La risa de Seok Jin llenó el lugar, Hoseok le miro confundido y siguió comiendo su cereal sin entender de que hablaba su mami, observó al hombre malo sonreirle y apartó la mirada fastidiado, recordaba haber visto a ese señor en otro lado.

— ¿Entonces tu madre de verdad se desmayo, Namjoon?—

— Hasta fingió un paro cardiaco, princesa— contestó entre risas observando a Jin cocinar— ¿Por qué no me dijiste que cocinabas tan rico? Te pude contratar como mi chef personal

Hoseok nego malhumorado y dejó caer su cuchara con fuerza.

— Eres un mañoso, Namjoon hyung— ronroneo Jin dejando un plato de verduras delante de Hoseok— Ni creas que voy a ponerme ese disfraz de maid que compraste

— ¿Por qué no?— dijo robandole su comida a Hoseok— Sabes cocinar y me mantienes la casa limpia, lo único que te falta es el trajecito...

Jin viro los ojos y dejó un segundo plato delante de Hoseok, tomo al niño entre sus brazos y se sentó junto a Namjoon.

— He pensado en tomar clases de cocina—murmuro jugando con la mano del moreno— Aprendere a hacer algunos postres, van a gustarte...

Jin le guiño un ojo y se dedicó a alimentar a su pequeño hijo que le observaba enfurruñado, Namjoon tuvo que admitir que lucía sexy, demasiado para ser sano, comieron en silencio y dejaron al niño frente al televisor.

— ¿A que clase de postres te estabas refiriendo, Seok Jin?—

— Ninguno en especial— Jin se observó en el espejo y sonrió— ¿Por qué? ¿Vas a querer probarlos?

Si Namjoon contase con cuantas chicas se habia acostado antes, perdería la cuenta después de pasar la centena, pero nunca había sentido lo que con Jin, el chico era inocente, demasiado para su gusto pero de vez en cuando no actuaba de esa forma, le gustaba cuando el chico tomaba la iniciativa.

— Sabes que me comería cualquier cosa que venga de ti—

El pelirrosa soltó una risita nerviosa y se sentó junto al chico, jugo con sus manos y soltó un suspiro.

—¿Por qué pensaste que era una puta?—

Namjoon tomó la mano de Jin entre las suyas y depositó un beso en ella, le sonrió y se apoyó en el chico.

— Olvidalo, Seok Jin—

— Es que no lo comprendo...—

—Traias una pulsera del Pink House—murmuro besando sus mejillas— Vestias de rosa y estabas en una esquina

— Pudiste llevarte a cualquiera— hizo un pequeño puchero— Incluso a Jiminnie

— ¿Jimin?— preguntó confundido— ¿Quién es Jimin?

Seok Jin dejó pequeño besos en el cuello del moreno mientras se acomodaba en el regazo del mayor.

— Un amigo...—

— ¿Un amigo?— Namjoon acomodo sus manos en la cintura del chico— No me gusta que tengas amigos...

— Entonces tampoco te va a gustar que te hable de mi novio—

Namjoon fijo su mirada en Seok Jin, el menor sonrio de lado y depositó un corto beso en la comisura de sus labios.

— ¿Quién es ese estúpido?— gruño apretando su agarre— ¿Como se llama, Jinnie?

—Tú eres ese estúpido— mascullo antes de salir huyendo de la habitación—