Third time's a charm
¿Podía ser demasiado pronto para pedirle a LuAn que fueran pareja?
SeHun realmente se lo estaba preguntando desde hace un tiempo (tanto que a veces él creía necesitar un freno de mano), pero al mismo tiempo ya lo había conciliado. El problema ahora era que, aunque hubiera creído asegurar su tranquilidad por cómo seguían las cosas, nada le daba garantía de decir que estaba bien si ya iba a hacer la pregunta y oficializar lo suyo.
"Deberías intentarlo. El no lo tienes ya, ¿qué te cuesta buscar el sí en cambio?" JongDae le dijo, un día que solo se juntaron para tomar. Sentados en las sillas altas de una pequeña mesa circular en medio de un bar, con nada más que unos nachos y dos cervezas, JongDae le dio un trago a la propia, y se encogió de hombros antes de sacar uno de sus cigarros.
"Ah, ¿mi dignidad? ¿No crees que se me caiga la cara de la vergüenza si me rechaza?" La risa de JongDae con el cigarro entre labios no le hizo más que acrecentar su ceño, y al arrebatarle este de ella, el oye que JongDae reclamó, poco le dio importancia. "No puedes fumar aquí, idiota, estamos en espacio cerrado."
"No iba a fumar, solo quería el cigarro entre labios."
"¿Sin prenderlo?"
"Sí."
"¿Por?"
"Lo estoy dejando. Y aunque no sea lo mejor, me tranquiliza al menos tener algo entre labios. La sensación de llevarlo sin prenderlo me quita el ansia."
"¿Por qué no usar mejor un palillo o goma de mascar como mucha otra gente normal haría?" JongDae se encogió de hombros, y como esa respuesta tampoco le dio más para continuar, SeHun suspiró, puesto el cigarrillo junto a los nachos. "De cualquier modo, dices las cosas como si fueran tan sencillas. ¿Es que no has pensado tú en cómo te sentirías si MiSuk te rechazara? No puede ser tan fácil como piensas."
"No, seguro, pero qué más me queda. No es como si fuera mi primera vez recibiendo una negación. Estoy acostumbrado a que me rechacen como para temer una vez más. ¿Qué es lo peor que puede pasar? ¿Que una chica me abofetee y me tire agua a la cara? He estado ahí, ya lo he hecho. No le temo a nada."
"¿Qué tuviste que hacer para que una chica te hiciera eso?"
"Nada malo en realidad. Solo decirle que me gustaba."
"¿Por eso te han golpeado y empapado?"
"Bueno, esa fue más bien su novia. Resulta que la chica estaba saliendo con alguien ya, y bueno, yo fui el amedrentado sin saberlo. Había un rollo entre ellas, algún tipo de engaño, yo andaba en el medio, y al final las cosas cayeron por su peso."
"Amigo, ¿a cuántas mujeres lesbianas te has ligado?"
"Oye, ¿qué insinúas?"
"Pues, oírte contarme esto y aparte saber que tú y ChanMi tuvieron algo hace años..."
"Pero con ChanMi fui solo tapadera, nada real, vamos."
"Sí, pero ella te gustó en serio, ¿no? ¿Te terminó en un punto gustando tu mejor amiga?" JongDae no se lo pudo negar, aunque sus ojos lo miraron con cierto fastidio que indicaba cómo lo molestó su comentario, SeHun sabía que estaba en lo cierto. Al final, entre ellos la cosa era distinta, podían no ser amigos desde hace mucho tiempo, pero al encontrar entre sí una relación varonil de confidencialidad que con sus amigas jamás podrían, compartieron más de lo que alguna vez hubiesen dicho. SeHun sabía muy bien leer a JongDae de algún modo, incluso sin habérselo contado, estaba claro para él que ChanMi le gustó en su tiempo. Como a él le gustó BaekHee, y al final, todo fue pasado pisado.
Como ley de la vida: entre ellos sabían, casi a cualquier hombre heterosexual le había gustado su mejor amiga.
JongDae tomó su cigarrillo, y con este entre labios, lo subió y bajó un rato antes de barajarlo entre sus dedos.
"LuAn no te va a hacer daño porque le pidas ser tu novia."
"No, quizá, pero eso no quita que duela."
