Capítulo 35.

Lena:

Todos estábamos con las maletas en manos, mis abuelos me miraron y sonrieron, mis ojos ya estaban llenos de lágrimas, sí que los extrañaría.

—Te cuidas y por favor cuida a todos —(dijo mi abuela y yo reí por lo último)

—Claro que sí, los extrañaré mucho —(dije y los abracé)

—Nosotros a ti —(dijo mi abuela y yo solté una lágrima)

—Lena, León, acompáñame a la biblioteca, quiero darte algo —(dijo mi abuelo y asentí, le di mi maleta a Jos y él la tomó)

Caminamos con mi abuelo a la biblioteca de la casa, entramos y cerramos, el camino a un cajón de su escritorio, saco unas llaves y lo abrió, saco un sobre de este y lo deslizó por el escritorio.

—Esta es una casa que compré en México, pensaba irme con tu abuela a vivir a México, pero tengo algunos pendientes, por favor, aunque su mamá quiera ser fuerte, le afecta estar en esa casa, no lo hagan por ustedes, háganlo por ella —(dijo mi abuelo y yo asentí)

—La cuidaremos abuelo, te lo prometo —(dijo León y el asintió)

Lo abrazamos una vez más y después salimos de la biblioteca, para así salir de la casa, me subí al taxi que nos llevaría al aeropuerto, mire a mis abuelos, sonrieron y me miraron, mis ojos ya tenían lágrimas, solté unas cuantas, ellos me lanzaron un beso y yo se los regresé, Ricardo me abrazó y yo sonreí, el taxi dio en marcha y salimos de ahí, me sentía mal dejarlos, no los veía en años y bueno este tiempo que estuve con ellos fueron los mejores, suspiré y cerré mis ojos dejando caer mis lágrimas, recargue mi cabeza en el hombro de Ricardo y el me abrazó, mis ojos pedían dormir, poco a poco me quedé dormida.

Habíamos aterrizado en México, nuevamente estaba a punto de pisar México, después de meses, Jos tomo mi mano y bajamos del avión, suspiré, me sentía tan bien regresar, nos llevaron al interior del aeropuerto, caminamos a la salida, ahí estaban dos camionetas mis Hermanos Leonardo y Lili estaban esperando, los abracé muy fuerte, ellos sonrieron y después todos nos subimos a las camionetas, en una se fueron todos los chicos y en la otra pues mi mamá, Ashley, Lili y yo, note que la otra camioneta se desvió mire a mi mamá y ella miró.

—Van para la empresa —(dijo mi mamá y asentí)

Llegamos a casa y me baje, mire la casa, se notaba tan vacía, entre y mire todo, todo, los recuerdos llegaron a mi lentamente, entramos a la casa y mire las fotos que estaban, pero note que ya no aparecía Leandro en ellas, suspiré y subí con Ashley a mi habitación, la que compartía con Alonso, dejé mi maleta y mire que ya no estaba la cama de Alonso.

—Se fue después de que desapareciste, su familia está aquí en México y bueno está viviendo con ellos —(dijo y yo la mire)

—No tenía por qué sacar la cama, al final este también es su cuarto —(dije y ella sonrió)

Camine a la ventana de mi habitación, mire el jardín, todo estaba como antes, Ashley se paró a mi lado y me miro.

—¿Quieres hacer algo en especial? —(pregunto y asentí)

—Quiero todo lo de la empresa, quiero que todo me lo mandes a mí —(dije y ella me miro sorprendida)

—Lena, pero... —(dijo y yo la interrumpí)

—Se lo que hizo Leandro y por esa misma razón no permitiré que siga el recuerdo y sobre todo siga lastimando a mi familia —(dije y ella asintió)

—Entonces ¿Irás a la empresa? —(pregunto y asentí)

Me puse en traje de misiones

—Vamos —(dijo y salí de mi habitación)

Baje las escaleras de mi casa y mi hermano Leonardo me miro, se puso de pie y me detuvo.

—Lena, no —(dijo y yo lo miré)

—Estoy bien, Necesito regresar, León me necesita —(dije y el suspiro)

—Está bien —(dijo y miro a Ashley con cara de "Cuídala")

Salí de la casa de y me subí a mi carro, lo encendí y Ashley se puso el cinturón de seguridad, le pisé todo al acelerador y salí de ahí a toda prisa.

Llegamos a la empresa, estacione el carro en la entrada, todos miraron el carro pues no lo habían visto y aparte era polarizado, abrí la puerta y me baje, todos miraban sorprendidos, cerré la puerta y camine al interior de la empresa, todos me miraron fijamente al entrar, se sentía tan bien regresar.

—Bien, ¿Qué pasó aquí? —(pregunté a Ashley cuando noté algunos cambios)

—Hay más seguridad, hay guardias nuevos y más cuidados —(dijo y yo reí)

—Bien vamos —(dije y caminé al ascensor, había dos guardias, estaban por detenerme, pero Ashley mostró un gafete, ellos de inmediato se quitaron y me dejaron pasar)

Subí al ascensor y puse el último piso, estaba tan contenta, salimos de ascensor y miré al pasillo, ahí estaba Jos y Alonso peleando con una chava, la chava trató de besar a Alonso y este Jos la separó de él.

