando Ruda? ". Preguntó la chica, Melfe, mientras disfrutaba de un helado de Nutella. " Fei me llamó, me dijo que algo le pasó al gemelo de nuestro emperador ". Dijo el chico, Ruda, cruzándose de brazos.

Los hombres que escuchaban a escondidas, intentando disimular sin éxito alguno, se miraron con el ceño fruncido de la preocupación; ellos se dieron cuenta de que con "el emperador" hablaban de Saryuu, entonces algo le había sucedido a Tenma. " El Dorado estaría vuelto un caos de no ser porque hoy es feriado para los que trabajan allí ". Le explicó el joven a su compañera. Ese día se celebraba el aniversario de 55 años por el primer viaje del tiempo exitoso de la organización fundadora del Dorado. Quizás los únicos en las instalaciones de El Dorado seria los chicos del Raimon y sus entrenadores, los miembros de los equipos entrenados por la organización, algunos chicos y chicas de Feida, Toudou-san y Sakamaki-san, y quizás el padre de Fei. " Hay que irnos ". Les ordenó Kidou con seriedad, recibiendo un murmullo afirmativo de Endo y Gouenji. Cuando los tres hombres se fueron corriendo, Ruda y Melfe se quedaron mirando por donde se fueron antes de mirar alrededor y esconderse silenciosamente en unos arbustos. " ¿Nos vio alguien? ". Preguntó el chico " No ". Contestó ella. El chico suspiró antes tocar su reloj digital y desactivando el camuflaje, con su amiga haciendo lo mismo. Un segundo después, donde habían estado Ruda y Melfe, ahora estaban Harold y Mikaela. " Espero que los protectores nunca se enteren de esto ". Dijo Harold en un suspiro. Acababan de romper al menos 13 reglas, además de interferir directamente en el transcurso de las cosas, y él podía ser un loco para tomar decisiones, pero normalmente no se salía de la línea. " Quizás lo hagan, quizás no ". Le dijo Mikaela con tranquilidad. " Confiemos en que Bajista Bondi borre nuestro rastro ". Harold asintió a su amiga con una sonrisa. Esperaron unos segundos escondidos antes de que todo su alrededor se congelara y en el cielo aparecía un remolino azul neón que expulsaba relámpagos dorados. " ¡Vamos! ". Le ordenó con determinación Harold a su compañera antes de que activaran sus dispositivos de teletransportación.

-_-_-_-_- El Dorado, segundos después de la explosión -_-_-_-_-

Cuando Torb los despertó a todos hace unos momentos, los chicos de Feida y El Dorado entraron corriendo a la habitación casi en ruinas preocupados por Saryuu, que por suerte se chocó contra una pared que por alguna razón era mullida y suave en lugar de hormigón. " Creo que eso lo hizo Tenma inconscientemente. ". Dijo Fei con alivio. Todos aceptaron era respuesta dado que algunos jóvenes con los genes de Segunda Etapa eran capaces de alterar objetos inanimados o inorgánicos, siguiendo la ley de conservación de la materia; también el hecho de que Tenma, a pesar de estar descontrolado en esos momentos, muchos estaban seguros de que el chico amable aún estaba allí en el fondo de su subconsciente. Levantaron a Saru del piso y lo llevaron a la sala de observación para acostarlo en una colcha improvisada con almohadas y una cortina. Poco después de eso, el grupo decidió dividirse; podrían entrar en una histeria colectiva como los estaba Hayami. " ¡Tenma-kun destruirá el universo! ". Pero Tsuruig, Kurumada y Amagi sugirieron enforcar sus mentes en algo más importante. Toudou y Sakamaki fueron a la oficina del primero para llegar a la computadora central del edifico y activar el cierre total, no sin antes llevarse un equipo tranquilizante por si encontraban al capitán del Raimon. Aslei Rune por otro lado dividió a los jóvenes en cuatro grupos para buscar a Tenma, y también les sugirió a los chicos que intentaran contactar a Endo e informale sobre la situación. Ya que los chicos de Feida y El Dorado también buscarían, los grupos quedaron disparejos, razón por la cual Kurama fue seleccionado al azar para que cuidara del emperador de Feida.