"¿Y no crees que sea peor guardarse la pregunta? ¿Cuánto te va a doler a ti saber que tanto la quieres, pero no puedes pedirle estar con ella? Por muy pronto que sea, ¿no piensas que ya estés a tiempo?"
"Yo solo no quiero arruinarlo... de verdad me gusta para hacerlo."
"Y si eso es verdad, no creo que lo hagas. Tan solo pregunta, SeHun."
"Pero tú..."
"Ay, ay, ¿qué? ¿Acaso temes dejarme atrás?" Se rio, aun cuando eso le provocara una mueca hacia abajo en su boca, JongDae bufó, divertido. "No te preocupes, a mí ya me llegará la oportunidad. Tendré que ver cómo la tomo pronto, pero si tú ya tienes la tuya, ¿qué esperas? Ve a tomarla. Ahorita no veas por las consecuencias. Después ya dirás, si acaso lo celebramos o tomamos otra."
Con la moción de su cerveza en mano y el cigarro puesto sobre su oreja, SeHun lo miró alzada la botella. Hubo un titubeo en su persona, porque SeHun era auténtico temeroso que no sabía tomar decisiones propias, pero al final, lo aceptó. Cogida su propia cerveza, la chocó con la de su amigo y le dio un largo trago.
Mismo que ahora deseaba saborear, porque muy puesto que estuviera para hacerlo como estaba de pasar por LuAn en su siguiente cita (donde pensaba pedirle ser su pareja) no se sentía.
Establecida esa como una cita–porque LuAn y él tenían claro que ellos estaban saliendo, se andaban conociendo más allá de lo que una mera amistad–, SeHun no hizo más que preguntarle a LuAn a dónde quería que salieran. Ambos solían dar ideas para hacer algo juntos, desde el primer momento cuando se manejaron para amoldar su cita a una pijamada de películas y fuertes hechos de almohadas y cobijas, hasta su extraña ocasión donde estuvieron con una comunidad china cristiana resolviendo misterios, siempre habían buscado proponer algo.
No había muchas opciones si se sabía que algunos establecimientos seguían cerrados y con número limitado de personas que permitían entrar–aparte de todas las protecciones requeridas por la salud y para bajar los contagios (que aún había en esa época con las vacunas ya en su distribución)–, les había hecho decidir después de haber escarbado mucho en aquello que ambos les interesaba, pero se las habían apañado. A veces uno solo decía salgamos, y el otro soltaba la pregunta para saber a dónde querían. Las ideas brotaban de esa manera. Uno llegaba a proponer algo en especial si acaso ya lo tenía en mente desde hace rato, mas, ellos no eran mucho de ser directos.
Rondaban por sus intereses, salían con una gran lluvia de ideas, y al final se decidían por algo en conjunto. Así que, cuando SeHun solo mensajeó a LuAn para decirle salgamos ese fin de semana después de regresar–medio achispado– con JongDae, lo cierto fue que no preparó mucho. Su cabeza en ese momento tampoco tenía mucho qué pensar, le dijo a LuAn que ella podía escoger el lugar (o para hacer más sutil sus nulas opciones, contestó ¿tienes una propuesta?).
No esperaba mucho, quizá la discusión se les podía abrir así, y cielos, él podía pensar en algo si leía las opciones que LuAn le daba. Sin embargo, antes de que algo de eso ocurriera, LuAn ya le había dado respuesta.
LuAn 🤍
↪️ ¿Qué te parece ir a observar estrellas?
¿Estrellas? Sí, bueno, ¿por qué no? No era lo que SeHun estaba pensando, pero sonó lindo. Era una cita donde no necesitaban preocuparse mucho por las contingencias, la gente a su alrededor, las medidas de seguridad, al aire libre, simple y fresco, sin la búsqueda de mucho material como para temer que gran cantidad de dinero requiriese o algo...
Aceptó de inmediato, y como ese día estaba medio borracho, ya no dijo nada más.
Al día siguiente descubrió que LuAn ya le había pasado una dirección de lugar, hora y día, y él sin saber nada, otra vez aceptó.
Hoy estaba ahí, después de atravesar la osadía de ir en camión en estos tiempos de cubrebocas y un asiento vacío, en la espera de que LuAn lo encontrase en la esquina de la bajada. Ya le había mandado mensaje para avisarle que ahí estaba, y la chica le dijo que ella estaba cerca–solo a unas cuadras, porque había salido a tomar café con su comunidad cristiana china como despedida.
