26
Kate levantó la mano nerviosa y temblorosa, tocó la blanca puerta frente a ella mientras sentía que el mundo se caía a pedazos y su preocupación aumentaba mientras los minutos avanzaban, respiró varias veces y hasta aguantó el aire en sus pulmones por unos cuantos segundos con la intención de que sus piernas dejen de temblar y su acelerado corazón pueda detenerse aunque sea un poco. La puerta se abrió delante de Katherine y levantó la mirada de sus zapatillas rosadas, vió el gesto molesto de SeokJin y lo entendió a la perfección, habían estado casi un mes sin hablarse y ella lo había estado ignorando mediante sus insistentes llamadas, mensajes e idas a su casa, era normal que se muestre enojado delante de ella después de estarle tanto tiempo insistiendo.
Y es que SeokJin nunca le insistió a nadie.
El mayor estaba apoyado en el marco de su puerta mientras miraba a Katherine con los brazos cruzados. En ese momento ni siquiera le miró el escote o la ropa que llevaba, estaba tan molesto de haber sido ignorado que no se tomó el tiempo ni para eso, y a decir verdad, en ese mes se había replanteado demasiado si había sido buena idea haberse involucrado sexualmente con la chica. No había que confundir las cosas, de manera física le atraía muchísimo, podría estar todo el día follando con ella que jamás se cansaría, pero el hecho de que sea tan sentimental, que quiera una relación seria, algo para toda la vida y toda esa "ilusión" que Katherine tiene en su mente le descontaba muchos puntos, tantos que había llegado hasta a los números negativos, SeokJin ya se había decidido que aunque la chica se presente en su puerta él no volvería a caer. Por primera vez pensó bien.
⎯ Te dignaste a aparecer.⎯ mencionó con mal tono el mayor. Vió que la chica se mordió el labio inferior y no lo miraba a los ojos como hacía comúnmente.⎯ ¿Viniste a darme una explicación de porqué me ignoraste por casi un mes?
⎯ Necesito que hablemos.⎯ murmuró. Kim chasqueó la lengua y sin decir palabras se movió de la puerta, en señal de que podía entrar.
Cuando Kate entró al departamento miró todo como si fuera la primera vez que estuviera ahí, cuando en realidad sería la última vez que pisaría esos azulejos y miraría ese sillón donde hicieron tantas cosas. Tragó saliva pensando en si lo sucedido fue cuando ella se largó del cumpleaños de su hermano o el día que se drogaron, porque en el segundo momento lo tenía casi que borrado de la mente y no podía afirmar ni negar nada, pero en la otra oportunidad ambos eran conscientes de que no habían usado protección, pero las fechas tampoco darían así que es más que obvio que fue en su último encuentro. Escuchó como su...mejor amigo carraspeó detrás de ella y se dió vuelta mientras sostenía mejor el bolso sobre su hombro.
⎯ Yo...lo lamento.
Era tan irónico que sea ella la que siempre pedía disculpas cuando justamente no tenía que darlas, sí se podía decir que había cometido errores de por medio en ese extraño vínculo que tuvieron pero nada peor de lo que había hecho SeokJin; ella no ilusionó, no jugó, no denigró, no trató mal al otro. Él siempre fingía que no tenía la culpa de nada, al parecer su mente funcionaba bien para olvidarse de los momentos que la dejó de lado, donde la hizo sentir mal o hasta el último reciente de cuando se le terminó de caer la careta falsa (finalmente) y le dijo lo que realmente pensaba de los diseños de Katherine. Pero a todo esto, ¿Había válido la pena esa amistad llena de mentiras? ¿En serio Katherine lloró noche tras noche por perder a un hombre como SeokJin, quien era mejor perderlo que encontrarlo?
⎯ ¿De qué te disculpas?⎯ preguntó molestó el mayor, Kate intentó no sentirse intimidada ante su tono de voz y mirada, era casi imposible, pero lo actuaba demasiado bien.⎯ ¿De ignorarme? ¿De haber estado con Park? ¿De ocultarte cuando iba a tu casa?
