02.
Mina y Momo se hallaban en el hospital, esperando pacientemente su turno en el consultorio, la menor con cara de culo a simple vista.
Claro que Momo tuvo un esfuerzo en llevarla literalmente del cabello para que deba asistir a hacer su análisis ya que la genia de Mina colocaba excusas como "me van a inyectar cosas" "Unnie ¿y si el doctor me hace empeorar?" "Soy una bebé aún y los bebés no van al doctor porque yo lo digo" "¡No voy a ir ni aunque me lleves a rastras" y ya saben como terminó.
—¡¿Estás bien, bebé?! —exclamó Jeongyeon entrando escandalosamente, irrumpiendo el silencio de la sala y haciendo que el resto de personas la mire mal luego de hacer ruido.
Mina no dudo en abrir los ojitos como dos estrellas, extendiendo muy grande los brazos y yendo a abrazar a su mayor como una niña pequeña mientras que Hirai Momo simplemente existía.
—¡Jeongyeon unnieee! —chilló Mina, apegándose a la alfa en un gran abrazo—. ¡Sí, sí estoy bien!
Jeongyeon parpadeó por sorpresa recibiendo la muestra de afecto por parte Mina.
—Me alegra que estés bien, Mina —dijo suavemente la alfa correspondiendo el abrazo—. Pero me refería a Momo.
Mina se alejó de ella, con un puchero y Momo simplemente carcajeó escandalósamente obligando que el resto la calle con el típico "shhh".
—Saquénla de la sala —dijo Mina frunciendo el ceño y la omega zabache le tiró un manotazo.
—Yo estoy bien, Yoo. Gracias por preguntar —le contestó Momo, haciendo sonreír a su novia como idiota.
Hubo un silencio entra las tres.
Paz.
Tranquilidad.
Momento de meditación perso-
—¡Pero yo no! —interrumpió Mina—. ¡Ya quiero irme!
Mina estaba a punto de hacer una rabieta, ella en serio detesta, execra, aborrece los hospitales. Con toda su vida porque llanamente esto era un escenario de lo peor, había mucha sangre y cosas que hacen doler el cuerpo ¡Incluso los baños eran asquerosos! No, no. Ella urge irse de aquí antes de que se lance de la ventana por sí misma.
—¿Quién? –cuestionaba Momo.
—¡Yo, yo!
—Te preguntó, omega estúpida —listo, esa es Myoui Mina siendo humillada por la tonta de su mejor amiga con una broma infantil.
Pobrecita.
Pasaron algunos minutos mientras hubía otro silencio pero este fue algo más durarero que el anterior. Jeongyeon mirando embobada a Momo como si fuera la cosa más hermosa del mundo, Momo acomodándose la ropa interior disimuladamente con la mano sin saber que la alfa la miraba y Mina, Mina quería correr de aquí.
—Señorita Myoui Mina, usted ya puede adentrarse al consultorio —de repente una conocida voz apareciéndose hizo que tragara saliva.
Esa voz, la reconocía.
Dios mío, ¿Esa no es...?
—Vamos, Mina. Mi mamá te atenderá de maravilla —Momo tomó la temblorosa mano de la otra omega llevándola hacia la puerta.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top