157

Mientras más avanza el manga, menos sé cómo adaptarlo a la historia jsahajsja

Gente, les voy a ser sincera, se me salió lo atrevido escribiendo éste capítulo. No sé qué decirles JSAHAJSJA

Apenas dos horas más tarde.

— Odio esto.

— No seas tan amargado.

— Matchi, siempre que salimos, la lluvia parece querer salir también.

— Está bien, hey, de todas maneras me gusta más cuando nos quedamos adentro juntos; así como ahora.

— Lo sé, sólo me tiene... frustrado. — ella tomó su mano. — Quizás estamos malditos o el universo no nos quiere juntos.

— No, no digas eso; sólo son coincidencias.

— Bueno, ¿tú sabías que la ciencia no cree en coincidencias? Yo tampoco; no sé por qué nos pasa ésto cada vez que salimos.

— Estamos por entrar al invierno; es normal que llueva y haga frío.

— No es sólo ahora; sucede sin importar la época del año. Son demasiadas “coincidencias” como para ser llamadas así.

— No te concentres en eso; siempre me dices a mí deje de ver todo lo malo y tú mismo lo haces. Bueno, lo que querías es que viera la playa y lo hice ¿no? Eso es más que suficiente. — el contrario suspiró pesadamente.

— Sí, supongo que sí...

— Y logramos llegar antes de empaparnos la ropa; lo único que tengo es frío, pero fuera de eso todo está bien.

— Bueno, y... ¿ahora qué?

— ¿Un abrazo para entrar en calor? — extendió sus brazos hacia él.

— No me voy a negar. — aceptó el gesto y la rodeó con sus brazos. Luego ella se acomodó en el sillón donde estaban sentados y se recostó sobre el reposabrazos, acomodándose de forma en que él quedó con la cabeza cerca de su pecho.

— Es mejor cuando te relajas y te dejas llevar por mí; te la vives muy estresado.

— No es para tanto. — ella le empezó a acariciar la cabeza.

— Sí lo es, pero no vamos a discutir sobre eso. — él levantó la cabeza y le dejó un pequeño beso en los labios.

— Prefiero que sea así; no me gusta pelearme contigo.

— Peleábamos más cuando éramos sólo amigos.

— Hagamos otra cosa. A pesar de que esto es lindo, es probable que luego me quede dormido, y justo ahora no tengo ganas de eso.

— Entonces, ¿qué quieres hacer?

— No lo sé, ¿qué quieres hacer tú? — le devolvió la pregunta mientras la miraba a los ojos.

— Me estás poniendo algo nerviosa; deja de mirarme así.

— ¿“Así” cómo?

— ¡Justo así!

— Tú dijiste que me la vivo muy estresado; relájate un poco tú también. — se volvió a acomodar, esta vez para quedar sobre ella.

— ¿En qué estás pensando? Me da miedo no saber lo que pasa por tu mente; veo el futuro pero no puedo leer tus pensamientos.

— No creo que quieras leer mis pensamientos justo ahora.

— Sólo dime qué es lo que tienes en mente.

— ¿Y si mejor te muestro?

— Eso sólo me pone más nerviosa.

— Cálmate; no voy a hacer nada malo. Hablando en serio.

— Pero dime en qué piensas.

— ¿Recuerdas lo que hicimos la otra vez?

— ¿Sí...?

— Justo ahora estamos solos de nuevo; no hay nadie más en tu casa que nos pueda interrumpir.

— Espera, ¿tratas de decir que quieres repetirlo?

— Bueno, tú también lo dijiste ese día; “deberíamos repetirlo alguna vez” fueron tus palabras exactas.

— Sí, y “alguna vez” no es tan pronto.

— ¿Entonces no quieres?

— No dije eso.

— Entonces sí quieres.

— Tampoco dije eso.

— ¿Sí quieres o no quieres? Porque si no quieres, no es como que vaya a obligarte.

— Bueno- ahg, está bien, tú ganas... sí quiero.

— ¿Totalmente segura de que no es por sentirte presionada?

— Sí, estoy segura.

