Capítulo 1
Una joven azabache sonreía junto a sus dos amigas y compañeras.
— Vamos, Kagome... deberíamos de haber llegado ya a casa de Koga-kun — habló la chica pelirroja.
— Eso es lo que piensas tú, Ayame — reclamó la morena.
— Sango-chan tiene razón, — razonó la azabache — no son más de las seis de la tarde...
— ¡Bien, me rindo! — exclamó la chica de ojos esmeralda — Sango, Kagome, vayan a sus apartamentos y arreglense. Nos vemos aquí a las ocho en punto.
Las dos chicas sonrieron y asintieron.
Kagome comenzó a caminar sola, ya que ella vivía algo lejos de sus dos amigas, de repente, notó un bulto negro en el suelo.
— Es un gato... — murmuró para sí misma. — ¿Estará herido?
Lo aferró entre sus brazos y lo examinó, estaba sucio, pero no herido.
Sonrió aliviada y corrió a su apartamento con el gato negro.
Metió al gato en la bañera y llenó un cubo con agua tibia para luego meter al animal, este pareció suspirar de satisfacción cuando, con una pequeña esponja, empezó a enjabonarlo para después aclararle y sacarle de allí envuelto en una toalla.
El gato negro ronroneó mientras la joven lo secaba cuidadosamente con la toalla.
— Te voy a llamar Kuro—sonrió— por tus hermosos ojos azules, ¿te parece bien, Kuro?
Recibió un maullido como respuesta mientras seguía ronroneando.
Miró la hora y rápidamente se metió en su baño, limpiándolo para después usarlo ella y llegar a su cuarto a cambiarse de ropa, cuando salió de la habitación, solo quedaba media hora para las ocho.
Se acercó a la nevera, sacó la leche y puso un poco en un plato colocándolo en el suelo observando como el felino se acercaba.
— Perdóname Kuro, pero no tengo comida para gatos... debo irme.— sonrió — Sé un buen gatito.
Acarició su cabeza y salió del piso. Kuro tomó un poco más de leche antes de alejarse y tumbarse en el sofá ya en su forma humana.
— Te tocó la lotería, Bankotsu. — se dijo a sí mismo — Te acaban de dar un masaje relajante mientras te bañaban. Lo siento señorita pero, — sacó su móvil de su bolsillo— no voy a ser un buen gatito...
¡Oh Dios! Llegaba tarde. Llamó a un taxi, que llegó enseguida y envío un mensaje a sus amigas diciéndoles que ya iba para allá.
Pagó al taxi antes de salir y miro sorprendida como la gran casa de Koga parecía pequeña por toda la gente reunida allí. Tranquilamente caminó hasta la sala principal esquivando borrachos por el camino y observando a su alrededor.
— Debí de haberme quedado con Kuro...
— ¡Kagome-chan, estamos aquí!– exclamó Sango mientras agitaba su mano al aire.
La azabache sonrió y se acercó al pequeño grupo montado compuesto por Koga, el apuesto moreno de ojos celestes, Miroku, su primo mujeriego y ojizarco, y sus dos inseparables amigas.
— Ya pensé que no vendrías – río el anfitrión dejando un sitio vacío a su lado.
Ella lo tomó y le sonrió para después saludar a Miroku y hablar con las dos chicas.
– Entonces, — habló la pelirroja— ¿dices que él vendrá?
– ¡Claro! Creo que es el mejor amigo de Koga...
— ¿Segura?
Kagome las miró confundida.
— ¿Quién va a venir?
— Bankotsu Mashima — la pelinegra le quitó importancia.— ¿No sabes quién es? Es uno de los siete hijos del dueño de la Empresa Takena. Y estudia en la facultad que está frente a la nuestra...
— Por ahí viene.— dijo Ayame.
El joven apareció serio, pero sonrió en cuanto vio a Koga y se acercó para saludarle.
— Pensé que tardarías más. — Río el ojiceleste
— Digamos que tuve ayuda para prepararme. — bromeó.
Su pelo era negro azabache largo y trenzado en una larga trenza. Sus ojos era azules como el cielo y brillaban por sí solos.
El joven notó la mirada de Kagome y se giró a observarla también, para luego sonreír.
— Te presentó, Bankotsu, él es Miroku ya lo conoces...— el nombrado levantó la mano para saludarlo— la morena es Sango, la pelirroja, Ayame. — Ellas solo sonrieron— Y esta de aquí es Kagome.
— Encantada — dijo extendiendo su mano.
Él soltó una carcajada y se acercó a abrazarla para luego decir:
— El gusto es solo mío.
La azabache no le dijo nada más y se quedó pensativa un momento...¿Por qué ese chico olía como su jabón de baño?
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¿Y qué tal? :3 Estoy emocionada
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