IV
– Esto es una mala idea, Kenny, Craig va a matarme en cuanto le diga que me he estado cogiendo a su adorable Tweek.
– Vamos, viejo; querías que te ayudara con tus problemas, pues eso es lo que estoy haciendo – Stan tenía miedo, y es que él no reviviría al día siguiente si Craig le mataba a golpes – No sé de qué tienes miedo, si casi siempre se rompen la cara.
– ¡Esto es diferente! Una cosa son nuestras peleas infantiles donde los golpes no pasan de un ojo morado o labio roto, pero en cuanto se entere de esto, va a romperme todos los huesos del cuerpo pero va a asegurarse de que siga vivo, ¿Sabes por qué? Porque querrá verme retorcerme en mi propia agonía y sufrimiento.
– Exageras, viejo.
– Entonces ve tú y dile que te has estado cogiendo a Tweek, a ver si regresas, al menos con vida.
– ¿Bromeas? Llevó casi una semana sin morir, no voy a arriesgarme a fallar en romper mi récord de cinco días por una mentira culpa de tus miedos.
– ¿Qué voy a hacer? Sé que dije que quería librarme de esto, pero quiero salir ileso, ¿Es demasiado pedir?
– Oye, el único que cuidaría de Tweek, sea solo en ámbito sexual o no, es Craig. Tú sabes que aunque terminaron aún se nota el ferviente deseo que se tienen el uno al otro, y si no encuentras a alguien que cuide de Tweek, no vas a salir de esto.
– Lo sé, pero esto de hablar directamente con él no va a resultar. Podría decírselo por teléfono después del baile de graduación en unos meses cuando me encuentre muy lejos, en la universidad de Nueva York; así no tendría oportunidad de meterse con mi bello rostro.
– Stanley Marsh – Odiaba cuando Kenny le decía su nombre completo – Tienes que terminar esto, y es mejor que sea de tu propia boca, porque si Tucker se entera por su cuenta te va a ir peor.
– ¿Tengo otra opción?
– No. Y si no haces esto rápido, Tweek encontrará a alguien más que de seguro no cuidará de él. Ese gótico es un buen ejemplo, seguro trataría a Tweek como su perra hasta el punto de llegar a quemarle la piel con sus cigarrillos.
– ¡NO!
– Entonces ten las pelotas para hablarle a Craig. Mira, está ahí fumando, es el momento ideal para que le digas – Kenneth empujó al pelinegro para llevarlo hacia Tucker, aun cuando el propio Stan no se moviera. Fue así hasta que Craig se percató de su presencia, y Stan ya no pudo huir.
– ¿Qué quieren, idiotas? – Dijo apagando su cigarrillo, que afortunadamente había terminado.
– Ah, tan amigable como siempre, Tucker – Ironizó el rubio, golpeando a Marsh para que reaccionara de su trance por el temor – Oye, Stan tiene que decirte algo.
– ¿Has notado que bonito está el clima?
– ¿Qué?
– No jodas – Kenny se palmeó el rostro, pellizcando el brazo de Stan para darle el puto valor de hablar de lo que habían estado planeando.
– No sé qué mierda se traen ustedes dos, pero de una vez advierto que...
– Me cogí a Tweek.
– ¿Qué?
– ¿Qué de qué? – Stan se hizo el desentendido luego de soltar aquello tan rápidamente – Oh cielos, miren que tarde es, debo irme, hoy me toca clase de física, nos vemos...
– ¡Alto ahí, Marsh! – El chico del chullo le sujetó un hombro para girarlo bruscamente, y así poder verse a los ojos. Stan tragó saliva – ¿Qué dijiste hace un momento?
Los ojos de Stan se desviaron hacia su compinche, pero Kenny le dejó en claro con la mirada que él no iba a meterse, así que debía enfrentar las consecuencias de sus actos, solo. Hijo de puta que fue el de la idea. Si Craig no le mataba, entonces iba a ser él quien matara a Kenny. Y no iba a limitarse.
