- Y por último... esta es la biblioteca – Aoi le mostraba el campus de la universidad a una nueva estudiante que tuvo que entrar unas semanas tarde.

- De nuevo muchas gracias por mostrarme todo – Le hacía reverencias rápidas mientras agradecía de todo corazón.

- No tienes nada que agradecer – Le dijo moviendo la mano para quitarle importancia – Mejor vámonos, me retrase un poco –

- Oh lo siento Aoi-sempai, todo es mi culpa – Se disculpaba de la misma manera que había agradecido.

Caminaron conversando sobre las normas de la facultad de medicina y a los clubs de investigación a los que se podía unir, cuando llegaron a la salida de la universidad vieron de repente a un chico en motocicleta que las miraba directamente.

- Wooau ¿viste ese chico? ¿Será estudiante de aquí? – Pregunto con el corazón un poco acelerado.

- Te aseguro que no – Respondió Aoi reprimiendo la risa.

- Es muy lindo... mira esos ojos verdes – comentaba fascinada.

- ¿¡Que rayos haces!? ¡Llevo esperando aquí mucho tiempo! – Grito en su dirección.

- ¡Ya te oí! ¡Tenía algo que hacer! – Respondió alzando la voz, pero sin llegar a gritar, la nueva los miro a ambos con los ojos muy abiertos.

- ¡¿Y tú que me ves?! – Le dijo a la pobre chica con cara de desagrado mientras le pasaba el casco a su novia.

- Ey! No seas maleducado – Le dio un pequeño golpe en el brazo, ambos se subieron a la moto – Nos vemos de vuelta de la Golden week – Ella solo se quedó mirando sin palabras como la moto se alejaba.

Inosuke manejaba con mucho cuidado cuando iba con ella, ya que lo regañaba terriblemente cuando cometía alguna imprudencia, por lo que apoyo la cabeza en su espalda de manera relajada mientras se reía de la reacción de aquella chica nueva, todos en la universidad se extrañaban de que la alumna destacada de último año de enfermería saliera con aquel chico rebelde.

Recordó con nostalgia cuando hicieron oficial su noviazgo y todos sus compañeros del instituto la miraron con sospecha, como si él la estuviera obligando, cuando nada estaba más lejos de la verdad, ella lo amaba. Aunque su círculo de amigos cercanos o inclusos sus padres no parecían para nada sorprendidos.

Llegaron a su casa, al lado de la de él, para recoger los bolsos y tomar un taxi para la estación de trenes, había una boda que celebrar y eran los últimos en irse, gracias a que ella que no había querido perder un día de clases.

- ¿Estás seguro de que llevas todo? – Lo miro impaciente, no tendrían tiempo de volver si algo faltaba.

- Estoy seguro de que llevo el traje y el sobre con dinero – Dijo despreocupado mientras salía de su casa.

- ¡Hablo en serio! ¡Estaremos allá dos días! ¿Estás seguro de que llevas todo!? – Pregunto por segunda vez.

- Te digo que sí, maldición – La tomo de la mano para irse, incluso él estaba consciente de que iban con retraso. – ¿Por qué a Tanjiro se le ocurrió casarse en un lugar tan lejano? –

- Kanao me contó que cuando escucharon el nombre del centro de eventos los dos decidieron en seguida que ese debía ser el lugar de su boda – Le conto – Esa "finca mariposa", incluso a mí se me hace que la conozco de algo –

- ¿En serio?, cuando leí el parte de matrimonio me paso lo mismo, pero le pregunte a mi mamá si habíamos ido en algún momento y me dijo que no –

- Vaya, mis padres tampoco lo conocían y al parecer a Tanjiro y a Kanao les paso lo mismo –

Tomaron el tren justo a tiempo, ahora más tranquilos tendrían tiempo de sobra para llegar, arreglarse y presenciar el gran evento. Tanjiro, el más tradicional de sus amigos le había propuesto matrimonio a su novia cuando tenían solo 21 años y ahora casi un año después por fin serian marido y mujer.

- Es increíble que esos dos se casen... aun que se siente tan natural – En secreto se preguntaba si algún día llegaría a casarse con Inosuke – Aunque Kanao me conto que ella no estaba del todo segura, como aún no ha terminado de estudiar (1) -

- Pero Gompanchiro tiene la panadería y ella ya está haciendo su práctica de trabajo ¿no?, no creo que tengan problemas – Le respondía dando un bostezo apoyado en el hombro de su novia.

- Tienes razón... - Dijo mientras se acurrucaba junto a él - Trata de dormir, el camino es largo -

- Lo intentare... pero me ponen nervioso los jodidos trenes - Luego de decir eso se durmió en seguida.

Despertaron a las horas ya en su destino, la finca no quedaba muy lejos de la estación por lo que llegaron rápidamente en un taxi y ambos se pararon frente a la puerta del recinto con la boca abierta.

- No sé porque... pero siento un sensación extraña en el pecho – Dijo Aoi mientras presionaba con fuerza su corazón acelerado.

- Vamos... - La tomo de la mano para ir a sus habitaciones, pero él sentía lo mismo, una nostalgia terrible.

- Es como si... ¿volviera a casa? – Dijo mientras entraban. Inosuke no respondió, no sabía que decir.