—Niño del cilantro —(dijo Ashley y corrimos a ellos)

—Dame una oportunidad —(dijo la chava y Alonso casi lloraba del desesperó)

—Aléjate de mi novio, ya te lo dejé en claro niña —(dijo Ashley enojada)

—Ustedes no son novios —(dijo la chava y Ashley la miro retadora)

En un abrir y cerrar de ojos Ashley ya tenía sus labios sobre los de Alonso, mire a la chica y en sus ojos se notaba coraje, se tapó la boca y salió corriendo, Ashley y Alonso seguían besándose, se separaron cuando se les acabo en aire, Ashley estaba roja y Alonso lo que le seguía, me quería reír y Jos también, después reaccionó y me miro confundida.

—¿Y tú qué haces aquí? —(pregunto confundido y yo reí)

—Tengo cosas que hacer bebé —(dije y él sonrió)

—Así, ¿más importantes que yo? —(pregunto sonriendo)

—No, pero algo —(dije y besé sus labios)

—Bien yo creo que me voy, Lena me acompañas —(dijo Ashley un poco incómoda)

Me separé de Jos y este sonrió, camine con Ashley hasta la oficina que antes le pertenecía a Leandro, me sentía incómoda ahora yo, La puerta tenía clave, Ashley la puso y pasamos a la oficina, ahí estaba Ricardo y León, Ricardo se notaba desesperado y cuando me miro se lanzó al mueble de la oficina y grito.

—¿Qué le pasó? —(pregunté mirando a León y este río, camino a mí y me abrazó y después siguió riendo)

—Adivina quién está aquí, la persona que más me desespera, que no me supera y que —(dijo y después de calló)

—Tu ex, la que cree que estoy embarazada de ti —(dije y el asintió)

—¿Embarazada? —(preguntaron León y Ashley y yo asentí riendo)

—No te rías es un grave problema, te recuerdo que tu macho el Jos ya se la traía contra mi ahora estuvo que me mata —(dijo Ricardo y se tiró al piso)

—Tranquilo, si le explicó a Jos el entenderá —(dije y el asintió frustrado)

—De hecho, tu amiga se encuentra en la cafetería —(dijo Ashley mirando su celular y yo reí aún más)

—¿Alguien quiere un café? —(pregunté y caminé a la salida de la oficina)

—Yo quiero una cafetera —(dijo Ricardo y yo sonreí)

Camine con él a la cafetería, llegamos y las puertas se abrieron, había pocas personas, pero entre ellas estaba la ex de mi primo, nos miró y su cara notaba tristeza, miro mi estómago y se confundió, Ricardo tomo mi mano y caminamos a la barra.

—Bien, si querías llamar su atención ya la tienes —(dije sentándome en la barra)

—Mi bebé hermoso —(dijo Ricardo y toco mi estómago)

—De lonjas —(dije y el río fuerte)

—Hermosa —(dijo Jos abrazándome por la cintura)

—Jos, por más que te pida no hagas un movimiento más, no la beses y nada que aparentemente se note que se aman —(dijo Ricardo y Jos lo miro confundido)

—Ahí viene mi ex, síguenos la corriente —(dijo Ricardo nervioso y Jos asintió)

La chica llegó a nuestro lado con su Amiga, nos miraron y puso más atención a como Jos me tenía abrasada.

—¿Dejas que tus amigos tengan esas confianzas con la madre de tu hijo? —(pregunto y yo la mire)

—Él es un buen amigo y lo conozco lo suficiente para saber que no se revolcara con el —(dijo Ricardo serio y ella cambió su semblante)

—¿Cómo puedes aceptar eso? —(pregunto ella indignada)

—Porque le daré un hijo y el hecho de que esté aquí con él es por confianza —(dije y ella río)

—Ahora resulta que hay confianza, eres de seguro una criada de todos ellos —(dijo riendo y varios miraron ya la escena)

—La criada aquí eres tú, no sabes con quién te metes —(dije ya enojada)

—Tranquila le hará daño al bebé —(dijo Jos separándome de ella antes de que hiciera una tontería)

—Aquí solo eres una gata más —(dijo ella y mi enojo se acumuló)

—Cuidado con lo que dices —(dijo Ricardo enojado)

—Es la verdad —(dijo ella y entonces Jos me soltó y yo me puse enfrente de ella)

—Aquí la verdad es que él no te ama, me ama a mí y aquí el punto es que yo le daré un hijo, te recomiendo que superes esa parte de tu vida con él, déjalo ser feliz, ahora ponte a trabajar —(dije y ella río por lo último)

—Tú no eres nadie para decirme que hacer o qué no hacer —(dijo riendo y yo sonreí)

—Querida Ximena, te presento a la dueña de la empresa —(dijo Ricardo y yo sonreí)

—¿Qué? —(pregunto ella indignada)

—Lo que escuchaste, ahora hazme caso o así me encargo de que te regresen por dónde llegaste —(dije y le troné los dedos)

Ella se fue enojada y yo suspiré, Jos nos miró serio, lo tome del brazo y a Ricardo también, los jale a dónde solo los agentes podían entrar que es el segundo piso dónde nosotros comemos, le explicamos todo, después Jos asintió y comprendió cuando le dijimos las cosas, Ricardo se fue a entrenar y yo me quedé con Jos sentada en el mueble.

