Aoi despertó con la luz que se colaba por las cortinas, abrió los ojos y vio como Inosuke dormía profundamente a su lado, sonrió contenta al recordar todo lo que había pasado la noche anterior. Comprobó con satisfacción como su cuerpo dolía un poco, pero no por la gripe.

- Me encantas – Le susurro y lo beso tiernamente en los labios.

Inosuke ante en el contacto despertó y al ser ella lo primero que veía en el día sonrió con gusto.

- ¿Como te sientes? – Le pregunto inocente, refiriéndose al resfriado.

- Estoy mucho mejor ahora – Susurro mientras lo abraza y él respondió el gesto – ¿Tienes hambre? –

- Un poco – Mintió. En realidad tenía el estómago vacío, pero no quería levantarse, estaba demasiado cómodo.

- Vamos a desayunar – Le tomo de la mano y salieron de la cama.

Preparo un desayuno rápido, ella igualmente tenía mucha hambre, pero cuando se sentaron a comer había una sensación incomoda entre ellos, propia de una pareja de amigos que habían tenido una noche de sexo.

- ¿Y te gusto? – Pregunto de repente.

- Si – Le contesto roja, ella sabía que no tenía sentido sonrojarse luego de todo lo que había pasado antes – ¿Y a ti? –

- Si – Dijo sincero mientras comía un bocado de arroz – Y mucho – Ella sonrió feliz.

- Inosuke... tú me gustas, bueno... creo que eso quedo claro... pero tú... me gustas mucho, desde hace tiempo – Dijo tímida.

- Tú también me gustas – Respondió dejando los palillos a un lado – En un principio no sabía lo que me pasaba... pero luego note que contigo me sentía diferente que con otras chicas... y supe que me gustas, me gusta estar contigo, tu cabello, tu sonrisa, tu deliciosa comida, todo... todo de ti – Ella lo miro con ternura.

- ¿¡Puede una confesión ser más perfecta!? – Pensó Aoi aun desconcertada. - Es agradable escucharte decir eso –

- Sé que no sigo muchos de protocolos sociales, son solo estupideces... – Ella bufo, lo sabía perfectamente – y tampoco sé sobre lo que hacen las personas que se gustan, pero cuando veo al llorón ese con Nezuko (1) y a Gompanchiro con Yanao... yo también quiero eso contigo –

- Y yo también quiero eso contigo – Le respondió tomando su mano sobre la mesa.

- Entonces... ¿serás mi novia? – Pregunto con ansiedad y temor.

- Claro que si... - Ambos se relajaron y él la beso tiernamente en los labios.

Desayunaron con tranquilidad, conversando de todo y de nada, como viejos amigos y nuevos novios, felices y algo expectantes.

Cuando terminaron se fueron al sofá otra vez a ver una película que finalmente no vieron, ya que de nuevo aquella electricidad, ahora evidente, invadía el ambiente haciendo que ambos se miraran con complicidad.

- Quiero que hagas algo... – Le respondió entre medio de un beso apasionado que los había dejado con la respiración agitada, no sabían en qué momento las cosas se habían puesto calientes de nuevo, pero ambos ya estaban medios desnudos.

- ¿Qué cosa? – Le respondió mientras le mordía el lóbulo de una oreja.

- Haz lo que hiciste cuando me pusiste el condón – Ella sabía perfectamente a que se refería.

Primero paso sus dedos de manera juguetona por su abdomen, haciendo que él se estremeciera, para luego meter sus dedos lentamente por debajo del elástico del pantalón. Él estaba muy excitado y la erección sobresalía en sus pantalones.

Aoi, tomando el control, se arrodillo frente él haciéndolo sentir increíblemente poderoso, y ella de un tirón bajos sus pantalones y sus boxers al mismo tiempo solo hasta dejar al descubierto su miembro el cual tomo con fuerza para masturbarlo.

Ahora él ya sabía a qué sensaciones atenerse por lo que no se sentía tan indefenso y, contento, noto como le era mucho más fácil controlarse. Ella continúo masturbándolo unos segundos más hasta que puso sus labios sobre su pene para luego meterlo dentro su boca.

- Aaaaah~ - Jadeo Inosuke, colocando su mano sobre la cabeza de Aoi, de forma instintiva.

Ella lo chupo haciendo que su lengua pasara por su frenillo y acariciara su glande, viendo como el reaccionaba ante sus movimientos, pero también era inexperta y su mandíbula se cansaba con rapidez, así que alternaba entre masturbarlo y chupársela lo más profundo que podía. Luego de unos minutos sintió como Inosuke tenía pequeños espasmos en las piernas y notaba que pronto iba a terminar.

- Hazlo~ – Le dijo con una mirada sensual desde abajo, ella estaba igual de excitada y con una mano se tocaba para darse placer.

El trago con fuerza al ver lo que estaba haciendo, mientras miraba y luego de unas chupadas profundas más, eyaculo mientras apretaba la cabeza de Aoi suavemente sobre su miembro. Luego se volvieron a abrazar igual como lo habían hecho la noche anterior.

- Creo que me iré a bañar –

- Espera... yo no me he olvidado de ti – Le dijo tomándola del brazo, había pasado cerca de media hora y él estaba listo de nuevo. Ella le sonrió en respuesta.

- Está bien... pero esta vez yo arriba – El parecía desconcertado, pero luego levanto los hombros, aceptaba que no conocía todas las maneras en la que dos personas podían amarse. –

Ella se sentó sobre él, aun con pantalón, y se movió con suavidad comprobando como efectivamente volvía a erectarse, se besaron con pasión y luego él tomo con cada mano sus pechos y los amaso con fiereza. Hicieron los juegos previos hasta que ambos estaban tan excitados que ya no podían aguantarlo más.

Aoi rápidamente corrió a la habitación de su hermano para robar nuevamente un paquetito metálico, volvió donde Inosuke y se quitó los pantalones del pijama, él hizo lo mismo aun sentado y observo como le colocaban nuevamente el condón. Aoi se sentó sobre él y lentamente dejo que el placer la consumiera.

- Aaaah~ se siente bien – Dijo él mientras la tomaba por las caderas y lamia uno de sus pezones.

- Muy bien~ - Susurro mientras se movía con torpeza y cerraba los ojos con fuerza, era aún plena mañana y ambos se podían ver perfectamente, no quería que la vergüenza la detuviera.

Continúo cabalgándolo por varios minutos hasta que ella sentía que ya llegaba a su climax, se sentó fuertemente sobre él para que la penetración fuera salvaje y profunda y gimió casi en un grito. Él al ver nuevamente como ella experimentaba el orgasmo se entregó al placer y eyaculo nuevamente con un jadeo. Ambos se dejaron caer uno sobre el otro mientras respiraban con dificultad.

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1.- Inosuke desde pequeño vio a Nezuko como su propia hermana, fue de la primera que se aprendió el nombre y nunca se equivocó al decirlo, incluso después de muchos años.

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Gracias por leer <3