Aparecerán varias protagonistas de mis historias. Si no estás interesada en leer las partes de este Crossover puedes saltarlo con total libertad, ya que este no afectará la trama ni será mencionado.

Recomiendo leer cada parte con la música en multimedia.

Orden en el que estarán cada parte en las historias: Me abro al cierre, Siren, Let me smile, No soy Bianca, ¿Gemela de Evans? y por último Maze Runner.

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Lía trotaba por la casa buscando a alguna de las chicas, todo tenía sentido ahora esa era la manera de salir de aquel lugar, todas debían superar sus miedos, debían notar que nada de lo que sucedía era real, pero le preocupaba no encontrar a las chicas a tiempo un reloj que había pasado marcaba las diez y eso solo les dejaba dos horas para salir de ahí. Salió de una habitación del primer piso y su vista se topó con un cordón, aquel cordón que creía la llevaría al desván de la casa, pero al intentar alar de este nada paso era como si estuviera atascado.

—¡Sáquenme de aquí! —Lía reconoció la voz de ____ aquella chica que hablaba algo extraño y mencionó haber despertado en un laberinto tiempo atrás. Lía comenzó a alar con más fuerza el cordón, pero seguía sin ceder, escuchaba los sollozos de la chica y comenzaba a desesperarse al no poder ayudarla, sacó su varita e intentó más de un hechizo, pero nada ocurría era como si no tuviera magia.

—¡____! —gritó el nombre de la chica buscando que esta pudiera escucharla—. ¡Nada de eso es real! —esperaba que la castaña pudiera comprender lo que decía, era lo único que podía hacer, solo ella podía superar su miedo.

—Estoy sola —sollozó ____, había escuchado a la chica, pero el miedo no la dejaba pensar con claridad—. Me quedé sola, mi hermano, mi novio, mis amigos, todos me dejaron sola —abrazo con fuerza sus piernas—. No quiero estar sola, no quiero quedarme aquí —volvió a sollozar más fuerte provocando que Lía se sintiera impotente por la chica, su miedo era la soledad y este parecía estar ganando la batalla.

—No estás sola, ____. Recuerda a los que te quieren y aman, ellos jamás te dejaran sola —habló lo suficientemente alto para ser escuchada, quizá hablando también para sí misma—. No importa en dónde estés o en donde estén ellos, siempre estarán junto a ti, ellos nunca te dejaran sola —el silencio reino en el lugar apenas lograba escuchar los sollozos de la chica. ____ se puso de pie pensando en lo que la pelirroja había dicho, recordó las miles de veces que Minho le había dicho que siempre estaría para ella, cuando su hermano le aseguraba que nada los separaría y a Newt, tomó el collar que el rubio le había dado, él siempre estaría presente.

—No estoy sola —susurró con más ánimos—. ¡Nunca estoy sola! —gritó viendo como poco a poco aquella oscuridad que la rodeaba se desvanecía, en cuestión de segundos todo se ilumino a su alrededor y dejo ver que estaba en el desván de una casa, corrió hasta lo que eran unas escaleras y las dejo caer para baja por ellas, en cuanto toco el suelo del pasillo giró para abrazar a la pelirroja que le había salvado de su miedo—. Gracias —susurró agradecida con la chica que ahora consideraba una amiga.

—No hay de que —Lía estaba aliviada de ver a la chica sana y salva—. Debemos encontrar a las demás —se separaron y bajaron las escaleras de la casa, las otras chicas no estaban ahí y debían buscarlas.

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Tanto Lía como ____ corrieron tan rápido como les fue posible al escuchar gritos, justo en una de las casas pudieron ver a la castaña que se había presentado como hija de Hécate, justo cuando estuvieron más cerca de ella vieron que algo la tenía atrapada por los pies era algo viscoso de color negro y esto la jalaba hacia la casa.

—¡Suéltame! —lloriqueo Hailey mientras intentaba clavar sus dedos en la tierra en busca de no ser arrastrada a la casa, no había visto a Margot de nuevo, su voz había dejado de ser escuchada, pero su miedo no paraba, no quería regresar a esa casa.

—¡Hailey! —____ la tomó de las manos intentando halarla para intentar que aquella cosa viscosa la dejara, pero eso solo provocaba que pusiera más fuerza casi llevándose a las dos, pero Lía también comenzó a jalarlas para evitar que entraran a la casa.

—Esto no es real Hailey, debes vencer tu miedo —apenas lograba hablar la pelirroja por la fuerza que ejercía para evitar que fueran llevadas.

—No, no, no —sollozó la chica sin dejar de llorar—. No quiero regresar a esa casa, por favor no me suelten, no dejen que me lleve —miró a las dos chicas, sus ojos demostraban cuan aterrada estaba.

—¿¡Cuál es tu miedo!? —gritó ____ buscando alguna solución para lo que estaba pasando, sus brazos no soportarían demasiado—. ¿¡Cuál es tu miedo!? —volvió a preguntar al ver que la chica se negaba a decirlo en voz alta.

