"Itami" miro a todos lados, donde su vista llegaba decenas de hombres y mujeres se abrían paso, algunos hasta besaban sus pies, otros lloraban de emoción, gritando incoherencias, "salvenos dios emperador","cuide nuestras almas","perdone nuestras imperfecciones","piseme emperador","sane a mi madre"

¿Que rayos tenia esta gente en la cabeza?
El no era un dios, era un simple mortal, y de repente pensó en una posibilidad aterradora, alguna versión suya había viajado al universo de donde procedían estas personas y había organizado y creado un culto a su persona, por ello lo llamaban Dios Emperador

Miro a los pobres desgraciados, que seguían con sus oraciones, podía entenderlos relativamente bien por que sondear sus mentes no era un problema, escaneo todo lo útil y se preparo mentalmente para reducir su fanatismo con el poder de la ciencia

- Oh dios Emperador, somos hijos de Krieg, nacemos y morimos en su nombre, ¿alguna ve alcanzaremos el perdón? - "Itami" miro como uno de los hombres de gabardina se arrodillaba frente a él, quitándose la máscara y su casco,  revelando un rostro pálido y una mirada demacrada

- Ehm... - "Itami" miro hacia todos lados y luego comprobó que estaba solo, se arrodillo y coloco una mano sobre el hombre - Vuestra meta es noble, pero deberían esforzaros más en conseguir lo que desean - Las palabras salieron en tono solemne y con la mayor elocuencia posible, aunque "Itami"  no tenía idea de lo que había querido decir

- Mi señor - el hombre de gabardina coloco el rostro en tierra - ¡nos esforzaremos aún más para alcanzar su perdón!

El hombre se puso de pie de un salto y se alejo del grupo de hombres, corriendo mientras volvía a colocar su máscara en su lugar,  al emperador le dio la impresión que la había cagado, pero no sabía en qué forma

Esto de ser adorado no estaba tan mal de hecho, seguramente podría pedir cualquier cosa y estos locos lo harían, si, seria buena opción, podrían usar la fuerza de estos tipos para así conquistar la tierra y unirla bajo un gobierno que se basara en la ciencia y el humanismo, podría adelantar sus planes con milenios de antelación y permitirle a la humanidad alcanzar las estrellas, si, si, todo cuadraba, solo debía manipular a esta bola de idiotas y hacer de las suyas, era un genio, nada podía salir mal

- Dios emperador - "Itami" se giro solemnemente al escuchar estas palabras, con una sonrisa que jamás había tenido desde que mato a su tío hace tanto tiempo- ¿podría acompañarnos?

- Claro que os acompañaré, por que es el deber de un Hombre para con su pueblo, así que hijos míos, llevenme a mi destino

"Itami" sintió que ahora si que había metido la pata, el hombre vestido elegantemente con una gabardina negra y decoraciones rojas le sonrió, e hizo una reverencia, luego lanzó un grito semi triunfal y los demás hombres y mujeres se pusieron de pie, mientras seguían lanzando plegarias a su figura

Sea a donde fuera que iban, "Itami" debería dejar esa fachada de idiota y poner manos a la obra, puede que no aprobara los métodos que su otra versión había empleado para hacerse con el poder, pero podía sacar provecho de eso
Si, el momento de la gloria estaba cerca y la humanidad se volvería imparable