"¿Despedida?" Se preguntó, aún mientras miraba su celular, mas, no tuvo mucho tiempo para discernir a qué se refería.
"¡SeHun!" No cuando ella ya estaba ahí cruzando la calle con una mano arriba. Y aunque de inmediato le trajo una sonrisa bajo su KN95, tanto para saludarla de la misma manera, apenas lo distrajo de su duda y sus temores internos. "Hola, ¿cómo estás? ¿Ya listo para la cita de hoy?"
"Ah, claro, sí, yo estoy... bien, listo," medio tartamudeó, y en la risita simple que eso le dio a LuAn, puesta ahora junto a él en esa esquina lejos de los posibles coches que vinieran en otro lunes concurrido de febrero cerca de las seis de la tarde como ya iba anocheciendo, se quedaron uno frente al otro en el saludo compartido. "¿Tú? Digo, ¿estás... lista?"
"¡Claro! Estoy más que lista. Y muy emocionada. No sé si sea por el café que me he tomado o en serio me emociona tanto hacer esto, pero me siento enérgica."
"Genial. Entonces, ¿vamos a ver estrellas o...?"
"Sí, cierto, ¿no te expliqué exactamente cómo, cierto?" Negó con la cabeza, y ella, tan tranquila, solo rio de nuevo con esa sencillez que tanto a SeHun le gustaba. Porque para LuAn todo parecía ser divertido, fácil y bonito. Así era también estar con ella, solo no cuando pensaba preguntarle ser su novia. ¿Cómo iba a hacerlo sin saber en dónde iba a hacerlo? "Uno de mis compañeros en la escuela de idiomas me dijo que iban a dar unas pláticas en estas semanas sobre astronomía. Algo de compartir conocimientos en distintos idiomas con especialistas que los hablan, pero, aunque me han interesado algunos de los temas, creo que no he podido apuntarme para ninguno con todo lo que tengo que hacer ahorita."
"¿Ahorita? ¿Qué tienes que hacer ahorita? Creí que ya estabas terminando lo de la carrera. Y con lo de tus papeles solucionados..."
"Oh, no es nada, en serio, solo cosas mías," LuAn minimizó el asunto. Si a SeHun le resonó la forma en la que lo dijo junto a la duda anterior, apenas le hizo caso. Más enfocado en esa tranquilidad que LuAn le inspiraba, la dejó continuar donde estaba. "Pero saber de esas pláticas me hizo descubrir que la universidad tiene un observatorio, ¿tú lo sabías?"
"Ah... ¿se suponía que nos dijeran de eso en la inducción o algo?" Otra vez la risa. Al mismo tiempo, LuAn le tomó una mano, y en su propia dirección sobre la calle contraria a esa esquina a la derecha, los llevó juntos en una caminata. Con ella a la delantera.
"No creo, si a mí tampoco me han avisado, y eso que estuve aquí más de un año. Bueno, está encima del edificio de idiomas. ¿Alguna vez has visto esa cúpula que hay como en una torre aislada?"
"¿No era esa una iglesia?"
"¡No! Es el observatorio, y es de la universidad. Está completamente abierta al público en general, en especial a la de la comunidad estudiantil. Entonces, podemos entrar y pedir que nos permitan ver las estrellas."
"Wow, ¿en serio?" No requirió confirmación para saberlo. Con LuAn que ya los estaba encaminando a la escuela de idiomas–por cómo SeHun notaba que iban avanzado en esas calles que para él eran tan conocidas de la ciudad–, solo le quedó otra pregunta: "¿Y cómo se supone que sube uno a ese espacio?"
"Me han dicho que el elevador de las oficinas administrativas abajo te lleva hasta allá. Solo necesitas seleccionar el cuarto piso."
"Espera, ¿las administrativas? ¿Esas salas que están abajo, donde se hace la inscripción a idiomas y gestión escolar?"
"Aja, ¿puedes creerlo? Estuvo ahí todo este tiempo y no lo sabíamos."
"Sí, pero eso también es porque nadie nos dijo que podíamos usar ese elevador. O sea, según yo estaba reservado para gente que tuviera una discapacidad o para misma administración, como trabajadores de la escuela," LuAn tampoco le dijo más con ese comentario. En la evidencia de que a ambos les faltó ese dato en toda su carrera, entraron a la escuela de idiomas. Se dirigieron a las escaleras que bajaban del lado izquierdo a las oficinas, y al poco rato, ya estaban frente al dichoso elevador solicitado, listos para tener su cita. "¿Y estás segura de que podemos estar aquí, aunque no seamos estudiantes de idiomas?"
