~Fresas con Chocolate~

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— Aww! Que lindura! ¿Cuantos meses tienes? — Preguntaba con mucha emoción y ternura una osa marrón con edad alrededor de 30 años.

— Apenas tengo 3 meses... Es poco— Respondió ella con una sonrisa nerviosa y sus mejillas rosadas.

— Y ¿estás disfrutando tú embarazo?— La osa acariciaba el vientre con mucho cuidado y dulzura, encantada por el ser que crecía dentro de este.

— Es difícil, tengo muchos mareos y...— La rosada eriza fue interrumpida por la voz ronca de un erizo azabache, que salía de una tienda de bebidas y comestibles.

— ¡Rose, Vámonos! — Hablo fuerte el vetado.

— Lo siento... Mi marido me llama, espero pase un feliz día, fue un gusto conocerla — Con algo de prisa y pena se despidió la eriza de la mayor, está con mucho cariño se despidió también de ella, deseándole las mejores bendiciones en su embarazo y en su vida.

Amy rápidamente fue hacia el erizo y lo miró esperando a que el dijera algo, más no sucedió, solo tomo de su cintura con cuidado acercándola a él, para luego caminar juntos Hasta un Camión.

Shadow y Amy subieron con cuidado y luego de encender el motor, Shadow le preguntó a Amy.

— ¿Quién era? —

— La encontré en una panadería y quedó encantada con el embarazo... — Con dulzura Amy acariciaba su vientre, viéndolo con amor materno, algo único y especial que no se puede igualar.

— Hmp

Luego de media hora desde que salieron de ese pueblo donde Shadow estaba entregando uno de sus trabajos; Shadow y Amy se encontraban en carretera, con los vientos refrescando el ambiente del vehículo.

— Shadow.

— Dime, Rose — A pensar de ya tener su atención, el erizo seguía muy concentrado en la carretera.

— ¿Que te gustaría que fuera? — Dijo haciendo referencia al género de su bebé, cosa que no han descubierto todavía en sus consultas al médico, ya que el bebé no deja verse a través de los Ecografías.

— No eh pensado en eso... Solo espero que nazca sano. — Respondió Shadow frío como siempre lo ah sido.

— Entiendo... — Amy no estaba satisfecha por la respuesta, quería algo más detallado, quería saber los deseos de Shadow su embarazo — La señora me Comentó algo muy peculiar.

Al decir aquellas palabras, las orejas del azabache se movieron un poco, indicándole a Amy que le prestaba más atención.

— Me dijo que por la forma de el vientre y por corazonada... El bebé podría ser niña — Miro a shadow esperando una reacción.

Este tenía una ceja levantada y una cara algo burlesca, se río un momento, sin quitar su vista de el camino.

— Aveces se me olvida la estupidez de este mundo.— Al comentar eso, Amy frunció su cien y miro a Shadow con enfado.

— ¿Como puedes decir eso? ¡La señora sabrá porque lo dice! Se veía muy sabia...

— Solo digo lo que pienso Rose, así te guste o no — el seguía sin mirarla.

— jum.

🍫

Después de dos horas en carretera, el sol había bajado completamente, dejando paso a la luna llena, con las estrellas de acompañante, era exactamente las 8:30 de la noche, Shadow estaba hablando y viendo precios con un señor que al parecer era un cliente de la mercería del camión.

Amy en cambió descansaba en el haciendo copiloto, shadow aún no lo había despertado, ya que sabía que ella tenía que descansar, todavía les faltaba algunos lugar antes de terminar todas las entregas

— ¿Está embarazada?— pregunto un perro Pitbull algo obeso.

— Si, creo que tiene 3 meses y medio — respondió serio sin darle mucha importancia.

— No deberías de llevarla Contigo Shadow, Sabes muy bien que tienes algunos cuentos por estos lugares. — El hombre tomó unos papeles de recibo y se los paso a Shadow, faltaban otros pero estos estaban siendo buscados por un chico joven.

— Me importa poco lo que digan o de lo que se entere ella.— Shadow volteo de reojo hacía la rosada, sabía perfectamente que ella tenía algunas dudas de él, y que apesar de eso, se quedaría a su lado como se lo prometió cuando decidieron vivir juntos.

— Bueno, yo no me meto en eso...— Dijo acabando con la conversación al ver que el chico que fue a buscar los últimos papeles regresaba.

Minutos después Shadow se retiro.