—¿Cómo te sientes? —(pregunto y yo sonreí mirándolo)

—Bien, tranquila —(dije y el asintió, se acercó y me beso)

—Te amo —(dijo y yo sonreí entre el beso)

Mi celular sonó, Jos me seguía besando, entonces beso mi cuello, saqué mi celular y mire lo que llegó, Ashley me estaba mandando todo lo de la empresa, note un mensaje extraño en mi celular, lo abrí y mire lo que decía.

Necesitamos verte, nos vemos en la que fue empresa de tu padre antes, la detonada, te esperamos a las 8:30.

Miré la hora, eran las 7:30, me separé de Jos y me miro confundido.

—¿Qué pasó? —(pregunto confundido)

—Nada, solo me mareé —(dije y el asintió)

—No has descansado, tienes que hacerlo —(dijo y asentí)

—Iré a casa —(dije y el asintió)

—¿Quieres que te lleve? —(pregunto y negué)

—Por cierto, mañana mi mamá quiere que vayamos con ella a casa de mis abuelos, ellos te quieren conocer —(dijo y asentí sonriendo)

—Me encantaría bebé, bueno me voy, me saludas a tu mamá —(dije y el asintió)

Bese sus labios y salí del comedor, salí de la empresa y me subí a mi carro, prendí mi carro y maneje hasta la salida de la empresa, iba para mi casa pero me desvíe a dónde me citaron, la carretera estaba un poco fea de la antigua empresa que detonó, se encontraba un poco fuera de la ciudad, cuando llegué entre y dejé mi auto prendido, las luces iluminaban a una chica, me baje y camine a ella, cuando estuve cerca, la vi de la cara, ahí estaba Daniela la ex de Carlos, me abrazó y yo le correspondí un poco confundida, me jalo para una parte techada y ahí estaba Brenda la ex de Bryan, se veían las dos en mal estado pero más Brenda.

—¿Cómo es que? —(pregunté confundida)

—No sé, Julia y Sofía están aquí también, pero están más heridas, yo conseguí un teléfono móvil de alguien, no sé de quién, pero lo tenía en mi mochila, ayúdanos por favor —(dijo desesperada y derramando algunas lágrimas)

—Ayúdame —(dije y cargué a Brenda)

Camine con ella al carro subí a Brenda en la parte de atrás, corrí a dónde estaban las demás, los tacones del traje no me ayudaban mucho, llegue a dónde estaban y las mire, se estaban desangrando, corrí al auto y saqué mi suéter, lo rompí, corrí a dónde estaban Julia y Sofía, hice amarres de dónde se estaban desangrando, una vez cargue a Julia y la lleve al carro, la lluvia se soltó en un momento, me moje toda en tan solo llevarla, la coloque en el carro también, la dejé con Daniela y ella la acomodo, regresé por Sofía y la cargue también, me moje más de solo llevarla al carro, la puse en el lugar del copiloto, le puse el cinturón y cerré la puerta, corrí a mi lugar y arranque el carro, salí de ahí a toda prisa, Daniela lloraba a mares, tome mi celular ya que Jos me marcaba.

—Lena ¿Dónde estás? Marque a tu casa y tu mamá me dijo que no habías llegado, me preocupe mucho —(dijo y yo mire el camino pues si no chocaría)

—Jos, encontré a las chicas, voy para haya, espérame en la entrada de la empresa con unas camillas ¡ya! —(grite y el colgó)

Maneje a toda prisa, rebasaba a cualquiera que se cruzaba, llegue a la empresa y el portón estaba cerrado, no iba a frenar si lo tiraba lo tiraba, pero el guardia actuó rápido y abrió, entre como rayo y estacione el carro muy mal, Jos ya estaba ahí parado con las camillas, en cuanto llegué abrieron el carro y las sacaron, me salí pues las estaban sacando, mire a Julia, estaba sangrando, me mareé un poco y me recargue en la pared, Jos llegó a dónde estaba y me miró.

—Lena —(dijo y lo mire, veía a tres Jos a la vez)

Cerré mis ojos varias veces y después todo regreso a la normalidad.

—¿Estás bien? —(pregunto y yo asentí)

—Me entro tierra en los ojos, me ardían —(dije y el asintió)

Todos entraron a la empresa, Carlos, Alonso, León y Bryan vieron a las chicas y se fueron detrás de ellas, suspiré y Jos llegó a mi lado con una manta, salí con él y me subí a su carro, me acomodé en el lugar de copiloto y poco a poco me quedé dormida sin saber que más pasaba.