"Bueno, yo ya no estoy inscrita, pero al menos tú aún eres estudiante universitario, ¿no?"
"Este es mi último semestre, LuAn, solo llevo dos materias."
"Sí, bueno, nadie nos ha detenido. Y te lo he dicho, mi amigo me dijo que estaba abierto al público en general. El observatorio es territorio común, parte de la sociedad."
"LuAn..." temeroso y poco aventurero como él era, SeHun mostró su duda.
Eso no importó mucho, con el anuncio del elevador abierto ante ellos, LuAn no hizo más que entrar y sostener la puerta para que él la acompañara. SeHun no titubeó, ante esto, dio el primer paso y fue con ella en esa tranquilidad que una posible travesura juntos podía darle como no lo hacía nunca.
Era tal el lado que LuAn le sacaba. Fuera de su zona de confort, como un chico tan simple y sencillo, la calma de LuAn en su propia simpleza traviesa le otorgaba una pizca de gusto como a él poco se le había ocurrido buscar. Lo hacía creer y desear más, hacer cosas de las que no estaba acostumbrado, y encontrar provecho en sí mismo como en lo hecho al final de todo.
Cuando LuAn salió del elevador primero y caminó a ese espacio de terraza pintada de rojo en pisos y bordes blancos, lista para expirar una larga respiración–junto al quitarse su cubrebocas, probablemente en la comodidad de no haber nadie más para despreocuparse al hacerlo–, él la siguió. Sin más mínima pregunta, porque sabía que en cualquier situación iba a ser así, seguro de lo que hacían.
"¿No te parece esto fabuloso?" Lo era, más que solo ver a LuAn con esa felicidad, SeHun sabía lo que ella estaba diciendo.
La terraza se extendía por un amplio terreno. Debían estar encima de los últimos salones y oficinas de ese edificio de idiomas, lo que les daba una extensión amplia del espacio rectangular. El observatorio estaba a unos pasos, con esa cúpula y gran escena circular, pero lejos de ver mucho aquello, frente a ellos después de las bardas estaba la ciudad. Con la puesta del sol a la vista, las luces se iluminaban, el cielo se pintaba de un lindo tono entre azulado, púrpura y rosa, y sin contar el molesto sonar de las bocinas, ruidos de personas y algarabía de una ciudad capitalina, se podía admirar la belleza de lo que el mundo les daba. A lo lejos, a esas colinas verdes, los dulces olores de comida callejera, y el brillo de la luna y estrellas que iban resplandeciendo el firmamento sobre ambos.
Con el aire que le hacía volar su largo cabello a LuAn, recogido en media coleta, y las luces que le pintaba su piel blanca del mismo brillo que arriba se vislumbraba. En esa figura tan etérea que era ella en su totalidad.
"Sí, es fabuloso."
"Te puedes quitar el cubrebocas, aquí no hay nadie más, SeHun. Solo tú y yo, y quizá te alegrará respirar un poco. El aire está fresco."
"¿No hay aquí un encargado o...?" Miró a su alrededor. Quizá esperaba que, si el observatorio estaba abierto, una persona llegase a atenderlos. Pero LuAn negó con la cabeza, y aunque siguió su inquietud interminable, le hizo caso. Se quitó el cubrebocas y lo guardó en su bolsillo del pantalón. De todas maneras, covid ya le había dado, y con suficientes cuidados, no había sido tan malo (en su caso). "Entonces, ¿cómo vamos a ver las estrellas?"
"Bueno, por un lado, ya lo estás haciendo," LuAn bromeó. Por supuesto que él la vio con su perfecta ceja arriba, misma que trajo su risa, y en su entendimiento le dijo: "El observatorio está abierto. Podemos entrar y usar los aparatos."
"¿En serio? ¿No es peligroso? Digo, no quisiera romper o echar a perder algo y que la uni no me deje salir porque le debo millones ahora."
"No es nada que deba preocuparte, SeHun. Mi amigo me dijo que era muy autodidacta todo el observatorio."
