Felix había logrado convencer a Jeongin de que dejara a Chan llevar las cosas solo, y aunque Jeongin le había dicho que quería sólo platicar amablemente con él, Felix se negó, y le pidió por favor que lo dejara, y sobre todo que confiara en él. Al final Jeongin cedió y le mandó un beso.

Lo siguiente que Felix tuvo que pasar esa misma mañana, fue cómo Changbin y Hyunjin lo envolvieron de preguntas, y cómo Chan se hacía el desinteresado, cruzado de brazos en el sillón.

-Observa esa cara, Hyun... bonita sonrisa, veo sus ojos brillando, yo sé lo que pasó - Changbin disfrutaba demasiado de ver cómo Felix lo miraba confundido, y cómo Chan rodaba los ojos, porque sabía que estaba avergonzado, y ver a Chan avergonzado siempre le resultaba gracioso.

-Cállate, no quiero saber nada... - Hyunjin acariciaba las orejas de Felix, quien se encogía de hombros ante las divertidas miradas de parte de Changbin. Prefería mantenerse al margen, algunas veces no entendía ciertas conversaciones entre Changbin y Chan, Changbin le agradaba, pero no podía negar a que a veces le parecía extraño. Aunque Chan también, pero todo estaba bien para él.

Hyunjin le había repuesto el frasco de jarabe perdido, aún cuando Chan opinaba que no era necesario, Felix insistió a Hyunjin con una expresión en su rostro de suma dolencia y ternura. También había recibido más galletas de avena de su parte, y un regaño porque Chan le había comprado unas de chocolate.

-Si vuelves a darle pastel a Felix sin decirme te fosilizaré debajo de mi cama. - A Felix también se le había escapado en una ocasión su experiencia gloriosa con el pastel que Chan lo había llevado a comer. Y bueno, Hyunjin regañó a Chan de nueva cuenta.

-Una vez al año no hace daño - excusó Chan.

-Y dos por quincena te pone de buenas - Felix había interrumpido la conversación entre sus hyungs.

-Ah, te está contagiando lo idiota... - Hyunjin rodó sus ojos y se cruzó de brazos -no le hagas mucho caso a Chan, Felix.

Hyunjin decidió conseguirle un celular a Felix, no solo para estar más en contacto con él y poder tener una mayor vigilancia a cómo Chan lo cuidaba, sino porque no quería arriesgarse demasiado. Todo pese a que una tarde, en la que Chan y Felix decidieron salir a pasear al centro comercial porque Felix había oído en el trabajo que habían abierto una heladería ahí y era muy buena, Chan terminó perdiendo de vista a Felix por estar discutiendo con un niño (y después con su mamá) acerca de que él había ordenado el último cono con cubierta de chocolate que ese niño mal educado quería tomar.

Chan tuvo que ceder su cono especial al niño, después de ser insultado por la mamá de éste, y negarse a un cono normal. Además, de que se resignó a llamar a Hyunjin después de que había buscado a Felix durante un rato.

-Hey Hyun, amigo... hablo porque tengo una duda, es que, bueno, ¿a donde podría ir un gato en un centro comercial? es para, una tarea, ya sabes.

-Que te conteste Felix, es un gato.

-Ah sí, cierto, Felix, es un gato... es mi gato, un buen gato que está conmigo, a mi lado, lo quiero mucho, gracias por cuidarlo tanto.

- ¿Qué le hiciste ahora?

- ¿Yo? yo no le hice nada, ¿como que ahora? yo nunca le hago nada malo a Felix, él está bien...

- ¿En qué museo de historia natural te gustaría pasar el resto de tus días fosilizado?

- ¡Se perdió! yo solo me di la vuelta y ¡bum! ya no estaba, desapareció... es que es muy curioso y bueno, yo quizá estaba pensando en qué comprarle porque soy muy detallista con él, sabes... deberías ayudarme a encontrarlo, porfis...

Resultó ser que Felix estaba en una tienda de mascotas, platicando con la encargada acerca de lo mal que le parecía que vendieran mascotas en lugar de ponerlas en adopción. Cuando Chan y Hyunjin lo encontraron, la encargada del establecimiento estaba intentando consolarlo, porque había empezado a llorar frente a la jaula de un par de gatitos peludos que le maullaban entre las rejas de su compartimento.

