23

⎯ ¿Qué...?

Y en ese momento, más que sentirse molesta o triste, se sentía humillada de la peor manera. En lo único que podía pensar era que se había ilusionado demasiado, y que cada mínima acción buena de Kim le hacía caer nuevamente ante sus pies sin dudarlo un segundo, fingiendo que todos los sucesos malos entre ellos no habían ocurrido y que todo se lo inventó su mente, cuando la realidad era que los momentos buenos parecían más inventados que los malos. Lo único que podía notar en el momento es que SeokJin solo se ama a sí mismo, y si bien estaba perfecto tener amor propio, cuando ya pasaba a ser egocentrismo terminaba lastimando a los de su alrededor. Katherine estaba segura de que SeokJin no amaba a Young Sun, mucho menos a ella, lo que él amaba era tener a dos mujeres preciosas detrás de él y que le aumente el ego, si es que era posible tener más del que ya tiene.

Pero viéndolo también desde el lado de Kim, había tenido una vida difícil desde el momento que nació prácticamente; una madre presente pero ausente, un padre que lo había abandonado, no tener hermanos o amigos de su misma edad sino que eran más grandes y le insistían en hacer cosas que no correspondían para la edad que tenía. SeokJin no sabe amar, no sabe cuidar a una persona y mucho menos ser sincero con sus sentimientos, no sabía específicamente si estaba enamorado de Kate y no se daba cuenta justamente porque nunca supo qué es estar enamorado, así como tampoco sabía si de verdad estaba enamorado de Young Sun o solo encontraba en ella lo mismo que él; pura toxicidad y un pasado que era mejor olvidar. Kim puede ser muchas cosas malas, pero no mentía al momento de creer que tener relaciones sexuales con su mejor amiga le haría tanto daño a ella, porque para él tener sexo con amistades era...extrañamente normal.

Desde su punto de vista no hacía mal las cosas, pensó que su mejor amiga estaría bien con tener una amistad con derechos ya que era demasiado obvio que estaba enamorada de él, es decir, una persona que lleva tanto tiempo gustando de otra si se le ofrece tener algo íntimo es más que obvio que aceptaría gustoso, pero nunca pensó que mientras le cumplía sus deseos también la hacía sufrir. SeokJin es un hombre difícil de entender, demasiado inmaduro en muchas cosas pero muy listo en otras, y si habían dos cosas en lo que siempre pensó igual era que no quería ser su padre, un hombre que por miedo o cobardía abandonó a una mujer con un hijo, y tampoco dejaría su trabajo de lado, luchó muchos años para estar donde está y sabe que logrará llegar a más, ignorando por completo que subió de puestos de una manera poco ética, era algo que SeokJin había estado dispuesto a sacrificar con tal de cumplir sus sueños de ser un modelo famoso.

⎯ Mejor dejemos la conversación aquí, tengo cosas que hacer.⎯ respondió él después de segundos, por primera vez había visto a través de los ojos de una persona como se rompía su corazón, y saber que era el corazón de su mejor amiga, la que lo hacía reír y lo cuidaba de todo peligro, le había hecho arrepentirse de todos los sucesos que habían pasado en el último tiempo con ella.

Si pudiera llevar el tiempo atrás, jamás se insinuaría con ella, no quería perder su amistad.

No quería perder a Kate.

⎯ ¿Siempre será lo mismo? ¡Joder!⎯ exclamó furiosa, decepcionada, humillada, triste. SeokJin suspiró al notar a su mejor amiga como nunca antes la había visto, hasta ese momento creyó que era imposible hacer enojar a alguien tan pacífica como Katherine.⎯ Evitas tus problemas siempre, maldito cobarde.

⎯ ¿Cobarde yo?⎯ preguntó irónicamente y miró hacia adelante mientras chasqueaba la lengua, enojado también.⎯ Cobarde eres tú que involucraste tus sentimientos en algo que era solamente sexual, no sabes diferenciar entre una relación formal a algo pasajero.⎯ se defendió aún sin verla, no tenía el valor a decir verdad, por muy enojado que se encuentre si la veía llorar a la pelirroja él también se derrumbaría y no quería eso.⎯ Tienes miedo a quedarte sola y por eso te aferras a personas que aunque sabes que te hacen mierda sigues ahí para ellos.