"Tu amigo... ¿me has dicho quién era tu amigo del que hablas?" Cuestionó, si lo hizo con cierto tono celoso, LuAn apenas le dio importancia.
Encogida de hombros, lo miró y tomó su brazo para halarlo.
"Vamos, sé un poco de estas cosas igual, seguro sabemos manejarlo."
No tuvo de otra, como todo en esa cita, se dejó guiar. Llegó con LuAn a pasos rápidos al observatorio. Adentro no era muy amplio, por más que la cúpula ostentase por fuera, en su interior era otra cosa. Paredes y pisos de azulejo blanco había a su alrededor. Escalones para bajar se presentaron en su entrada, y tan solo en dos pasos, ya estaba en la base circular donde al menos tres telescopios se presentaban de distintos tamaños.
Todo el contorno de este espacio se rodeaba por cintas negras que dividían los telescopios de pantallas colgadas en las paredes por fila, así como fotos de astronomía, con diversidad de constelaciones, gente y fechas importantes de la ciencia, además de algún señalamiento y documentos que avalaban el uso correcto del espacio.
Apenas lo preocuparon, cuando leyó en voz alta de los letreros frente a cada telescopio el cómo funcionaban, qué se podía hacer (y ver) con ellos, se acercó a ella para entenderlo mejor y empezar a probarlos.
LuAn se había emocionado mucho. Estaba realmente entretenida en las pruebas, y claro que en su primer intento no lo hicieron bien–les falló ajustar la visión, quitar la tapa, ubicar correctamente la dirección en donde se estaban enfocando–, pero de eso también vinieron risas que ambos compartieron por la torpeza del otro.
"¡Ya no te rías, SeHun! Solo no estaba enfocando."
"Pero ¿qué has dicho que has visto? ¿La luna?"
"Cualquiera se podría equivocar..."
"¡Estabas viendo una pelusa!"
Lo disfrutaron a su modo, y sin pensarlo, se les fueron las horas. Fue buena cosa que hubieran venido ahí a esa hora, no era muy tarde aún, solo lo suficiente para tener el cielo oscuro listo para que ellos observasen más de lo que este lugar les ofertaba. De ser las seis, habían llegado a las siete, y pronto las ocho.
Según el cartel de la entrada, el observatorio se cerraría a las nueve en punto, y no era sorpresa, si la misma escuela de idiomas cerraba a esa hora. Nadie más había venido hasta ahora–tampoco una impresión, si él ni LuAn sabían de ese lugar–, mas, seguro que una persona encargada llegaría en cualquier momento, al menos para limpiar o ponerle a la puerta candado.
Ninguno de los dos se preocupaba, tenían tiempo. Y aun si así no fuera, se calmaban. Siempre así para ambos, una serenidad que solo en su convivencia podían disfrutar ambos.
"¿Ya viste cómo se ven las estrellas? No sé mucho de constelaciones y esas cosas, pero estoy casi segura de que esta debe ser una. Se ven tan bonitas. ¿Crees poder identificar lo que formen si tú la observas?"
"Incluso si lo hiciera, estoy seguro de que tampoco la identificaría. No sé cómo los viejos astrónomos y civilizaciones antiguas podían darles formas. ¿Un pez, un centauro o un toro? Sí, lo que digas, te creeré si eso dices que es, pero no creo verlas de esa manera nunca."
LuAn se rio ante su comentario, y al alejarse del telescopio–ya bien ajustado para ver algo–, se paró en toda su altura con manos en jarras.
"¿No quisieras verlo por tu cuenta? Al menos, darle una oportunidad de adivinar."
"No sé, ¿realmente vale la pena?" LuAn se encogió de hombros, como si no le diera gran importancia. Hubo algo en su gesto que casi lo llevó a dudar, pero... como era él para desinhibirse junto a LuAn, lo dejó estar. Recargado de brazos cruzados junto al letrero del funcionamiento. "Disfruto viendo las estrellas, pero creo que tú lo estás haciendo más que yo ahora."
"Hay muchas cosas bonitas que ver allá arriba," LuAn admitió, de vuelta en el telescopio, y al posicionar sus manos sobre este como si lo sostuviese, él puso sus ojos arriba, a ese ligero pedazo de abertura que el telescopio al exterior le daba. "Y en realidad, quizá ahora no sepa mucho, pero cuando era niña llegó a interesarme un poco estudiar algo relacionado."