El de tez oscura intentó negarse, pero para cuando se dio cuenta quedó solo con el chico inconsciente. Norihito suspiró enojado antes de sentarse en una silla giratoria. " ¿Cómo demonios terminé siendo niñera de este chico? ". Se preguntó el de cabello celeste acomodando sus manos detrás de su cabeza para recostarse mejor. Miró con el ceño fruncido a Saru, el que en cierto modo había provocado que llegaran a esa situación. Si Saru no hubiera revelado su relación con Tenma podrían haberse ido a su tiempo y seguir con sus vidas como si nada, pero Kurama no era un insensible. Podía entender y ver que Saryuu era igual de emocional que Tenma, por lo que el de cabello blanco no pudo evitar hablar de más cuando disputaron el futuro del mundo en aquel partido. Norihito suspiró mientras se rascaba la cabeza con frustración cuando sus pensamientos lo llevaron a los otros culpables de esto, El Dorado. Él entendía lo que querían y sus objetivos, pero pudieron haberlo hecho sin tener que involucrar o lastimar a nadie del pasado, Tenma para ser específicos o tener que borrar toda la existencia de un deporte en el pasado. " No vale la pena seguir pensando es eso ". Se dijo a sí mismo Kurama antes de poner sus manos en su regazo. Pasaron unos minutos de silencio antes de que escuchara un sonido de su celular, entonces inquieto miró la pantalla. " El sistema de seguridad está encendido ". Decía el mensaje de Fei al grupo del club de fútbol. Kurama suspiró, había esperado que fueran noticias del joven capitán... " Espera... ". El joven se tomó un momento para reorganizar sus pensamientos y se dio cuenta con una sonrisa. " ¿Realmente dejé de odiarlo para preocuparme por él? ". Pensó dándose cuenta de Tenma ahora es alguien por el que se preocupa más de lo que quiere admitir. " Y nunca lo admitiré ".

Pensó el delantero, siendo fiel a su yo tsundere. " Mhm... ". Kurama miró a Saru que empezaba a despertar; se levantó de la silla y se agachó junto al otro. " Hey, Saru ". Kurama intentó ser tan gentil con el más joven como lo hubiera sido Sangoku. El de cabello blanco parpadeó todavía aturdido por el sedante que se inyectó sin querer. " ¡Tenma! ". Exclamó Saryuu sentándose rápidamente para luego sentir nauseas. " Tómatelo con calma ". Se sugirió Kurama; el de cabello celeste no sabía de donde procedía la calma con la que estaba manejando la situación, pero no le daría importancia. " M-mi h-hermanito? ". Le preguntó Saru al otro con voz temblorosa. " Están buscando a Tenma, todo estará bien Saru ". Le dijo Kurama al de cabello blanco. " Debo avisarle a los demás ". Pensó Kurama sabiendo que calmaría a los demás. Mientras, la mente de Saryuu iba a mil por hora con la respiración agitada y el corazón latiendo con fuerza. Sus manos temblaban, incapaces de encontrar algo a lo que aferrarse. " ... todo estará bien ". Esas palabras se repitieron en la cabeza de Saryuu una y otra vez; él odiaba esas palabras las escuchó de su gemelo antes de que tuvieran que enviarlo lejos, de sus padres antes del ataque a la mansión, de sus amigos, de aliados. " No puedo respirar ". Pensó Saryuu llevando sus manos al cuello; la ansiedad se apoderaba de él, como un vórtice oscuro que amenazaba con engullirlo por completo. Saru intentaba recordar cómo respirar, pero cada inhalación parecía insuficiente, como si el aire se negara a entrar en sus pulmones. " Quiero que los que provocaron que no creciéramos juntos y felices, los que mataron a nuestros padres se esfumen de la faz de la tierra ". Escuchó la voz de su gemelo en su mente; esas fueron una vez las palabras de Saru, pero sonaban muy mal salidas de la boca de su otouto. " ¡Mentiroso! ". La acusación de Tenma provocó que los ojos violetas se llenaran de lágrimas porque no eran del todo falsas. Norihito, al notar la respiración irregular del otro, se apresuró hacia él. " Saru, ¿estás bien? ". Preguntó Kurama con preocupación, poniendo una mano en su hombro.