-Ustedes son pequeños, y deberían tener a su familia... - Felix acariciaba los pequeños hocicos de los gatitos, que le respondían con un suave ronroneo, dando la impresión de estar consolando a Felix, éste ahora había empezado a recordar cuando él era pequeño.

-Lo siento joven, él llegó y empezó a hablar con los animales, después se enojó conmigo y de repente empezó a llorar, no sé qué le ocurre... - la chica se había encargado de explicarles la situación a Chan a Hyunjin, mirando a Felix con el par de gatitos.

-Disculpe usted señorita, cierto dueño irresponsable que no presta atención a su mascota es el culpable. - Hyunjin en realidad quería decir "cierto novio irresponsable" pero se limitó a lo que dijo. Tomó a Felix de la mano, mirando molesto hacia Chan, después de hacer que el menor se desprendiera de la jaula lo condujo fuera del centro comercial, con Chan siguiéndolos detrás.

-Felix es muy sensible con esas cosas, creí que lo sabías - Hyunjin le había dirigido la palabra a Chan una vez que Felix ingresó al auto y quedó sin escucharlos.

-Ya lo sé, no sabía que terminaría allí, y mucho menos llorando, lo siento ¿si? debo cuidarlo mejor... - Chan se recargó en el cofre el carro, con sus manos en los bolsillos de su pantalón. En realidad disculparse no era muy suyo, y a pesar de que muchas cosas en él habían cambiado con la llegada de Felix, no se sentía mejor con decir que lo sentía cuando tenía a Felix llorando en la parte trasera del carro. Ni siquiera había conseguido su helado.

-Cuando Jeongin adoptó a Felix... - Hyunjin empezó a hablar después de haber soltado un suspiro. Se había puesto junto a Chan con los brazos cruzados -le contaron que lo habían rescatado de cría, así que no conoce a su madre, y si tuvo hermanos no lo sabrá nunca, es por eso que es muy sensible con esto de la familia y querer compañía, supongo...

Chan asintió, mirando hacia el suelo, dándose cuenta de que nunca se había detenido a pensar en eso, y que era algo egoísta el no haberlo hecho.

-Fue adoptado una vez de cachorro, pero adoptantes no resultaron ser la familia que él merecía, terminó siendo un gato de la calle, así como nació. Yo creo que por eso es tan miedoso, y a veces desconfiado, pero la verdad es que su nobleza le impide desconfiar mucho, a veces es malo ser muy amable, en especial para Felix. Después llegó Jeongin a amarlo como se merecía por primera vez, y después llegaste tú, a hacerlo llorar, a decirle feo, a decirle que era un gato malo, a hacerlo llorar de nuevo, a darle galletas de chocolate y pastel, a perderlo en el centro comercial...

Chan soltó un bufido, no era como si pudiese quejarse, porque Hyunjin tenía la razón. Y un sentimiento de culpa lo estaba invadiendo, muy a pesar de que hacía tiempo él ya había aceptado su posición con Felix. Sentía ahora que lo que hacía no era suficiente, el hecho estaba en que Felix merecía mucho más de lo que él era capás de darle.

-Pero a enamorarlo. Y eso compensa todo lo anterior... - Hyunjin sonrió de lado, marcando su hoyuelo cuando sus miradas se cruzaron - ¿no es así?

-Yo... supongo, que sí... - declaró inseguro. En realidad ahora dudaba, porque era muy cierto que Felix no merecía todos aquellos malos momentos que lo hizo pasar, y su culpa se lo recordaba.

-No lo supongas, tienes que estar seguro de ello, porque la manera en la que haces sentir a Felix no puede dejar espacios a dudas. Después de todo, ya es tiempo de que ese gato sea feliz, y tú maldito idiota, puedes lograr que lo sea.

Chan había recibido una amigable palmada en su hombro, para después ser dejado atrás por Hyunjin, quien se dirigía a entrar al carro. Esa ocasión Hyunjin compró helado para ambos.

Muchas gracias por leer<3