— Sí, Jisung, claro que saldría contigo! ¿Sabes porqué? Porque te amo desde hace varios años, porque soy un cobarde que le costó admitir su orientación, porque no sabe cómo revelarte sus sentimientos para que los creas a la primera. ¡Perdón! Es que leí muchos libros y he visto varias películas donde los gay no son tomados en serio y sufren por no saber amar, me hice de ideas, la conclusión, fácil, si no era lo suficientemente gay tú ibas a creer que solo jugaba contigo y no lo haríamos en serio, entonces por eso le pedí ayuda a mi amigo Christopher, para que sea mi novio y yo parecer un verdadero gay pero bueno, Chris era demasiado genial y yo parecía muy pequeño a su lado, por eso me busque un nuevo novio, menor para poder adaptarme y parecer más maduro. Hyunjin y yo fuimos novios por tres años y luego cuando parecía que iba a confesarme a ti Han Jisung, dije "no me mejor no" así que le pedí a Felix que fuera mi novio pero por conciencias del destino terminé con dos novios, ahora pensaba que tendría que pasar otros largos años para poder confesarte pero no, lo estoy haciendo ahora Jisung. Pero bueno contestado a tu pregunta, sí, si saldría contigo es más salgamos justo ahora, dejaré todo por tí, ¿quieres internar? — Suelta un gran suspiro sintiéndose agotado por todas las palabras que dijo, Hyunjin mira a Minho negando con la cabeza. — Eso tuviste que decir, bobo, quizá menos palabras. O por lo menos no quedarte como un idiota.

Hyunjin miró seriamente a Minho y este solo regresó la mirada, podría sentir la gran bruma y vergüenza que albergaba su pequeño gatito. Minho tenía levemente sus mejillas sonrojadas, jugaba con su lengua y mordía sus mejillas internas ante ello.

Ahora simplemente suspira recordando que sucedió. Y lo patético que fue.

Antes de eso, ve por última vez a sus novios, Felix asiente dándole la razón a Hwang.

Ahí iba un flash Back.

Han suspiró formando una pequeña e ingenua sonrisa teniendo que pasar la lengua por sus labios para calmar la bruma y jugar a una mala broma para su amigo. Era eso o seguir esperando una respuesta que no llegaba al pasar de largos segundos.

» — Supongo que aquí no funciona la parte del discurso no homo, Minho, no digas nada, seguramente eres un cursi y dirás algo para hacerme sentir mejor.

Jisung tragó saliva, estaba más o menos ebrio, no tenía la excusa de pensar que no recordaría esa conversación, quizá el alcohol lo ayudó a formular esa pregunta muy dentro de su pecho pero no estaba de ánimos para más.

Ni siquiera el sabía porque la había hecho o que quería esperar de respuesta.

— Claro que saldría contigo, ¿quien no quisiera? eres demasiado genial, quizá puede que nosotros... seamos esas almas gemelas que nacieron para estar juntos...

Han rio, dios, se sentía extremadamente patético, no solo él, la situación su amigo, todo.

Le dió un signo de asco la respuesta y la conversación. Negó, aún queriendo tener puesta la máscara de desinteresado, o fingir que no le importaba a tal grado de seguir siendo el amigo juguetón que es para Lee.

Entonces rio, tan pateticamente que esperaba se escuchará creíble porque ciertamente para él no lo era.

No había ni un ápice de ello.

— Definitivamente si eres demasiado cursi, Lino. — Sabía que su amigo podría llegar a odiar ese apodo que le dió una vez Jeongin, no quería hacerlo pero lo sentía cada vez necesario para que fuera más creíble. — Sabes, yo me voy, no quiero que Felix y Hyunjin crean cosas que no son.

Cómo si no le importara Han se despidió con un gesto de manos dándole la espalda a su amigo dejándolo solo en aquel oscuro pasillo.

Sin saber que probablemente el corazón de Lee había sido lastimado con sus palabras y forma de expresarse. »

Jisung al principio mantenía sus ojos clavados en Minho pero luego queriendo salir de esa tensión nerviosa río negando. — Definitivamente eres muy cursi, pero no gracias no quiero ver a Hyunjin y Felix que salgan y vean que estoy hablando con su novio. »

FIN DEL FLASHBACK.