" Idiota, claro que no está bien ". Pensó el de pelo celeste dándose una bofetada mental. " No puedo... no puedo respirar ". Balbuceó Saru, su voz entrecortada por la falta de aire. Kurama le dio palmadas en la espalda un poco incómodo por no estar acostumbrado a calmar a otros. " Escucha, Saru. Vamos a intentar algo juntos, ¿de acuerdo? Primero, intenta inhalar profundo y lento. Lo haremos juntos, ¿vale? ". Saru asintió, aunque sus ojos todavía tenían las pupilas dilatadas mirando a la nada. El emperador de Feida intentó la respiración profunda, pero el pánico persistía. " ¡No funciona! No puedo, no con mi hermano en quién sabe dónde ". Dijo Saru, su voz temblorosa. Kurama hace un rato se estaba preguntando porque carajo terminó siendo el cuidador de Saryuu mientras todos los demás iban a buscar a Tenma, pero ahora le quedó claro porqué. De alguna forma, Kurama podía compartir su protección a su capitán-kohai a Saryuu, quizás porque ambos eran gemelos, pero no importaba. Kurama miró al otro directo a los ojos. " Saru, cuenta conmigo, ¿sí? Inhala... uno, dos, tres. Aguanta el aire... uno, dos, tres. Ahora exhala lentamente... uno, dos, tres". Repitieron este proceso varias veces, y gradualmente, la respiración de Saru comenzó a calmarse. Aún tembloroso, logró recuperar cierta estabilidad. Kurama continuó ofreciéndole apoyo con una sonrisa que no era común en su rostro. Saryuu se sentó contra la pared, exhausto, pero agradecido por la ayuda del senpai de su hermano. " Gracias ". Murmuró Saru, mirando al otro con gratitud. Kurama puso una mano reconfortante en el hombro de Saru. " No hay de qué, todo saldrá bien al final ". Saru sonrió ante la típica frase de su gemelo. " ¡Vamos! ". Kurama se levantó y ayudó a Saryuu a levantarse. " Busquemos a tu hermano descarriado ". Saru asintió con determinación. " Tenma, por favor no hagas una locura ". Pensó Saru antes de correr con el otro a través del hueco en la pared por donde escapó su hermano.

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-_-_-_-_- El Dorado, 4 minutos después de la explosión -_-_-_-_-

Tenma avanzaba por los interminables pasillos del complejo de El Dorado con el sonido de sus pasos asiendo eco en la soledad del laberinto que parecía ser el edificio. La figura del castaño estaba iluminada por destellos ocasionales de energía azul neón que emanaban de sus manos. El zumbido constante de su poder recién descubierto llenaba el aire, mientras las luces parpadeaban y los paneles electrónicos de las paredes estallaban en chispas a su paso, reflejando el torbellino de emociones en su interior. Pensó primero en sus padres biológicos; el recuerdo de haber visto el día en que sus padres murieron para protegerlos a él y a su gemelo lo atormentaba sin piedad. Y luego su mente se fue Saryuu. " Traidor... ". Susurró Tenma entre dientes, con sus puños apretados con fuerza provocando que salieran rayos de estos. La mente del joven capitán estaba en llamas, alimentada por la sed de venganza que ardía en su corazón. La injusticia que había sufrido a manos de su propio gemelo, el traidor que lo había intentado sedar cuando sus poderes despertaron, se repetía como un eco constante en sus pensamientos. Para Matsukaze, Saru lo traicionó y eso le dolía más que nada al ser alguien en quien confiaba ciegamente. " Tenma... te juro que no estoy... con ¿ellos? "... " Estoy aquí, por ti. Porque te quiero "... " No te tengo miedo "... " Solo quiero ayudarte Tenma "... " No necesitas venganza "... " Me tienes a mí, tus amigos... no necesitas nada más "... " ¿Me lo juras? "... " Sí "... Toda la escena fue un trago amargo para el de tez morena que marcó un punto de inflexión en sus elecciones. " Maldito traidor ". Saryuu prefirió estar a favor de El Dorado que con su hermano; era algo que deseaba olvidar.

