Capitulo 20.- En las sombras

Laura di Antonio camino en silencio por el callejon, su carro estaba al final, escondido entre las sombras con las luces apagadas, detras de ella, dos guardias estaban escoltandola, armados con subfusiles ADP90 (Arma de Defensa Personal 90), que eran ideales para lugares cerrados y con buena candencia de tiro, los dos iban unicamente con un chaleco anti balas, y ella esperaba que fuera sufuciente para disuadir a cualquiera para que no se acercase 

Estaba dirigiendose al subnivel, los barrios bajos de forma literal y figurativa de la ciudad, una zona que si bien, durante el día estaba concurrida y era colorida, durante la noche era bastante peligroso entrar

Para Laura, el riesgo valdría la pena, sobre todo para tratar el ultimo trabajo que había salido terriblemente mal, se acercaron al elevador publico que los llevaría al lugar, y despues de unos segundos donde las puertas se quejaron por lo oxidadas y gastadas que estaban, Laura se pregunto cuantos años tendría el ascensor y si era seguro

Para su suerte, lo era, los llevo con algunos chirridos al nivel A-4, el Barrio asiatico de la ciudad, como era un nivel subterraneo, la unica luz que había eran la de las lamparas en las calles, había autos estacionados en garajes, casas con paredes altas y trozos de vidrio roto encima, ventanas con barrotes, y perros demasiado violentos y ruidosos en los patios, pero por lo demas, las calles estaban tranquilas

Laura camino en silencio en mitad de la calle para evitar que algun perro despertara a sus dueños y la vieran vagar por el lugar, lo que menos necesitaba eran testigos, avanzaron lentamente y finalmente llegaron a su destino, un viejo almacen de aspecto destartalado, pintura resquebrajada, y soportes oxidados, tenía un letrero viejo y borroso que dictaba "Programado para demolicion" 

Uno de los guardias toco la puerta oxidada, la cual chirrio y un hombre de aspecto eslavo, de ojos claros se asomo por la puerta, sonrio y luego termino de abrir la puerta, lo suficiente para dejar a la vista un grupo de unos 30 a 40 hombres, todos armados, salvo uno, quien estaba sentado en una caja, en cuanto vio a Laura se puso de pie

- Laura, mi amiga, ¿como estas? - pregunto, extendiendo sus brazos, su tono dejaba en claro que no le agradaba verla

- En una escala del 1 al 10, estoy en -5, sabras bien por que - el hombre bajo los brazos y solto un suspiro

- Sabes bien que no fue mi culpa que un jodido guardia inmortal apareciera frente a mis hombres - exclamo Caius, para volver a sentarse

- No quiero excusas Caius, prometistes que tus infiltrados asegurarían una ruta segura para matar a la emperatriz - Laura solto un suspiro de molestia, dio unos cuantos pasos hacia el frente con sus guardias siguiendole - al final lo que obtuve fueron varias bolsas de cadaveres y perder mi jodido dinero - Laura dio un pequeño aplauso nervioso antes de empezar a dar vueltas en circulos 

- Deja de hacer eso, me pones nervioso - Laura se detuvo

- Vaya, la damicela se pone nerviosa - el tono de desprecio en su voz se acentuo - ¡LA QUE DEBERÍA ESTAR NERVIOSA SOY YO HIJO DE PUTA! 

- El que ideo el plan fui yo, fue mi fracaso, vale, lo reconozco - hablo el hombre

- Caius, se que fue tu "plan" pero la que dio las armas fui ¡YO! - para recalcar la idea Laura se golpeo el pecho dos veces - Si rastrean las armas, encontraran al proveedor, si encuentran al proveedor rastrearan el dinero, y eso los lleva a mi, ¿Sabes que pasa si me descubren? 

- Eh bueno...

- Pierdes a tu aliada y, recalco, fuente de ingresos para tu estupido movimiento campesino comunista - el hombre no se atrevio a alzar la cabeza

- Lo siento, la proxima planeare todo de mejor manera

- No, no habra una proxima, esta claro con este fracaso, que tu mente de campesino no puede con una gran responsabilidad, yo sere la que lo planeara todo - Caius asintio desde su asiento

- Esta bien, como quieras, menos trabajo para mí - miro a sus hombres un momento antes de regresar la vista a la mujer - ¿Algo más que quieras hablar? - Laura levanto la mano y la movio en signo de negacion

- No, pero para la proxima reunion busca un lugar un poco más limpio, este sitio es asqueroso - comento

- Bueno, al menos es discreto - contesto el hombre

Entonces el flash de una camara destello en la oscuridad, todos voltearon al lugar de donde había salido el destello, en silencio, por unos instantes, antes que la oscuridad retomara el control, observaron una silueta que les devolvio la mirada en estado de consternacion

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