– Verás Craig – El nombrado curveó una ceja. El chico del pompón nunca le llamaba por su nombre a menos que de verdad pasara algo extraño – Cuando una persona se siente atraída por otra, pero sin llegar a enamorarse, estos siempre se involucran en una relación completamente sexual llegada a un acuerdo por parte de ambos. Las dos personas tienen que aceptar este trato.
– Sí, tiene razón – Secundó McCormick, que aunque había dicho que no ayudaría, la estupidez de Stan iba a sacarle de quicio. Así que mientras más rápido lo supiera Craig, más rápido morirían, y más rápido pasaría lo peor. Los ojos del líder del team opuesto le miraron un segundo, solo uno.
– ¿Me van a decir de qué se trata está mierda o tendré que sacárselas a golpes?
– Lo que sucede es que yo... Tengo un amigo con derecho.
– ¿Y eso a mí qué? – Preguntó sin importarle.
– Espera, esto te va a encantar – Comentó el rubio con una sonrisa. Estaba disfrutando el miedo en el que su amigo estaba envuelto, y sabía que lo que venía sería tanto problemático como divertido.
La risa de Kenny no le dio buena espina. Algo le decía que en realidad, no iba a encantarle.
– Mi amigo con derecho es... – Stan hizo una pausa dramática, mientras los otros dos esperaban que terminara la oración – Es... uno de los chicos más tiernos de la escuela – Eso había sido cobarde.
Ya está, Kenny estaba encabronado.
– ¡OH POR EL PAPÁ DE DAMIEN! ¡ES TWEEK, CARAJO! ¡STAN SE HA ESTADO COGIENDO A TWEEK! – Mala idea, el rubio de inmediato tapó su boca con sus manos. Rayos, aquello se le había escapado sin querer al notar la cobardía de Stan por hablar. Se suponía que no iba a meterse y sin querer había abierto la boca.
Iba a morir, sino por Craig, entonces por Stan.
– ¡¿QUÉ?! – A los pocos segundos, la cara de Tucker se deformó en una mueca de ira, mientras tomaba el cuello de la chaqueta de Marsh para acercarlo a su rostro de forma amenazante.
– ¡En mi defensa, Tweek estaba de acuerdo! – Stan no era ningún debilucho, pero debía tener cuidado si Craig le tiraba algún golpe. Debía defenderse y no responder, después de todo, la culpa era suya por hablar.
– ¡Hijo de puta! ¡Te voy a romper la cara!
– ¡Espera! ¡No he terminado de hablar! – Aquello Craig se lo tomó como un insulto. De seguro el idiota de Stan iba a decirle lo bueno que era Tweek en la cama y otras insinuaciones sexuales para joderlo. Eso sí que no.
– ¡Cuando termine contigo tendrás suerte si puedes volver a hablar!
– ¡No! ¡Craig, basta! ¡Stan tiene que decirte algo más! – Kenny sabía que se estaba arriesgando a un muerte 90% segura, pero tampoco iba a dejar que dejaran inválido a Stan. Él fue el de la sugerencia, después de todo.
– ¡Suéltame McCormick! ¡O voy a utilizarte como bate de béisbol! – Craig se removía intentando librarse de los brazos del rubio que le tenían aprisionado. Por su parte, Stan, que había caído al suelo, se alejó arrastrándose hasta estar a una distancia considerable.
– ¡Te dije que esto era mala idea, Kenny!
– ¡Solo dile de una puta vez! ¡Se me acalambran los brazos! – Y era verdad, pues Tucker aprovechó eso para librarse del agarre e ir corriendo hacía el chico que seguía en el suelo.
– ¡Wow, chicos! ¿Qué pasa aquí? – Una cuarta voz se hizo presente, y Kenny le miró como si fuera su salvación. Era Clyde, quien veía como su líder trataba de matar a su rival mientras este último luchaba por defenderse y huir.
– No hay tiempo para explicaciones, ayúdame a separar a Craig – El castaño no tuvo otra opción, y aunque se trataba del team contrario, debía admitir que esta pelea de los dos líderes era bastante diferentes a las usuales. En especial porque Stan no atacaba, solo se cubría.
