The sexiest Valentine ever
Oh, San Valentín. El dulce, hermoso y siempre esperado por muchas de las parejas en el mundo San Valentín. Probablemente para varios la celebración fuera absurda, algunos la aborrecían, mayor parte de las personas solteras llegaban a dejarlo pasar como cualquier otro día, y unos cuantos solo lo tomaban como una excusa para coger con la vaga esperanza de que no hubiera crías un mes más adelante.
ChanMi tenía que admitirlo, ella seguro calificaba en más de uno de aquellos. Ustedes debían saberlo mejor que ella, era una romántica empedernida, le gustaba mucho celebrar algunas cosas, aunque fueran muy poco significativas y BaekHee y ella habían establecido ya no darse regalos para no agobiarse con la planeación de todo lo que eso era y romperse la cabeza por no saber ahora qué dar–aunque no fuera en todas las festividades, había todavía algunas cuantas especiales que se reservaban para sorprenderse la una a la otra de alguna manera en específico–, sin duda, el día de San Valentín no podía dejarse pasar.
Para ese año, ChanMi no había planeado la gran cosa. Estaba esperando pasársela bien con su novia. Justo había caído el día en domingo, así que se daban una gran libertad de quedarse en casa a disfrutar una de la otra. Entremedio de eso... ChanMi confesaba que se había visto interesada en quizá celebrarlo de una forma particularmente especial. Del modo que ustedes mejor debían saber, se imaginarán, con algo de acción, cercanía, especial atención sobre la otra.
Entonces, ChanMi podía decir que definitivamente se encontraba dentro de esos calificativos que se habían mencionado antes, porque si ella tenía que decirlo, pues sí, había planeado que para esa tarde, luego de estar un rato a gusto con su novia, pudieran disfrutar una de la otra con algo más que solo besos y arrumacos. ¡Era justo y necesario! Ya había pasado un tiempo desde que habían tenido sexo. Y sí, acababa de decir la palabra con S, no tenía nada de malo, pero necesitaba resaltarlo para que les quedara claro:
ChanMi quería tener sexo. Muchos podían pensar que ChanMi era un poco tímida en cuanto a ese tema, probablemente por el modo en el que se había mostrado con sus amigas cuando lo hablaron, pero, en verdad, la chica más alta de la casa no era muy desconocedora de todo esto, tampoco una mojigata que se avergonzara por decir en voz alta 'vagina'. Solo no gustaba de tener que compartir con otras personas sobre su intimidad con la persona que más podía amar en este mundo, así que, una disculpa si antes había sido bastante inocente. Si algo tenían que saber en verdad de ChanMi era que le gustaba mucho disfrutar del sexo.
Y con alguien como BaekHee, ¿quién no lo haría? Su chica no era perfecta, tenía sus ligeros defectos, pero ella no podía llamarlos de esa manera. De cualquier modo, así le gustaba, y al ser alguien que realmente amaba, sin contar la forma en la que bien sabía darle en sus puntos exactos, bueno, la acción era solo algo que podía gozar con lujos.
Estaba segura de que BaekHee pensaría de la misma manera. Probablemente no hubieran pensado en tener sexo como primera actividad en ese día, pero si se lo proponía o solo escalaba un poco en su actuar dentro de esa tarde, que ChanMi supiera mover bien sus cartas, tenía mucha confianza en que podría convencerla de pasar a esa página al menos por esta noche.
Una suerte que ellas no tuvieran que preocuparse por el temor de que dentro de un mes alguna se hiciera una prueba de embarazo porque tardara en bajarles más de lo normal. Nunca más esperaba ChanMi que se vieran en ese temor de suponer que una estuviera embarazada. Luego del susto que le había metido BaekHee hacía algunos años, había quedado claro que ninguna de las dos podrían alguna vez pensar que terminara en cinta.
(Y sí, la situación sobre el posible embarazo de BaekHee era otra anécdota que probablemente más adelante se contará, de momento, seguimos con la historia en la que ChanMi iba).