⎯ Joder, SeokJin.⎯ bufó también molesta, había un tema mucho más importante del cual hablar, aunque decirle eso sería minimizar el enojo de él, pero de verdad necesitaba darle la noticia para saber cómo avanzar.
⎯ No, vamos a hablar en serio, Katherine.⎯ aclaró y la chica con una mirada le dijo que siguiera sus palabras.⎯ Sabes más que nadie que jamás estuve detrás de una persona y mucho menos de una mujer, y por primera vez que hago eso por ti prefieres ignorarme y esconderte de mí como si fuera el malo de todo esto.
⎯ ¿Estas haciendo todo este escándalo porque no te di lo que querías? ¿Todo porque no te di atención?
SeokJin se quedó mudo al notar que, efectivamente, aquello le enojaba más que nada. No estaba enojado por perder el sexo con Katherine, muchas otras mujeres podían dárselo. No estaba enojado por haber lastimado a su amiga, lo hizo desde siempre. No estaba enojado porque la preocupación pasó a enojo, ni siquiera se sentía preocupado. Le enojaba que por primera vez en tanto tiempo una persona le hacía saber que no era nada, que no valía un solo centavo y que no era tan importante como creía ser. Le enojó que alguien le había dicho "no", que Kate haya preferido pasar sus días con JiMin y no con él, pero no le dolía en el sentido de que se le podía romper el corazón, SeokJin no tenía un corazón para que pudiera romperse, le enfurecía que Katherine, la chica que siempre estuvo con él porque no tenía más amigos, finalmente se estaba abriendo a conocer otras personas, a ser más independiente, a buscar el éxito por ella misma y no bajo la sombra de los demás.
Le enojaba que Kate ya no era suya.
⎯ ¡¿Qué demonios dices?!⎯ habló en un grito y ella retrocedió un paso, a este punto no sabía de lo que Kim era capaz.⎯ ¡No quería perder tu amistad! ¡No quería perderte a ti!
⎯ ¿Debo creerte? Solo haces cosas que me lastiman.
SeokJin se quedó en silencio y detestó a la persona que estaba transformando a la sumisa Katherine, la que no enfrenta a nadie y era callada con tal de no formar un problema, pero parecía que esa chica había sido remplazada por la mujer frente a él. Vió como sacó algo dentro de su bolso, una bolsita de tela color rosa que dentro contenía algo de suma importancia.
⎯ No me importa lo que digas porque lo que sea que teníamos se acabó.⎯ se adelantó a decir el mayor. Katherine frunció el ceño y apretó lo que tenía entre sus manos.⎯ Si has venido a follar es tarde, porque eso fue un maldito error y ahora quiero volver a estar como antes. ¿Tanto nos contará volver a ser así?
⎯ Nos hicimos amigos con derecho por tu culpa, no por la mía.⎯ argumentó reuniendo todo el valor que tenía para decirle esas palabras. Incluso. Usando terminó de hablar se sorprendió por haberlo dicho con un tono tan desinteresado, que estaba lejos de sentirse de esa forma respecto al tema.⎯ Y de igual manera, no me importa lo que quieras ser ahora mío, porque hay otra cosa que nos une más allá de la amistad tan falsa que teníamos.
La pelirroja le dió la bolsa y SeokJin la tomó con el ceño fruncido, le habían confundido demasiado las palabras de Katherine y más ver que no le había afectado en nada decirle que lo que habían hecho fue un error. En su mente, cuando se imaginó esta situación, pensó que ella empezaría a llorar rogando que no la dejara, que se conformaría con ser la otra mujer, o le prometería una infinidad de cosas con tal de que él vuelva a elegirla, porque Kim estaba acostumbrado a estar con mujeres que rogaban estar con él, pero ahora Katherine se sumaba a la lista junto a Young Sun de mujeres que no le rogaban a un hombre.
