Desde que Poseidón secuestro a Saori empezó a llover por todo el mundo, unos lugares eran inundados y otros atacados por maremotos, mientras tanto Tsume peleó contra unos marinos pero estos quedaron noqueados en el suelo. Ella siguió para buscar a Saori en el reino de Poseidón pero en Asgard, Seiya, Shiryu, Hyoga, Shun e Izumi estaban con Hilda de Polaris.

— Fue Poseidón quien se llevó a Athena — Dijo Hilda asegurado aquello.

— Tsume-Nee fue detrás de ellos pero debemos ir a ayudarla — Dijo Izumi preocupada.

— ¿Hay alguna entrada al reino de Poseidón aquí en Asgard, no es así? — Preguntó Seiya.

— Así es — Afirmó Hilda — El poso sin fondo esta aquí en Asgard es una de las dos entradas al reino de Poseidón.

— La otra está en Cabo Sunion — Dijo Flare — Pero pocos saben donde queda exactamente entre las profundidades.

— Debemos ir a ayudar a Tsume y salvar a Athena — Dijo Hyoga.

— Será mejor irnos de una vez — Dijo Shiryu.

Salieron del castillo de Hilda para ir en busca de esa entrada al reino de Poseidón para ayudar a Tsume a salvar a Athena.

(...)

Los caballeros fueron hacia ese poso, el cual tenía un torbellino oscuro que lo protegía, entraron en aquel poso y después habían llegando al reino de Poseidón.

— ¿Que paso? — Preguntó Shun confundido.

— ¡Miren! — Exclamó Seiya — ¡El cielo esta formado por el agua!

El cielo era el agua de los océanos mientras que donde estaban de pie había oxígeno ya que podían respirar.

— Es el templo submarino de Poseidón — Dijo Hyoga mirando a lo lejos dicho lugar — ¿Pero donde esta Tsume?

De pronto escucharon un hermoso canto a lo lejos, como si los estuviese llamado, los caballeros se dirigieron hacia ella al igual que Tsume pero ella había llegado primero que sus amigos.

— ¿Una sirena? — Preguntó Shun al ver una armadura fucsia a unos metros de su amiga pelirroja.

— ¿Tsume? — La llamó Seiya viendo que su amiga miraba fijamente esa escama de la marina.

— Será mejor que salgas — Dijo Tsume con tono serio y amenazante

Sus amigos se sorprendieron al ver que la amenaza de Tsume fue respondida dando entender que estaba oculta en los alrededores.

— Parece que a ellos si les gusto mi canto y a ti no — Dijo la marina rubia que yacía escondida — Era obvio que no te afectaría al ser una Nereida, Aquiles.

Frente a ellos estaba una armadura de sirena pero después aparece en el cuerpo de Thetis y se hace presente ante ellos.

— ¿Que? — Dijo Hyoga asombrado y confundido.

— Esa es la única diferencia entre tú y yo — Dijo la marina Thetis a Tsume.

— Hay cosas que no se sobre mi — Le dijo Tsume a la rubia — ¿Y tú apenas me dices que soy una Nereida? — Tsume respondió sonriendo de lado.

— Tal vez no me conoces pero se muchas cosas sobre ti, Tsume de Aquiles — Dijo Thetis.

— ¿Donde esta Athena? — Preguntó Tsume con seriedad borrando su sonrisa.

— Todo a su tiempo — Rió divertida la marina de Poseidón.

— ¿Quien eres? — Preguntó Izumi sospechando el por qué esa mujer le hablaba de esa manera a su amiga Tsume.

— Una servidora de Poseidón, Una Marina Soy Thetis de Sirena — Se presentó la rubia.

— Así que Sirena — Dijo Hyoga.

— La diferencia entre una Nereida y una Sirena es que las Nereidas son la Deidad del mar — Dijo Thetis mirando solamente a Tsume — Ellas ayudan a los marineros a llegar a su destino y en cambio desde siempre el camino indicado por una sirena lleva hacia la muerte — Thetis los atacó y estos esquivaron el ataque, la marina salió del lugar haciendo que los caballeros de bronce la siguieran y luego ella se detuvo en un lugar específico — Este lugar será perfecto para su tumba.

— ¿Que? — Exclamó Seiya.

— ¡Trampa Mortal de Coral! — Una aura de colores comenzó a rodearlos escuchando el canto de Thetis mientras de sus pies comenzaban a cubrirse de coral hasta la cintura.

— ¿Eso es todo lo que tienes? — Tsume se liberó de su prisión de coral al igual que los demás, Thetis estaba sorprendida de ver como se liberaron de su prisión de coral.

— ¿Ahora vas a decirnos donde esta Athena? — Preguntó Tsume con algo de enojo en su voz. Eso causó que uno de los marinos de Poseidón riera un poco.

— Thetis, no subestimes a los caballeros de Athena te podría costarte caro.

— Dragón Marino — Susurró la rubia al escucharlo.

El dragón marino atacó a los caballeros con un ataque el cual no llego a ellos por que Tsume lo detuvo usando su técnica Escudo Espejo.

— ¡Basta de juegos! ¡¿Donde esta Athena?! — Ordenó de manera exigente, Tsume estaba enojada por tantos trucos.

— Eres muy difícil niña — Dragón marino sonrió de lado por la audacia de la pelirroja — ¿Pero podrás contra ellos?

Y en eso estaban siendo rodeados por más marinos que de Poseidón, los cuales los atacaron pero los caballeros de Athena logran derrotarlos fácilmente.

— ¡Ya basta de rodeos y diganme donde esta Athena! — Tsume rápidamente fue hacia el dragón marino intentando golpearlo pero este la esquivó.

Una leve risa salió de los labios del dragón marino, Izumi miró sorprendida a ese marino de Poseidón, le recordaba a alguien en especial.

Mientras que el dragón marino estaba viendo la rudeza de Aquiles, era igual a la mujer que lo había sacado de su prisión en el cabo sunion.