XVI.
TaeHyung.
Me propongo tanto continuar pero "Min YoonGi" es la persona que me cuesta tanto olvidar, es como si estuviera hecho a media de él y duele demasiado porque se que debo continuar aunque YoonGi me dejé caer una y otra vez.
Mi cama se había hecho mi mejor amigo y aunque nadie había venido quería estar con alguien, quería sentirme cerca de una persona que pudiera abrazarme y me ayudara a que dejara de querer solo a YoonGi.
-.¡Tae! ¡Tae, por favor!.- más de media hora escuchando las quejas y pedidos del mayor para que abriera la puerta pero no quería, no quería verlo porque tenía miedo de perder el control porque cada vez que lo encontraba abría un deseo que arde dentro.- ¡TaeHyung abre o tiró la maldita puerta!
Me levanté furioso y abrí la puerta de golpe quedando frente a frente.
-. No soy hombre de los que creen que entienden lo que es sentirse bien o mal, nunca tendré las palabras que digan cosas sin lastimarte. Sé que no es fácil pero puedes hacer lo que quieras.- vi que iba a hablar y también observé cómo mis vecinos salían a ver qué sucedida por el escándalo que hizo YoonGi.- ni te pido perdón porque se que fue tú error, ¿Y dónde queda la parte de mí que nunca a dado el corazón por ti? Si me equivoco solo ámame o déjame pero no me jodas ahora porque no quiero hacer una estupidez.
Iba a cerrar la puerta pero el pie de YoonGi la abrió hasta atrás y la cerró cuando ya estábamos adentro los dos.
-. ¿Quién te crees que eres? Todas esas malditas fotos que te enviaron fueron sacadas de contexto, no recuerdo bien que pasó pero se que no hubiera dejado que nada pasará si tenía una cita contigo.-
-. Soy un chico enamorado de tus caricias, estoy resignado a pensar que con otro estás jugando. No quiero comprender la razón de esta situación pero no puedo depender más de tu calor.-
-. Estoy atado a esta sentimiento y aquí estoy rendido a tus pies, pensando en ti y quiero tenerte, amarte, protegerte.- se acercó lentamente a mi posando sus manos en mi cintura y apoyo la frente en la mía.- tú ausencia es cruel, sé que no hay nada que perder si no me dejas ir, Kim TaeHyung.- sentía mis labios temblar y quería alejarme o eso pensé.- respirar y sentir cada amor que siento por ti, este amor me llena de ilusión así que por favor no creas en esas fotos.
-. No quiero vivir sin tu amor, jamás.- quería ser más fuerte pero no podía, simplemente no podía ser más fuerte cuando mi piel pedía a gritos ser de YoonGi.
Me acerqué temeroso a sus labios y comencé un lento beso que a media que pasaba el tiempo se volvía más apasionado, bajo las manos hasta mi trasero y me impulso hacia arriba, me sentía flotar cuando caminó conmigo enredado a su cintura hacia mi habitación. Me lanzó sobre la cama, se sacó la playera dejando ver su blanco y niveo torso haciendo que me mordiera el labio con fuerza cuando sus dedos bajaron hacia el botón de su pantalón, quería ser yo... Y lo sería porque no quería que se sacará la ropa por su cuenta cuando estaba yo deseoso de tocar cada centímetro de su piel, cada pedacito de ser.
Me puse de rodillas sobre la cama, puse mis manos sobre las suyas para que estás actuarán por sí misma, dándole rienda suelta a mis deseos más recónditos que exigían a gritos la piel desnuda de YoonGi. Sentía mi cuerpo demasiado caliente y cada movimiento que hacía me recordaba el calor que emanaba de mi, ese calor que sentí aquella vez en el galpón, el mismo calor y deseo que sentí cuando me arrinconó en la pared de este departamento.
-. Siéntete libre de tocar todo lo que quieras tocar, bebé.- dice con toda seguridad y mis manos vagan por su piel, como si está fuera la última vez que lo siento, como si está fuera la única vez que pueda sentirlo realmente y siento que estoy poco a poco desvaneciéndose en mis dedos.
-. Tengo miedo, tengo miedo a que todo esto sea producto de mi imaginación y mañana te vayas para no volver jamás.- mencionó con un nudo en mi garganta que no se quiere disolver, es difícil aceptar que la persona que siempre haz amado no es tuya realmente.
-. Estaré aquí contigo al amanecer, te lo juro.- termino de desvestirse quedando completamente desnudo al igual que hizo conmigo, sus dedos se sentían cómo ir al paraíso y caminar sobre nueves.
Sus manos recorrían mi cuerpo con lentitud y seguridad, como si fuera completamente de él y lo era, era de Min YoonGi desde el primer momento. Se recostó sobre mí sin lastimarme con su peso y puse sentir como su pene chocaba con mi trasero provocando un suave suspiro de mis labios, realmente quería esto y lo necesitaba como nunca necesite a otro hombre en mi vida... Me estaba entregando en cuerpo y alma a él cuando nunca lo había hecho con otra persona.
-. Te amo, te amo tanto que llegó a pensar que eres la persona que algún ser divino creo para mí y no me puedo arrepentir de estar aquí, ahora contigo.- susurro sobre mis labios haciendo que estos respondieran por si mismo para crear un beso, antes que aquel suave y delicioso beso se rompiera sentí como empujó su pene dentro de mí, esta vez no era sexo... Era amor.
Comenzó con penetraciones lentas, tanto que por un momento estuve a punto de gritar que fuera más rápido pero realmente no hizo falta porque por sí solo se movió con rapidez, sentía como sus manos no se quedaban quietas y acariciaban mi cuerpo con desdén. Mis labios entreabiertos y pequeños gemidos salían de ellos creando un ambiente demasiado prefecto para ambos, no hacía falta nada más pero aún así comencé a mover mi trasero para ayudar con sus penetraciones pero YoonGi las paro poniendo ambas manos en mis nalgas y separandolas con fuerza.
Pasados los minutos mis gemidos eran cada vez más altos y las fuertes penetraciones hacían que la cama chocará en el muro junto con un caliente sonido chicloso al meter y sacar su miembro de mi interior, las palabras sobraron cuando ambos llegamos al orgasmo, YoonGi cayó sobre mi con su respiración jadeante y solamente puede atinar a hacer una cosa... Abrazarlo.
-. Solo... No quiero que te vayas, en este momento quiero que te quedes conmigo y si mañana te arrepientes prometo olvidarlo. Ahora déjame darte ese amor que guarde en mi interior por tanto tiempo, Min YoonGi.- asintió sin decir nada y salió de mi interior haciéndome sentir frío pero no duró demasiado porque me abrazó con fuerza, una realmente innacesaria por el simple hecho de que ahora yo no quería irme de su lado.
Por primera vez en mucho tiempo me sentí completo, sin la necesidad de sacar a mi amante del departamento y creo que es porque YoonGi es más que un simple amante, ambos estamos brillando en esta habitación que me hacía querer quedarme por siempre entre sus brazos.
-. Hora de dormir, se que no es tarde pero cuando despertemos debemos hablar.- su voz salió ronca y no pude evitar robarle un pequeño beso y con el una bella sonrisa, una que realmente extrañe a sobre manera, esta noche iba ser la mejor de toda mi vida lo presentía.
_/_/_/_/_/_/_/_/_/_/_/_/_/_/_/_/_/_/_/_/_/_/_/_/_/_/_/_/_/_/_/
Número de palabras: 1256.
No tengo excusas pero he tenido un bloqueo de escritor de mierda asqueroso y recién ahora mi cabecita quiso trabajar después de escuchar la Bamba de Astro jsjs.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top