Una parte de Tenma en lo más profundo de su subconsciente se preocupó por Saru cuando lo tiró contra la pared y quedó inconsciente, pero en su rabia hizo que se olvidara de eso. Los recuerdos de muchas cosas se sumaron; el ataque de Alpha y Beta para borrar sus recuerdos y el fútbol respectivamente por orden de la mesa directiva de El Dorado, la casi traición de Fei, la revelación de su verdadera familia, que su vida en Okinawa y los padres de allí eran solo gracias a un aparato tecnológico futurista, saber que toda la lucha contra el Sector V y su control en el fútbol no era algo que el fuera hacer sino el verdadero Matsukaze Tenma. Todo y más martillaban en su mente, alimentando su sed de venganza. Cada paso de Tenma estaba marcado por la furia contenida, sus ojos brillaban con una intensidad casi sobrenatural. Su corazón latía con fuerza, impulsado por la ira y el deseo de justicia para sus padres. A medida que avanzaba, los corredores se retorcían y deformaban bajo la influencia de sus poderes desatados. Paredes de metal crujían y se retorcían como si fueran de papel, tuberías se desprendían de sus anclajes, y el sonido de la destrucción resonaba por todo el edificio siendo escuchado por los compañeros y amigos de Tenma que lo buscaban por todo el lugar. Tenma intentaba mantener la calma, pero la tormenta en su interior amenazaba con desbordarse. Entre los retorcidos pasillos, Tenma emergió en un espacio inesperado y ciertamente un lugar que no esperaba encontrar sin un mapa de las instalaciones.

Un campo de fútbol interior fue una vista que ciertamente calmó un poco su ira; Tenma, incluso con su descontrol, tenía presente que era uno de sus lugares felices. La luz artificial iluminaba el verde intenso del césped artificial, creando un fuerte contraste con el caos y destrucción que reinaba en los pasillos. Las gradas vacías miraban en silencio, como si fueran testigos mudos de la tormenta que se desataba en el interior de Tenma. El chico se quitó las zapatillas y los calcetines; sentir el césped, por falso que fue, o hizo suspirar y su mente quedó en blanco mientras volvía a caminar. Se detuvo en el centro del campo, mirando fijamente a la nada. Su respiración agitada resonaba en el vacío mientras sus poderes continuaban su danza destructiva en las gradas de metal y afectando el sistema eléctrico. El entorno a su alrededor también se distorsionó como si él fuera un dios recién bajo del Olimpo; el césped artificial se volvió real a sus pies, de las paredes metálicas brotaron parches de musgo y un viento inexistente pareció llevarse sus pensamientos más tumultuosos. " ¿Por qué, Saru? ". Murmuró Tenma en voz baja, como si las palabras fueran arrancadas de su alma. " Te pedí que siguiéramos tu plan original, pero te rendiste muy fácil ". Una brisa gélida sopló a través del campo, agitando los mechones de cabello castaño de Tenma. Sus puños se cerraron con fuerza, los nudillos blanquearon mientras la resolución se apoderaba de él. " No descansaré hasta que mis padres tengan justicia ". Se prometió, sus ojos centelleando con una determinación feroz. " ¡Tenma! ". El capitán miró hacia la puerta al escuchar las voces de Shindou, Tsurugi y Fei. " Hora del show ". Susurró Tenma con una sonrisa siniestra antes de que la energía a su alrededor se condensara, creando un aura de poder incontrolable.

