Axel:

— ¿Estás sola?—le susurro suavemente en el oído. Se da vuelta y me fulmina con su mirada tan potente.

—Que sorpresa—sonríe—ahora sí, mi amiga se fue con otras amigas. Genial.

—Me tienes a mí, boba—prosigo.

—Ay... pero capaz que con vos me aburro, no es por nada eh—acota burlándome.

— ¿Ah si? ¿Con que la señorita piensa que soy aburrido? Ya vas a ver quién soy, bonita—contesto desafiante.

—Lo espero—se sonroja para tomar su bombilla y beber de su trago de forma sensual y delicada.

¡Mierda Bambi! Estás hermosa. Realmente hermosa.

—Graciosa—continúo la conversación—claramente siempre tienes la última palabra en todo ¿O me equivoco?

—Tal cual, soy así—agrega—empieza el baile y Molly me llama.

—Deslumbra con tu danza.

—Siempre deslumbro, Axel—finaliza sus palabras para guiñarme el ojo y perderse en la pista.

¿Qué me estás haciendo sentir?