Terminó tomando lo que estaba dentro de la bolsa junto a un papel grande con instrucciones, pero estaban remarcadas las indicaciones de "si marca una línea es negativo, si marca dos es positivo". Leyó aquel renglón una y otra vez, mientras en su mano tenía el test de embarazo que marcaba de manera muy fuerte las dos líneas. Llevo la vista de una cosa a la otra demasiadas veces, tantas que Kate casi se comía las uñas de la ansiedad, pero es que no tener reacción del hombre frente a ella la ponía nerviosa. Cerró los ojos un segundo al sentir las lágrimas yendo hacia los mismos, pero los abrió al instante cuando escuchó algo estrellarse contra el suelo, miró y el test de embarazo estaba hecho trizas en el suelo y el papel con las instrucciones roto en muchos pedazos. Abrió la boca sorprendida, fuera de que el bebé que tenía en su vientre no había sido planeado y mucho menos con alguien que la amara, ella quería tener eso como recuerdo de su primer embarazo.
SeokJin estaba tomándose el pelo con las manos mientras los ojos se le llenaban de lágrimas, que precisamente no eran de felicidad. Comenzó a marearse y tuvo que sentarse en el sofá detrás de él porque llegó a pensar que se desmayaría en el suelo. No estaba listo para ser padre, mejor dicho no quería. Detestaba a los niños, la idea de tener uno, saber que le arruinaría la vida porque tener un hijo significaba cuidar su imagen pública, no tener mujeres distintas en su cama todas las noches, pasarle dinero a Katherine por manutención si es que no estarían viviendo juntos. No deseaba nada de todo eso, y en ese momento, comprendió a su padre que escapó al momento de enterarse que el vendría al mundo, porque quería hacer exactamente lo mismo.
⎯ Aborta.
⎯ ¿Qué?⎯ preguntó atónita Kate. No estaba en contra del aborto ni nada por el estilo, pero no quería implementarlo por muchas razones, entre ellas que después sería ella la afectada tanto física como psicológicamente, pero claro que para SeokJin era fácil decirlo, no era a él a quien le quitaban un bebé y estaría semanas en cama.⎯ No.
⎯ No seré padre, Katherine.⎯ negó con la cabeza. Comenzó a llorar de la desesperación.⎯ No quiero un hijo. No quiero. No quiero.⎯ comenzó a repetir una y otra vez.
Ella se arrodilló frente a él y acarició su rodilla con movimientos suaves.
⎯ Escucha, yo también tengo miedo pero...
⎯ ¡Pero nada! ¡No seré padre!⎯ exclamó levantándose de golpe. La señaló con el dedo mientras sus ojos se cargaban de lágrimas, no sabía si era por furia de no haber usado preservativo o porque rechazar a su hijo le haría perder a la única mujer real que conoció en toda su vida.⎯ No me obligarás a ser padre.
⎯ Ah, claro.⎯ la pelirroja asintió sarcásticamente.⎯ ¿Entonces yo me tengo que obligar a ser madre y padre porque tú no quieres asumir la responsabilidad que te corresponde?
Ella lo siguió y suspiró, quizá se esperaba esa reacción, pero su mente quería hacerle creer que todo resultaría bien y gracias al bebé tendría su cuento de hadas soñado, cuando aquello estaba demasiado lejos de la realidad, tanto que ni siquiera podía ser cierto. Pero en todo esto había una realidad; SeokJin no le hacía del todo bien que digamos, no podía seguir aferrándose a él solo por los lindos recuerdos que tenían juntos o por los largos mensajes que Kim le dedicaba de vez en cuando solo porque estaba drogado y le pintaba ser cariñoso. Al fin y al cabo, era más mal que bien lo que recibía de su parte, y esto solo terminaba por confirmarle que lo mejor era separarse de él en todo ámbito. No aceptaba a su hijo, así que tampoco tenía que pretender que ella siga con él (ya sea en sentido de amistad con derecho o simplemente amigos) porque no podría verlo y notar como él finge que el hijo que crece dentro de ella no es de él.