Entonces, el plan estaba predispuesto para ella. Esa mañana ChanMi se había levantado temprano–probablemente porque ya estaba algo acostumbrada, su cuerpo no la dejaba dormir más tarde de las nueve o diez de la mañana si consideraba que era su horario más usual al salir hacia el trabajo– para ir directo a su cocina a comenzar a preparar un buen desayuno. Quería tener una mañana normal, donde pudiera disfrutar de un desayuno y almuerzo con su chica, de la misma manera que pudiera luego pasarse a la sala donde quizá conversarían de cualquier cosa que se les viniera, pensarían en ver algo interesante o que les llamara en Netflix, y como decían por ahí, quizá tomarían muy en serio la frase Netflix and chill para que terminaran justo en el punto que ChanMi buscaba. Una cosa las llevaría a la otra, y esta vez ChanMi ni siquiera necesitaría vestirse de una manera especial. Ella solo quedaría en sus lindas pijamas de la misma mañana para que con los toques y besos en puntos correctos pudiera llevar a BaekHee hasta el cuarto donde gozarían de la manera esperada su San Valentín.
Una tarde agradable, pensaba ella. Sexy, seguramente. A la mañana siguiente podría sentirse medio avergonzada de que Key le preguntara de dónde habrían salido esos piquetes de mosco en su cuello, o quizá sus amigas le llamarían y le harían insinuaciones que la pondrían muy rojita, pero que no podría negar porque todas iban a ser ciertas.
Eso al menos pensó mientras se dedicaba a poner sus panqueques recién terminados en pila sobre su mesa de comedor. Estaba planeando servir unas cuantas porciones en dos platos para ya dejar puesto todo, de la misma forma que pudiera quizá decorar el de BaekHee con algo cursi, tal vez unos corazoncitos hechos de esas moritas que habían comprado y todavía tenían en el refrigerador. O escribirle un mensajito con el jarabe, no parecería malo. Sin embargo, antes de que se le pudiera ocurrir qué hacer sobre aquello, algo distinto la sorprendió desde su habitación, con el solo llamado de nada más ni nada menos que su querida novia en la que tanto estaba pensando.
"¡ChanMi! ¡ChanMi!"
Sonaba un poco alterada, así que inmediatamente ChanMi se preocupó.
"¿BaekHee?" Preguntó, un poco torpe, porque obviamente la estaba llamando ella. No obstante, eso la llevó hasta la puerta de su habitación, donde solo pudo darse cuenta de que la cama que dejó ocupada por la mayor ahora estaba vacía, con las sábanas revueltas de haber sido utilizadas con anterioridad. Eso solo le daba la idea de que, si no había visto salir a BaekHee de la habitación, entonces, solo podía estar en el baño. Se giró aún en la puerta hacia la otra que tenían de frente a su cama matrimonial, y con eso habló un poco más fuerte. "¿Qué sucede, BaekHee?"
"Gorda, necesito ayuda," su novia pidió, ya con la voz un poco más baja, quizá por escuchar que ella estaba también cerca. Y ahora con ChanMi que decidió recorrer el espacio que las dividía, solo para quedar frente a la puerta cerrada de su baño, puso una mano sobre la madera como si buscara tocar a su novia del otro lado. Atenta.
"¿En qué necesitas ayuda? ¿Está algo mal? ¿Qué te pasa, cariño? Dime."
"Yo... me acabé el papel," finalmente ChanMi escuchó, lo que la hizo quedar quieta en su lugar. Eso había sido bastante inesperado, no precisamente lo que esperaba, pero, bueno, qué cosa no le había pasado ya con BaekHee. "¿Puedes traerme otro rollo?"
"¿Te acabaste el papel?" ChanMi preguntó, de nuevo, torpe, porque era obvia la respuesta. Pero estaba un poco confundida, ya que... "Creía que todavía había suficiente allá adentro."
"Ya no, es que ocupé mucho."
"¿Por qué? ¿Está todo bien? ¿Ya te bajó, acaso?"
"No... pero me siento mal."
Oh, no. A ChanMi no le gustó cómo sonó eso.
"¿Qué tan mal te sientes, cariño?" Su respuesta vino con un fuerte estruendo del otro lado de la puerta que, ChanMi estaba segura, si estuviera dentro, seguro se hubiera desmayado con el olor. Porque los gases de BaekHee no olían precisamente a rosas.
"Muy maaaal... Hum, creo que me hicieron daño esos palitos de camarón que compré con SeHun anoche."
"Caray, te dije que no comieras nada de la calle con ese niño, si sabes que SeHun no es de confiar en sus recomendaciones."
"Pero a él no le pasó nada... creo, bueno, no me ha dicho nada sobre eso."
"SeHun tiene estómago de acero, tú no, BaekHee," ChanMi suspiró y recargó su frente sobre la puerta en lo que se escuchaba otro terrible estruendo del otro lado de la habitación. No le quedó más que fruncir un poco el ceño por eso. Su pobre nenita que estaba toda adolorida debía estarla pasando mal, no debería seguir reclamándole. "Supongo que no vas a querer ahorita desayunar unos panqueques con jarabe ni chocolate, ¿cierto?"