— Han, no me ve más que un amigo, decirle ahora sería simplemente separarlo de mí. Teóricamente me rechazó y me mandó a la mierda en ello.

Lee mayor ocultó parte de su rostro en su mano, sollozando en silencio, aún así lo suficientemente agudo para ser escuchado por sus dos novios.

— No sé de qué tengo más miedo, que me rechacé o que no me tome en serio.

— Está bien. — Felix lo abrazó por la espalda, agradeció el cálido gesto del más pequeño. Aún con esa voz grave en el rubio y su rostro infantil, de una manera u otra lo hacía sentir bien. — Dale tiempo, todos merecen tiempo, Minho, sabes que está idea es lo más extraño, pero tú también te darás cuenta de tus errores y lo que pasará en un futuro. Todos lo haremos.
Como dice una serie que miré, "todo lo que quieras lo podrás alcanzar"

La puerta de la habitación de Minho se abre, hace poco que habían llegado a su hogar. Eran casi las diez de la mañana casi no durmieron, todo era platicas o intentos de conciliar el sueño. Entonces, con el desvelo hasta la frente, los tres dan un pequeño brinco del susto aunque relajan sus posiciones de ver al señor Dae Han. Poco les dura la tranquilidad cuando el adulto habla con su característica voz gruesa y muestra la expresión de su rostro bastante seria.

— Los tres, a la sala.

Con esas simples cinco palabras, Dae Han se marcha dejando la puerta abierta y con ello el terror de que aparezca pronto por no apurarse en su orden.

— ¿Por qué parece que tu papá quiere meternos a una caldera gigante con agua caliente? — Felix hace la pregunta, Hyunjin le da la razón asintiendo más Mihno no tiene idea alguna.

— ¿Hicimos algo malo?

No niegan, no dicen nada, caminan en silencio a la sala donde ambos señores están sentados en sus cómodos sillones, ambos con sus tazas de color gris mate los tres sabiendo que ambos adultos están en su hora del café.

— Minho.

El pequeño Lee sintió un escalofrío recorrer desde su cabeza hasta sus tobillos y viceversa, escuchando la voz gruesa de su padre Grisha. Su papá tenía una voz demasiado dura, aspera, gruesa, grave, no sabía cómo interpretarla más que con una solo sentimiento. Temor.
Aunque así era la voz de su padre, podría saber con exactitud como la usaba, si estaba tranquilo o enojado, en este momento se escuchaba enojado.

La pose firme aún sentada de su alto padre, Dae Han, lo confirmó. Estaba en problemas.

— Papis...

Escuchó cómo si fuera una explosión. (Exagerando, claro, así era él) cuando su padre dejó la taza con su humeante e hirviente café en la mesa sin derramar una sola gota aunque está aún se miraba bastante llena y el golpe se escuchó algo fuerte.

— Tomen asiento... Niños.

Ambos Lee menores y Hwang obedecen justo al instante casi en simultáneo.

No era exagerar, aveces parecía otras se daban cuenta que no. Más cuando solían burlarse de que Minho tuviera demasiado respeto - miedo a sus padres. Pero ahora sabían que no era exagerar.

Ambos señores eran altos, con voces gruesas y varoniles, los padres de Lee quizá tenían dos adicciones, el café y el ejercicio. Era como se miraban en la mayoría. Lee Dae Han, es doctor psiquiatra que actualmente trabaja en una clínica privada.

Yoo Grisha había dejado su trabajo para ser la mano derecha de su hermana Seoho. Aparte de ser el manager de los dos modelos, claro.

Tenían poder en su mirada. No parecían intimidarse con nada, fácilmente lograban tener el respeto de cualquiera.

Y claro, ambos soldados en sus tiempos jóvenes.

Felix apenas llevaba unos días desde que los señores le brindaron hospitalidad en su casa, así mismo pocos días de conocerlos y realmente, en esos pocos días, había logrado tenerles gran respeto y admiración.