Katherine no le había contado a nadie sobre su embarazo, solo Azkeel sabía y porque había estado en el momento con ella, sino hasta a él se lo ocultaría. No sabría cómo decirle a sus padres que estaba embarazada de un hombre el cual no es su pareja, no acepta a su hijo y encima de todo en ningún momento la tomó en serio como para proyectarse como novios reales. Sabía que sus padres jamás la juzgarían por haberse metido con un hombre que de entrada estaba en un ida y vuelta con su ex novia, pero saber que ellos pensarían en lo difícil que se le haría a su hija para ser madre soltera, empezando su carrera, y recién saliendo del capullo, porque en este tiempo que dure el embarazo Katherine tendría que aprender hasta cómo cocinar porque ni eso sabe a la perfección, y su hijo no podía vivir de hamburguesas vegetarianas.
Pero SeokJin no entendía que ella tendría la parte más pesada y dura de todo esto, es decir, él como padre también tendría que sacrificar demasiadas cosas por su hijo (en un caso hipotético que quiera ser un padre presente y demás) pero al negarse, además de ser un cobarde, lo hacía ser la persona más egoísta del planeta. Le dejaba todas las responsabilidades a Katherine, y quién le asegura a ella que por lo menos Kim le pasaría la cuota mensual por su hijo, así que hasta tendría que salir a trabajar y no estar tanto tiempo con su bebé solo porque el padre del mismo decidió desaparecer.
⎯ ¡SeokJin yo te amo!⎯ confesó ya en un momento de estrés total. No tenía nada en contra de las madres solteras pero se le iba a complicar tanto que en ese momento sentía que todo el mundo se caía encima de ella. No era la muerte de nadie criar un hijo sola, pero viendo su situación; alguien que a duras penas ordena su propia cama, le cocinan siempre, nunca lavó su ropa y mucho menos tuvo tantas responsabilidades como lo serían un hijo, un trabajo y mantener un departamento pequeño para ellos solos, la desesperaba. Sentía que no iba a poder sola.⎯ Soporté cosas por ti. ¡Hice cosas que no quería solo para hacerte feliz!
⎯ Jamás te obligué, Katherine.⎯ negó con la cabeza lentamente. A este punto a ambos le caían lágrimas de los ojos, y visto desde otra perspectiva, sin escuchar la conversación, parecerían dos personas enamoradas que se les impide estar juntas. Lastima que solo una era la que sentía amor.⎯ Todo lo que hiciste fue porque quisiste. Nunca te apunté con un arma en la cabeza para que aceptaras.
¿Y qué era lo peor? Que SeokJin tenía toda la razón.
Sí es cierto que Kate hizo cosas que no quería, que en el fondo de su mente se arrepintió en su momento pero luego lo justificaba con que a su mejor amigo lo había hecho feliz, le había provocado placer o simplemente le dió gusto que ella hiciera tal cosa por él, pero en todas esas ocasiones Kim no había insistido, lo pidió una sola vez y ella lo hizo aunque en el fondo no quería, pero en eso ya no se podía culpar a SeokJin cuando la pelirroja no le expresaba su disgusto por tal cosa o acción que le haya pedido, lamentablemente él no es adivino. Katherine sabía mejor que nadie que el mayor no pedía las cosas dos veces, si ella hubiera dicho no a tal acción, a tal salida o a tal cuidado, SeokJin lo hubiera aceptado con la boca cerrada, ¿Hubiera buscado un remplazo para ella? Obvio que sí, pero Kate no quería eso y por esa razón se prestaba a salir con él a antros aunque estaba cansada, lo cuidaba cuando estaba drogado aunque tenía que estar estudiando para un parcial, o le hacía una felación profunda aunque su garganta no diera para más.