Al amanecer Amy se encontraban en una cama desconocida, al parecer era un Hotel, algo nada extraño para ella, quién acostumbraba a ir de viajes y otros pueblos con Shadow ya que el trabajaba de camionero entregando Comestibles y bebidas o cualquier otro tipo de productos a los pobladores del país.

No se preocupo mucho de donde se encontraba el azabache ya que el siempre se va temprano a hablar con sus amigos o si no a desayunar.

Salió de allí con una ropa diferente, y luego fue a ver qué tal estaba el pueblo, ya lo habían ido a visitar antes así que nada le asombraba a ella.

La rosada saludo a muchas personas, que no sabían sobre su embarazo, y le deseaban muchas bendiciones y buenas cosas; muy agradecida con todos. Al llegar a un restauran pudo notar a un par de Señoras quienes eran amigas de ella desde unos años atrás.

Entró con emoción al volver a verlas.

— Buenos días, señoras — saludó.

— ¡Rosita! Tiempo sin verte...— Con alegría hablo una Ardilla, levantandose de su lugar para abrazar a Amy.

— No habías vuelto a venir, ¿Tu marido no te quiso traer por acá?— preguntó una Loba de color morado claro.

— Jeje... No es eso. — Amelia con cuidado apretó parte de su vestido para que se notará si vientre, pequeño pero notorio.

Las mujeres hicieron diferentes expresiones pero a todas se les veía lo asombradas.

— No te lo puedo creer.

Hablaron bastante tiempo, sin que ella se dieran cuenta habia pasado 2 horas charlando, apesar de eso, le pidieron un desayuno sencillo pero con cierto alimentos, para cuidado y protección del bebé.

— Por cierto, Amelia... — habló la lobo de azul celeste.

Amy fijo su vista en ella esperando sus palabras.

— No hemos enterado de unas cositas en el tiempo de tu ausencia. — Al decirlo, la otra mujer supo inmediato de que se trataba el tema.

— Está muy preocupante todo ese asunto, Hubo un tiempo en donde todos hablaban de ti y del Joven Shadow— Amy miro a las señoras preocupada de lo que sea que estuvieran que decir.

— ¿Me pueden decir de qué se trata? No me gusta como están tomando la situación. — Dijo Amelia con todo respeto que siempre les ah tenido.

— Han estado hablando de que Shadow tiene otra mujer embarazada por el pueblo. — Soltaron por fin.

Shadow que...?

— luego de que el se fue hace unos meses de una entrega, Vimos a Shadow hablando con la Joven Smith, no pensábamos que fuera verdad hasta que vimos como el le daba una farra de dinero. —

Okey, si, fue sorprendente.

Amy apretó su mandíbula para poder controlar las emociones que empezaban a llegar a ella.

Si sabía que Shadow era alguien un poco mujeriego y coqueto al momento de ingerir sustancias como la Cerveza; siempre se lo ah reclamado y el siempre le ah dicho que nunca pasaría a mayores, solo coqueteo pero ¿dejar a una mujer embarazada?

Por Chaos que metida de pata.

Muy constantemente su imaginación le ah mostrado escenarios donde Shadow le era infiel, y la verdad es que no lo dudaba, pero... Esto pasó algunos límites. Los latidos de su corazón empezaban a acelerarse, su rostro palideció, sus manos empezaban a temblar levemente.

Por Chaos, por Chaos.

Shadow como pudiste...

— Querida, querida. — Amy salió del trance que tenía al momento de sentir como la Loba tenía las manos en sus hombros moviéndola suavemente— Creo que no fue buena idea decirte en esta condición.—

Sus ojos estaban acuosos, se veía apunto de llorar.

— No se preocupen, estoy bien.— Amy se levando limpiando sus ojos de las atrevidas lágrimas que querían salir, su expresión se volvió sería pero "calmada" — solo hablaré con Shadow y arreglaré este posible mal entendido.

La Rosada se retiro al instante dejando a las Señoras preocupadas y algo avergonzadas por decir cosas que a lo mejor no les correspondían, pero al final tarde o temprano se iba a enterar.

Ella caminaba a paso veloz con la esperanza de que Shadow ya se encontrará en el Hotel, al llegar no saludo a nadie, su mente estaba concentrada en una sola cosa.

— Rose, ¿Fuiste a desayunar?

— Si, Shadow necesito preguntarte algo, quiero y espero que seas sincero conmigo. — la seriedad con la que Amy lo dijo, hizo que a Shadow le diera un escalofrío en la columna, frunciendo si ceño.

— Okey, ¿Que paso? — El se levanto de la cama ya arreglada de la habitación.