—¡Mi pasado! ¡Le temo a regresar a lo que era antes! —gritó mientras cerraba los ojos, sentía sus manos sudar provocando que estas comenzaban a resbalarse del agarre de la chica que la sostenía—. No quiero regresar a los golpes, no quiero regresar a la casa que me ha hecho tanto daño, no quiero regresar sin Bianca —admitió sollozando con más fuerza, le temía a regresar y vivir todo de nuevo, pero sin que Bianca estuviera para ayudarla.

—¡Todos tenemos un pasado horrible! —admitió ____ al ver el miedo en los ojos de la chica, aquel miedo que pudo ver en Chuck antes de salir del laberinto—. Pero el pasado es lo que nos hace fuertes, lo que nos guía para no cometer los mismos errores y el que nos hace lo que somos ahora —sonrió viendo que Hailey le prestaba total atención aun con lágrimas en los ojos—. Solo tú puedes decidir si vivir siempre en el pasado o comenzar a vivir tu presente —Hailey sollozó en cuanto la chica termino de hablar.

—Quiero vivir, quiero vivir mi presente —apretó la mano de ____—. ¡Quiero vivir sin miedo! —pateó como pudo a la cosa que sostenía sus pies y este dejo de sujetarla de golpe provocando que las tres chicas cayeran de espaldas—. ¡Lo hicimos! —gritó emocionada la chica antes de abrazar a las otras dos.

—Lo hiciste, solo tu podías salvarte —sonrió Lía, las tres se levantaron del suelo y en cuanto estuvieron por dar un paso para buscar a las demás más gritos se escucharon de la casa de al lado, las tres corrieron hasta la casa y entraron en esta, listas para salvar a quien había gritado, pero a diferencia de ellas solo encontraron a una pelirroja hecha un ovillo en la esquina de la sala de la casa—. ¿Alessia?

—Ellos me olvidaron, ellos no saben que existo —sollozó mirando a las tres chicas, la pelirroja temblaba mientras se acurrucaba más contra la pared—. Sabía que esto pasaría tarde o temprano, pero no puedo evitar sentir que algo me falta —sollozó, más de una vez había imaginado que todo lo que había vivido solo sería un sueño y que al final solo su gran imaginación le había jugado una broma de mal gusto. Siempre creyó en que solo era una chiquilla en busca de una familia y por ello había imaginado el estar en todo lo relacionado con el mundo de Harry Potter.

—Querida ellos no te han olvidado, lo que viste no es real —Lía se hincó para estar a la misma altura que Alessia, hizo que esta le mirara y sonrió un poco—. Puedo asegurarte que nunca podrán olvidarte, mírate eres imposible de olvidar. Nosotras te recordamos —señalo a las dos chicas que estaban detrás suyo, Alessia miro a las tres chicas aun con lágrimas en los ojos y sollozó al ver que ellas podían tener razón—. Vamos, no creo que seas una damisela en apuros —se levantó y estiro su mano hacia Alessia.

—Gracias —Alessia tomó la mano de Lía y se levantó aun teniendo un poco de hipo tras haber llorado.

—Las encontré —las cuatro chicas giraron encontrado a Isabella con la nariz roja muestra de que había llorado, se acercó a todas y sonrió viendo que todas estaban bien, solo faltaba Megan de estar con ellas.

—¿Cómo lograste salir? —____ era la más intrigada por esto, ninguna había podido salir sola sin la ayuda de Lía, pero la chica que parecía ser la más pequeña de todas sí había salido de lo que fuera que les hubieran hecho.

—Lo que fuera que estaba diciéndome cosas horribles se metió con mi hijo, así que al golpearlo todo desapareció —se encogió de hombros queriendo no recordar todo el tiempo que había llorado por las cosas que supuestamente Carl le decía, pero en cuanto mencionó a Jason algo en Isabella se encendió y provocó que luchará contra su miedo y lo venciera.

—Tengo curiosidad sobre cuál es tu edad, pero no tenemos tiempo para eso. Felicidades por vencer sus miedos —sonrió Lía, pero al ver un reloj cerca de ellas notó que ya solo quedaba media hora para la medianoche y seguía faltando una de ellas—. Debemos encontrar a la sirenita, el tiempo se acaba.

—¿Buscaban esto? —una voz desconocida las hizo girar encontrándose a tres chicas totalmente desconocidas para las cinco y justo a su lado en lo que parecía una burbuja estaba Megan y esta tenía los ojos cerrados como si estuviera dormida.

—Nadie saldrá de aquí —la mayor de las hermanas sonrió con malicia, después de ver que las chicas que necesitaba para poder romper el hechizo que mantenía a su familia encerrada en una casa estaban por escapar decidió que era momento de actuar.

—Eso ya lo veremos —Hailey tomó su collar transformándolo en una espada, Alessia tenía sus poderes sin utilizar su varita, Isabella usaría el cuchillo que siempre traía con ella y las únicas que no tenían armas eran Lía y ____ por lo que pelearían sin arma alguna, ellas estaban dispuestas a salir de aquel lugar y no dejarían a la rubia en manos de aquellas chicas.

Última parte en The Maze Runner