Se podía llevar a cualquier caso, porque lamentablemente Katherine no sabe decir que no.
La pelirroja no soportó más la situación y cubrió su rostro con sus manos, pensando que de alguna manera ella también había tenido la culpa en cierta parte de todo lo que ocurrió. Sí, SeokJin le había roto el corazón de las mil y un formas posibles, la había hecho sentir para la mierda, pero Katherine en ningún momento dijo basta, aceptaba las cosas aunque no quisiera, y hasta se prestaba para que él se burle de ella. Quizá, teniendo un efecto mariposa o algo por el estilo, si ella tuviera una personalidad más fuerte y decidida, se hubiera ahorrado muchas cosas. Todo esto se hubiera ahorrado. Sintió como Kim le acariciaba el cabello y se lo corría de la cara para colocarlo detrás de sus orejas, y eso la lastimaba aún más si es que aquello era posible. Sentir su tacto la quemaba en lo más profundo de su ser, darse cuenta que no lo recibiría nuevamente y que lo había perdido del todo a quien fue su compañero por tantos años.
⎯ Me hace mierda ver cómo quieres salvar algo que no se puede salvar, Kate.⎯ habló. Tenía la voz quebrada y la nariz casi chorreando, le lastimaba verla así, por muy mala persona que haya sido con ella, la amaba en serio.⎯ Pero no podemos seguir juntos, te hago mal.
⎯ Pensé que tú...me amabas.⎯ respondió entre vergonzosos sollozos. La realidad a todo esto era que Kate se había cansado de intentar hacer que se enamore de ella, le mostró su más verdadera personalidad y los secretos que nadie sabía acerca de ella, se entregó en cuerpo y cumplió sus fantasías, pero al final todo fue en vano porque él no sentía nada más allá de amor de amigos. No había valido la pena para nada haberse destruido para él.
⎯ No Kate, no te amo.⎯ mintió. Quizá así ella lo olvidaría más rápido, teniéndole enojo tal vez haría que el rechazo sea menos doloroso.⎯ Tú quieres casarte, tener una familia ideal, vivir como en una película de princesas y yo no puedo darte eso, y tampoco lo quiero para mi vida.
⎯ Puedo acoplarme a tu estilo de vida.
SeokJin se levantó del sillón suspirando, entre enojado y triste, porque Kate insistía una y otra vez en querer intentarlo de verdad, como una pareja real, pero aquello estaba tan lejos de las manos de Kim que lo veía completamente imposible cumplirle esos sueños. Y, por primera vez, pensó más allá de él, y tampoco quería darle una vida así a una mujer tan dulce que no se merece un marido de mierda, así como tampoco quería mostrarle a su hijo que él vivía bajo su mismo techo por obligación y no porque lo ame. Ya pasó por eso, no quiere hacerle lo mismo a su hijo.
⎯ ¡Jamás podrías porque yo quiero vivir de fiesta!⎯ gritó cansado.⎯ Quiero vivir drogado hasta no acordarme de nada y follar con una mujer distinta todas las noches. ¿Ese es el marido que quieres? ¿Ese el que padre que quieres para tu hijo?
Y la verdad...era que no, no quería esa vida. Ser madre solera sería difícil, tan complicado que de solo pensarlo comenzaba a estresarse, pero nada sería más difícil que vivir con un marido que la engaña y aparentar ser la familia perfecta cuando todo va de mal en peor. Le iba a costar demasiado salir sola adelante, vivir con el rechazo de quien fue su más grande amor por tantos años, pero prefería eso antes que una vida de mierda.
⎯ Pero yo te amo..
⎯ ¿Y eso qué? De amor no se vive, Katherine.
⎯ Por favor, tan solo déjame...
⎯ No. No quiero verte nunca más, ni a ti ni a eso que llevas en el vientre. Desaparece de mi vida.
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