– Craig, hermano, tranquilo – Dijo Donovan mientras ayudaba a Kenny a separarlo de Stan, quien se levantó recuperando la respiración pero manteniendo su distancia.
– ¡Que se jodan todos! – Vale, Craig estaba oficialmente molesto, así que su típico dedo medio no se hizo esperar, aun cuando le estuvieran deteniendo entre Kenny y Clyde.
– ¿Pero qué te pasa, viejo? – Preguntó el castaño con confusión.
– ¡El idiota de Marsh se folló a Tweek!
– ¡¿Qué?!
– Las cosas se complican – Murmuró el rubio al ver la reacción del "gordo" del otro team. Sin embargo, cuando creyó que Clyde soltaría a Craig para que matara a Stan ocurrió otra cosa.
– Bien hijo de puta, ¿estás feliz? Recuerda que esto es tu culpa – Sorprendentemente, aquello había sido un regaño para el chico del chullo, quien dejó de forcejear ante las palabras – Escucha Stan, no me importa tu "venganza" o la mierda que estés pensando, pero más te vale no lastimar a Tweek o voy a...
– ¿Qué venganza? – Preguntó Kenneth confundido al igual que el otro pelinegro. Eso descolocó a Clyde, y ¿por qué no? También le extrañó a Craig.
– Pues... – El castaño no sabía cómo explicarse – La venganza de que Stan se follara a Tweek porque Craig se había follado a Kyle... ¿no? – El silencio después de eso fue horrible y Kenny se esperó lo peor.
– ¡¿QUÉ HICISTE QUÉ, HIJO DE PERRA?!
– Ah, entonces no lo sabían. Ups – Clyde se mordió el labio mientras McCormick dejaba el cuerpo de Craig para ahora ir a sujetar a un enfurecido Stan que parecía al mismo satán (deja-vú).
– No tienes derecho a quejarte, Stan – Y aunque Marsh ahora era quien quería despedazar lentamente a Craig, tuvo que resignarse por las palabras de su amigo – Bien, ahora que esto se ha calmado, a lo que venimos.
– No voy a decirle nada, que se joda – La actitud de niña berrinchuda de su líder estaba hartando a Kenny, y esto ya había agotado su paciencia hace rato.
– Oh ¡Sí lo harás! ¡Ahora deja de lado tu berrinche y habla de una jodida vez, marica! – Stan se tomó unos segundos haciéndose el indiferente, pero luego la imagen de un Tweek sonriéndole después del sexo apareció en su cabeza; se veía tan lindo. Suspiró, lo haría por él.
– Voy a terminar con Tweek, pero necesito que tú vuelvas con él – Dijo dirigiéndose a Tucker. Lo había dicho con una seriedad increíble, cambiando por completo su actitud aunque dejando confundidos a los dos integrantes del team contrario.
– ¿Qué? – Donovan preguntó por los dos.
– No me importa si vuelves con él como novios o como follamigos o lo que sea, lo único que necesito es que regreses con él – Kenny dio un asentimiento a las palabras de su amigo. Craig estuvo a punto de preguntar qué carajos con eso, pero Stan siguió hablando – Si no aceptas, seguiré cogiéndome a Tweek hasta el baile de graduación, o incluso después de él.
– ¡Maldito imbécil! – Clyde tuvo que hacer fuerza de nuevo para sujetar a Craig, pues la sonrisa socarrona de Stan ante esas palabras le habían sacado de quicio.
– A todo esto, ¿Por qué quieren que Craig vuelva con él? – Preguntó el castaño aun forcejeando con el pelinegro – ¿No es más fácil terminar y ya?
– Cosas estúpidas de Kenny que ustedes no tienen por qué saber – Masculló el chico del gorro entre dientes – Ahora, ¿Vas a aceptar o no? Y mira que te estoy dando una oportunidad para que regreses con él sí o sí.
– ¿Oportunidad? – Preguntó sarcástico Craig – Eso es hipócrita de tu parte.