"¡Me encantaría! Pero creo que mi estómago no está para nada de acuerdo con eso, ChanMi..." más respuestas por parte del estómago vinieron del otro lado que ChanMi tuvo que asentir. Dios, cuando BaekHee saliera de ese baño, iba a tener que ponerse una mascarilla para sobrevivir a lo que dentro hubiera.
"Voy a hacerte un tecito y te traigo el papel ahorita, lo dejo frente a la puerta."
"¡Gracias, gorda! Eres la mejor, te amoooo."
ChanMi se vio sonriendo por eso último. Suponía que podía decir que eso era cierto, y hubiera sido tierno el gesto si los terribles sonidos que se escucharon de dentro no lo hubiera opacado. Imaginaba así que no iba a tener el deseado San Valentín que esperaba. ¿O habría modo de que los intestinos de BaekHee cedieran más tarde y les permitieran ser un poco sucias?
Definitivamente no lo habían permitido. BaekHee se la había pasado toda la mañana y tarde hecha un burrito entre las sábanas de su cama. ChanMi tuvo que ir con ella y traerle algo ligero para comer así como tomar porque la pobre se estaba quejando de unos fuertes retortijones que terminaron por hacerle sobar la pancita.
Incluso cuando ChanMi quisiera ser un poco traviesa y acariciar de más mientras abrazaba a BaekHee por la espalda en su cama, la cosa solo no le había funcionado en el más mínimo disfrute porque...
Pff.
"¿Te acabas de echar uno?"
"Sí..."
"¡BaekHee!"
"¡Es que presionaste muy fuerte mi pancita!"
Parecía que tenían un pequeño inconveniente en medio de ellas. Eso al menos hasta que en cierta hora de la tarde, ChanMi dejó que BaekHee se durmiera para sobrellevar el dolor de panza que tenía. Se había tomado su tecito y también algunas medicinas que esperaba pudieran ayudarle a mejorar. Dicha situación solo dejó a ChanMi fuera de la habitación mientras se entretenía haciendo otras cosas, como viendo esa lista de películas romanticonas que se había hecho en su cuenta para ver con BaekHee, pero... bueno, sí, ya sabían lo que había pasado.
Fue un día para que ChanMi engordara, riera y llorara con todo lo que se había enlistado sin siquiera saber bien de qué iban todas las tramas de distintas películas sola. Incluso terminó por ver una serie de terror que, aunque no fuera muy fanática del género, le llamó la atención porque era un poco diferente de lo usual con esos mini relatos de historias de la vida real que las personas que supuestamente los habían pasado narraban. En verdad terminó bastante entretenida con eso.
No se dio cuenta de en qué momento se le hizo de noche hasta que recordó que necesitaba prender las luces a menos de que se quisiera quedar ciega con el brillo de su computadora tan fuerte. En ese punto decidió dejar el maratón de fiesta de lástima que tenía y fue de regreso a su habitación. En ella, BaekHee seguía acostada, envuelta en las sábanas, tal como la había dejado. Seguía con su pijama puesta, como ella, ni siquiera se habían cambiado porque no lo habían visto necesario y el domingo era de flojera. Probablemente se bañarían hasta el día siguiente y ya en esa ocasión no. Un modo de ahorrar el agua, ¿no decían?
ChanMi se sintió un poco triste, de cierto modo, porque sabía que San Valentín solo se le había acabado, y ella no hizo nada con BaekHee, ni siquiera poder ver esas películas tontas, porque su novia había estado muy adolorida para poder quedarse despierta. Sin embargo, ChanMi también sabía que no se podía quejar, era solo un día, siempre podía pasar mejores tardes y citas especiales junto a BaekHee en otras ocasiones sin necesidad de nombrarlo de una manera en específico.
Por eso, con una sonrisa un poco más renovada, en una promesa muda que se hacía de tener la mejor salida que podría con BaekHee en otro día tan pronto su chica se sintiera mejor, se acercó hasta la cama para acariciar la cabeza llena de nudos de cabello alborotado. Estaba en medio de su intento por despejarle la frente cuando sintió algo peculiar. La frente de BaekHee estaba muy caliente.
"¿BaekHee?" La llamó, inquieta sobre cómo se sentía, pero cuando no recibió respuesta, ChanMi tuvo que sacudirla. "BaekHee, ¿te sientes bien? ¡Estás ardiendo!"