Capaz lo que más dolió fue que verdaderamente era así, Katherine no sabía alejarse de las personas aunque la hayan hecho mierda de todas las maneras posibles; SeokJin es un claro caso. Ella no sabía ser una mala persona, si alguien la necesitaba ella estaría ahí, aún sabiendo muy claramente que esa misma persona no estaría en los momentos duros de Kate. Era algo que envidiaba mucho de Kim, él podía alejarse de todas las personas de su entorno y nunca los extrañaría, no se sentiría culpable ni volvería a ellos por lástima, una vez que él dice basta es basta.

⎯ ¿Entonces eres consciente de que me haces mal?⎯ consultó y el silencio fue la respuesta que necesitaba. Aunque en realidad, nuevamente SeokJin se justificaba con que no era consciente de aquello porque en ningún momento pensó que le haría daño que tengan sexo, pero ahí estaba el problema, no sólo tenían sexo, sino que también eran las palabras, los lindos detalles, o que la defienda tanto hasta de personas como Young Sun.⎯ ¿Por qué lo haces?

⎯ Porque te amo y no puedo alejarme de ti.⎯ dijo lo que escuchó una vez de Young Sun cuando tuvieron una pelea, recién en ese momento, ya demasiados meses después de aquella discusión, entendió a su ex novia. Ella lo ama tanto que quería ayudarlo, no tenía los mejores métodos porque sino hoy en día Kim sería otro hombre, más distinto y decente, pero comprendió que quería ayudarlo a cambiar.⎯ Entenderás que así vas a aprender de una vez por todas a que el mundo no es color de rosas, que las relaciones no son como en las películas de romance y ahora no vendrá un giro argumental que nos hará estar juntos para toda la vida.⎯ soltó, y cada palabra era como una daga para la menor que estaba llorando en silencio.⎯ Hay personas malas en el mundo y eso es lo que tú no comprendes, piensas que todos son buenos y no es así, yo no soy bueno.⎯ se sinceró, volteando para poder verla a los ojos, y ella notó que los de SeokJin estaban llorosos, algo que de verdad la sorprendía pero tampoco era momento para pensar en eso.⎯ Nadie te va a tomar en serio si permaneces en una fantasía, Katherine, serás presa fácil para cualquiera que quiera manipularte o controlarte a su antojo. Abre los ojos, cuando madures te darás cuenta que solo intento hacerte ver el mundo real.

Después de esas duras palabras Katherine bajó del auto sin saludarlo, ingresó a su casa y notó que por primera vez su mejor amigo se había quedado tiempo de más en la puerta de su casa, quizá con la esperanza de que ella salga nuevamente para hablar sobre lo ocurrido, pero no quería, no tenía ganas de rebajarse nuevamente ante alguien que le dice inmadura. Ella más que nadie sabe cómo es, y es algo que le encantaría trabajar sobre ver el mundo como realmente está compuesto porque es obvio que no hay personas malas ni hay personas buenas, todos tenemos maldad y bondad en nuestro interior, pero a Katherine le costaba mucho darse cuenta de eso, viendo solo una acción buena ella ya mete a la persona en la lista de "buenas personas" sin conocerlos del todo. No podía confiar de alguien solo porque le dijo que tenía lindo atuendo o porque se mostrara vulnerable ante ella, todo podía ser una máscara pero no pensaba admitirlo.

No quería darse cuenta de que hay villanos en el mundo real.

Sin poder evitarlo se sentó en el suelo mientras se deslizaba con la espalda pegada a la puerta, no sabía si había alguien en casa pero por las dudas había tapado su rostro para que nadie la escuche llorar. Ni siquiera lloraba por haberse dado cuenta de que de todas sus esperanzas con SeokJin ya no existía ninguna, sufría por darse cuenta de que ella misma se había encerrado tanto en un mundo fantasioso, uno donde no tenía problemas o prefería ignorarlos le había hecho mal. No tenía muchos recuerdos de su infancia y tal vez se debía a que prefería imaginar cosas cuando notaba un problema entre sus padres o su entorno, soñando que estaba con su caricatura favorita en los dibujitos animados, y a medida que fue creciendo ignoraba los conflictos externos mientras escuchaba álbumes de Taylor Swift y hablaba sola, como si la cantante pudiera escucharla y fueran amigas de toda la vida.