– Te repito que Tweek estaba completamente de acuerdo con esto, aunque yo sabía que le seguías gustando.
– ¡¿Lo sabías y decidiste seguir?!
– ¡Hey! ¡Estaba caliente y buscando en dónde meterla y Tweek se ofreció! ¡No iba a rechazarlo! – Se defendió Stan – Además, no te quejes cuando tú hiciste lo mismo. Toda la maldita escuela sabe que me gusta Kyle y eso te valió pepino; por no mencionar que también te follaste a Wendy cuando salía conmigo – Tucker frunció el ceño, pero no apartó su mirada de la contraria.
– Sí – Aceptó – Me follé al idiota de Broflovski y a la puta de Testaburger, y no me arrepiento – Stan estaba a nada de saltarse encima para matarlo – Pero solo fue una vez, y dime tú, ¿Hace cuánto que follas con Tweek?
– Que ellos no hayan querido seguir contigo no es mi problema – Murmuró el otro. Kenny y Clyde solo escuchaban atentos, contralando a sus líderes cuando alguno hacía por saltar sobre el otro a arrancarle la cabeza – Y mañana se cumple nuestro aniversario número cinco – Le dijo con burla.
– Diablos, viejos, esto se pone cada vez más feo, ¿Por qué mejor no dejan esto por la paz? Digo, cada quien es libre de hacer su vida y coger con quien sea. Yo por ejemplo, me cogí a Bebe cuando ella y Clyde habían terminado...
– ¿Qué?
– Pero no por eso Clyde me tiene una ira incontrolable, y sé que él también se ha metido con alguien más a quien no mencionaré para no ocasionarle más problemas. Pero hey, está bien, somos humanos, tenemos necesidades, y ninguno está en un compromiso como para que se pongan a pelearse de propiedades.
– Hablaremos de esto después, McCormick – Siseó Clyde, para luego regresar la atención a los dos pelinegros – Pero desgraciadamente, Kenny tiene razón. No pueden decidir la vida sexual de otras personas, ni tampoco tienen que pedirles permiso. Así que vayan al jodido punto que me estoy cansando y quiero un taco.
– Mira, es simple – Habló de nuevo el rubio – Si Stan termina con Tweek, nada garantiza que no encuentre a alguien más, después de todo, las hormonas están como locas a esta edad. Y estoy casi seguro que la opción más sencilla para Tweek será el gótico ese que va a su cafetería.
– ¿Pete? – Preguntó Clyde.
– Ese mismo. Y les puedo decir que esa no será una relación muy bonita. Así que Tucker, ten las malditas pelotas de hablar con Tweek, así como Stan las tuvo de hablar contigo para pedirte este favor – La mirada de Craig se clavó en la de Stan.
– ¿Por qué? – Fueron sus palabras.
– A diferencia de ti, yo si tuve cuidado con Tweek mientras estaba... – Tosió para corregirse – Quiero decir, tengo cuidado mientras estoy con Tweek – Craig frunció el ceño, eso el cabrón lo había dicho para burlarse – Y no quiero que nada malo le pase, y como dice Kenny, no voy a permitir que Pete o cualquier otro idiota le haga algún daño.
– Podrías aprender algo de Stan, Craig.
– Cállate gordo – Clyde se quejó por el apodo, pero el pelinegro el ignoró – Bien, entonces acepto. Aunque no sepa qué carajos van a hacer para que eso funcione.
– Mañana es viernes ¿no? – Preguntó Kenneth. Clyde y Craig asintieron – Entonces es fácil, Stan terminará con Tweek mañana y luego...
– ¿Mañana? – Interrumpió Marsh quejumbroso – Pero... es nuestro quinto mes y de seguro vamos a follar todo el día. ¿No podría ser mejor el sábado?
Tanto Craig como Clyde y el mismo Kenny se encargaron de golpearlo por estúpido.
Se suponía que esto sería publicado mañana a las 3 de la tarde, pero gracias la personita a la que va dedicado el capítulo y sus dos actualizaciones preciosas, aquí me tienen. <3
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top