"¿De verdad? ¿Algo como astronomía?" LuAn asintió, todavía enfocada en el telescopio, con ojo cerrado y el otro puesto en su lente abajo. "¿Por qué no acabaste por hacerlo?"
"Ah, ¿la realidad? De cierta forma sabía que estudiar algo de eso no iba a ser bueno. Se necesita mucho dinero para triunfar en carreras del tipo, algo para viajar, irte a otros lugares, conseguir tus fondos de investigación, y aunque sé que hay apoyos para la ciencia, mis padres no creyeron que yo estuviera forjada para la carrera. No era cosa de chicas, dijeron."
"Pero–"
"Lo sé, sé a dónde vas a llegar, y estoy de acuerdo, pero al final, fue una buena cosa. Tampoco era como que la ciencia me interesase al poco rato. Los idiomas fueron mi fuerte en un punto, y heme aquí ahora, terminada Traducción como carrera, y lista para hacer algo al respecto, incluso con la negación de mis padres por las decisiones que he tomado en su contra," otra vez lo miró, aunque inclinada, brotó de sus labios esa sonrisa tan linda que guardaba mucho de lo que él aún no decía. "Algo debía hacer que nos juntáramos igual, ¿no?"
"Sí, pero ¿no es eso mismo lo que nos volverá a separar?" LuAn frunció el ceño, interrogativa, él suspiró para aclarar su punto. Al fin, sacada la duda que no se había acallado por mucho tiempo. "Dijiste en tu mensaje que tuviste una despedida con tu comunidad, entonces, eso significa que tú vas a..."
No lo dijo, mas, fue claro. LuAn supo a dónde estaba yendo, y por lo mismo, suspiró. Reincorporada para afrontarlo.
"Ah, entonces, la emoción del café en serio pegó duro para dejarme soltarte eso antes de tiempo, ¿no?" Se rio, muy bajo, lo que ya no lo hizo tan creíble como en los otros momentos. En la expectativa, SeHun oyó más que hacer otra pregunta. "Sí, bueno, yo... no es que vaya a irme mucho tiempo. Solo necesito hacerlo, pero estaré regresando pronto."
"¿Y eran esas las cosas que estabas haciendo y te entretuvieron?" Ya no necesitaba confirmación de esa pregunta, el mismo punto con el que titubeó antes estaba dicho. Se iba a ir, LuAn se iba de nuevo, y él ya debía saber que era eso de lo que antes hablaba. "¿Por qué? ¿Por qué te vas ahora? ¿No habías arreglado lo de tus papeles y universidad, LuAn?"
"Sí, pero no es tan sencillo, SeHun. No he podido resolver todo como quisiera. Aunque algunas cosas ya he logrado concretarlas, necesito volver para concluir otras. Eso incluye no solo los papeles de universidad, sino con lo que voy a sostenerme acá. Y sabiendo que no puedo quedarme en Corea por más de tres meses ahora que ya no soy estudiante de intercambio..."
"Pero..."
"Tengo que regresar si no quiero ser deportada. No creo que quieras que sea deportada y nunca más pueda entrar a Corea, ¿cierto?"
"Yo podría irme contigo a China..."
"No. China jamás será un lugar en el que te quieras quedar. La vida allá... es muy distinta. Sí, es buena, para algunas personas es fantástica y la sociedad es fabulosa, pero yo sé que no es lo que tú buscas, menos por el tipo de vida que has tenido hasta ahora," apretó los labios, no estaba para contradecir o aceptar eso, porque ni él sabía lo que era China ni LuAn completamente lo hacía con su vida. Estaban los dos ahí, en esa suposición que no les dejaba más que entender lo compartido. "Y el asunto de mi estadía legal en el país no lo es todo. Aparte de los papeles que aún debo obtener para encontrar un trabajo con el que ya pueda residir aquí sin tantas trabas, debo arreglar asuntos con mi familia."
"¿No habías hecho eso ya?"
"Estuve con ellos cuando fui, pero jamás hemos discutido lo que ahora me depara, y aunque sé que mis padres no estarán de acuerdo con lo que quiero hacer, porque ellos siempre abogarán porque viva con ellos en China, será algo con lo que igual deba lidiar. Para dejar todo establecido, enmendado, y hacer lo que quiero con mi vida de ahí en más, sin cuentas pendientes en ningún lado."