"Mmm, ChanMi... mi panza..."
"Ay, Dios, creo que tienes fiebre, BaekHee. Esos malditos camarones debieron ya hasta darte una infección. BaekHee, necesitas sacarte las sábanas para enfriarte," declaró, como la antigua usanza que le habían enseñado para bajar de un tiro la fiebre. Dada la temperatura que BaekHee parecía tener, ChanMi estaba segura de que iba a ser malo que no se le bajara pronto. Situaciones desesperadas requerían medidas desesperadas. "¡BaekHee!"
El problema era que su novia ahora no quería cooperar. Estaba todavía intentando dormir, con el ceño fruncido y quejándose porque buscaba jalarle las sábanas para seguir envuelta en ellas. ChanMi tuvo una batalla fuerte con ella, porque incluso cuando BaekHee fuera pequeña, ella sabía que escondía muy bien su fuerza. Finalmente se las logró arrebatar, y al dejarlas lejos de su novia, la chica estuvo temblando con sus brazos alrededor de su abdomen, entre quejidos que siseaba sobre sus labios.
"Perdona, linda, pero necesito bajarte esta fiebre a la de ya, estás muy caliente."
"¿Es eso un halago?" BaekHee preguntó, incluso en su semiconsciencia, lo que hizo que ChanMi se detuviera mientras recorría el espacio de la cama que las dividía. Tuvo que reírse por eso, ya frente a la cara de su novia que ahora notaba estaba un poco sudorosa. Debía ser de la misma fiebre que tenía, con la que seguro ni se daba cuenta de lo que decía. "Sí, ChanMi, soy muy caliente... Hum, tómame."
"Me encantaría, preciosa, pero en este momento no estás en la mejor posición. Me vas a patear el trasero si descubres que te tomé cuando estabas enferma y medio drogada por la fiebre y medicinas," sobre eso, se dio la oportunidad de cargar con BaekHee, y aunque tardara en nivelarla para soportar adecuadamente su peso sin dejarla caer o hacerle mucho trabajo, terminó por colocar su frente sudorosa sobre su hombro y cargarla a lo princesa.
"Rawr, esto es muy sexy, gorda, cuéntame más," BaekHee le dijo, seguro sin saber de lo que hablaban. ChanMi se rio de nuevo por eso y tan entretenida como podía estar con esta BaekHee que decía incoherencias, fue con ella cargada hasta su baño donde intentó respirar lo menos posible dado el olor que aun con el aromatizante había quedado.
"Bueno, si lo quieres saber, en otras circunstancias sí te hubiera hecho algo muy interesante, BaekHee."
"¿En serio? ¿Qué planeabas hacerme, mi hermosa mujerzota?"
"Pues... estaba planeando que viéramos juntas una película, pero en medio de eso, ya sabes, un besito por aquí," tuvo que darse al menos sobre eso la libertad de besar la coronilla de BaekHee, mientras maniobraba con sus pies para jalar un banquillo que tenían guardado en el baño y moverlo hasta la ducha. "Y otro por allá..."
Entonces, le besó también la mejilla pegajosa al colocarla finalmente sobre el banco, ya bajo la ducha, todavía apagada, con lo que BaekHee ronroneó y se recargó en sus azulejos con ambas manos muy cerca de su entrepierna. Parecía que alguien estaba pasando por otro tipo de calentura.
"Mmm, ¿y qué más?"
"Luego, seguramente terminarías mojada," ChanMi respondió al tiempo que abría la ducha, y sin piedad dejó que el agua fría le cayera encima a BaekHee. El grito que soltó su novia con eso fue uno sin igual. ChanMi podría haberse sentido mal por ella, pero luego de ver cómo se estaba comportando, toda sucia incluso en la inconsciencia–su novia de verdad no tenía límites– tuvo que admitir que le dio algo más de risa en el momento.
BaekHee terminó con una nueva pijama solo poco más tarde, con su novia que le estaba secando los cabellos junto a una toalla detrás de ella, ambas sobre la cama, aunque la mayor se hallara más en el borde.
Estaba algo molesta, se notaba en su claro ceño fruncido y la forma en la que estaba con los brazos cruzados como niña enfurruñada. ChanMi tenía que decir que eso definitivamente era su culpa, pero no podían culparla, ella hizo lo que había creído adecuado en el momento.
Bien, quizá una ducha fría no había sido muy adecuada para una pobre chica con fiebre, pero fue lo que mejor se le vino y en verdad le bajó rápido el problema.
