Lo prometido es deuda

— Mirai, ¿qué deberíamos hacer? — le preguntó Takemichi.

— Tú cuida a Draken o trata de buscar a quien sea que pueda atacarlo; yo voy por el idiota de Shuji porque miedo no le tengo.

— Pero si antes te escondiste.

— Eso fue porque él no sabía que yo estaba aquí, pero ahora ni modo; trataré de distraerlo y tú encárgate de lo otro. Aunque preferiría que llames a una ambulancia, porque si todo se desarrolla como en mi sueño entonces la vamos a necesitar.

— Entiendo.

— ¡Vamos! — se escuchó a Mikey gritar antes de que todos empezaran a golpearse.

Mirai y Takemichi se separaron, y ella trató de evitar a tantas personas como le fue posible para llegar hasta su hermano mayor, quien estaba entretenido golpeando a varias personas de la ToMan.

Desgraciadamente para ella, alguien llegó hasta estaba y trató de atraparla desde atrás, pero ella rápidamente se liberó dándole un codazo y pateándolo para mandarlo lejos. Aún así, eran demasiadas personas, seguían llegando y Mirai se atrasaba cada vez más; la suerte fue que al ser flexible, esquivar golpes se le hizo muy fácil y tan sólo terminó con algunos raspones en su cara.

— Diablos, ya estoy harta de esto. — habló en voz alta mientras veía a otras cuatro personas correr hacia ella. — Antes estaba en medio de algo. — se apoyó en su pie izquierdo giró para golpear a las cuatro personas de una sola patada.

— ¡Oye, Mirai! — ella se volteó y se dio cuenta de que quien le hablaba era Baji. — ¿Necesitas ayuda? — le preguntó mientras detenía a un par de chicos que planeaban ir tras ella.

— Te lo agradecería.

— ¡Vamos, Chifuyu! — el mencionado se volteó y asintió. — Haz lo que tengas que hacer, Mirai.

Una vez tuvo el camino libre, ella siguió corriendo hasta poder ver a su hermano a lo lejos, quien seguía golpeando a varias personas. Llegó hasta donde estaba y él notó su presencia.

— ¿Qué haces, Mirai? ¿Vas a pelear conmigo? Porque si es así, no tengo problema; elegiste estar en el otro bando después de todo.

— ¿Y qué demonios hacías tú aquí? ¿Para esto tenías que salir?

— Tú no tienes derecho a reclamarme nada. Si te tengo que detener por mi cuenta, entonces lo haré.

— Como quieras.

Ella se acercó corriendo y trató de golpearlo, pero él lo bloqueó muy fácilmente, después él trató de atacarla y sucedió lo mismo, luego otra vez y otra vez. El problema era que se conocían de toda la vida y, por lo tanto, ambos sabían bien como peleaba el otro. El mayor de los dos evitó atacar a Mirai en la cabeza, así que básicamente sólo estaba lanzado golpes del cuello hacia abajo tratando de derribarla.

Mirai le lanzó una patada, que él logró parar con su mano, cuando se escuchó Takemichi gritar.

— ¡Draken!

Aprovechando el pequeño momento en que él se distrajo, Mirai se estiró todavía más y puso una de sus manos en el suelo como soporte, giró sobre sí misma y por fin logró darle una buena patada a su hermano para luego salir corriendo en dirección a Takemichi.

Mikey también iba a ir hacia allí, pero pronto Shuji lo encontró y comenzaron una pelea. En medio de todo el caos Mikey le pidió a Takemichi que se encargara de Draken.

— Takemicchi, ¿qué pasó? — le preguntó Mirai cuando llegó junto a él, agachándose para verificar que el más alto siguiera vivo.

— Apuñalaron a Draken en medio de todo el disturbio.... al final, no pude cambiar nada; ni siquiera con tu ayuda.

— Deja de llorar, él está vivo. ¿Llamaste a la ambulancia como te lo pedí?

— Ah... creo que con todo lo que pasó.... lo olvidé.

— No importa, ya sabía que lo ibas a olvidar. Yo llamé a la ambulancia, pero tardarán en llegar por el festival.

— ¿Cómo sabías que lo iba a olvidar?

— De lo poco que te conozco ya sé que estás idiota. Ayúdame a cargarlo; hay que alejarnos de aquí así que tú lleva la mitad inferior y yo la mitad superior.

— Sí.

Ambos empezaron a caminar mientras cargaban a Draken hasta que llegaron a cierto punto, donde se encontraron con Hina y Emma.

— ¡Pedimos una ambulancia! — les preguntó Hina

— ¿Y Draken?

— Tranquilas, sigue vivo. — les informó Takemichi.

— Yo también había llamado una ambulancia, pero supongo que está bien. — Emma comenzó a llorar de pronto, dejaron a Draken en el suelo y la rubia se agachó junto a él.

— Draken...

— Hina, dijeron que esperáramos aquí, ¿no?

— Sí, pero.... no ha de ser fácil llegar con la lluvia y el festival. ¿Takemichi? — preguntó al ver que caminaba, había llegado Kiyomasa junto a más personas.

— ¿Cómo? ¿Draken sigue vivo?

— Oigan, ¿qué hace Tontomichi aquí?

— ¿Qué crees que haces, sabandija? ¡Que alguien me traiga cinta adhesiva! — los otros empezaron a reír.

— Takemicchi....

— ¿Draken?

— No te muevas. — le dijo Emma al ver que se había sentado.

— Gracias, Takemicchi. Huye con las chicas; voy a estar bien.

— ¿Qué huya? — se quedó un momento en silencio y luego gritó. — ¡Soy patético! ¡¿Para qué demonios vine aquí?! — respiró profundamente. — Mirai, aleja a Hina de aquí. Lo siento Draken, gracias por darme valor.

— Hay que quedarnos quietos aquí. — le dijo Mirai a Hina. — Es su pelea, así que no voy a interferir.

— ¿Segura que eso está bien?

— Tranquila, si las cosas se ponen muy feas entonces le ayudo.

— Kiyomasa, aún tenemos cuentas pendientes. — habló Takemichi. — No terminamos nuestra pelea a puño limpio.

— ¿Qué?

— ¿De qué demonios hablas? Por lo que vimos, está claro que perdiste.

— No perdí.

— Vaya, en ese caso... apuesto 100 millones por Takemicchi. — dijo Draken. — Es una ridiculez, pero ¿qué más da?

— ¡Yo también apuesto 100 millones por él! — siguió Hina.

— ¡Yo 300 millones!

— ¡¿Hina?! ¡¿Emma?!

— ¿Por qué me miran a mí? — les dijo Mirai al notar que la estaban viendo. — ¿Están esperando que apueste yo también? Pero con el dinero no se juega.

— ¡Mirai! — le dijo Hina.

— Bueno, pero sólo 10 millones.

— Parece que todos perdieron la cabeza. — se burló Kiyomasa.

— No, — afirmó Draken —Takemicchi va a ganar.

— Gracias, chicos. ¡Vamos, Kiyomasa! ¡Pelea!

🔮 Estaba revisando y la historia ya tiene como 20k lecturas ah- yo no pensé que llegaría tan lejos.

Muchas gracias por leer, votar y en especial comentar, me muero de risa siempre con sus comentarios y me anima mucho a seguir escribiendo 💞✨

Besitos en las manos, cuídense y tomen mucha agua.