"Claro," dijo, y aunque asintió, lento, aún tuvo miles de dudas. Agolpadas todas en su cabezota, sin saber cuál escoger, por lo que LuAn al menos le dijo:
"Ya estoy en búsqueda activa de un trabajo igual. Como aún me hace falta algo de mi papeleo que sigue en China, mis aplicaciones no pasan mucho de una primera fase todavía, pero es casi seguro que algo he de encontrar. Después de todo, el mandarín es una lengua que está muy solicitado en el mercado, ¿no? Y tengo el contrato de mi apartamento estudiantil por otro año más. Es seguro que voy a regresar, tengo hasta agosto para sacar mis cosas de ese espacio, no puedo irme dejando todo de esa forma, ni contigo cuando–"
"¿Cuándo te vas?" Surgió, sin pensarlo, solo en la preocupación de lo que eso significaba.
"En abril, el 28."
"28... ¿eso quiere decir en dos meses y pico?" Otra pregunta sin respuesta. Era obvio. "¿Y cuándo piensas regresar?"
"No tengo fecha exacta, he comprado boleto abierto de regreso. Pero si todo sale bien... quizá un mes más tarde de eso."
SeHun lo entendió, y aunque era algo muy normal, nada exorbitante o malo, decidió que no podía aguantar más. Si LuAn se iba a ir pronto, ¿cuándo más iba a poder hacer esto?
"LuAn, ¿quieres ser mi novia?"
"¿Cómo?" Esa no fue la palabra que él esperaba escuchar. En realidad, apenas la oyó, se sorprendió también de que en verdad lo hubiera dicho. Solo así, sin anticipación, con ningún detalle especial, él solo lo dijo. Porque una parte de él había tenido miedo, temor de que LuAn se fuera y él ya no encontrase la oportunidad, fuera a perderla o... "SeHun, pero..."
Quién supo. Ya no importaba, quizá seguía sin conseguir la respuesta deseada, e igual ya no pensó. Se fue de lleno, sin discutirlo, totalmente impulsivo para decirle sin titubeos:
"Sabes que me gustas mucho. Que eres una persona especial para mí, eres esa mujer que me ha hecho más feliz en tan poco tiempo y con tantas cosas. Y tal vez esta no es la forma en la que esperabas lo dijera, o tal vez ni siquiera lo esperabas, podrías no quererlo, y aún... no pude guardarlo más. Necesito que lo sepas. Te quiero, LuAn, y tanto como eso es verdad, quisiera que fueses mi novia... para estar juntos de forma oficial, porque no puedo ver otra forma en la que quiero estar contigo al menos por ahora."
"¿Por ahora?"
"Sí, bueno, quizá en un futuro quisiera algo más..." LuAn arqueó una ceja, y otra vez con sus manos sobre su pecho, cruzadas, pensó que tal vez estaba yendo demasiado lejos. No la quería asustar, mejor retrocedía en ese aspecto. "Yo... entonces, ¿qué opinas?"
"Bueno... me has quitado un poco las palabras de la boca," frunció el ceño, inquieto por lo que eso era, como solo LuAn podía, soltó una risita aguda. Con mano en la boca, sacó un papelito del lente del telescopio que no sabía en qué momento o cómo habría puesto de esa forma. "Yo pensaba decirte que te quería igual, de un modo un poco cursi quizá, pero esperaba que cuando vieras las supuestas estrellas que estaba viendo, leyeras el papelito donde lo decía, solo..."
SeHun no vio bien lo que decía el papel que ahora ella alzaba. En el supuesto que era esa confesión de amor dicha, la vio solo arrugar su papelito entre manos con labios entreabiertos de palabras que él no dijo al escucharla:
"Creo que te me has adelantado. Fuiste un poco más lejos, no esperaba una propuesta."
"¿E-Eso significa?"
"No es que te esté rechazando, porque como te he dicho, de verdad me gustas, SeHun, tanto como para decirte que te quiero, pero... no sé si esté preparada para dar el siguiente paso de oficializar."
"Oh..."
"Sí... pero no es que lo esté negando," alzó su ánimo con eso. Inquieto, SeHun la vio sonreírle de nuevo, antes de acercarse en un paso y poner sus manos sobre sus hombros. "Solo creo que necesito tiempo. No me gustaría empezar una relación contigo sabiendo que en poco tiempo me voy. Sería malo que como novia lo primero que haga sea dejar varado a mi novio, ¿no?"