-_-_-_-_- El Dorado, 15 minutos después de la explosión -_-_-_-_-

Todos se habían reunido a un lado del campo; los jóvenes se sentaron en los pocos asientos que aún estaban intactos o en el pasto mientras los adultos presentes hablaban del mejor curso de acción. Aoi, Shinsuke y los demás de primer año no dejaron de mirar a su amigo al otro lado del campo. El kenshin de Tenma se unió a él en forma de su armadura, pero era mucho más elegante y oscura de lo que era normalmente. Donde antes existía el blanco, dorado y rojo ahora predominaba el negro, plata y azul, las alas de su espalda antes suaves ahora eran filosas, y la diadema de pegaso era del mismo oro blanco solo que con rubíes en los ojos. Para añadirle más drama a todo, Tenma estaba sentado en un trono de hierro retorcido, que en palabras de Kariya se parecía al de Game of Thrones. El trono se alzaba con una majestuosidad sombría, su estructura retorcida recordaba a las pesadillas más oscuras y profundas de muchos del Raimon, Feida y El Dorado. Tenma, con su cabello alborotado y mirada perdida, ocupaba el asiento de una manera que evocaba una mezcla entre la locura y majestuosidad. Sus ojos, que una vez irradiaban calidez y amistad, ahora parecían ocultar tormentas internas. En cierto modo Matsukaze se comportaba con una elegancia y actitud regia tan sublime igual a la que mostró Saru hace semanas, que nadie podía dudar de su parentesco; incluso para Saryuu, quien imagino y deseó que su gemelo estuviera a su lado liderando Feida, la imagen le revolvía el estómago por lo mal e inquietante que era ver una sombra de su pasado reciente cerniéndose sobre el de ojos azules. " Tenma~ ". Susurró Aoi conteniendo sus lágrimas ante el completo desconocido que era el chico que no se rindió para ser futbolista. Tsurugi miró a el mejor amigo y salvador que la vida le pudo dar.

El de ojos ámbar no pudo decir ni una sola palabra porque la escena de un Tenma que los miraba con una mueca de desprecio le pareció muy familiar; quizás porque el mismo había hecho lo mismo cuando llegó al Raimon para destruir el club de fútbol por órdenes del Sector V. " Esto está muy mal ". Le dijo Hikaru a Amagi con miedo en su voz; Daichi abrazó a Kageyama para darle cunsuelo. " No te equivocas ". Murmuró Kurumada con el ceño fruncido. " Tenma estará bien, verdad Shin-sama? ". Le preguntó Akane a Shindou con preocupación; el de cabello le dio la mirada más confiada que pudo y le asintió, cosa que alivió un poco a la joven. " ¡Ok chicos! ". Llamó Mamoru a todos con una voz inusualmente seria. Todos" Tenemos una formación, aunque no sabemos que tan bien funcionará considerando que la basamos solo en las jugadas que conocemos de Tenma ". Dijo Yuuto acomodándose los lentes. " ¿Rune, tuviste suerte? ". Le preguntó Sakamaki al chico de cabello menta, quien estaba intentando llamar a los demás de Feida y a su padre. Fei negó con la cabeza. " No, al interfiere con la señal ". Nadie sabía lo que estaba pasando fuera de las instalaciones, incluso el trio dorado original no se dio cuenta de lo que pasaba gracias a los relojes hechos especialmente para no ser afectado por alteraciones en el espacio-tiempo. " Entonces necesitamos un plan B ". Dictaminó Toudou mirando a Saru. El chico de cabello sabía a qué se refería. " ¡No puedo entrar en la mente de mi gemelo? ". Dijo Saryuu, negándose. " Además, ya no puedo hacerlo lo olvidan ". " En realidad creo que sí puedes ". Todos miraron a Meia ante esa declaración. " Cuando Matsukaze te tenía en su control, tú brillaste en violeta por unos segundos ". Explicó la de cabello lila; todos pensaron en aquel momento y se dieron cuenta de que era cierto. " Quizás estar con el más cercano en sangre a ti reactivó el gen ". Le explicó Sakamaki a Saryuu ante su mirada confundida. Pasaron unos segundos de silencio antes de que Toudou le volviera a hacer la pregunta. " Entonces... ¿lo harás? ". Saru miró a todos los presentes, sus miradas intranquilas, y luego miró a su gemelo que los miraba como simples cucarachas. " ¡Lo haré! ". Dijo el de cabello blanco con resolución. " Te salvaré hermanito ". Pensó Saru sin dejar de mirar a Tenma.

Bajista Bondi: Creo que esto abarca más de lo pensaba originalmente, pero el resultado lo vale.

Hayashi: Ahora necesitamos de la ayuda de los lectores para crear la formación del partido que muchos están esperando.

Shindou: Envíen sus ideas, y tengan presentes las posiciones de los personajes que están disponibles para el partido.

Bajista Bondi: Espero sus respuestas; hasta la próxima mis Diamantes del mundo. (^-^)/