— Bien...

Empezó a acercarse a ella con la intención de besarla, sintiendo pronto la respiración de la fémina justo sobre sus labios mezclándose con la suya debido a la cercanía. Sintieron sus  narices rozar y ambos cerraron los ojos unos segundos antes de juntar sus bocas.

La puerta principal fue abierta abruptamente, causando un ruido de un segundo a otro que logró asustarlos. De nuevo, la única persona en el mundo que siempre lograba interrumpirlos en el peor momento.

— Mi sexto sentido se activó, ¿qué estaban a punto de hacer?

— ¿Tu sexto sentido se activó cuando estabas junto a la puerta o desde dónde vienes? — le preguntó ella.

— Responde la pregunta, ¿qué estaban haciendo y por qué Kisaki está encima de ti?

— Sólo la iba a besar. — Kisaki se excusó. — Las parejas se besan, ¿sí lo sabías?

— No lo sabe porque no tiene novia.

— Una posición un tanto sospechosa sólo para besarse.

— Pues en primer lugar, lo que él y yo hagamos no es de tu incumbencia. — le habló Matchi. — Segundo, la lluvia nos tomó por sorpresa y teníamos frío; estábamos aquí abrazados y él sólo me quería besar, así que gracias por arruinar el momento.

— De nada.

— Ahora estoy enojada. — ella quitó a Kisaki para poder sentarse correctamente.

— Por lo menos la lluvia ya paró. — habló Kisaki al darse cuenta de ello. — Con suerte... quizás pueda haber un arcoiris.

— ¡¿Un arcoiris?! — exclamó ella con clara emoción. — ¿Tú crees?

— Vayamos a ver.

— Hey, ustedes dos aún me deben explicaciones.

— No te debemos nada. — le reclamó la menor. — Ya vámonos Kisaki.

— Kisaki no te vayas y dame las explicaciones que les pido.

— Lo siento Hanma, pero justo ahora estoy en la obligación de hacerle caso a ella.

— ¿Justo ahora? ¡Le haces caso siempre! — los vio salir del apartamento. — Maldito favoritismo; estoy empezando a extrañar la época en la que estaban peleados y no se querían ver ni hablar y Kisaki pasaba todo el tiempo conmigo.

Los otros dos salieron lo más rápido que sus piernas les permitían afuera; Kisaki sabía que ese era otro punto de la lista que ella tenía cuando era pequeña. A pesar de que Matchi ya era consciente de lo que él trataba de hacer, quedaron en que a ella no le molestaba y le dijo que no lo detendría si quería seguir haciéndolo; ese hecho sumado a la emoción de la chica momentos atrás por ver un arcoiris le indicaban que nunca había visto uno antes.

— Mira. — señaló un punto específico del cielo, a lo cual ella miró en dicha dirección.

— ¿Eso es un arcoiris?

— Sí, por un momento olvidé que a veces aparecen después de la lluvia.

— No es tan genial como me lo imaginaba cuando tenía 5 años; apenas y lo puedo ver, pero de todas formas es lindo.

🔮 Yo: Sí, como que sí quiero estudiar literatura.
Mi hermano: NooooOOOOoo ¿cómo vas a hacer para ganar dinero con esa carrera? Que tengas éxito es muy difícil.
Una señora que ni me conoce pero mi mamá le contó de mí: Es la mejor que puede estudiar, es más, yo le ayudo a encontrar beca en el extranjero.
Otro señor amigo de mi mamá: Que buena carrera, es más, le paso el contacto de la universidad de la que me gradué en España donde ofrecen becas.

Adivinen quien está a casi nada de encontrar la forma de escapar de latinoamerica. La cosa es que mi mamá dice que cree que me tendré que ir sola (tengo nervios pero si me llego a ir sola creo que me sentiría un poco más libre jsahajsja).

La verdad no sé qué decirles del capítulo de hoy, no sé qué me pasó mientras escribía. Es lo más cercano al lemon que he escrito, y es lo más lejos que voy a llegar (eso creo)

Besitos en las manos, cuídense y tomen mucha agua.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top