001
Capítulo 1 de la segunda temporada, empezando por donde se quedó la anterior en el capítulo 183
Mañana del 31 de diciembre, año 2006.
Extraño.
Desde que Matchi se despertó, todo había sido bastante extraño, empezando porque solía recibir algún mensaje de Kisaki apenas despertaba pero esta vez no hubo nada; se dijo a sí misma que quizás estaba ocupado con algo y no le dio mucha importancia.
Luego de haberse tomado su tiempo para darse una ducha, fue hasta la cocina para desayunar algo ligero; aunque sea un pedazo de pan añejo que haya quedado del día anterior. Sin embargo, la distrajo el sonido de la voz de su hermano hablando por teléfono con alguien, y la curiosidad la llevó a ir a preguntarle.
— ¿Con quién hablas?
— ¿Qué? ¿Qué con quién hablo? Ah, es sólo... Kisaki. — iba a decir algo más, pero apenas abrió la boca él volvió a hablar. — Cállate un rato.
— No seas grosero.
— No, no tú; le hablo a Kisaki.
— ¿De qué están hablando para que lo insultes?
— No te importa de qué estamos hablando; somos mejores amigos. — la fémina rodó los ojos, sintiéndose irritada por su actitud; la cual no era nada normal en él. ¿De qué podrían estar hablando esos dos que no quisieran que ella supiera? ¿Y si era algo malo? — Kisaki dice que te ama. — la voz del contrario interrumpió sus pensamientos.
— ¿Qué?
— También dice que te manda saludos. — volvió a susurrarle al teléfono; demasiado sospechoso.
No, no iba a hacerse ideas sobre lo que podría estar pasando; no en ésta ocasión. Le había prometido a Kisaki que pasarían año nuevo juntos e iba a mantener esa promesa sin dejar que su ansiedad la domine.
Aunque...
Él había estado actuando extraño desde hacía mucho tiempo atrás; le pedía favores a Shuji y le preguntaba a ella sobre la propuesta de matrimonio de Takemichi a Hina. No había ninguna razón que pudiera explicar su comportamiento tan extraño, excepto...
Tampoco iba pensar en esa posibilidad; esperaba que fuera sólo su imaginación.
Decidió comer un poco más en vez de llenar su estómago de un pan viejo y litros de agua; para algo tenía comida, así que mejor desayunó un plato de cereal.
Faltando un par de horas antes del momento acordado para verse con Kisaki, ella empezó a arreglarse a sí misma un poquito; sólo por una ocasión. Decidió seguir los consejos que ya le había dado Mitsuya para vestirse y pudo escoger algo decente, a diferencia de sus atuendos casuales, y también decidió que sería lindo ponerse algo de perfume.
Al ponérselo recordó que no lo usa porque la hace estornudar; ¿por qué siquiera lo tenía?
Desde su habitación escuchó el timbre de la casa sonar; seguramente era él. Caminó apresuradamente hasta la puerta tratando de no estornudar de nuevo mientras gritaba “ya voy”, haciendo saber que se acercaba, y la abrió la puerta, dejando ver a Kisaki frente al pequeño apartamento.
— Hola. — lo saludó con rapidez antes de salir y cerrar la puerta detrás de ella. — ¿A dónde querías que te acompañe a ir hoy?
— Hoy es... un día especial; es por eso que quiero que me acompañes a tu lugar especial.
— Aww eso es lindo, pero ahora es nuestro lugar especial. Además, es sólo año nuevo; no es un día tan especial.
— Lo es para mí. — Kisaki le tomó cuidadosamente de su mano. — Es nuestro primer año nuevo juntos como pareja, ¿ya estás lista para irnos?
— Síp. — sintió como el agarre de su mano y ambos empezaron a caminar, pues el día anterior habían acordado que irían a pie. — A veces pienso que pensamos mucho en todo lo que hacemos juntos como pareja; aún cuando todas esas cosas ya las habíamos hecho antes.
— Creo que es porque nos emocionamos mucho cuando pensamos en nosotros como pareja.
— Pues es muy lindo ser pareja, y creo que ya hemos dicho “pareja” muchas veces.
— Bueno... somos pareja. — él se rió de forma nerviosa, lo cual a ella le pareció tierno; parecía estar algo ansioso por alguna razón que desconocía.
Siguieron caminando en silencio; de nuevo lo extraño. Hubiera hablado con él de cualquier cosa que se le ocurriera si él no se viera tan tenso, pero tampoco se atrevía a preguntar qué le pasaba; Kisaki siempre se estaba negando a admitir sus sentimientos.
Pronto llegaron al lugar que ella conocía bien; el mismo que le mostró al chico cuando aún estaban en primaria, y él definitivamente se veía como la primera vez que fueron ahí: asustado. No se preocupó mucho por eso; le pasaba eso cada vez que iban a ese sitio.
Lo que no le pasaba era que él estuviera tan alterado; no se relajó ni un segundo durante todo el tiempo que estuvieron allí y eso sólo lograba hacerla sentirse mal. Tal vez él ni siquiera quería estar ahí y sólo lo hacía por ella.
— ¿Te sientes bien? Pareces alterado; si quieres nos podemos ir.
— No, no... faltan sólo... — vio al chico revisar el reloj en su teléfono. — 12 minutos para la media noche, y oficialmente será un año nuevo.
— Pero te ves como si te sintieras mal.
— Estoy bien, sólo... podemos irnos después de la media noche.
—...Bueno.
Decidió no preguntar más; estaba claro que no le diría nada si estaba decidido a no hacerlo. Pero no tuvo que pensar mucho en ello, pues faltando dos minutos para la media noche él le habló de nuevo.
— Matchi.
— ¿Sí?
— ¿Recuerdas que te dije que hoy era un día muy especial? ¿Y que en navidad quería preguntarte algo muy, muy importante? Bueno, invitarte aquí no era eso tan importante; es la razón por la que este momento es especial.
Entró en pánico.
— ¿De qué... hablas? — preguntó, esperando que no fuera lo que ella pensaba.
— Matchi, ¿te... — se detuvo ahí. — ¿Tequierescasarconmigo?
Lo escuchó perfectamente, pero quería asegurarse de en realidad sus oídos no la habían engañado.
— ¿Qué? Hablaste muy rápido; no entendí. — lo vio suspirar y meter su mano en su bolsillo.
— Lo que quise decir fue... bueno, cuando seamos mayores, claro. ¿Te quieres casar conmigo? — sacó una caja con un pequeño anillo.
Frente a ella tenía su peor temor hecho realidad; no sabía qué decir. Por supuesto que lo quería, pero no sabía si quería eso.
Es decir, ¿ella siquiera podría ser una buena esposa? ¿Y qué hacen las esposas exactamente? No lo sabía; no tenía idea y eso la asustaba, porque podría arruinarlo todo al decirle que sí. ¿Qué pasa si resultaba ser una esposa terrible y él terminaba hartándose de ella, y luego terminaban divorciados?
Eso sólo significaría que su madre tenía razón cuando le dijo que nadie iba a quererla en serio nunca, y odiaba que su mamá tuviera razón, pero ¿estaba dispuesta a arriesgarse? La situación era demasiado estresante, y que él estuviera esperando su respuesta no la ayudaba en lo absoluto; se sintió muy presionada, asustada y confundida.
— No puedo.
👁️ La verdad no pensé que la historia llegaría tan lejos como para tener una segunda temporada, pero ya ven, la vida da sorpresas; el primer libro era larguísimo jsahajsj
Mañana sabremos lo que pasa después de ésto.
Besitos en las manos, cuídense y tomen mucha agua.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top