Se registraron en la recepción y los llevaron a sus habitaciones, al fin y al cabo, la "Finca Mariposa" era un hotel muy tradicional con centro de eventos y para la celebración de la boda los amigos y familiares cercanos se quedarían dos días, mientras que los demás invitados solo estarían hasta el día siguiente.

Se dieron un baño y tenían una hora exacta para estar listos para la ceremonia, todos los demás invitados ya debían estar en la recepción.

Aoi había conseguido un lindo vestido color beige con detalles azules, que combinó con uno de sus broches de mariposa y unos zapatos formales de tacón mientras que Inosuke, bajo amenaza, vestía un traje completo color negro, incluso llevaba corbata!

- Te ves tan lindo con traje – Le susurro mientras le daba un beso con deseo, ante la idea de quitárselo de a poco.

- Tu eres la que siempre se ve linda – Le respondió el beso con un poco más de intensidad - Más con vestido - dijo mientras se lo levantaba con la mano a la altura de los muslos.

- Vamos... o llegaremos tarde – Se alejo con la respiración acelerada.

- Tsk... vamos –

Cuando llegaron, todos los invitados ya estaban sentados, por lo que rápidamente tomaron sus lugares para ver como Kanao y Tanjiro, luciendo kimonos tradicionales, eran bendecidos para que su unión fuera feliz.

Pasada la primera parte de la ceremonia ambos dieron sus discursos, donde más de alguno de los presentes soltó alguna lagrima. Cuando salieron Aoi corrió a abrazar a su amiga y felicitar a ambos por su boda.

Para la celebración pasaron a una habitación amplia donde disfrutaron de la cena y vieron como los esposos cortaban el pastel. Luego de unas horas solo quedaban los invitados más cercanos y por supuesto, el grupo de amigos de siempre, por lo que bebieron y festejaron hasta bien entrada la noche recordando sus momentos en el instituto y todas aquellas memorias que tenían luego de muchos años de amistad.

Aoi aún se sentía intranquila, por lo que después de un rato salió a recorrer la finca dándose cuanta con incredulidad de que conocía cada rincón del lugar, luego de dar un par de vueltas por las habitaciones salió y se sentó en una banca bajo un cerezo florecido, con una sensación de paz, cerró los ojos y se relajó oliendo el aire de primavera.

- Aoi... ¿qué haces aquí afuera? – Inosuke, que se había quedado charlando con sus amigos fue a buscarla cuando no sintió su presencia cerca. Un poco nervioso se sentó a su lado.

- Yo... solo, no sé cómo explicarlo – dijo con suavidad – Este lugar... siento que ya había estado aquí... me llego al corazón –

- Yo siento... como si lo hubiese visto en un sueño... - Dijo sin mirarla a los ojos, con el corazón acelerado.

- Como en otro tiempo... - Coincidió.

- Y en otra vida... - Ambos se miraron y sonrieron entristecidos.

- Quizás en esa otra vida éramos enemigos mortales – Dijo riendo ante la idea.

- Oh quizás... éramos exactamente nosotros mismos – Le tomo la mano y la apretó suavemente.

- Quizás... - susurro mientras lo besaba con ternura.

- Aoi... - La miro serio – Llevamos años planeando mudarnos juntos y por fin este año terminas tu carrera, yo ya conseguí un buen trabajo (2) ... Tenemos dinero ahorrado y... maldición... - Ella lo miro con cara de pregunta, él se había sonrojado – Esa casa tan linda que encontraste en las afueras, me gustó mucho... y quiero... vivir en ella contigo para siempre –

- Oh... - Solo eso fue capaz de decir, comprendiendo el significado de esas palabras.

- ¡Quiero que seas mi esposa! – Le dijo demasiado fuerte y rápido, sacando de su bolsillo una pequeña caja con un anillo plateado (3), ella sonrió.

- Yo también quiero vivir contigo para siempre – El aun esperaba ansioso su respuesta – Y también... quiero ser tu esposa – Acepto, estirando los dedos de la mano para que sellara el compromiso.

- No quiero una boda tan grande como esta y tampoco tiene que ser pronto, yo solo quiero... que estés a mi lado – Comento sencillamente.

- Lo se... - Le tomo la mejilla mientras ella derramaba pequeñas lagrimas por la suya.

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1.- Kanao finalmente decidió estudiar una carrera de imagenología ya que se dio cuenta que no contaba con la vocación suficiente para dedicarse a la medicina y al tener una vista privilegiada le gustaba mucho analizar rayos x y ecografías. Mientras que Tanjiro estudio administración para gestionar la panadería que tiene su familia.

2.- Inosuke estudio una carrera técnica para ser preparador físico, la experiencia que había tenido entrenando a Aoi le sirvió como inspiración.

3.- Cuando Tanjiro le conto a Inosuke que le pediría matrimonio a Kanao y todo lo que aquello significaba, él sintió de inmediato que quería lo mismo con Aoi. Decidió pedírselo ese día por que estaban vestidos formales y sabía que ella le gustaba verlo así.

Nota: Zenitsu escucho todo y como había hecho años atrás llevo a los demás para espiar a hurtadillas, Inosuke no los noto porque estaba demasiado nervioso.

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Gracias por leer <3