Todo eso, que aunque se ve muy tonto y hasta chistoso visto desde el lado de afuera, la está haciendo sufrir mucho a Kate, salirse de su realidad era algo que no había resultado tan bien como resultó en su momento para olvidarse de los problemas, se terminó volviendo un hábito y cada vez que tenía un conflicto recurría a su excesiva imaginación para estar bien. Por eso es que le costó tanto encontrar trabajo, que se le hace extraña la idea de ser pareja de alguien que no sea SeokJin porque creció con él, que no sabía hacer muchas cosas como manejar un automóvil o cocinar por sí sola, que no tiene idea de cómo hacer los trámites para comprarse su propia casa o tan siquiera saber usar a la perfección una tarjeta de crédito. El problema en todo esto es que nunca creció.

Su teléfono sonó y la sacó de sus depresivos pensamientos, atendió al saber que era JiMin, pues no quería hablar con nadie más, pero a su vez un flechazo de desconfianza cruzó su corazón después de recordar las palabras de SeokJin; "hay personas malas en el mundo". ¿Qué le aseguraba de que JiMin era una de esas personas buenas que Katherine dejó entrar a su vida?

⎯ ¿S-si...?

⎯ ¡Kate, hola!⎯ saludó efusivo el rubio del otro lado, había tenido un buen día desde que su madre lo llamó y le dijo que viajarían con su familia a Seoul para hacerle una rápida visita de un par de días.⎯ ¿Vendrás a la empresa? Recuerda que en dos semanas es la pasarela y no sé cómo vas con los vestidos.

Kate abrió los ojos sorprendida, se había olvidado de que tenía que trabajar ese día y miró nuevamente la hora, hace ya hora y media tenía que haber ingresado y no era el caso. Después de afirmarle a Park que estaba esperando un taxi corrió escaleras arriba para cambiarse a algo más formal mientras llamaba un auto que la lleve a su lugar de trabajo. Casi se cae mientras se ponía los zapatos de tacón bajo e intentaba cerrar el botón de su falda rosada, pero logró conseguirlo. Minutos después se encontraba en el vehículo de camino a la empresa, que a su vez se retocaba en maquillaje ya que las lágrimas le dejaron los ojos hinchados y no era muy difícil saber que había tenido una mala tarde, y aunque no pudo lograr disimular mucho aquello, por lo menos no sería tan obvio.

Le pagó al taxista y corrió al elevador, que para su desgracia parecía subir mucho más lento de lo normal, pero después de unos tres minutos que se le hicieron eternos pudo llegar a su oficina. Cuando ingresó vió a JiMin en su escritorio, ojeando el cuaderno de diseños como si fuera suyo.

⎯ Okey, no preguntaré porque llegaste tarde, solo te diré que tienes que terminar este vestido.⎯ señaló el diseño de una página para después mirar el maniquí; la falda y el corset estaban hechos, al igual que el velo con la diadema, pero faltaban coser unas cuantas perlas en la zona de los pechos. JiMin se sentó en la silla de enfrente y se acomodó como si estuviera en su casa viendo una película.⎯ Por cierto, te he visto tomando un helado con...

⎯ Agh, no digas su estúpido nombre.⎯ lo cortó ella antes de que pudiera seguir.

JiMin abrió los ojos con sorpresa por el evidente enfado que tenía la pelirroja con SeokJin. Vió como abría un armario y sacaba una caja blanca que tenía las perlas que se usarían en el vestido, así que el menor preguntó sutilmente si quería contarle y claro que ella no evitó hacerlo, necesitaba desahogarse con alguien que no sea Azkeel porque ya podía escuchar el "te lo dije" y no estaba con ánimos para eso. Kate empezó a contar todo lo sucedido mientras cocía perla por perla en el precioso corset y JiMin miraba sus movimientos concentrado, le parecía fascinante como alguien podía hacer ese tipo de arte con tan solo agujas e hilos. Después de un largo rato, él relató terminó, y con eso la chica había soltado demasiados suspiros y su garganta dolía por tragarse los nudos que se habían formado al aguantarse el llanto que nuevamente quería soltar. Por lo menos, estar cociendo la hacía no romper en llanto, obligaba a su propio cerebro a concentrarse en la aguja e hilo y no en lo que le pasaba. Nuevamente evitaba sus problemas, evitaba llorar lo que tenía que llorar para poder desahogarse y sentirse bien, y eso solo la llevaría a un punto en el que podía explotar en cualquier momento contra cualquier persona.