"A mí no me molestaría, digo, puedo entenderlo, sé que necesitas irte por esto, y no es como si me estés abandonando, yo–" LuAn se rio, lo cortó sus prontas palabras. Ahora puestos sus brazos alrededor de su cuello, no evitó rodear con una mano su cintura, instintivo.
"Sé que puedes entenderlo, tú mejor que nadie lo harías, porque me has entendido y respetado en espacio durante tanto. Pero quiero que, si vamos a ir en serio, se haga de verdad. No más cartas, mensajes ni Nadie que esté del otro lado, lejos, sintiendo un amor unilateral ni inseguridad de la otra persona. Por eso, sé que te pido mucho, pero ¿crees que podrías esperar?" Ya estaba asintiendo, cuando LuAn lo tomó de la nuca. "Solo hasta que vuelva, y cuando así sea, te daré bien mi respuesta. Pero dime que sí si en verdad estás de acuerdo, si puedes esperar, y si aceptarás lo que de ahí en más venga."
Eso le dio para pensar. Había algo por ahí implicado, casi como una promesa, porque sabía que en ese tiempo podían cambiar las cosas. Quizá en tres meses serían otras personas, tal vez sus vidas daban un giro que ninguno esperaba cuando todo avanzase, en la clara idea de que ambos estarían en otro punto de sus vidas: él graduado, sin saber cómo o de qué iba a trabajar, ella en búsqueda de un trabajo, estabilidad y nueva vida en país extranjero...
¿No podían solo casarse ahora y solucionar el asunto de la deportación...?
¡No!, era justo ese pensamiento ingenuo lo que hacía que LuAn insistiera en su respuesta. No podía decir que sí solo por impulso, de verdad tenía que considerarlo.
Pero él ya tenía su respuesta. Sin ser impulsivo ni guiado por la emoción, sabía lo que iba a decir porque estaba deseando esto. Sin importar lo que también viniese: difícil, nuevo, complicado o molesto. Iban a superarlo, y lo harían juntos.
"Sí, puedo esperar a tu respuesta, LuAn."
LuAn le sonrió de a poco, y con la seguridad de lo leído en sus ojos y escuchado de su boca, sellaron la promesa al juntar sus labios. Bajo las dulces estrellas que iban a presenciar los cambios de ambos, faltantes en su camino.
"Entonces, ¿cuándo organizamos tu despedida?"
"¿Crees que alguien quiera prestarme su cumpleaños para hacer algo juntos?"
"¿Juntamos fiestas? Por mí no hay problemas, me salva un poco en el ahorro. Y si tú y yo compartimos invitados..."
"Déjame adivinar: ¿ChanMi, BaekHee y JongDae estarán en la lista?"
"Si acaso quieres agregar a alguien más..."
"Será mejor que lo vayamos pensando. Esa será una noche para no olvidar, estoy segura de que ambos la disfrutaremos."
Fue el turno de que SeHun riera, sin saber lo que esa noche de cumpleaños le iba a traer a su vida. Oh, su travesía solo estaba empezando.
¿Pueden creer que este capítulo estaba escrito desde hace meses y solo hasta ahora vengo a publicarlo? La verdad lo había olvidado 😅
Por eso, pido una disculpa, si ya llegaron después de su actualización, no hay gran problema, pero igual saben que no me gusta dejar tanto tiempo abandonada la historia 🥲
🎀 ¿Qué les pareció el capítulo? ¿Les gustó la declaración del HunHan?
Recuerden que lo que aquí pasa no está en forma cronológica, entonces, la declaración de SeHun fue antes que la de JongDae... con resultados contrarios ;;
🎀 ¿Se esperaban esta respuesta o creían que habría complicaciones? Juju, no podía hacer a todos sufrir... aunque tal vez sea porque pronto tendremos algo distinto de esta parejita 👀
🎀 ¿De quién creen que vayamos a hablar luego? Ya tengo otros capis preparados, entonces, esperen la siguiente actu pronto~
Muchas gracias por leer y seguir aquí a pesar de todo. Espero hayan disfrutado lo leído, y si dejaron votitos o comentarios, se les aprecia el doble, ¡se les quiere! 🫂💙
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