Además, ahora su chica estaba bastante despierta, ya no más decir cosas incoherentes ni con dolores de estómago mortales que la dejaran retorciéndose en la cama. Tal vez ya era muy tarde para pensar en hacer algo interesante, pero no podía quejarse, habían pasado un buen tiempo de calidad al final de todo, ¿no era cierto?
"¿En serio era tan necesario que me metieras bajo el chorro de agua helada?" BaekHee reclamó, por tercera vez en esa ocasión, y cuando ChanMi la escuchó, se detuvo en su accionar, al tiempo que inclinaba un poco la cabeza para verla. De la misma manera, BaekHee la miró, aunque siguiera en su posición molesta como para darle nada más que un ceño fruncido y labios en puchero.
"Era eso o dejar que la fiebre siguiera, ya estabas diciendo cosas raras, no estabas en posición de decidir o no qué estaba bien de lo que yo hacía."
"No mientas, yo no estaba diciendo ninguna cosa rara."
"¿Vas a decir que esa eras tú con toda normalidad, acaso?"
"Claro. ¿Dudas que no hubiera querido que me dijeras caliente en la cama? Una lástima que fuera toda una trampa para solo llevarme a la ducha fría sin que lo notara. Seguro fue tu venganza por haberme echado un pedo en tu cara."
"Puede ser, pero ¿qué? ¿Hubieras aceptado voluntariamente ir hasta la ducha fría si te lo hubiera pedido? Ya que dices que estabas tan consciente de tus acciones..."
BaekHee le dedicó una mirada molesta sobre esas palabras, hasta con los ojos entrecerrados, a lo que ChanMi decidió dejarla de lado, ya con la toalla mojada entre manos para salir de la cama a ir a colgarla a su baño.
La mayor tomó eso como su punto final de aquella discusión improvisada, y al verla alejarse, BaekHee solo pudo dejarse caer sobre el colchón de su cama para soltar un suspiro. Aunque tuvo que admitir que desde donde se había quedado sí se puso a observar un poco el traserito de su grandota. Esos pantaloncillos de pijama que traía de verdad que le hacían ver mucha pierna. Chueca, flaca y larga. Uf, como a BaekHee le gustaba.
"ChanMiiiii," se quejó casi como una pataleta, con sus piernas que golpearon su edredón hasta el suelo. La más alta solo se volteó desde el baño, donde todavía intentaba aromatizar un poco más luego de colgar la toalla porque esa pestilencia de verdad que era imposible de acabar.
"¿Qué pasa? ¿Todavía te duele algo?" ChanMi preguntó ya con el aromatizante terminado. Mala idea que tuvieran un baño sin ventanas. Las desventajas de vivir en un complejo de apartamentos uno pegado al otro. Ese baño estaba mal posicionado, sin ventanas era insufrible en muchos de estos casos.
"No..." BaekHee respondió en medio de su puchero, a lo que ChanMi se dio el tiempo de regresar y recargarse en el marco de la puerta para ver cómo su novia ponía sus manos en cruz sobre su abdomen. "Bueno, poquito la panza, pero ya no tanto. Creo que lo que tuvo que salir, ya lo hizo. Y con lo que hiciste, la fiebre también se ha ido."
"Gracias a Dios, no quería tener que dormir en el sillón hoy."
"¿Tan mal huelen mis peditos?"
"Depende. A veces solo son muy ruidosos, pero ahorita que estás enferma y por unos camarones que seguro estaban echados a perder..."
"Maldito SeHun, no vuelvo a comprar nada con él, nos ha arruinado el San Valentín," ChanMi paró su intento de broma con eso, y sobre el ceño fruncido que BaekHee tenía, debió demostrar que parte de eso sí le había molestado o afectado un poco. A quién engañaba, era una romántica empedernida, y que le hubieran hecho pasar un San Valentín no del todo como lo esperaba, sí le estaba haciendo sentir algo triste... pero solo poquito.
"No era como si tuviera muchos planes para hoy, no te preocupes," ChanMi respondió al intentar disminuir la molestia de su novia, pero eso no quitó su ceño fruncido, menos porque BaekHee la leía muy bien y sabía que detrás de esa pequeña sonrisa se encontraba un corazón un poco desanimado.
"Me hubiera gustado poder hacer un poco de lo que me platicaste en mi inconsciencia," BaekHee admitió, a lo que ChanMi la miró sorprendida, y ahora con las mejillas algo arreboladas de saber lo que su novia insinuaba, escuchó cómo la mayor se reía mientras palmeaba el colchón a su lado. "¿Quieres al menos que nos hagamos mimitos en lo que dormimos?"