— Legalmente son "mayores". Lo sabemos. — Habló primero Dame Han.  — Para nosotros, niños sin compromiso o conocimiento de la vida adulta.

Tragaron saliva, ¿A dónde iba esa conversación?

— Minho. — Grisha se dirigió justo con la mirada solo a su hijo, Lee nuevamente tensó su cuerpo estando completamente recto haciendo un pequeño asentimiento para darle atención a las palabras de su padre.  — Está bien que salgas, que tengas pareja, que tomes tus propias decisiones. Agradecemos que tengas esa libertad con nosotro. Sin embargo. No deseamos mucho como padres. Una llamada, un mensaje para avisar que no llegarás a dormir, no era demasiado, no era mucho tiempo. ¿O lo es? Dime y dejamos de preocuparnos por ti.

Ahora tenía sentido, dios, ahora sí tenía sentido sentirse tan abrumado y aterrorizado por la llamada.

Negó con juntando sus piernitas, y su rostro delataba lo aterrado que estaba de aquella llamada de atención.

— Mientras vivas en esta casa, tienes que seguir nuestras pequeñas reglas, una de esas es llegar a dormir o pedir permiso para no hacerlo.

Volvió a asentir mirando los oscuros ojos de su papá Dae Han.

Si creyeron Hyunjin o Felix que estaban libres de un sermón.

Se equivocaron todos.

— Te estuvimos marcando. — Dice Dae Han, Minho sigue asintiendo y ahí es cuando el golpe de la verdad hace que sea más doloroso.

— También a tí, Hyunjin. — Grisha mira al alto chico que no le llega a los hombros, literalmente. Hyunjin traga saliva y ahora el es quien asiente con cierto pánico.

— También a tí, Felix. — Dae Han mira al Australiano y como sus dos novios, empieza a asentir con miedo y la cabeza gacha. — Sus celulares sonaban pero ninguno contestó.

Automáticamente los tres asintieron con la culpa golpeando sus espaldas.

Hyunjin se siente nervioso debido a que no llegó a escuchar ninguna llamada mientras dejaba besos por todo el cuerpo de Felix.

Felix se sonroja porque si llegó a escuchar un celular pero no le dió mayor importancia ya que estaba demasiado extasiado sintiendo todos los besos que Hyunjin le daba.

Minho había dejado su celular en la habitación, todo el tiempo que estuvo con Jisung le fue imposible escuchar su celular.

— Lo sentimentos. — Dicen los tres con la cabeza gacha, Dae Han y Grisha niegan con la cabeza mirando a los menores.

— Niños... ustedes deberían de tener más cuidado, Felix somos responsables de tí hasta que te den tu departamento, Hyunjin tus padres tienen confianza de dejar que duermas aquí en nuestra casa, de estar días enteros con Minho no sentimos responsables por ti. — Grisha los mira a los tres pero ahora sus ojos obligan a Minho a alzar la cabeza y hacer contacto visual con su padre. Minho está aterrado tragando en seco ya que su saliva a desaparecido por completo desde su garganta. — Eres nuestro hijo, tengas diecinueve o tengas cuarenta, mientras estemos vivos queremos saber si estas bien, si no ha pasado nada contigo, puedes beber y divertirte pero si vueles a ignorar nuestras llamadas, dejaras atras tus privilegios, salidas, coche, trabajo y regresarias a la escuela.

— ¿Queda claro, los tres?

Otra vez los tres asintieron velozmente aún mantenimiento la cabeza gacha.

— Muy bien, ¿algo que quieran decirlos?

— Felix también es mi novio...

Atentos a la primera línea de Felix 🫣

Quiero dar un spoiler.

Antes. Aunque está historia esté publicada desde 2021, quería decir que llevo dos años escribiendo, quisiera actualizar más veces seguidas pero por cosas de llevar dos años con esto, hay cosas que deben ser cambiadas. Y así.

Claramente no tengo la misma idea de hace dos años que ahora.

Ahora sí el spoiler para que se den una idea.

El número de arriba no es el número de capitulo, obviamente.