Kate se sentó frente a él en la silla más grande que tenía exclusivamente para ella, JiMin se había puesto demasiado cómodo en el pequeño sofá que tiene la pelirroja en la oficina y terminó soltando un suspiro al igual que la chica cuando ella contó toda su historia con el que aún dice que puede ser su mejor amigo. Estaba de más decir que, desde el punto de vista de Park, SeokJin era un inmaduro que no sabía qué es lo que quería y mucho menos tener un poquitito de responsabilidad afectiva, le faltaba eso en demasía, pero no sabía si decirlo cuando a simple vista se notaba que Katherine no se encontraba en el mejor estado.

⎯ No sé qué decirte cuando cualquier cosa te entrará por un oído y te saldrá por el otro.⎯ soltó con toda la sinceridad que tenía en su ser. Vió como la chica cubrió sus ojos con sus manos mientras suspiraba de una manera fuerte, demostrando que estaba cansada de la situación.

⎯ Necesito un consejo en serio, JiMin.

⎯ Es la verdad, Kate.⎯ levantó los hombros totalmente de acuerdo con sus palabras.⎯ Tienes tan idealizado a SeokJin que cualquier cosa que te diga no te importará en lo absoluto y mañana correrás a sus brazos.

Y aunque eso le rompió el corazón y dignidad a Kate, lamentablemente, su amigo tenía razón. Al final terminó siendo una copia de SeokJin, prometiéndole a todo el mundo que jamás volvería con una persona tóxica (en el caso de él con Young Sun) y al otro día hacían que todo estaba bien y todos los consejos de los pasaba por la raya del cu...

⎯ ¿Qué harías si fuera yo?⎯ preguntó, esa pregunta la había salvado varias veces de alguna situación y entendiéndola desde otro punto de vista.

⎯ Mandar a la mierda a SeokJin y después escaparme a otro país o ciudad, no lo sé.⎯ respondió honestamente.⎯ Cualquier solución lejos de él es la indicada.

⎯ ¿A dónde crees que iré?⎯ soltó molesta, no con JiMin, sino con ella misma. No sabría manejarse sola fuera de su zona de confort, menos ahora que tiene un trabajo fijo y que le pagan bien.⎯ Además, tampoco es tan grave lo que ocurrió, ni que me haya golpeado o algo.

⎯ Algún lugar en el mundo esperará por ti.⎯ se limitó a responder.

Para JiMin, habían acciones que eran mucho más dolorosas que un golpe físico, y si bien entendía que Kate intentaba minimizar las cosas, no estaba bien. Le había dicho en la cara que es poca cosa para él cuando la realidad era totalmente opuesta, la rebajó a niveles impresionantes, no la cuidó, la humilló y aún así tiene el tupé de seguir llamándose "el mejor amigo de Kate".

⎯ Que difícil estar con un hombre.⎯ comentó ella suspirando y volviendo a cubrir su rostro, en toda su vida jamás se imaginó que estaría en esta situación, de hecho, siempre pensó que iba a tener su fabuloso cuento de hadas increíblemente tierno y amoroso.

Una inmadura.

Los hombres sólo quieren amor si es una tortura.

La pelirroja de descubrió los ojos al notar la tan famosa frase en la canción de Taylor Swift, no sabía que compartía el gusto musical con JiMin y eso la había emocionado, conocía pocas personas que sean apasionados por la discografía de la cantante rubia. Y claro que, como buena swiftie, encontró una canción de ella que claramente hablaba de su situación actual, y fue demasiado triste darse cuenta de que 'All too Well' era la canción que la describía a la perfección, cuando al momento de escucharla por primera vez deseó nunca estar en el lugar de esa desafortunada chica.

Las vueltas de la vida.

⎯ Eso es de Taylor Swift, en Blank Space.⎯ mencionó feliz y JiMin rió levemente por el tono tan emocionado.⎯ No sabía que te gustaba.

⎯ Desde 2016 la escucho, quise ir a alguno de sus conciertos pero nunca tuve el dinero suficiente.⎯ dijo con una leve sonrisa.

⎯ Yo pude ir al The Eras Tour de este año.⎯ respondió orgullosa, aunque en realidad su padre le había regalado la entrada, el alojamiento, el pasaje a Los Ángeles y todo.

⎯ Joder, que envidia te tengo.⎯ habló con un resentimiento fingido y Kate soltó una risita.⎯ Somos más parecidos de lo que parece.

⎯ Podríamos ser la pareja ideal.

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