"¿Eso no va a hacer que se te salga otro pedito?"
"No me toques la panza y prometo que todo va a estar en orden," BaekHee respondió en seguida, a lo que ChanMi tuvo que ceder, porque estaba muy deseosa de pasar un tiempo junto a su novia. Tal vez no era el modo en el que imaginaba, pero en medio de esa posición, rodeadas de sus sábanas, con los mismos brazos de la mayor que la rodeaban y la atraían a ella, ChanMi se podía sentir gustosa. Cálida. Tal como siempre se sentía junto a BaekHee: como en casa. "No es lo que esperabas, pero supongo que puede ser por ahora suficiente, ¿no?"
"Sí, porque es justo lo que necesitaba, pasar tiempo a tu lado siempre es hermoso, BaekHee, sea del modo que sea."
"Ow, mi gorda," BaekHee la apachurró un poco más, a lo que ChanMi se rio en el hueco de su hombro y cuello. "Feliz San Valentín, ChanMi."
"Feliz San Valentín, BaekHee, te amo," al menos en este momento sí se dio la libertad de besar en los labios a su pareja. Y con eso, BaekHee le respondió, incluso con sus tripas sonando de manera horrible para ambas. "¡Juro que no apreté nada!"
"Hum, tranquila, solo fue mi forma de responderte. También te amo," BaekHee la volvió a besar, y sobre eso, sus tripas de nuevo sonaron, a lo que ChanMi la miró, preocupada sobre el beso, probablemente por temer lo que de aquello vendría. "Y voy ahorita mismo al baño."
"Será mejor que corras si no quieres que te salga premio," ChanMi bromeó a lo que vio cómo BaekHee le levantaba el dedo medio antes de dar un azotón de su puerta de baño. Con eso rio, pero no se pudo quejar más, porque esto era lo que tenía junto a BaekHee.
Un San Valentín inesperado, aunque bastante sin igual, muchos dirían. Verdadero amor era todo lo que se necesitaba para saber sobrellevar una situación como esta.
¡Hola, cariños! Una disculpa haber tardado tanto en actualizar esta bella historia. Solo que estos días he estado algo ocupada. Entretenida mientras subía algunos otros fics, historias, por si no lo han visto, pueden pasarse por mi perfil, he subido un par de cosas nuevas por distintas fechas, ya saben, el KaiSoo day, día de San Valentín, entre otras. Y bueno, de esta no me quería olvidar, así que, aunque haya llegado algo tarde, finalmente me pude hacer un espacio para subirles algo nuevo y especial para esta fecha.
Por cierto, quería traerlo antes, pero hice una encuesta en mi tablero y nadie respondió si querían que Gals' Love fuera actualizado sobre otra historia (hasta ya tarde, cuando en otra encuesta que hice en Instagram—que sí me pelaron un poco más— había ganado el interés sobre la otra historia). Tal vez eso deja saber los tantos lectores que tengo por aquí siguiéndome, ¿no? 😅😬🤧
¡Feliz San Valentín 2021 atrasado! Probablemente cuando algunos lean esto ya tampoco sea la fecha, pero bueno, la intención es lo que cuenta(?)
No sé qué tal les ha parecido esta pequeña parte, intenté hacer algo divertido e igual de tierno tal como siempre se nos caracterizan estas chicas, pero de cierto modo estoy un poco dudosa sobre lo que hice. ¿Les ha gustado a ustedes? ¿Al menos se han reído con algo?
Ojalá así fuera. Ahora espero no desaparecerme pronto, que necesitamos ver un poco más de estas chicas, ¿no? ¿No estaban ya ansiosos de leer sobre ellas de nuevo?
No sé, los que están aquí, ¿qué extrañaban más? ¿Quieren que una situación se trate en específico? Sé que todavía tengo cositas que tratar de estas dos, y ya estaba planeando empezar a retomar algunas de estas, pero antes quizá veamos más sobre otros personajes... ¿Ustedes saben de lo que hablo?
Espero entonces puedan sentirse tan gustosos de volver a esta historia como yo, que ya saben no voy a olvidarme de ella, así que siéntanse cómodos, porque pronto vamos a tener algo nuevo de todo esto. ¡Muchas gracias por leer hasta aquí! Nos estaremos comentando en las siguientes partes, ¡un abrazo! 💙
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