— ¿Es cierto eso de que dejaste a una chica embarazada? — Casi le costaba decir esas palabras, le dolían el lo más profundo de su ser.

— Mierda... Malditos sapos entrometidos — murmuró el Erizo.

— Entonces, si es cierto? — las lágrimas de la rosada volvieron a salir, está vez Amy no lo evito.

— Si, es cierto, pero no es como tú piensas — Se defendió.

— ¡¿Entonces como Shadow?! Me fuiste infiel y aún así tienes una supuesta explicación para eso! — Grito con rabia y lágrimas sin parar.

— Si no quieres escucharme está bien, lo comprendo, y si quieres irte, nos iremos — Dijo el azabache con algo de temblor en la voz.

— Quiero una muy pero muy buena explicación Shadow The hedgehog —

— Me emborrachar demasiado, fui a la casa de Los señores Smith y ellos no estaban me recibió su hija y después me metio a su cuarto- —

— ya! Suficiente... T-tengo que pensar las cosas — Amy volteo su cuerpo dirigiéndose a la salida de la habitación.

— espera. — Shadow la tomo del brazo acercándola a el, tomando su cintura y su rostro, juntando sus frentes — Se que debes estar molesta, lo comprendo perfectamente, yo tampoco espere esto, Me moleste mucho cuando lo supe, pero aún así no puedo dejar a ese niño solo, no me gustaría que viviera lo mismo que yo viví.

— Pues estás repitiendo los mismos pasos que tu padre — el ceño de Amy seguía fruncido, le estaba costando bastante estar calmada.

— No me digas que esa mierda de ser humano es mi padre — Shadow se separó un poco de ella, apretando sus dientes — Cometí un error, lo se, pero...

Callo un momento, tomo las manos de Amy con cuidado aunque está se había resistido al principio, al final cedió.

— Por favor Amelia, no me odies, perdoname, de verdad te lo pido, no sabes cómo me hubiera gustado evitarte todo este dolor y frustración — Apesar de las palabras la fémina era incapaz de mirar a los ojos carmesí.

Shadow se arrodilló sosteniendo más fuerte sus manos.

— Te lo ruego, eres lo más precioso y puro que pude haber encontrado en esta vida, no me alejes de ti y de nuestra hija... — Shadow se estaba humillando por el perdón de la eriza, la ama tanto que era capaz de pegarse un tiro si se lo pidiera.

Pero eso no le sorprendió a Amy... Lo que le sorprendió de una forma intensa que hasta sus lágrimas empezaron a salir con más rapidez fue el echo de que el Erizo aceptara que su bebé sería una niña, tal y como se lo había comentado en la noche anterior, por el comentario de una señora.

— Shadow...

El azabache levantó la mirada.

— Rose por favor.

— Está bien — Amy se limpió las lágrimas después de separar sus manos de las de el —Pero quiero confiar algo.

— Dime Rose — Shadow se levantó poco a poco.

— Tú... ¿Hace cuanto tiempo fue eso?

— paso antes de que estuvieras embarazada, Ella tiene 4 meses más que tú. — Shadow le explico sin rodeos.

— ... ¿Te harás cargo? — Amy trato de no ver a Shadow, le costaba perdonarlo.

— Es mi responsabilidad, apesar de las circunstancias — Shadow iba a continuar con lo demás, pero se vio interrumpido.

— Te voy a perdonar, pero, si algo como esto vuelve a pasar, no te voy a dar otra oportunidad Erizo — Amy miro a Shadow fijamente, con un rostro decidido.

— Comprendo, Rose, estoy seguro que esto no vuelve a ocurrir—

...

Ya estaban a punto de salir del pueblo, el mismo hombre que habló con Shadow la otra vez, estaba de nuevo con la pareja de erizos.

— Me dijeron que tú Mujer se enteró — Dijo el hombre.

— Ya hablé con ella, no es tu problema desgraciado, ve y tráeme los resibos . — hablo shadow a la defensiva.

— Tú siempre de repugnante... — con eso el hombre se alejo del vehículo, Dejando a Amy y a Shadow solos.

Shadow miro el vientre de Amy, y con algo de dificultad para moverse, por la incomodidad que tenía, tocó a Amy en su vientre, haciendole masajes a este.

Ese fue un gesto de disculpas para la rosada, con eso, ella le sonrió y le miró, sacando la lengua de forma infantil.

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Historia inspirada en un suceso de la vida de un familiar lejano mío, y también de un libro que me encanta la verdad es preciso.

Gracias por leer y tenerme paciencia.