Seiya había logrado destruir el pilar del Pacífico norte, él y Kiki iban en camino a ver a los demás para destruir los pilares restantes mientras que en el pilar del Pacífico Sur estaban Tsume y Io de Escila comenzando su batalla.

— ¡Venga, vas a probar mis garras! — Dijo Io con arrogancia.

— ¡Las únicas que probaras son las mías! ¡Garras Cósmicas! — Respondió Tsume confiada.

Ambos atacaron con sus garras sorpresivamente las garras de Io de Escila no afectaron a Tsume pero las de ella lograron alcanzar a Io de Escila dejándole un rasguño en el rostro con unas gotas de sangre.

— Impresionante, lograste alcanzar a tocarme — Dijo el pelirosa limpiándose la sangre de la mejilla — Pero no será suficiente.

— Hagamos esto rápido, mis amigos y yo debemos salvar a Athena — Respondió Tsume queriendo apresurar la pelea.

— ¡Ahora veras! ¡Presa del Águila! — Una de las criaturas de Escila el águila intento atacar a Tsume pero ella lo esquivó y apareció detrás de Io.

— ¡Nunca subestimes a tus oponentes, Aguja Escarlata! — Impacto a Io de Escila contra uno de los muros del lugar y este rápido se puso de pie y usó a otra de sus bestias.

— ¡Colmillo del Lobo! — La ilusión de un lobo atacó Tsume pero esta detuvo la cabeza de la bestia y concentro el cosmos en su mano y desvaneció la ilusión — ¿¡Pero como!? — Exclamó sorprendido el marino de Escila.

— Ahora sigo yo, Relámpago de Voltaje — Atacó a Io de Escila con la técnica haciendo que él cayera al suelo pero al momento de levantarse usó a otra bestia.

— ¡Aguijón de la abeja reina! — Hizo aparecer una enorme ilusión de una abeja para que atacara a Tsume.

— ¡Plasma Relámpago! — Tsume respondió al ataque con una de las técnica que aprendió de Aioria contra la bestia y alcanzó a atacar también a Io de Escila.

— No puede ser — Io estaba herido y sorprendido — ¡¿Como es que no te alcanzo ningún ataque!?

— Eso debes saberlo tú ya que eres el que me ataca — Respondió seriamente. Estába enojada por Saori, quería ir a ayudarla lo más pronto posible.

— ¡Ya veras, Estrangulación de la serpiente! — Apareció una enorme serpiente que atrapó a Tsume. Io de Escila sonrío al ver que alcanzó a atrapar a la caballero pero la serpiente explotó cuando ella fue rodeada con el cosmos de Tsume.

— ¿Oye eso es todo lo que hacen las bestias de Escila? — Preguntó Tsume esperando terminar esta pelea.

— Demonios — Gruñó molesto — ¡Inhalación del vampiro! — Io invoco a varios murciélagos para atacar a Tsume pero esta hizo desaparecer a los murciélagos con su Furia Eléctrica.

Eso desesperó a Io de Escila al ver que ella fácilmente se lo libraba de los ataques de sus bestias.

— ¡Ahora daré mi mejor golpe! ¡Zarpazo de Oso! —Io de Escila había utilizado a la sexta bestia de Escila pero el oso desapareció al ser tocado por el Plasma relámpago de Tsume y alcanzó a atacar a Io despojándolo de su Escama (o Armadura) de Escila.

Tsume parecía no tener ni un rasguño, solo la respiración un poco agitada debido al esfuerzo de atacarlo.

— ¡Imposible! ¡Yo nunca alcance a darte un golpe! — Exclamó enojado — ¡Pero ahora veras no pensé que tendría que utilizar mi ataque definitivo contra ti! ¡Te demostrare el verdadero poder de Escila, Gran Tornado!

— ¿¡Pero que...!? — Tsume fue atrapada por el ataque de Io de Escila y había caído al suelo con algunas heridas pero ella se puso se pie — Ahora si lograste alcanzarme — Rió un poco — Pero eso no me detendrá ¡Fulminato de Mercurio Rayo Rojo! — Con esa técnica Tsume logró acabar con Io dejándolo en el suelo mal herido.

Ella se acercó a él al verlo en el suelo, el marino estaba más herido que la misma Tsume quién era resistente a todo los ataques a menos que si Io hubiera sabido sobre su punto débil podría haberle causado más daño a ella como él quería.

— Demonios, como es que...eres un digno oponente Tsume de Aquiles — Dijo el marino débilmente.

— Agradezco el halago pero debo destruir el Pilar del Pacífico Sur — Le dijo Tsume con decisión.

— No podrás lograrlo — Le dijo Io al momento — Es prácticamente imposible que logres destruirlo.

Tsume y Io a lo lejos vieron que Seiya había logrado Destruir el Pilar del Pacífico norte.

— Nada es imposible ya vez, el Pilar del Pacífico Norte a sido destruido — Le dijo Tsume a lo que el marino que yacía en el suelo lo miró igual y luego a ella.

— Veo que si — Dijo débilmente — ¿Pero tú como lo lograras?

— Ya veras — Tsume concentro todo su cosmos para tratar de destruir el Pilar pero por medio de teletransportación apareció Kiki con la armadura de Libra.

— ¡Tsume espera! — La llamó el ariano.

— ¿Kiki? — Dijo ella un poco confundida al verlo.

— No podrías destruirlo — Le informó — Necesitaras utilizar una de las armas doradas de libra así Seiya logro destruir el pilar.

— Así que...así fue como lo logró, bien rápido hagamos esto — Dijo Tsume.

Kiki bajó la armadura la cual se dejo ver sus armas, Tsume tomó una y atacó el pilar haciendo que se destruya en pedazos.

— ¿¡Pero como es posible!? — Exclamó Io sin poder moverse.

— Nada es imposible — Respondió Tsume mirando el pilar hecho pedazos y como el cielo cambio repentinamente.

— Rápido, tengo que llevar la armadura con los demás — Dijo Kiki tomando la armadura.

— De acuerdo — Dijo Tsume

Desde lejos estaba alguien sorprendido por la pelea al ver que Io de Escila no pudo con Tsume.

— Vaya...debo decir que me quede impresionado, pero espero pronto conocer a Tsume en persona y no a lo lejos como ahora, debo informarle todo esto a La Diosa Marina cuando regrese a verla — Pensó Patroclo viendo a lo lejos como Aquiles se alejaba del lugar para ir a los demás pilares al igual Kiki.